-"Sakura Haruno"-

-Bueno, señor Haruno, Sakura tiene un comportamiento extraño, últimamente se ha vuelto más retraída-hizo una pequeña pausa con duda- peleó con una compañera de clase-dijo por último mientras abría la carpeta que tenía por nombre "Sakura Haruno" y sacaba un suspiro-así que dígame hay algo mal en casa?, Nosotros nos preocupamos por la educación que llevan los alumnos en casa-dijo una mujer de ojos rojos.

-Se refiere a ¿qué la golpeó?-interrogo por fin un hombre alto, de cabello rosa oscuro, ojos marrón y no mayor de 40 años, mientras enarcaba una ceja y veía fijamente a la trabajadora social

-No quería decirlo así-manifesto por último la mujer mientras hacía una mueca, llevaba por nombre en su gafete Kurenai- pienso pasar por la semana a su casa-comento esto mientras anotaba en una hoja que había en la carpeta- comprendo que fue muy amable de su parte cuidar de Sakura después de que sus padres murieran pero....-dejo de escribir mientras lo veía fijamente- quiero saber si la muerte de sus padres es lo que ocasiona esto o es otro factor-argumento esto mientras volvía a escribir.

-estaba bien, ¿qué día piensa pasar?-menciono el pelirosa mientras la veía de una forma intimidante.

-Lo lamentó señor Haruno, pero no puedo decirle eso-expreso esto mientras acomodaba los papeles dentro de la carpeta- es una visita sorpresa, solamente le avisé que iría porque no quiero llegar y encontrarme con que no están en casa-argumento la peliverde mientras se paraba y iba a guardar los documentos al estante-lo veré en uno de estos días-hablo por último mientras le abría la puerta de la salida.

El señor Haruno solo atinó a asentir con la cabeza y salir del cuarto de la trabajadora social y encontrarse con Sakura sentada afuera en las sillas.
Se acercó a la niña de forma muy despacio.

-Espero y no hayas dicho nada-susurro lo suficientemente audible para que solo la niña lo escuchará. La pelirosa solo atinó a asentir con la cabeza y levantarse de una forma muy rígida.

Dejo de inclinarse y volteó hacia la salida mientras le extendía la mano a la niña- no estuvo bien lo que hiciste...-le hizo una pequeña sonrisa "dulce"- por lo que en casa discutiremos tu castigo-aseguro por fin, mientras lograba ver cómo los ojos de la niña se llenaban de terror puro.

Eso lo exitaba.

🌸🌸🌸🌸

-Venga pequeña...no te escondas-dijo un hombre pelirosa, con un tono sádico- se que te facina tanto como a mí...-risa suave-sabes amo como gritas -añadio esto mientras se relamia los labios- es muy excitante- menciono por último mientras caminaba con seguridad hacía el armario rosa y hacía sonar su látigo .

Sakura sólamente tenía leves espasmos y se tapaba la boca mientras evitaba hacer cualquier ruido que delatará que se encontraba debajo de la cama, mientras sostenía un cuchillo con fuerza en sus pequeñas manos.

-Venga cariño, sal...se que estás en el armario-hablo mientras una sonrisa de satisfacción salía de su rostro. Tomo ambos pomos de las puertas del armario y lo abrió con fuerza, mientras comenzaba a mover los vestidos con fuerza.- ¡Carajo!- gritó furioso-me facinas- solamente atinó a decir mientras una sonrisa se formaba en su rostro.

Sakura en cuanto escuchó como este abría las puertas de su closet sentía la adrenalina correr por su sangre, estaba aterrada, está era la doceava vez que utilizaba juguetes, juguetes malos.
Aún recuerda como la amarro a su cama y la penetró con dos cosas que la hicieron sangrar más de una vez . Le dejó marcas que le obligó a ocultar, las demás veces solamente la penetró con su miembro masculino.

No quería que eso sucediera.

Justo cuando iba a revisar debajo de su cama escuchó como tocaron el timbre de la casa.

-Amada cerezo tengo que bajar a ver quién es, si quieres huir y cambiar de escondite, puedes hacerlo-manifesto esto mientras dejaba el látigo en la cama y cerraba la puerta de la habitación.

Sakura en cuanto escuchó que abrió la puerta de la entrada a la casa, dudo unos minutos ya que no escuchaba voces así que corrió a su alcoba. Más sin embargo algo la tomó del pelo y la jalo de regreso a la cama.

-¡Aqui estabas!, Maldita perra-exclamo furioso mientras tomaba sus manos y la llevaba a la nuca de esta. Mientras comenzaba a desvestirla. Sakura gritaba por ayuda- o venga baja el volumen, todavía no iniciamos, espera de ¿dónde sacaste este cuchillo, he?-dijo esto con una risa burlona mientras lo ponía en la alcoba.

Así siguió, hasta que el quedó también sin ropa y Sakura amarrada a la cama de una forma sometida y la penetró más de una vez.

Cuando terminó de correrse por última vez la soltó- me daré una ducha has lo mismo después, no quiero que apestes.-finalizo mientras entraba al baño.

Después de que el saliera, Sakura corrió al baño y tuvo una larga ducha...hasta quitarse cualquier rastro que tuviera de el.

Cuando al fin terminó de darse una ducha, vió como este estaba cocinando en la cocina.

Entonces lo vio.

Vio el cuchillo que antes había tenido en sus manos y no lo dudó, solamente acató las órdenes de su cuerpo.

Se acercó de una forma silenciosa mientras empuñaba el cuchillo y justo se dió la vuelta su tío, así que no lo dudó y clavo el cuchillo en sus genitales una y otra vez. Cuando su tío calló inconsciente al piso.

Sus ojitos brillaban con fuerza. Lágrimas de libertad salieron por sus ojitos esmeralda.

Corrió hacia su habitación y hizo una pequeña mochilitas con ropa y una y que otra prenda.

Salió de la casa y comenzó a caminar por el vecindario.
Entonces su conciencia llegó, sabía que no estaba bien, entonces vió como sus manos estaban ensangrentadas y la lluvia hacía que está brillará como si estuviera fresca... solamente atinó a sentarse de golpe y dejar que sus lágrimas salieran de sus ojos, sin percatarse que un pelinegro ya se encontraba allí.

Tenía sangre en sus manos...

Sakura no notó como después de que ella se sentará alguien más se sentó a su lado, mucho menos notó como un hombre extendió su paragüas para cubrirlos a los tres de la lluvia.

-Meilinlin12-