-¿Qué tal si te sacas la polla de Willy de la cabeza y me cuentas...? ¿Calvo? ¡Eh calvo no me jodas!

-¡Mi Nieveeeeeeeeeees!

-¡Pero espérame cabrón!

Llegaron corriendo al muelle del oso encontrando a Lolito y Mangel sentados, tan tranquilamente, en el borde de los tablones de madera.

-¡Ey! ¿Encontrasteis al Vegetto?

Rubius y Auron se doblaron sobre sus rodillas para respirar, de todos los héroes de Karmaland, ellos dos eran de los más vagos, no ganarían una competición de resistencia, así que la pareja de "alfas" en el muelle tuvieron que esperar pacientes a que dejaran de ahogarse.

-No, ¿Y Nieves? ¿Qué la has hecho Mahe?

Mangel soltó una nube de humo con una clara expresión de "¿en serio, tío?"

-Lo mismo se la comió el monstruo que tienes ahí arriba cabrón -Mangel sonrió a Lolito por defenderlo.

-¡¡¿¿QUÉEEE?!!

Rubius agarró la espada y saltó sobre el ascensor dispuesto a... Lobo Plateado estaba sentado frente a él, con la lengua fuera y moviendo el rabo como loco.

-Si es que soy imbécil -el lobo era enorme, algún día le preguntaría a Vegetta de dónde había sacado a semejante criatura, y empezaba a sospechar que el de ojos morados tenía cierto problema con el color de pelo blanco- Escóndete bobo, Auron está aquí.

De un grácil salto el lobo subió las escaleras, dejando a Rubius con cara de tonto preguntándose si en serio le había entendido.

-¿Dónde está el bicho? -ya tenía la Saqueadora en la mano.

-¡¡Guarda eso en mi casa Auron!!

-¿Entonces ya podemos entrar? -Lolito apareció autoinvitándose a subir las escaleras.

-Rubiuh tío, de donde sacaste a ese perro.

-Era Coringa, limpiaos los ojos.

-¿Pero se ha comido a Nieves o no?

-Nieves... últimamente pasa tiempo a solas en la antigua casa.

-¿La que explotaste?

-No idiota, la de madera.

-Si sabías que Nieves no estaba aquí ¿Por qué mierda me has traído todo el camino corriendo, puerco?

Rubius puso morritos y empezó a hacer ruidos indescifrables.

-Mangel, se nos rompió el oso, ¿Como se arregla?

El bueno de Mangel rió encogiéndose de hombros. Rubius, enfadado por no poder bajarlos de la isla a espadazos, decidió que era mejor subir las escaleras para dejarlos atrás.

-¡Lolito cabrón! ¡¿Qué estás haciendo ya?!

-¿Yo? -la carita dulce y de santo del pelirrojo no tenía precio, y a Mangel, que subía detrás de Rubius, se le cayó la baba- asar el pescado que mi niña y yo conseguimos ¿Qué hacéis vosotros par de impresentables?

Rubius cayó sentado de mal humor en el primer lugar que encontró, no hizo falta que fuera una silla, le bastó con las escaleras.

-¿Qué hay de Vegetto? -volvió a preguntar Mangel está vez, todos estaban extrañados por la falta del líder.

-Hemos estado en su casa, parece que no ha pasado por allí, tampoco vimos que hubiera nada extraño -aclaró Auron.

-¡Ya! ¡Por qué yo lo guardé no voy a dejarlo ahí para que lo vierais to...! -Rubius se interrumpió a sí mismo al darse cuenta- Si es que me gusta ser imbécil.

-No jodas Rubiuh, ¿Qué hiciste?

No es que estuviera rodeado de los peores enemigos de Willy, pero tampoco hacían cola por ser sus fans.

-Habla calva, o te pego.

El oso miró a los tres chicos que estaban expectantes, casi con miedo en sus caras, pues tenían claro que él no estaba bailando por una buena noticia. Pero aquello ya no se trataba de Willy, era de Vegetta. Abrió el inventario tomando el taser tras varios intentos, el dispositivo cada vez daba más problemas. Dejó el aparato en manos de Auron que se lanzó a inspeccionar, mientras él intentaba recuperar lo más importante de su inventario para no perderlo. Los otros dos chicos se acercaron a Auron que le daba mil vueltas al taser.

-¿Qué pasa con la mierda esta? -le interrogó Mangel.

-Estaba en el faro, junto al ascensor -dijo distraído en su tarea de luchar con el dispositivo averiado.

-¿Por qué lo tienes? ¿No se te ocurrió decírselo a Luzu o Willy? -Auron le habló enfadado como si fuera idiota.

-¿Crees que soy imbécil? ¡Porque no estaba ahí cuando Vegetta desapareció!

-¡Cómo estás seguro de eso, puerco!

-¡Yo fui a casa de Vegetta solo unos minutos después de que él escribiera el mensaje a Willy! ¡Estuve como un cuarto de hora gritando en el puente esperando que desactivara las putas torretas y ni Vegetta ni eso estaban allí! ¡¡Apareció esta mañana!!

Mangel tomó el aparato y tras inspeccionarlo, se lo entregó a Lolito, también interesado.

-Rubiuh, ¿y si Vegetto desapareció después de que tú te fueras?

-¡No! -cómo explicar que Lobo Plateado lo sabía ya en ese momento- ¡Coringa estuvo muy pesado en el faro! Había algo ahí que le volvió como loco.

-¿Coringa? -Mangel se extrañó.

-Siiiiiiiiiiiiiiiiiii Coringaaaaaaaaaaaaaaaa, ¿Tas bobo o qué?

