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La puerta estaba abierta y su madre mandaba a Phoebe a pasearse para revisar que la puerta permaneciera de esa forma cada quince minutos, comenzaba a ser molesto.

Ava estaba sentada en la cama mientras los dos hacían la tarea de Química, la pelinegra apestaba en esa materia y la odiaba, pero a Adrien parecía hacérsele muy sencilla.

El castaño en cambio estaba acostado boca arriba con los pies sobre la pared mientras le dictaba a Ava unos componentes de la tabla periódica que ella anotaba en ambos cuadernos en respuesta a un cuestionario.

El teléfono de Ava sonó, ella lo limpió rápidamente con una toallita y contestó.

-¿Si?-preguntó, dibujando una flor acompañada de pequeños corazoncitos en la esquina del cuaderno de Adrien.

-Hola-dijo su madre sonriente-¿En dónde estás?-preguntó la mujer, Ava suspiró.

-Fuera-respondió seria.

-Uy, no, vuelve a casa, tu padre tiene una importante cena con su jefe hoy y tenemos que ir-dijo y después soltó una risita, Ava pudo escuchar la voz de un hombre y suspiró al saber que su madre seguía viéndose con ese tipo.

-¿Y eso a mi que me importa?-preguntó entrecerrando los ojos.

-En el dinero que gana tu padre Ava-dijo obvia.-Iré a casa en unos treinta minutos, ya te quiero ahí.

Ava bufó.

-Estoy haciendo tarea, no voy a dejarlo solo porque tú y papá quieren ir a cenar-dijo brusca-Vayan ustedes.

-Escúchame niña, es una cena con su jefe, tal vez le aumenten su salario, así que regresa a casa, arréglate y esperaremos a que tu padre venga por nosotras.

Ava suspiró.

-Yo estoy arreglada-dijo rodando los ojos.

La mujer suspiró.

-¿Qué traes puesto?-preguntó.

-El vestido rojo y tenis-respondió.

-Bien, pero te llevaré unas zapatillas, ¿las de brillos o las rojas?

-Brillos-respondió bajo la mirada curiosa de Adrien.

-¿En donde estás?-Ava escuchó el motor de un auto.

-En casa de Adrien-Su madre soltó una risa.-No lo hicimos, ¿podrías dejar de molestar con eso de una vez?-preguntó brusca.

La mayor rió.

-Cómo sea, mándame la dirección de ese chico, pasaremos por ti.

-Te la envío por mensaje, adiós-colgó y suspiró.-Mis padres vendrán en un rato-murmuró.

Adrien la miró con el ceño fruncido.

-Creí que siempre llegaban de noche-Ava se encogió de hombros, enviándole su ubicación a su madre.

-Casi siempre, ahora papá tiene una cena con su jefe y quiere que mamá y yo vayamos, es odioso.

-¿Ir a cenar?-preguntó confundido, Ava asintió-¿Por qué?

-Jamás como algo que yo no haya preparado o visto su preparación, hay gente que no desinfecta y lava todo adecuadamente -susurró avergonzada-Asi que solo me siento ahí a tomar agua mientras ellos hablan durante estupideces toda la noche, es exasperante.

-¿Por eso no quisiste venir a cenar el lunes?-Ava asintió.

-Lo siento si tu mamá se enojó-susurró, Adrien negó.

-Nah, solo me dijo que debería de insistir más-dijo con una sonrisita, dio vuelta en sí mismo quedando boca abajo, tomo el gel de Ava y se limpió las manos, le apretó la mejilla delicadamente.-¿El viernes a donde quieres ir?-Ava se encogió de hombros.

-No me gusta salir, pero si tu quieres ir a algun lugar está bien-murmuró besándole el dorso de la mano.

Adrien le sonrió.

-Podemos ver peliculas en mi casa o en la tuya, si lo prefieres, porque la verdad es que los viernes mi casa normalmente es un desastre, mi hermano descansa ese dia y seguramente se pondrá a pintar la cocina-rodó los ojos.

-Uhhh, mis padres harán una fiesta, o irán a una, no lo se aun, pero de cualquier forma no dejan que nadie suba-dijo sonriendole-¿A qué hora llegarás?-preguntó.

-¿A las 6:00 está bien? Tengo que ir al oculista-Ava asintió.

-Claro, espero que te vaya bien, buenas noticias-explicó.

Adrien asintió con una sonrisa.

-Yo también, comienzan a estresarme los lentes, esta semana se me han caido como seis veces y arruiné el estuche cuando le lanzé mi mochila a Cal, cayó en el piso y se rompió.-Ava lo miró confundida.

-¿Por qué la lanzaste?-preguntó curiosa, Adrien se encogió de hombros.

-Uhh, nada más-susurró, Ava soltó una risita sin comprender del todo.

-A mi me gusta como te ves con lentes, creo que te ves más guapo-dijo en un susurro.

Adrien la miró sonriente.

-Gracias, creo que eres la única que piensa eso-dijo en voz baja acercándose más al rostro de la pelinegra.

Ava le sonrió y dio un pequeño toque en su nariz.

-Pues seguro mucha gente lo piensa pero no te lo dicen-murmuró.

-Es cierto-respondió Phoebe, ocasionando que ambos saltaran hacia atrás, del susto Ava cayó en el suelo.-Uy, lo siento.-murmuró apenada mientras Adrien ayudaba a la pelinegra a ponerse de pie, murmurándole que acababa de limpiar el suelo y estaba perfectamente libre de gérmenes.

