-¡Y esto es Karmaland chavales!

Los noobs miraban asombrados la ciudad a espaldas del orgulloso Vegetta.

-¡Pero si hay un casino! -fue lo primero que gritó Herny.

Vegetta rio, aún si cabe más orgulloso.

-Y un zoo, una heladería, cafetería, restaurante y un hospital para tontitos.

-Y una iglesia Vegettita -Rubius se acercó a él con una sonrisa, los noobs corearon su nombre, y el de Alexby a su lado, saludándolos- ¡Buenas! ¿Este señor mayor os está tratando bien?

-¿A quién llamas señor mayor cabezón?

-A ti Vegetta -había mucho cariño en la mirada del oso, no solo burla y picoteo.

-Milagro que no los haya puesto a trabajar todavía, ¡Que tal chavales! ¡Bienvenidos a Karmaland! -cantó Alexby, moviendo las caderas en tanga al son de su tarareo. los noobs rieron.

-Ui ese culito Alexby -el aludido rio con su risa de delfín a la broma de Lexosi.

-¿Vas a misa?

-Si, y espero que os paséis a confesaros.

El aire se cargaba de corazones, con Rubius demasiado cerca de Vegetta y unas sonrisas por parte de los dos que hicieron a Alexby fingir arcadas y distraerse con sus antiguos compañeros.

-Claro que si chiqui, nos pasamos.

Las orejas de Rubius cayeron sobre su pelo, su cara se llenó de un dulce color rosa, mirando al resto de los chicos de reojo, muy cerca de Vegetta, demasiado.

-Vegettita... -susurró jugando con sus manos, asegurándose de reojo que todos estaban distraídos en lo suyo.

Vegetta le sonrió con dulzura, viendo lo que Rubius trataba de decirle, llevó su mano enguantada al rostro de su osito y le dio un lento y suave beso. Los noobs se clavaron el codo para avisarse unos a otros de no perderse la escena, pero disimulando.

-Ui ui ui -Jesus corrió a taparle la boca a Lexosi para que no interrumpiera el momento ni las cálidas sonrisas que se daba la pareja-

-Nos vemos.

-¡Adiós Señor cura! -algo en el tono de voz de Arsilex los hizo reír a todos, incluso a Rubius, después de encogerse un tanto avergonzado.

-Sois tontitos. ¿Os parece si tomamos unos helados mientras viene el resto?

-¡Si! ¡Helado! -Arsilex gritaba subiéndose sobre Herny.

-¡Yo lo quiero de dos bolas! -aplaudió Herny.

-Invitas tú, ¿no, Vegetta?

-Como niños. Si venga, yo invito, ¡Pero sin pasarse que os conozco a todos cochinos!

Alexby y Elyas, al lado de Vegetta, fueron los primeros en empezar a caminar distraídamente, mientras Jesus, Arsilex, y Lexosi, iban detrás, ocupados en sus tonterías o en lo que llamaba su atención.

-¡Ey tíos mirad! ¿Ese de ahí no será el famoso Willy? -anunció Lexosi con musicalidad.

-¡¡Quién, dónde, dónde!!

-Ahí idiota, mira -Lexosi le acarro la mandíbula orientando la cara de Arsilex a la fuerza- el que está con Rubius.

-¡Ostia! ¡Pues sí que parece!

-¡¿Lo saludamos?! -se emocionó Jesus- ¡Quiero conocer al que más tiempo ha aguantado a nuestro Vegettita!

-¡Vam...!

Sus pies se anclaron al suelo en el instante en el que vieron como Rubius se inclinaba para darle un beso en la boca. Se quedaron como estatuas, sombríos y con una nube de sentimiento homicida oscureciéndolos. Rubius siguió su camino con una enorme sonrisa y Willy se acercó hasta ellos, manos en los bolsillos y su sonrisa traviesa de chino malo.

-¡Pero bueno! ¡Todavía aquí!

-¡Willy compañero! Vamos a por un helado, ¿te apuntas?

Los tres pequeños noobs comenzaron a gritar furiosos.

-¡Mejor vamos a misa! -gritó Arsilex por encima.

-¡Si Vegetta a misa! -Jesus.

-Tenemos unas palabras que decirle al cura -la voz un poco grave de Lexosi sonó siniestra.

Todos los miraron con asombro.

-Pues... -los cuatro veteranos se miraron entre si, Vegetta se encogió de hombros- Vamos a la iglesia.

Mientras de fondo, los pequeños noobs sacaban las espadas.

