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9: Lolito, arma de destrucción.


500 estrellas?? Dejo esto por aquí y me voy, gracias!!!
PEQUEÑIIIIIIIIIISIMA ESCENA +18 EN ALGÚN PUNTO DEL CAP. :)


-¡¡Ma'he!!

Mangel estaba en pie, firme, a la orilla del lago donde estaba su más querida casa. Respiró por ese cigarrillo lentamente disfrutando de, no solo el sabor horrendo del tabaco, también del lindo crujir de las secas hojas quemándose, sin perder de vista su casa. Soltó el humo y sacudió las cenizas sobre la cara de Rubius, que se le había enredado en los tobillos a montar un berrinche. Mangel hacía oídos sordos.

El oso se resguardó de las cenizas lloriqueando aún más.

-¡Te prometo que yo no he sido esta vez! ¡Ma'he! ¡Yo te perdoné lo de Nieves! ¡Puedes creerme! ¡Amigo! ¡Hermano!

-¿Y alguien de la Hermandad por irme? -contestó serio sin dejar de mirar lo poco que quedaba de su casa.

Alguien se la había volado por los aires, otra vez.

-No sé tío. Fargan no, ya te pegó el tiro de expulsión. Willy estaba molesto pero no dijo nada.

Apartó el cigarro de los labios, bajó la mirada hasta Rubius, pero no la barbilla.

-Con que Willy no dijo nada... ya veo.

-Ma'heeeee -rosnó como si estuviera llorando.

-Ya, levanta, te creo no seas pesa'o tio.

Rubius se abrazó a él juntando los cachetes.

-¡Ay mi Ma'he!

-¡Quita coño! ¡Que luego mi niña se cela!

-Lolo me come el coño con pan bimbo. Tú eres solo mio Mangel.

Mangel suspiró al aire. Le dió un buen empujón.

-¡Quita ooo'tiaaaaas!

El empujón consiguió librarlo de Rubius pero ambos cayeron al suelo. Mangel tuvo la mala suerte de hacerlo en el agua. Rubius se rió de él a viva voz mientras Mangel solo pudo levantar la vista al cielo, quedándose sentado en el agua con el cigarrillo superviviente en sus labios.

-Quiero moriiiiiiiir.

-¡Mangel! ¿Quieres ver las cosas ilegales que le he robado a Vegetita?

-¿Pero qué dices tío? ¡¿que le has robado al Vegetto?! Estás loco cabron.

-¡Siiii, vente y te enseño!

-Aaaah tio tengo hambre, -se levantó goteando medio lago desde sus mangas y pantalones- ¿No tienes comida?

-¿Yo?

-Da igual macho. Vamos a casa de mi niña, siempre hace galletas.

Mangel comenzó a andar con las manos en los bolsillos, Rubius dudó.

-¿A casa de Lolito?

El de ojos grises se giró solo un poco para sonreírle de lado con el cigarro en la boca y sobre las gafas.

-¿No me digas que tienes miedo de Lolito?

Lolito abrió la puerta y su sonrisa de oreja a oreja fue increíblemente maravillosa, sus ojos de un verde radiactivo realmente iluminaban su dulce rostro. Se tiró sobre Mangel abrazándolo con brazos y piernas gritando eufórico, hasta que vió a Rubius tras Mangel, que le devolvió la mirada con cara de cordero degollado.

-Hola Lolito ¿Que hay?

La sonrisa del pelirrojo se esfumó pero volvió al segundo, más falsa, pero igual de linda.

-¡Mi niña! Tenías que haberme avisado de que venias, con compañía. ¡Hubiera preparado algo!

Mangel agarró fuerte los muslos de Lolito haciéndolo brincar en sus brazos. La melena zanahoria, lacia y desordenada de Lolito, se agitó en el viento, adornando su feliz risa, lo que iluminó el siempre sombrío rostro de Mangel.

Rubius no pudo evitar sonreír, aunque él había intentado romper esa pareja miles de veces no podía ignorar la verdad, y esa era que el rostro de Mangel jamás se había visto tan feliz de estar vivo como cuando su niña reía para él.

El moreno cedió el paso a Rubius haciéndose a un lado sin bajar a Lolito, cerró la puerta tras él, la casa parecía totalmente suya.

-Mi niña, ¿Tienes algo de comer? Nos morimos de hambre.

-Ahora mismo mi niña.

Saltó feliz de los brazos de Mangel robándole el cigarro de la boca con una sonrisa corriendo hacia la cocina. Rubius tomó sitio en la mesa de cuadros blancos y rojos y su amigo de toda la vida con él.