-¿Alguien puede saber de quién es este taser?

Era como que la conversación no fuese con Lolito, que no perdía su dulce y bonita cara que casi era mejor aún, concentrado en el aparato, mirándolo desde todos los ángulos ladeando la cabeza. Pero nadie contestó, así que Lolito los repasó a todos con los ojos esperando que con eso alguien hablara, topándose con qué Rubius desviaba la mirada a todos lados, Lolito sonrió ladino y jugueteó con el taser dándole vueltas en la mano.

-Esto son marcas de garras, y aquí los únicos que tienen garras sois tú y Fargan, y no sé porqué pero me da en la nariz que si le pregunto a Fargan, él tiene su propio taser bien guardado. Rubius ¿de quién es el taser?

Lolito daba miedo cuando sonreía así, el oso se encogió más en sí mismo, pero todos le miraban viendo como Lolito había dado en el blanco.

-¡Él no ha hecho nada vale! ¡Siempre le estais culpando de todo pero él no ha sido esta vez!

-De Willy -interrumpió Auron, deduciendo la respuesta obvia al escuchar las palabras de Rubius.

-No, Willy no chavales, yo estoy en eso con Rubiuh, Willy no le haría nada a su Vegetto.

-Yo no estaría tan seguro. Los celos son muy jodidos.

Aquello hizo al oso ponerse en pie y encararse a Auron.

-¡Cierra esa sucia boca ya mismo!

-¡Vamos! ¿Me vas a decir que tú y Vegetta no os coméis el morro? Llevas tirándote a Willy, ¿Cuánto? ¿Cinco, seis meses? -de fondo se oyó un grito de sorpresa de Mangel, Lolito seguía distraído, con un dedo en su mentón, mirando el taser- Willy se habrá pasado con alguna de sus bromas.

-Cállate Auron.

-Creo que Rubius tiene razón -la voz de Lolito congeló el ambiente, todos lo miraron- Está claro que es una trampa, o un mensaje, incluso podría ser de la Hermandad Oscura.

-Explícate Lolito -la voz grave de Auron pidió lo que todos querían.

-Puede que Coringa oliera a un extraño en casa de Vegetta así que es posible que Rubius tenga razón con la hora, entre el mensaje de Willy y la llegada de Rubius a su casa -Rubius asintió-. El que lo hizo, por algún motivo, debió volver más tarde a dejar algo que incrimine a Willy.

Se hizo el silencio, Rubius asentía emocionado a punto de besar al pelirrojo.

-¡¿VEEES?! ¿¡VEEEEEEEEEES!? ¡Ese es mi alcalde!

-La Hermandad Oscura no puede ser porque los tres, y la rata noctura, estaban en Karmaland en aquel momento, a no seeeeeeeeer -Auron miró a Rubius acusadoramente.

-¡Qué estaba con Fargan en casa de Willy pesado!

-No no, si yo no digo nada. Gorrino -otra mirada acusadora.

-¡Cállate un mes!

-De todas formas, los demás deberían saber esto, puede que así encontremos al Vegetto.

-Tranquilo puerco, nadie le va ha hacer daño a tu novia. -Auron le dió una buena palmada en la espalda al oso que se escuchó como si hubiera querido matarlo de un golpe, Rubius lo miró mal.

-¡¿Qué os pasa a todos con decir que Willy y Vegetta son mis novias?!

-¿Lo vas a seguir negando? Algún día hará calor y tendrá que quitarse la cazadora- Auron movía las cejas de arriba a abajo rápidamente- Seguro que Luzu ya ha hecho su trabajo de mamá y estan chillando como colegialas.¿Cuánto tiempo va a esconder Willy la marca que le has dejado en el cuello, puerco?

-¿Marca? Rubiuh... tú has marcado... -Mangel ni respiraba.

A Lolito se le cayó el taser chisporroteando con el golpe del suelo.

-¡No! -se hizo pequeño otra vez, sus orejitas se hundieron en la misma miseria de la que salieron sus palabras- Él... él me rechazó. ¡Mi oso solo pensaba...!

-¿Qué? -Mangel, su amigo de toda la vida, reconoció su tono de voz, a punto de llorar.

Con vergüenza, en un tono muy bajo, Rubius continuó.

-Qué si marcaba a Willy... yo podría... ¡Si tan solo hubiera marcado a Vegetta cuando mi oso me lo dijo ya lo habríamos encontrado!

Sus ojos estaban rojos, casi al borde de las lágrimas, pero era ira lo que llenaba su cuerpo. Ira, por ser tan imbécil.

Y el temido momento llegó... me he atascado XD pero no prob, hay capítulos de sobra para que sigáis teniendo uno cada cuatro días y ni notéis las pedazo vacaciones que me voy a tomar jajajajaja

Cambio la hora de publicación a esta hora siempre y cuando los chicos no tengan directo (Auron no cuenta, sigo enfadada con el)

Ansiosa de veros comentar!! esperando vuestros chistes y teorías!!!

Por cierto, a la gente nueva que está empezando a leer, os amo ya os lo voy diciendo, ¿Pero enserio que estáis leyendo los capítulos de delta? Tenéis los huevos enormes. Como curiosidad para todos, el primero de delta lleva 451 lecturas, el segundo 110 lecturas menos y el tercero es el menos leido del fic con 270 lecturas totales, 180 lecturas menos que el primero y 70 menos que el segundo jaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa. Pues si que van a ser capítulos desagradables oye. Prometo no volver ha hacerlo, palabrita.