-"Kakashi Hatake"-

-Tu misión del día de hoy es ir tras la cabeza de Danzo, ese hombre es uno de los narcotraficantes más peligrosos del mundo, la paga son: ¥4,000,000 tú decides, eres el más capacitado para esto kakashi-dijo una mujer rubia que bebía un trago de sake.

-Acepto el trabajo-Tsunade enarcó una ceja- no tengo dinero para la siguiente edición del libro de Jiraiya-dijo mientras hacía una sonrisa bajo su máscara.

-Bien-manifesto con un tic en el ojo, mientras sellaba una hoja dentro de el folder.-aqui tienes toda la información que necesitas saber-argumento esto mientras le entregaba la carpeta, que decía "015S".

-Gracias Tsunade-sonrio por último mientras salía por la puerta y un suspiro pesado salía de su boca.

Un día más en su pesado trabajo, ser mercenario de los riquillos es algo muy bien pagado, sin embargo la carga de conciencia es lo peor.
Pero en fin, la mayoría de las veces mataba cabecillas o personas que cometieron un delito así que con eso se consolaba. Le bastaba para no sentirse un asco de persona.

La misión tenía como límite de lapso para lograrse llevar acabó hasta ese día. Tenía que buscarlo y obtener su cabeza, según lo que decía la hoja. Realmente jamás comprendería a los ricos, tener la cabeza como trofeo después de un asesinato?, Por dios....
La gente está muy enferma.

En fin.

-Kakashi que tengas un buen día-expreso una secretaria con voz seductora, mientras daba la vuelta y movía sus caderas al compás de su caminar.

Kakashi solamente atinó a ver hacia el camino que tomo la mujer, capturando en su mente cada parte de ese movimiento de caderas.

Una belleza de mujer.

Kakashi dejó de observarla y camino hacia la salida, antes de ir a su misión pasaría por las tumbas de sus dos exmejores amigos.

Claro que antes de ir paso por un puesto de flores y compró unos claveles y rosas rojas.

Aún le dolía el recordar aquella trágica misión en la que ambos perdieron la vida y el fue el único sobreviviente. Aún le pesa el no a ver escuchado a su mejor amigo.

Cuando menos lo vió ya había llegado a su destino, las tumbas de aquellos dos, que aunque no lo admitieron nunca se notaba su amor a kilómetros.

Se pudiera decir que son como Romeo y Julieta tan cerca y tan lejos a la vez. Kakashi soltó una pequeña risa por tan divertido pensamiento mientras una sonrisa melancolíca salía de sus labios.

Estaba a una hilera de llegar a sus tumbas y entonces las piernas le comenzaron a temblar, no negaría jamás el que los extraña al final y al cabo eran su única familia.

Que murió por su culpa.

-Chicos, creo que al fin podré vengar su muerte, deseenme suerte-hablo en un tono bajo mientras ponía a cada tumba su ramo que compró para cada uno.- se que es egoísta pedirlo, porque no vengo muy seguido-hizo una pausa mientras se sentaba enmedio de ambas tumbas-pero realmente quiero que ustedes estén allí cuando masacre a su asesinó-argumento esto mientras buscaba en sus bolsillos una cajetilla de cigarros y un encendedor-no me digan que soy un cursi...pero los extraño-dijo finalmente mientras encendía su cigarro y daba una calada, mientras una lágrima silenciosa salía de sus ojos-bueno en fin, me retiro solo venía a contarles esto volveré pronto-comento esto mientras se ponía de pie y comenzaba a salir casi corriendo, aún le dolía ver sus nombres en las lápidas, las lágrimas jamás se hacían esperar. Solo esperaba el poder saldar su deuda, hacerlos sentir orgullosos.

🚬🚬🚬🚬

3 horas después, Residencia D.

Kakashi se encontraba analizando desde afuera cada parte de la casa, de una forma estratégica que el dueño no pudiera verlo a través de cámaras, ni mucho menos personas a su alrededor que lo identifiquen.

Kakashi Hatake, un asesino de élite conocido por ser silencioso y un maestro del engaño, la forma en la que asesina es tan perfecta siempre logra complacer en todo a sus clientes.