Justo como Mangel había predicho, Lolito les ofreció leche y galletas con trocitos de chocolate, sin perder esa maravillosa sonrisa. Rubius no pudo evitar mirar desconfiado aquellas que Lolito le puso más cerca.

-Oye Lolito cabrón, ¿No las habrás envenenado?

-¡Rubius! Me estoy reformando -dijo ofendidísimo, o quizá no lo suficiente- No confiáis en mí, así no puedo ser buena persona -fue hasta la espalda de Rubius tomando una galleta y mordiéndola fuerte en sus orejas de oso- ¿Ves? Auron dice que estoy progresando -tragó la galleta y poniendo las palmas sobre los hombros de Rubius se inclinó a susurrarle- Además, lo mío son los cuchillos y la sangre.

El cuerpo de Rubius dio un escalofrío, por un segundo pudo ver los ojos de Lolito brillando reflejados en los cristales de las ventanas frente a él.

-¿Os quedáis esta noche? Podemos hacer una fiesta, llamar al calvo, a Alexby, a Fargan... ¿Qué te parece mi niña?

-Estaría bien. Oye Lolito -el mencionado lo miró con una sonrisa de oreja a oreja- ¿Me puedo quedar unos días contigo?

Lolito saltó como un loco, como un "puto loco" según el pensamiento de Rubius, aterrizando otra vez en los brazos de Mangel.

-¿¡Aquí alaísimo!?

-Alaísimo de mi niña -le confirmó Mangel.

Los gritos de celebración no se hicieron esperar inundaron la casa llenándola de vida. De un segundo a otro todo aquello se esfumó.

-Mi niña, ¿Le ha pasado algo a tu casa?

Lolito era un monstruo hábil, rápido y mortífero y eso era lo que les estaba mirando ahora.

Mangel se encogió de hombros, pero con una pequeña sonrisa.

-No no no no no no -pensó Rubius quedándose con la galleta en la boca a medio abrir.

-Alguien la ha explotado otra vez, no sé por qué Willy se habrá enfadado esta vez.

-¡¿Mangel qué coño haces?! ¡Te dije que no sabía si era Willy!

-¿Willy? -preguntó Lolito con una carita que podría hacerlos enfermar de diabetes.

DEMASIADO TARDE.

-¿Por qué crees que fue Willy mi niña?

-Rubiu tiene razón, igual no fue él, la Hermandad Oscura está poniendo minas otra vez igual fueron ellos.

Lolito volvió a sonreír, daba miedo.

-Esos cerdos de la Hermandad... Tenía que haberlos colgado y desangrado en público cuando fui el alcalde. ¡Voy a por más galletas!

La pareja se sonrió, aunque a Rubius le costó, lo hizo por salvar su vida.

-Qué cabrón eres Mangel, solo espero que esta vez no se pase.

Mangel sonrió levantando los hombros.

-Se está reformando Rubiuh.

Lolito volvía a la mesa con otro plato, esta vez patatas.

-Voy... al baño -el oso se levantó realmente tenso.

-¿Rubius está bien mi niña?

Lolito dejó el plato sobre la mesa sentándose con una rodilla sobre Mangel, acercando su rostro muy acaramelado.

-Ni idea mi niña -Mangel le abrazó atrapandolo junto a él por la fina cintura.

Lolito fijó su mirada en los ojos grises sonriendo con malicia. Acarició al moreno solo pasando dos dedos por su rostro tentando un beso.

-Bueno, así nos deja solos.

No dejaron de devorarse con los ojos el uno al otro. La caricia del pelirrojo descendió peligrosamente por el cuerpo de Mangel quien detuvo su mano a mitad de camino, agarrándolo con fuerza, con la misma con la que se sostenían la mirada. Fue ahí cuando Mangel tomó el poder de retar los límites de Lolito, haciendo descender el mismo su mano, metiéndosela dentro de los pantalones. Eso solo hizo que Lolito sonriera aún más, con esa expresión de la que solo él es capaz.

Lolito no conoce los límites de nada, y ahí estaba su mano demostrándoselo a su niña, haciendo crecer su erección de una forma explosiva, tocándolo como nadie lo había hecho nunca, arriba abajo, su pulgar trazando caricias en él, sin saber como, dándole más placer que nadie, destrozando sus sentidos, sus latidos, su cuerpo.

-Rub... ah...Rubiu puede volver ¡Mi niña!

-Vigila que no venga, yo me ocupo.

