Capitulo once
Aquí comienza el Severus x James.
¡Comencemos!
Despacho de Dumbledore. 9:30 a.m.
Enfrente de Albus estaban los estudiantes que había mandado a llamar, estaba cansado que estos pelearan y hasta yo lo entendería - ¿Ustedes no? - como sea, los chicos estaban que se miraban entre odio y dudas.
- señor Pettigrew, ¿Por que actuó así? - pregunto Albus
- fue un accidente - lo miro Peter
- ¡Mentira! - hablaron las serpientes y el Ravenclaw
- jóvenes - llamo Albus - señor Pettigrew con todo respeto, yo no vi que usted empujara "accidentalmente" al joven Black - lo miro
Peter se quedo callado.
- bueno a vista que no puede decir nada - miro a los demás - ustedes no debieron tratar a Remus así
- ¡Se paso a Slytherin! - grito Sirius - ¡Es una asquerosa serpiente!
- ¡Señor Black! - exclamo Minerva - lamento la tardanza, Regulus esta en la enfermería con el joven Lupin,el joven Snape y la señorita De'Lacour
- menos mal - suspiro Lucius - ¿Cual va hacer nuestro castigo?
- los voy a separar para que trabajen con la ayuda del otro - señalo a ambos "bandos" - los voy a escoger yo, y escúchenme bien, voy a pedir que los pongan así en los trabajos
Los chicos se quejaron, bueno al menos los leones, mientras que las dos serpientes y el águila se mantenían calladas, sabían que habían hecho mal en golpearlos, pero el viejo abuelo tenía que comprender que entre ellos se cuidaban.
- las parejas van hacer el señor Pettigrew y el señor Malfoy - ambos se miraron - el señor Blak y el señor De'Lacour - se escucho un bufido - y a lo ultimo va hacer el señor Potter y el señor Snape
- ¡No! - exclamaron los leones
- ¡Silencio! - los regaño Minerva - ustedes ya no son unos niños
- vaya primera vez que la escucho decir algo sensato - soltó Lucius
- ¿A que se refiere señor Malfoy? - preguntaron ambos profesores
- profesora no se haga la inocente - la miro - usted nunca ayudo a Severus cuando estos inutiles lo lastimaban son sus asquerosas bromas, es mas hasta usted castigaba a Severus como si hubiera hecho todo eso
- Minerva, es eso cierto - la miro Dumbledore
- B...bueno y...yo - comenzó a tartamudear
- ni se le ocurra mentir, que Sev puede mostrar sus memorias - bufó Lirio
- si es cierto - se sonrojo
- yo esperaba mas de ti - se notaba triste el director - hablare contigo cuando ellos se vayan - suspiro - Peter, Lucius van a ayudar a Madame Pomfrey en la enfermería, Sirius y Lirio irán con Madame Hera con la biblioteca, mientras que James y Severus van con Hagrid al bosque prohibido - los miro - ¿Alguna duda?
- Yo - hablo Sirius - No quiero hacer esto, ni menos con un rubio descerebrado
- Black, yo tengo mas cerebro que tu - se burló Lirio - pero no voy a negar mi castigo
- ¿como me dijiste? - pregunto Sirius mientras se para de la silla
- señores - dijo Albus - vayan con los profesores, si gustan pueden ir a ver al joven Black y a Remus
Los seis salieron de la oficina e inconscientemente los leones fueron a la enfermería también, Peter porque no tenía de otra mas que hacer su castigo, James para llevarse de ahí a Snape lo mas rápido, mientras que Sirius sentía la necesidad de saber si su pequeño tierno y sexy hermano menor estuviera bien.
Enfermería. 10:05 a.m.
Desde hace rato que Regulus, Remus, Dominique y Bastian estaban en la enfermería, el primero estaba con un ungüento blanquinoso y un trapo con hielo en su nariz, los otros tres estaban sentados cerca de el.
- te sigue doliendo mucho - pregunto Dom
- un poco - suspiro - me duele mas el labio que la nariz
- es normal, esta inflamado - suspiro Bastian - tienes que descansar, Pompy vuelve en unos momentos
- quiero ver a los demás - suspiro
- falta poco - sonrió Remus
El de ojos ambarinos se sentía culpable, se sentía tonto, las serpientes estaban cuidando de el, no entendía como Severus lo había perdonado, no merecía su perdón, estaba mas que metido en sus pensamientos cuando vio el arete de Dominique, pues parecía un pavo real.
- se que no tiene que ver con lo que esta pasando - comenzó Remus - pero no te he visto la serpiente, Bastian
- ¿Que? -lo miro - ¿mi serpiente?, aquí esta
Remus vio la serpiente en su dedo, era mas que hermosa, miro a sus tres amigos, los cuales le sonreía, cuando vio como el arete de Regulus cambiaba a una forma que juraba era la cola de Sirius cuando se transformaba en Canuto. Cuando iba a decir algo, las puertas se abrieron dejando ver a los leones y las serpientes.