Después de observar el lugar, saco del folder que le dió Tsunade un mapa de toda la casa y marco puntos claves por los cuales entraría de manera exitosa y saldría sin ser visto. Decidió entrar por el techo, no había cámaras y tenía una ruta rápida para llegar a la habitación de la víctima así que su plan era perfecto.

Subió por un punto ciego de las cámaras. Escalo la pared hasta llegar al techo, forzó con el mayor silencio posible la puerta que daba adentro hacia la habitación del blanco de Kakashi.

Cuando entró vió todo en penumbra, entonces su instinto comenzó a avisarle que algo no andaba bien.

Reviso el lugar de manera rápida y no vió a nadie, entonces sacó con rapidez el arma que siempre llevaba consigo en caso de emergencia se acercó a la puerta tomo el pomo de la misma y en cuanto trato de girarla para salir una alarma sonó y la habitación comenzó a tornarse de color rojo.

Le habían puesto un cuatro,por fin lo comprendía era más que claro que la misión era demasiado fácil y la paga perfecta, además Tsunade lo odia.

Corrió a la pequeña puerta que daba al techo y salió lo más rápido posible antes de que se cerrará con una barra blindada.

Kakashi no tuvo de otra más que correr, correr a toda la velocidad que su cuerpo le daba cuando creyó estar a salvó una lluvia intensa comenzó a caer, solamente sacó su paragüas y se cubrió cuando las gotas se intensificaban. Camino un poco más hasta llegar a un parque; vió a dos niños y una niña, no sabía cómo sus padres le permitían estar allí a esas horas y con esa lluvia.

Hasta que pudo ver cómo tenían manchas de sangre en su cuerpo y cómo sus mejillas tenían un gran consumo de agua. Por primera vez en años su corazón se apiadó y decidió taparlos con el paragüas que antes uso para no mojarse.

-Hey-exclamo con tono alto, logrando sacar a los tres niños del shock que vivían en ese momento. No comprendía su estado eran demasiado jóvenes como para cargar con unas miradas llenas de terror y desoladas-y sus padres?, Saben que están aquí?-dijo Kakashi con una voz gruesa y carraspeada por no a ver tomado una gota de agua.

Los tres niños al fin notaron la presencia de todos los presentes, cuando Kakashi pronunció a sus padres, sus rostros se desfiguraron, no tenían a nadie. Están solos.

Cuando el asesino vió que ningún estaba dispuesto a hablar decidí hacerlo el- ¿tienen un lugar donde quedarse? -pregunto con fuerza y sin querer con un tono amenazante.

Los chicos se encogieron en sí mismos, Sakura tenía miedo le aterraba el hombre que tenía enfrente no lo conocía pero temía que le hiciera algo malo. Así que de forma automática jaló a ambos niños más cerca de ella para sentirse "segura" tenía un poquito de confianza en que no le harían nada, no le habían hecho nada en todo el rato que llevaban allí o eso suponía dicha acción sorprendió a los dos niños quienes no comprendían el porque había hecho eso, pero algo les decía que la niña los necesitaba por lo que no pusieron resistencia y solo confrontaron tomando un poco de valor a el adulto. Desconocían sus historias pero algo los impulsaba a confiar en el hombre frente ellos...

-Solamente son niños que necesitan ayuda-pensó Kakashi mientras veía como los dos niños lo veían de una forma poco amable si no más bien en forma defensiva-quieren venir conmigo?-interrogó de forma comprensiva-no tienen un buen estado y no pienso hacerles daño-manifesto tratando de hacer que su voz sonará comprensiva. Mientras observaba como cada uno tenía pequeñas maletas enfrente de ellos.

Los tres se voltearon a ver. Sakura tenía miedo, pero por alguna extraña razón el hombre le inspiraba confianza pero tenía miedo, si los niños no aceptaban no pensaba irse con ese desconocido. Mientras tanto Sasuke pensaba en los miles de escenarios posibles que pudiera suceder si se iban con aquel hombre y Naruto...no confiaba en el.

-Mi nombre es Kakashi-hablo el peligris- ¿Cómo se llaman ustedes?-dijo esto de forma interrogante.

No obtuvo respuesta.

