Nora

Estoy tumbada en medio de la cancha, mis manos sobre mi abdomen, cierro mis ojos dejando que el viento sea lo único que sienta. Escucho voces a lo lejos, es la voz de Elena, pero no solo me llama a mí, hay alguien más ¿Quién es?

─ Nora... ─conozco esa voz─ Debemos irnos, es tarde y mañana tienes la competencia

Solo asiento lentamente con la cabeza, no entiendo nada.

─ Yo la llevo ─Elena está delante de mí─ se va a quedar en mi casa

─ Adiós chicas ─intento voltearme hacia esa voz, pero no puedo 

Me levanto del pasto con ayuda de Elena y volteo hacia donde se fue esa persona, pero lo único que logro ver es su espalda, ¿quién eres?

De un momento a otro todo se vuelve negro, ya no escucho nada, abro mis ojos con cuidado, la luz entra por la ventana encandilando mi vista, me siento rápidamente en la cama, mi pulso está acelerado, mi cuerpo es húmedo por el sudor.

Tomo mi celular de la mesita de noche y reviso la hora, aún queda 30 minutos para que suene la alarma, me levanto de la cama un poco desorientada. Busco ropa en el placar y me meto a la ducha, el agua está congelada, cae por mi cuerpo llevándose todo, me envuelvo en una toalla y salgo del baño.

Mi celular comienza a sonar, pero no es la alarma.

─ ¿Qué quiere Dylan? ─hablo apenas contesto la llamada

─ Amanecimos de malas ─responde

─ ¿Para qué me llamaste? ─pregunto

─ ¿Quieres que te pase a buscar? ─termine de acomodarme el vestido y tome nuevamente el celular─ si no quieres...

─ No, digo... si ─mierda, amanecí un poco torpe─ digo que sí, pásame a buscar... no tengo ánimos de conducir

─ Bueno, en 30 minutos paso a buscarte

Termino de arreglarme y aprovecho el tiempo que queda para ordenar mi habitación.

✩ ✩ ✩

Dylan me espera en el estacionamiento de la residencia, está afirmado en el capo del auto con las manos en sus bolsillos. Me acerco a él con los brazos cruzados, él levanta la mirada y una sonrisa aparece en su rostro.

─ ¿Por qué me miras como si me quisieras matar? ─pregunta

─ Puede que sea lo que haré ─rodeo el auto en tiempo récord y se subió─ Recuerda que me tienes que comprar un Frapuccino

─ Lo recuerdo perfectamente 

En el camino fue hablando del partido que tendrían la otra semana y yo solo podía sentirme más nerviosa que antes porque sería la primera vez en 3 años que me presentaría en público. Cuando Dylan aparco el auto, levante la mirada del celular y me encontré con Elena que estaba entrando en la universidad, me quite el cinturón de seguridad y guarde el celular en mi bolso.

─ Nos vemos en la cafetería en 30 minutos ─abrí la puerta del auto y salí─ gracias por traerme

Corrí hacia la universidad para alcanzar a Elena antes que entrara a su clase, la busqué por el pasillo y la vi en los casilleros.

─ Elena ─afirmé mis manos en mis rodillas─ hace mucho no corría

─ ¿Por qué estabas corriendo? ─cierra su casillero y se voltea en mi dirección─ Dime, ¿para qué soy buena?

─ Tengo que hacerte una pregunta ─me indico que la siguiera hacia la cancha de deportes

─ ¿Qué pasa? ─nos sentamos en las gradas─ te ves un poco pálida

─ Tuve un sueño ─me miro con el ceño fruncido─ en el sueño estabas tú y un chico, bueno solo escuché la voz  

─ ¿Qué es lo que me quieres preguntar? ─mordí mi labio inferíos con nerviosismo─ Nora ¿Qué pasa?

─ Estaría volviéndome loca si digo que... creo que es Dylan ─su mirada cambio rápidamente─ ¿conozco a Dylan de antes?

─ Eh... ¿Por qué crees que el de tu sueño es Dylan?

─ Nose... es que han pasado cosas un poco raras ─alzo sus cejas─ a ver, el sábado mi mamá lo invito a una cena, por alguna razón me pareció que ella y mi hermano ya lo conocían

─ Puede ser una coincidencia ─tiré mi cabeza hacia atrás─ no te quemes tu cabeza con suposiciones

─ Tienes razón ─suspiro profundamente─ si lo conociera, debería recordarlo ─asiente con la cabeza

─ Bueno, yo tengo clases y tú debes ir a la cafetería ─dice levantándose de las gradas─ vamos

─ Me voy a quedar un rato acá

─ Entonces... nos vemos en el receso ─asiento 

Bajo de las gradas y camino hacia el pasto con la intención de practicar algunas acrobacias.

Camino un poco para entrar en calor, empiezo dando vueltas laterales para iniciar, poco a poco voy tomando más confianza e intento hacer una voltereta hacia atrás, pero me caigo en el aterrizaje provocando que mi cabeza se golpee en el suelo.

Me mantengo tumbada en el pasto otro rato y mi mente nuevamente me transporta a ese sueño, a ese chico ¿Quién eres? Intento levantarme del suelo, pero un fuerte dolor de cabeza me lo impide, me vuelvo a dejar caer sobre el pasto hasta que se me pase el dolor.

─ ¿Por qué estás tirada en el suelo? ─abro un ojo encontrándome con el rostro de Dylan

─ Es divertido ─me mira con el ceño fruncido─ bueno, me caí y me golpeé en la cabeza

─ ¿Estás bien? ─su rostro se tensó

─ Si, solo me duele un poco la cabeza, pero se me pasa luego ─estiro su mano hacia mí para ayudar a enderezarme─ gracias ─mire su mano donde tiene una Frapuccino─ ¿y eso?