-¿Desde hace cuánto estás ahí Phoebe?-preguntó Adrien brusco, la menor se encogió de hombros.

-La verdad es que no mucho, venía a revisar que la puerta estuviera abierta-dijo rodando los ojos aburrida-Ya lo hice, así que adiós-dijo caminando de regreso a las escaleras con rapidez.

-Lo siento-se disculpó Adrien-Mi hermana a veces es un dolor de cabeza-Ava le sonrió tranquilizadoramente.

-No tengo hermanos pero la verdad creo que para eso existen-dijo, Adrien rió levemente y besó su mejilla.

-Terminemos con la tarea-murmuró, Ava asintió acostándose boca abajo, con las piernas cruzada en el aire, Adrien se acostó de la misma forma a su lado y juntos continuaron resolviendo el cuestionario.

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El timbre de la casa sonó, Ava se levantó de un salto de la cama y Adrien la miró confundido.

-¿Qué pasa?-preguntó mientras la pelinegra guardaba sus cosas dentro de su mochila.

-Mi mamá llegó-susurró.-Y no quiero que hable con la tuya-Adrien arrugó la frente.

-¿Y eso por qué?-preguntó confundido.

-Mi mamá no suele dejar una buena impresión-explicó en voz baja, cerrando la mochila, miró nuevamente a Adrien.-¿Vamos?-el ojiazul asintió, levantándose y comenzando a caminar junto a Ava,ni siquiera se había puesto sus tenis, sabía que su mamá lo iba a regañar por andar caminando en calcetines.

Cuando ambos bajaron de la escalera Ava suspiró al mirar a su madre de pie dentro de la casa.

Tenía un vestido azul marino pegado y largo con un corte desde la cintura, unas zapatillas negras, unos aretes y un collar muy caros y el cabello en una coleta alta.

-Hola cielito-saludó sonriente a Ava, la pelinegra le sonrió fugazmente caminando hacia ella.

-Hola-respondió en voz baja.

-Oh, pero si es tu chico, creí que no lo verías más-dijo mirando sonriente a Adrien, quien se sonrojó rápidamente bajo las miradas de todas las mujeres ahí.

-Hola señora Nass, es un gusto volver a verla-murmuró Adrien.

Catalina le sonrió.

-Hola corazón, pero que educado hijo tienes-dijo en dirección a Koreen, la castaña le agradeció con una sonrisa-Hoy en día todos los chicos que veo en la calle son unos patanes, ¿sabes? me alegra que Ava y él sean novios, será un buen primer amor-murmuró.

-Mamá-murmuró Ava mirando seria a su madre, la mayor le guiñó un ojo..

-¿Novios?-preguntó Phoebe, con sus dos amigas a sus lados mirando tristes a Adrien, el castaño asintió rápidamente al notar las miradas de las menores, Linda y Koreen lo miraron con la boca levemente abierta.

-No sabía que eran novios-dijo Koreen mirando seria a Adrien, pidiendo explicaciones.

Él sabía muy bien que ni siquiera los hubiera dejado subir si hubiera sabido que Ava y él 'estaban en ello' con sus dos novias pasadas, siempre tenía que estar abajo, y no tenía problema con eso, pero, no creía que a Ava le agradara mucho.

-Uhmmm-murmuró Adrien nervioso.

-Oh, no te preocupes, son adolescentes-dijo Catalina, Ava miró a su madre con los ojos llenos de pánico, ya sabía que era lo siguiente-Deben de disfrutar, siempre le he dicho a mi princesita que haga todo lo que guste pero con condón, no queremos otro accidente-murmuró divertida, la pelinegra se sonrojó aún más al notar la mirada de todas las demás mujeres sobre ella, se mordió la mejilla interior.

Su madre siempre encontraba la forma de avergonzarla.

-¿No tenemos que irnos?-preguntó Ava en un susurro mientras su cuello se coloraba.

-Ay princesita, te has puesto toda roja-dijo, acercando su mano para apretar la mejilla de Ava, pero la menor saltó rápidamente hacia atrás-Oh claro, lo siento-dijo sonriente.-Bueno, ha sido un gusto, debemos irnos-dijo, caminando hacia la puerta.-Hasta luego.

-Hasta luego-dijeron al unísono, Ava salió rápidamente de ahí sin mirar a nadie, prácticamente corrió al lujoso auto de su padre y abrió la puerta trasera bruscamente, comenzando a limpiar el asiento con rapidez cuando Catalina a penas bajaba del porche.

-¿Por qué tardaste tanto niña?-preguntó su padre serio, expulsando el humo del cigarro.

Ava rodó los ojos.

-Mamá es la que quiso entrar a conversar-dijo molesta

El hombre rodó los ojos, al mismo tiempo que Ava se sentaba dentro del auto y su madre abría la puerta del copiloto.

-¿Quieres un cigarro cielito?-preguntó su madre mirándola desde el asiento delantero mientras sacaba un cigarrillo de la cajetilla, Ava negó.

-No gracias-respondió, rodando los ojos mirando hacia la ventana, topándose con que la chica embarazada la miraba desde la ventana de la sala de estar, su padre arrancó y salieron de ahí a una alta velocidad.

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K opinan

Siento mucho haber pasado tanto sin actualizar pero pinche teléfono pvto que se desactivó y ya no puedo hacer una mierda xd, estoy harta.

Luego mi mamá quitó el internet y pss no pude escribir por lo mismo del teléfono):