-Bien mocosos si no piensan hablar quédense aquí y pasen frío-hablo mientras les extendía su paragüas, Sakura lo aceptaba tímidamente y se daba media vuelta-hasta luego-comento esto mientras les movía la mano a manera de despedida y se iba caminando rumbo a su departamento que por cierto estaba más cerca de lo que imaginaba.

Kakashi no pensaba quedarse horas rogando para que esos niños fueran con el, trato de ser amable y ellos no aceptaron así que se fue lo más rápido que pudo. Hasta que escuchó un quejido y como sonaba un charco de agua cuando algo cae.

Los tres niños entraron en pánico cuando vieron al adulto irse, al final de cuentas trato de ayudarlos pero ellos no quisieron por lo que tomaron con rapidez sus cosas y tiraron el paragüas les estorbaba para caminar. Cuando lograron alcanzarlo no supieron como hablarle, pero lastimosamente Sakura se calló. Ocasionando que todos dejarán de caminar y Kakashi volteará a verlos mientras enarcaba una ceja.

Naruto se animó a hablar- disculpe señor pudiera ayudarnos-menciono esto mientras lo veía fijamente tratando de ocultar su sonrojo de vergüenza. Mientras tanto Sakura se paró con dificultad haciendo una pequeña reverencia y Sasuke solamente veía hacia bajo evitando el contacto visual.

Todo esto ocurría a unos pasos de llegar a su casa en plena lluvia que caía a cántaros. Todos tenían la ropa empapada, no había personas en la calle viendo esta escena tan extraña.

Kakashi solo asintió haciendo un ademán de que lo siguieran lo cual los niños correspondieron y siguieron a su destino.

Al llegar a su apartamento, el guardia de seguridad lo vió extraño jamás llevaba a nadie a su casa y mucho menos niños lo cual hizo que lo viera de manera interrogante.

-Son mis sobrinos Garet-dijo Kakashi mientras le dedicaba una mala cara y dejaba a los niños subir primero al elevador.

Cuando entró el al elevador marco el piso en el que se encontraba su apartamento, un silencio sepulcro predominaba en la sala.

-Me llamó Sakura-susurro bajito una pelirosa para romper la tensión en el lugar.

-Me llamo Naruto-menciono el pelirubio en un tono normal meintras alzaba la mirada y veía a los demás.

-Mi nombre es Sasuke-habló por primera vez el pelinegro.

Kakashi solo asintió y en ese momento llegaron a su departamento. Bajaron del elevador, el peligris abrió la puerta de su casa y dejó pasar a los niños.

Después de que cada uno tomará una ducha y estuvieran ya secos, Kakashi los sentó en la sala.

-Y bien...¿Qué pasó?-interrogó el adulto que los veía con cierta duda y un poco de temor al ver cómo estos cambiaron sus expresiones en el rostro.

-Yo...mis padres-dijo Naruto con duda- están durmiendo ahora-manifesto, tratando de sonar lo más claro posible sin un llanto de intermediario, no podía pronunciar esas palabras era demasiado duró.

Kakashi entendió a la perfección, no tenía que ser un genio para saber que sucedía, con ver el semblante de Naruto y su forma de hablar bastaba

-Mis padres murieron...-comento Sakura sin ningún titubeo-mi tío....- su voz se quebró-no quiero volver-dijo por fin mientras se abrazaba a si misma y sus mangas de su playera larga dejaron a la vista sus muñecas.

Para Kakashi fue más que suficiente para sentir impotencia y ganas de matar a alguien.

-Yo, no tengo a nadie-hablo finalmente Sasuke mientras su voz era áspera y dura-mi hermano es el responsable, el...el...-expreso entre susurros mientras cerraba los ojos y trataba de callar aquella voz.

-Bueno suficiente, es momento de dejar eso en el olvido- dijo Kakashi con una sonrisa tratando de calmar a los menores, no quería que sufrieran más, esos rostros le recordaban tanto a él y a sus amigos... Óbito, Rin estará bien lo ¿qué estoy a punto de hacer?-les parece si ahora viven conmigo, les prometo que no les haré daño-dijo esto mientras les regalaba una cálida sonrisa.

Los niños se vieron entre ellos, era el único que al parecer no les haría daño...aceptaron.

Y así es como el equipo 7 se conoció y este es su inicio......

-Meilinlin12-