Encontraron a Luzu muy cerca de la iglesia, quien encantado por las animadas visitas se ofreció a acompañarlos. Los pequeños noobs entraron en tromba con las armas en la mano, casi como si fueran a ser recibidos por una horda de zombies, miraron furiosos a todos lados.

-¡Pero que hacéis tontitos! ¡Que esto es una iglesia!

Alexby y Elyas intentaban no reír negando con la cabeza, pero Luzu parecía encantado y disfrutaba de las ocurrencias de los chicos.

-¡¿Y el cura?! -gritó Jesus mirando por todos lados, igual que sus compañeros.

-¡Eso! ¿Y el cura? -esta vez fue la gritona voz de Arsilex.

Vegetta miró a todos lados, reparando en el confesionario y sonriendo con picardía.

-¡Luzu! ¿Les enseñas la iglesia?

-¡Claro Vegettoide!

-Yo voy a confesarme jijijijiji.

-¡Eh no! -gritó Alexby.

-Voy contigo Vegetta -Willy le siguió.

-¡Pero que no! -Alexby se volvió loco- ¡Que esto es la iglesia! ¡Pero Luzu~!

Luzu reía con su melodiosa risa incómoda.

-Déjalos Alexbitas.

-¡¡Pe... pero...!!

-¡¡¿Y el cura?!! -interrumpió gritando Herny.

-Pero vamos a ver -Elyas por fin intervino con su serenidad- ¿Se puede saber qué os pasa a vosotros con el cura?

-¡¡Que es un puerco!!

-¡Le vimos comerle el morro a Willy!

-¡¡Nadie le rompe el corazón a nuestro Vegettita!!

Luzu rio si cabe más incómodo, Alexby escondía la cara en la mano, negando con la mirada en el suelo, y luego, harto de la gente que lo rodeaba, fue pisando fuerte hasta el confesionario, abriendo la puerta de golpe.

Vegetta estaba sentado a horcajadas sobre las piernas de Rubius, el oso le agarraba las caderas de una forma que dejaba muy pocas dudas sobre lo que hacían y el contacto que tenían sus cuerpos, Willy sujetaba el cuello de Vegetta para besarlo desde la espalda, con la mano perdida en los pectorales del pelinegro. Los tres se sonrojaron como tomates, Rubius incluso escondió la cara en el pecho de Vegetta. Alexby cerró la puerta de un simple tirón.

Silencio y caras de asombro, hasta que la escandalosa risa de Luzu rompió la tensión. Los noobs se miraron, terminaron por sonreír avergonzados por la escena triple x.

-¡Ese es nuestro Vegettita! -gritó Arsilex emocionado.

-¡Dales duro macho de pelo en pecho! ¡Tifón, fuente de agua! -coreó Lexosi entre risas.

-¿Qué, vamos a por ese helado? -dijo Jesus como si nada.

-Venga vamos, invita Lely.

Tranquilamente y felices salieron de la iglesia los tres pequeños noobs juntos, hacia las preciosas luces del amanecer.

-¡Eh no desgraciados! Lo pagáis vosotros.

-Luego lo puede pagar Vegetoide, vamos con ellos Alexby.

Alexby suspiró, viendo sonreír a Elyas a su lado.

-Está bien, vamos a por ese helado.

Han sido alrededor 150 mil palabras que jamás pensé que saldrían de mis manos, toda una tarea titánica que he disfrutado, con sus momentos altos y bajos, con vosotros de fondo sacándome sonrisas y haciendo de esta experiencia algo único que guardaré toda mi vida como uno de los mejores recuerdos y logros.

Esta historia, son solo 150 mil palabras dedicadas a vosotros, a todos, por que por más que pueda deciros lo agradecida que estoy, nunca será tan suficiente como para sentir que podéis entenderlo, por eso, esta historia es vuestra, para vosotros, con todo mi corazón. Si, podéis pedirme una copia XD.

Gracias a los que estáis, estuvisteis y estaréis aquí. Conozca vuestros nombres o no, os lleváis un trozo de mi kokoro, uno enorme, que os dejo a vuestro cuidado.

De aquí en adelante... PUEDE que publique algún ESPECIAL PENDIENTE, pero con tiempo y calma. También hay otros proyectos, que no sé cómo se desarrollan, pero uno ya podéis encontrarlo anunciado en mi perfil .

NOS LEEMOS!!

HASTA SIEMPRE <3

Con amor: Dabrida.