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Capítulo 7

¿!Que!? No creyeron que iba a actualizar tan rápido. Aúnque la razón tiene que ver con la cantidad de palabras. Aunque sí quise extender este capítulo no quiero arruinar la calidad.
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Cuando llegaron al cuartel, no encontraron a Ryder en su oficina ni en el salón común. Marshall y Chase se miraron con preocupación. "Esto no es normal", dijo Marshall. "Ryder siempre está aquí".

Chase asintió. "Vamos a buscarlo en todo el cuartel. Quizás esté en el garaje o en el patio".

Dividieron el cuartel entre ellos y comenzaron a buscar. Después de unos minutos, Chase llamó a Marshall desde el patio. "¡Marshall, ven aquí! ¡He encontrado algo!"

Marshall se apresuró a reunirse con Chase y encontró un papel en el suelo con una nota escrita a mano. "¿Qué dice?", preguntó Marshall.

Chase leyó la nota en voz alta. "Dice: 'Necesito irme por un tiempo. No se preocupen, estoy bien. Ryder'".

Marshall frunció la ceja. "Eso no suena como Ryder. ¿Por qué se iría sin decirnos nada?"

"No lo sé, pero debemos encontrarlo". Dijo Chase llamándole através de su placa.

Mientras tanto, Zuma y Skye patrullaban Bahia Aventura, disfrutando de la brisa marina y la tranquilidad del día. Skye, sintiéndose más animada gracias a las palabras de su amigo, observaba con atención el paisaje en busca de cualquier señal de problemas.

"Es un buen día para volar", comentó Skye, mirando al cielo despejado.

"¡Ya te dije que no fumo mariguana!". Respondió Zuma.

"¡No me refería a eso! Lo que quise decir era que es un buen día para dar un vuelo". Contestó Skye mientras miraba el hermoso color azul del cielo.

"Sí, lo es", respondió Zuma. "¿Sabes qué, Skye? Creo que deberías hacer una demostración de tus habilidades aéreas. Siempre me impresiona verte en el cielo. Traigamos a los demás y hacemos un espectáculo aéreo que venceremos a Danny en vistas".

Skye sonrió, sintiéndose halagada. "Siempre le ganaremos a Danny en vistas en nuestro canal de YouTube, Facebook y X. Por algo nuestra mercancía es una de las más vendidas" .

"!Quien no pagaría por abrazarnos! Oh, casi lo olvido. Voy a llamar a los demás para hacer el espectáculo en la noche". Dijo Zuma emocionado por lo que había planeado.

"Gracias, Zuma. A veces olvido lo mucho que disfruto volar. ¡Vamos, te mostraré algunos trucos nuevos que he estado practicando ahorita!"

Con un giro elegante, Skye despegó en su helicóptero, haciendo una serie de acrobacias en el aire. Zuma la observaba desde abajo, animándola con entusiasmo. Los giros y vueltas de Skye eran impecables, y pronto atrajeron la atención de algunos habitantes de la Bahía que aplaudieron al ver los trucos en el cielo.

Mientras tanto, Chase y Marshall en cuartel, encontrando a Ryder trabajando en su computadora. Ryder levantó la vista cuando los vio entrar, sonriendo.

"¡Hola, chicos! ¿Todo bien?" preguntó Ryder.

"Nos preocupamos porque no te vimos en todo el día," explicó Marshall mientras comenzaba a rascarse su oreja con su pata trasera. "Queríamos asegurarnos de que estuvieras bien".

Ryder se rió y se levantó de su silla. "Gracias por preocuparse, chicos. Estaba trabajando en una actualización para los vehículos y fui rápidamente por unas herramientas que necesitaba. Quiero asegurarme de que estén en perfectas condiciones para nuestras misiones".

"Eso es genial, Ryder. Siempre pensando en cómo mejorar las cosas". Dijo Chase mostrando un cara de satisfacción y no la de preocupación que tenía hace unos segundos.

"Claro, eso es lo que hace un buen líder", agregó Marshall con una sonrisa.

Ryder les mostró algunas de las nuevas características y mejoras que había estado trabajando, explicando cómo cada una ayudaría a hacer sus misiones más eficientes y seguras. Los cachorros se sintieron emocionados por las novedades y agradecidos por el esfuerzo de Ryder.

Mientras tanto, Skye aterrizó suavemente junto a Zuma, quien la recibió con una gran sonrisa. "¡Eso fue increíble, Skye! Eres la mejor piloto de la Bahía".

Skye se sonrojó ligeramente, sintiéndose orgullosa. "Gracias, Zuma. Me alegra que te haya gustado".

Zuma sonrió. "Hasta olvidaste lo de tus ojos". Mencionó el cachorro labrador mientras miraba al mar.