Esa sonrisa, lo volvía loco, en cuanto giró la vista Lolito se apropió del lóbulo de su oreja, de su cuello, dejando pequeñas mordidas con sus puntiagudos dientes que llevaban cosquillas por todo el cuerpo de Mangel.

La expectativa de ser descubierto, la dominancia de aquel hombre, y aquella voz, que solo alguien con el secreto que guardaba Lolito podía entonar, hermosa melodía hechizante, lo llevaron a las nubes y lo hicieron caer con euforia de vuelta al suelo, con un placer casi agónico.

Le devolvió la mirada jadeando por el buen orgasmo.

-¿Me echaste de menos, alfa? - le dijo Lolito con esa sonrisa psicópata lamiéndose los dedos de los que goteaba semen.

-Serás io puta.


A la mañana siguiente Willy suspiraba pasándose las manos frente al rostro, no daba crédito. Aquello no había podido ser ni un zombie ni un monstruo cualquiera, había reforzado y protegido aquel subterráneo como ninguna otra parte de la casa y aun así alguien se había colado.

Todas sus ovejas estaban despedazadas, la sangre cubría un dedo de sus botas y las tripas de todos los animales adornaban su alrededor como guirnaldas de navidad.

Solo un monstruo en Karmaland disfrutaba tanto de la sangre y de los mensajes subliminales.

Sacó el comunicador:

Willy: chicos, ¿Tenéis obsidiana?
Fargan: luego te llevo William.
Rubius: creo que también tengo.
Willy: me corre prisa ¿podéis venir ya?
Rubius: ok
Fargan: ok
Auron: ¿Para qué quieres la obsidiana puerco?
Willy: para un portal al nether.
Vegetta: ILEGALÍSIMO!!!
Willy: hooooooombre.
Auron: pero mira quien a vuelto.
Lolito: Triple Sieteeee.
Vegetta: jijijijijiji.
Lolito: Triple siete a vuelto!!! Vamos a celebrarlo!!! Todos!! Fiesta en casa de triple siete!!?
Vegetta: ¡Eh! ¡No! Todos lejos de mi casa ratas asquerosas.
Auron: Vegetta, tú y yo tenemos un tema que resolver, te debo una ensalada de putazos.
Vegetta: cuando quieras chiqui :)
Lolito: eh, cuidao con mi mano derecha triple siete.
Vegetta: ven tú también Lolito, tengo para los dos.
Auron: policía! Estoy, recibiendo, amenazas!!!!
Alexby: a ver que pasa aqui hombre.
Lolito: comisario! Triple siete quiere agredirnos.
Alexby: pero hombre Vegetta, ya estás otra vez?
Vegetta: cómeme el huevo derecho Alexby.
Alexby: pues vale Vegetta pues vale.

Vegetta ha sido enviado a la cárcel 1 hora por chulo.

Vegetta: ¿PERO QUÉEEEEEE?
Alexby: hahahahahahaha
Vegetta: ¡¡¡ILEGALÍSIMO!!!
Auron: jajajajajaja
Alexby: porque tu lo digas no?
Auron: yo, como juez, lo veo correcto.
Lolito: buen trabajo comisario.
Luzu: pero que está pasando aquí a ver.
Vegetta: pero Alexby macho, que no puedes usar las herramientas de los dioses para esto.
Alexby: cómeme los huevos Vegetta, cómeme, los huevos.
Rubius: Evil-Leli a vuelto. Unas copitas esta noche Leli?
Alexby: por supuesto compañero.
Vegetta: ¡¡¡Alexby!!!
Alexby: ya te saco Vegetta ya te saco deja de llorar.
Vegetta: si es que sois tontisimos macho.



NUEVA SHIP DESBLOQUEADA:

MANGELITO

Una pareja incapaz de enlazarse, tóxica y fuera de control, pero enamoraiiiiiiisimos, me encaja.

Buuenas. Espero que os agrade que Mangel sea aquí el manipulador que es en la serie, amé el Mangel asesino de Nieves, y siempre he visto a Lolito como un liante muy feliz y super dulce como cuando solo quería besar a su esposo Willy jijiji

Tampoco quiero imitar el adorable acento de Mangel porque en un directo Rubius dijo que eso le molestaba mucho y me hizo daño en el kokoro, me es imposible hacerlo... a veces es difícil poner el límite de cuando son más "ellos" que los personajes de ficción, mi regla es: si me incomoda porque se me parece demasiado a la persona y no al papel que interpretan, borro.

Ojala os siga gustando yo os amo igualmente!!!!!

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