─ Ya que no fuiste a la cafetería, te lo traje ─un impulso me llevo a abrazarlo, rodeo mi cintura con sus brazos

─ Creo que deberíamos irnos al aula, pronto empezara nuestra clase ─hable mientras me alejaba de su cuerpo

─ Eres muy impredecible, Nora ─se burló y Unió sus labios con los míos

No sé qué paso, pero de un momento a otro me vi correspondiéndole nuevamente el beso, al igual que los otros, su lengua se introdujo en mi boca y me beso de manera demandante. Subí mi mano libre por su cuello y tiré de su cabello acercándolo más a mí, me mordió el labio inferior.

─ ¿Y yo soy la impredecible? ─alejo mi rostro del suyo─ ¿Por qué me has besado?

─ ¿Por qué me has correspondido? ─y vuelve el Dylan egocéntrico

─ No me gusta que me respondan con otra pregunta ─se empieza a reír─ ¿Qué?

─ Nada ─sus manos siguen en mi cintura manteniéndome cerca─ pensé ver a Kylie, pero creo que fue mi imaginación ─responde

Aparto sus manos de mi cintura y camino hacia la entrada.

─ ¿Por qué te vas? ─grita

─ Porque no te soporto ─respondo. Siento sus pasos detrás de mí

─ No me gusta que me dejen hablando solo ─escucho su voz en mi odio, envuelve sus brazos a mi alrededor

─ Que lastima ─intento soltarme de su agarre, pero es imposible─ suéltame

─ No ─susurra en mi oído─ tengo que hablar contigo

─ ¿Es necesario que sea de esta manera? ─pregunto

─ ¿De qué manera? ─se burla

Me giro aún en sus brazos quedando frente a frente, dándome cuenta de que fue una mala idea, su rostro está demasiado cerca y puedo sentir todo su cuerpo, con todo, me refiero a todo.

─ Estás demasiado cerca ─digo─ no me voy a escapar, pero aléjate

─ Bien, pero ─deshace su agarre y toma mi mano─ iremos a hablar a esa sala, porque no confió

Lo seguí hasta el aula de química, cerró la puerta detrás de mí y se afirmó en ella para obstruir mi paso.

─ Te escucho ─cruzo mis brazos sobre mi pecho

─ Hoy hay una fiesta...

─ Es lunes ─me quejo

─ Por eso, me acompañarás ─ruedo los ojos─ no hagas esos gestos ─Me advierte

─ ¿o qué? ─doy un paso al frente – no puedes hacer nada, si quieres que te acompañe a esa fiesta

─ ¿Iras? ─le doy un golpe suave en la nuca─ ¿eso es un no?

─ Si voy, ahora cállate y déjame salir 

Dio un paso al costado dejándome el paso libre, tomé mi Frapuccino que había dejado en una mesa y salí del aula. Camine por el pasillo contrario hacia mi clase que empieza en 15 minutos, busque un puesto en la última fila al lado de la ventana.

Veámosle el lado positivo a ir de fiesta un día lunes, no tiene lado positivo, pero ¿Qué puede salir mal? Puedo olvidarme de mi sueño confuso y beber, total mañana mis clases empiezan a las 12 del mediodía.

✩ ✩ ✩

Las clases ya terminaron, y faltaban 2 horas para que Dylan me pasara a buscar para ir a la fiesta, busque un vestido rojo que hace mucho no usaba, me cambie el vestido que llevaba por el rojo y me empecé a maquillar. Me alisé el cabello para que no se vea tan desordenado y guarde mis cosas en un bolso pequeño.

Pasaron como 30 minutos cuando Dylan me mandó un mensaje para decirme que ya estaba acá, deje todo apagado y cerré con llave la puerta. Me subí en el ascensor, apreté el -1 que da al estacionamiento, las puertas estaban por cerrarse cuando apareció Cooper.

─ Gracias ─dijo con una sonrisa─ ¿Nora? Oh, hola

─ Hola, Cooper ─miré la pantalla donde marca el número de los pisos y maldije, recién va en el piso 5

─ ¿Vas a salir con Dylan? ─pregunta

─ Si, debe estar aburrido en el estacionamiento, lleva esperando como 20 minutos ─saco mi celular para revisar la bandeja de notificaciones, tengo un mensaje de Ethan─ ¿Y tú? ¿Cuál es tu conquista de esta noche?

─ Tal vez un pelirrojo ─me guiñó un ojo

¿No les dije? Cooper es gay, es un amigo de la universidad.

Cuando el ascensor por fin llego al estacionamiento me despedí de Cooper y me acerqué a Dylan que estaba mirando a Cooper como si lo quisiera matar. Me detuve delante de él bloqueando su visión hacia mi amigo.

─ ¿Por qué esa cara de amargado?

─ ¿Ese era Cooper? ─evito mi pregunta─ ¿Por qué estabas con él?

─ Nos encontramos en el ascensor ─respondo con una sonrisa angelical─ no lo mires así ─lo señalo─ es gay ─su expresión se suavizó

─ Vamos, te quiero llevar a un lugar primero ─asentí y nos subimos al auto 

Si no supiera que estamos en una residencia estudiantil, y que cualquiera de la universidad puede vernos, pensaría que estaba celoso de Cooper.

____________❤ ____________

Mhm... están pasando cosas raras, ¿quién será ese chico del sueño de Nora? ¿Y por qué soñará con él? 

Aquí sabemos que Dylan si estaba celoso, pero Nora lo negara por obvias razones.