De repente, el comunicador ambos sonó, y Ryder apareció en la pantalla. "Cachorros, llamada de alerta".

"¡Ryder nos necesita!" Gritaron, y ambos cachorros se dirigieron de vuelta al cuartel.

Todos los cachorros corrieron al cuartel y se formaron en una fila horizontal.

"¡Paw Patrol, listos para la acción, jefe Ryder!" dijo Chase con entusiasmo, su pecho inflado de orgullo.

Ryder, con una sonrisa de aprobación, se adelantó y comenzó a explicar la nueva misión. "Cachorros, tenemos una emergencia en la montaña. Un grupo de excursionistas ha quedado atrapado después de un desprendimiento de rocas. Necesitamos llegar allí rápidamente y asegurarnos de que todos estén a salvo."

"Espero que esta vez no termine rodando montaña abajo... otra vez," dijo Marshall con una sonrisa nerviosa, recordando sus intentos de rescate pasadas.

Rocky le dio una palmadita en la espalda. "No te preocupes, Marshall. Esta vez, todos estaremos ahí para ayudarte," dijo, su voz llena de camaradería.

"¡Eso es lo que me gusta escuchar! ¡Trabajo en equipo, siempre!" exclamó Rubble, levantando su pata para un choque de patas.

Zuma, con una sonrisa tranquila, se volvió hacia Skye. "Estás lista para liderar el vuelo, Skye? Te vi practicar esos giros impresionantes esta mañana. Eres increíble."

Skye sonrió con confianza. "Gracias, Zuma. me siento lista para cualquier cosa. Vamos a hacerlo juntos."

Ryder asintió, observando a cada uno de los cachorros con un aire de orgullo y confianza. "Recuerden, trabajamos en equipo y siempre nos apoyamos mutuamente," dijo, mirando a cada uno de los cachorros a los ojos. "Ahora, a la montaña. ¡Paw Patrol en marcha!"

Con determinación y camaradería, los cachorros salieron hacia la montaña. Chase lideraba con su instinto policial, Marshall y Rubble estaban preparados con sus equipos de rescate, Rocky tenía sus herramientas listas, y Skye, sintiéndose renovada y confiada gracias al apoyo de Zuma, lideraba el vuelo.

Los cachorros avanzaron hacia la montaña, el cielo empezaba a oscurecerse y el viento se hacía más fuerte. Skye mantenía la vista fija en su camino, volando con gracia y precisión, mientras los demás cachorros la seguían desde tierra.

"Chase, necesito que uses tu megáfono para mantener a los excursionistas calmados," ordenó Ryder a través de su comunicador. "Rocky, asegúrate de tener tus herramientas listas, podríamos necesitar reparar equipo dañado."

"¡Sí, señor!" respondieron ambos cachorros al unísono, mostrando su compromiso con la misión.

Al llegar a la base de la montaña, Marshall desplegó su escalera y empezó a subir para tener una mejor vista del terreno. Mientras tanto, Rubble estaba listo con su excavadora para despejar algúna roca que se pusiera en su camino.

"Ryder, aquí Marshall. He localizado a los excursionistas, están atrapados en un saliente a mitad de camino. Parece que una roca grande bloquea su camino de regreso."

"Bien hecho, Marshall. Skye, ¿puedes volar hasta ellos y entregarles una radio para mantener la comunicación directa?"

"¡Enseguida, Ryder!" Skye se elevó rápidamente, sus alas zumbando en el aire. A medida que se acercaba al grupo atrapado, pudo ver las caras de alivio y esperanza en los excursionistas. Entregó la radio y les aseguró que el rescate estaba en marcha.

Desde abajo, Zuma observaba con admiración a Skye, siempre impresionado por su valentía y habilidad en el aire. Aunque la situación era seria, no podía evitar sentirse orgulloso de su amiga.

"Skye, prepárate para asistir con el arnés de rescate. Necesitaremos bajarlos uno por uno," indicó Ryder.

"¡A la orden, Ryder!" Skye se movió rápidamente, listo para ayudar.

Mientras Rocky trabajaba en despejar el camino y Chase mantenía a los excursionistas calmados, Ryder se aseguró de que todos los cachorros estuvieran coordinados y seguros. Marshall y Rubble trabajaban juntos para mover la roca que bloqueaba el camino, usando la fuerza combinada de sus herramientas y maquinaria.

Poco a poco, el equipo logró liberar a los excursionistas uno por uno, utilizando el arnés de rescate que Skye había preparado.

Los agradecimientos y sonrisas de los rescatados fueron un recordatorio del impacto positivo que Paw Patrol tenía en la comunidad.