- Lamentamos la tardanza - suspiro Lucius
- ¿como estas? - pregunto Lirio
- estos bien - sonrío - solo que me duele un poco el labio
- pero nada mas, ¿Verdad? - lo miro Sev
- si - rodó los ojos - ¿los castigaron?
- si - contestaron los tres
- yo me quedare un rato contigo, ayudare a Madame Pomfrey - sonrió Lucius
Bastian iba a decir que tenían "invitados", pero Dom se les adelanto.
- ¿Que hace la rata y sus amigos aquí? - los miro
- ¿A quien le dices rata?, ¡Puta! - chilló Peter
- ¿Puta? no has visto a tu amiga Evans ¿verdad? - sonrió - Lucius no te queremos causar problemas, así que nosotros nos vamos
Cuando ellos se fueron, Remus sintió la mirada penetrante de los que alguna vez logro llamar "amigos", "hermanos", "familia". Mientras que los demás se ponían con sus compañeros "felizmente", aunque Sirius sintió envidia y celos cuando hace poco minutos vio como Dominique le daba un beso en la frente, Bastian y Remus le besaban la mejilla cada uno de un lado, después el como Snape le mandaba un ¿beso?, ¡Si, un beso!, y como Lirio lo sujetaba de la cintura y juraba que lo había besado.
Biblioteca. 1:45 p.m.
Desde hace rato que estaban en la biblioteca, Sirius se estaba hartando, mientras que Lirio estaba mas que tranquilo, la verdad hacía lo imposible para no meterse en la mente de Black a ver que realmente sentía por el pequeño Regulus.
- De'Lacour - lo llamo
- ¿Que quieres Black? - pregunto mientras miraba el libro de transformaciones básicas para novatos
- quiero que te alejes de Regulus - soltó
- ¿Que? - lo miro - ¿Tu crees que voy a dejar de estar con el? - soltó una risa - por favor Black, tu hermano es algo hermoso
Lirio no mentía, Regulus era mas que hermoso, pues quien se podía resistir a el, pero no lo veía de esa forma, pues desde hace tiempo el sentía algo por Bastian, pero jamas le había dicho a nadie, pues sabía que era una locura.
Sirius por su parte quería matar a Lirio, odiaba la idea que se le acercaran a su hermano, desde que el había entrado a Hogwarts había espantado a todo el que se le acercaba a su pequeño Reg, odiaba que lo miraran, odiaba a todo aquel que quisiera algo mas que una "amistad", las cuales también le daban celos.
Bosque prohibido. 6:45 p.m.
Llevaban mas tiempo del que hubieran deseado, James estaba mas que cansado, desde hace tiempo que estaba en el lodo buscando algo que se le había caído, mientras que Severus estaba recogiendo unos ingredientes para pociones. Todo estaba tranquilo cuando a James se le ocurrió una idea.
- ¡Oye Snape! - grito, pero este no le hacía caso - ¡Te estoy hablando!
Severus no respondía.
- sabes que es de mala educación no responder - lo miro - vaya así que eres un cobarde
Silencio.
- ¿Que llevas en el oído? - pregunto - ¿Que peculiar arete? - frunció el ceño - ¿Magia negra?, vaya ya estas practicando, como no si eres un asqueroso mortifago de mierda
Silencio.
- ¡Snape! - grito - ¡Te estoy hablando! - nada - vaya eres como tu madre, una perra
Con solo escuchar eso Severus paro de sacar unas raíces, se paro y se voltio a verlo, sus ojos que antes brillaban ahora parecía que no tenían vida, su rostro estaba serio.
- ¿Que dijiste? - pregunto
- vaya ya hablas - sonrió - y yo que pensabas que eras igual de perra que tu madre - se acerco poco a poco - claro si eres una perra, la perra de Malfoy
- a ti que te importa si soy algo de Lucius - dio una media sonrisa - de seguro que te imaginas a Lucius besándome, tocándome
James no hizo ni digo nada, ver a Snape moviendo sus caderas, sus labios rojos y la ropa pegada al cuerpo. El corazón le comenzó a latir ferozmente, se comenzó a poner nervioso y su mente se quedo en blanco cuando los brazos del mas bajo quedaron en su cuello y sus labios a una distancia muy corta.
Cuando alguno iba a decir algo, la voz de Hagrid les dijo que ya se podían ir, todo paso muy rápido, Severus ya estaba caminando directo al castillo mientras miraba su reloj que decía 20:00 hr, faltaba poco para que comenzara la cena. James por su parte, sintió algo, que jamas había sentido con Lily cuando los dos tenían sexo.
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