Finalmente, con todos a salvo y en tierra firme, Ryder reunió a los cachorros. "¡Gran trabajo, cachorros! Una vez más, demostramos que no hay misión demasiado grande ni cachorro tan pequeño."

Los cachorros celebraron su éxito, abrazándose y felicitándose mutuamente. Skye aterrizó suavemente junto a Zuma, quien le dedicó una sonrisa amplia y llena de admiración.

"Lo hiciste genial, Skye," dijo Zuma, con una chispa en sus ojos. Aunque no resaltaba tanto como las se Skye todavía se notaba su resplandor.

Marshall se unió a la conversación, con su usual entusiasmo. "¡Estuviste increíble allá arriba, Skye!

Rubble asintió con la cabeza. "Definitivamente".

Ryder los miró a todos con orgullo. "Estoy muy orgulloso de cada uno de ustedes. Ahora, regresemos al cuartel y descansemos. Nos lo merecemos."

Mientras se dirigían de vuelta al cuartel, Skye y Zuma caminaban juntos, hablando en voz baja sobre la misión. "Sabes, cada vez que vuelo, siento que podemos hacer cualquier cosa," admitió Skye, mirando a Zuma con una sonrisa.

Zuma le devolvió la sonrisa, sintiendo una calidez especial en su corazón. "Si eso también significa tu ojos de tomate estas en un buen camino."

Skye sintió una oleada de felicidad y tisas al escuchar las palabras de Zuma. "Y tú eres un buen amigo. Y un mejor psicólogo que Marshall".

"Escuché eso". Reclamó Marshall.

Skye se rió al ver la expresión divertida en el rostro de Marshall. "Lo siento, Marshall. Sabes que solo bromeo."

Marshall puso cara de fingida indignación. "¡Pues ya veremos quién es mejor psicólogo cuando te deslices por una pendiente embarrada y necesites ayuda para levantarte!"

Zuma se rió y le dio una palmadita en la espalda a Marshall. "Tranquilo, amigo. Todos sabemos que eres el mejor cuando se trata de caer y levantarse."

"¡Eh! Eso suena a un cumplido a medias," replicó Marshall, intentando mantener su rostro serio, pero pronto se unió a las risas.

De regreso en el cuartel, Ryder les dio la tarde libre. "Descansen, cachorros. Han hecho un trabajo increíble hoy."

Skye decidió dar un paseo por el patio, buscando un poco de aire fresco. Marshall, siempre dispuesto a acompañar a sus amigos, la siguió.

"¿Te importa si te acompaño, Skye?" preguntó Marshall, tratando de no tropezar con sus propias patas mientras caminaba junto a ella.

"Para nada, Marshall. Me encantaría la compañía," respondió Skye con una sonrisa.

Mientras paseaban, Marshall intentaba impresionar a Skye con sus habilidades de equilibrio, caminando por el borde de la acera. Sin embargo, en su intento de ser gracioso, resbaló y cayó en un charco de barro. Skye no pudo contener la risa.

"¡Marshall! ¡Siempre encuentras la manera de hacerme reír!" dijo entre risas, ayudándole a levantarse.

Marshall, cubierto de barro, sacudió la cabeza y rió también. "Bueno, al menos soy bueno en algo, ¿verdad?"

Skye le dio un amistoso empujón con su hocico. "Eres bueno en muchas cosas, Marshall. Y sí, también en hacerme reír."

Intentando sacudir el barro de su pelaje, Marshall miró a Skye con una sonrisa traviesa. "¿Sabes, Skye? Tal vez tú necesitas un poco de barro para relajarte también."

Antes de que Skye pudiera reaccionar, Marshall sacudió su pelaje, lanzando gotas de barro en su dirección. Ella gritó sorprendida, pero pronto comenzó a reír, atrapada en la diversión del momento.

"¡Marshall! ¡Ahora ambos necesitamos un baño!" exclamó Skye entre risas, tratando de esquivar las gotas de barro.

Marshall se rió también, dejando escapar un suspiro de alivio. "Supongo que siempre puedo contar con Zuma para un buen baño, ¿verdad?"

"Definitivamente. Pero primero, vayamos al cuartel antes de que Ryder se dé cuenta de que estamos cubiertos de barro," dijo Skye, todavía riendo.

Mientras caminaban de regreso al cuartel, empapados y cubiertos de barro, Skye y Marshall se dieron cuenta de que, a pesar de todas las tragedias, siempre podían contar el uno con el otro para encontrar la diversión y el humor en cualquier situación.

Después de dañarse y evitar que Ryder los viera Marshall y Skye volvieron a sus casitas.

Y ambos solo sabía que querían estar juntos denuevo. Solo que no esa noche.

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