Capitulo doce
Atención ella es Nicolett Beckham y va hacer una de las nuevas aventuras de Sirius, lo que es del asco, pero no importa. Otra cosa.
1.-¿con quien quieren que este tom?
2.- ¿Quieren que aparezca Harry en la historia, como el hermano menor de James?
3.- si en la anterior fue si, ¿Como quieren que conozcan a Harry?
4.- ¿Quieren que algo le pase a los tres tontos (James, Sirius y Peter)?
5.- Si no quieren que aparezca Harry, ¿Quien quiere ser la pareja de Tom?
6.- ¿Quieren lastimar a Lily?, porque yo si.
:)
¡Comencemos!
Sala común de Slytherin. Cuarto de los prefectos.
Definitivamente Severus se maldecía, no estaba pensando cuando se le acerco de esa manera a Potter, ¿porque lo hizo?, no lo sabía, pero le sorprendía que Potter se quedara quieto, como si este lo quisiera cerca.
- Sev, me estas mareando - hablo Lucius mientras se acomodaba a lado de Remus - aparte Remus te lleva hablando por mas de una hora
- ¿Que? - pregunto desconcertado Severus
- que te estoy hablando desde hace una hora y tu ni en cuenta - suspiro Remus
- lo siento - se sonrojo -¿Que pasa?
- te quería preguntar que que tenías - sonrió tímidamente Remus
- bueno, hay algo que les tengo que decir - miro a todos
- ¿Que paso? - pregunto Dominique mientras se sentaba en la cama de Regulus
- tienes la misma mirada de Bastian cuando mete la pata - suspiro Lirio, a lo que todos lo vieron - ¿Que?
- como sabes que yo pongo esa mirada - cuestiono Bastian
- bueno, te conozco muy bien - se sonrojo - y te pongo atención - murmuro aquello ultimo, para que solo Regulus quien estaba a su lado sonrió
- ¿Okey? - dijo dudoso Sev - bueno no importa, y si, metí la pata y a fondo
- ¿Que hiciste? - pregunto Lucius con el ceño fruncido
- Potter cree que tu y yo tenemos algo - se sonrojo
Todos se quedaron callados, Regulus estaba impresionado, aunque sabía que Severus era de los que actuaba y luego pensaba.
Lirio se quedo impresionado, no sabía que hacer, aunque trataba de evitar que se notara.
Dominique se estaba riendo demasiado tanto que se había caído de la cama de Regulus.
Bastian estaba entre enojado y ¿avergonzado?, la primera porque no quería que nadie le quitara a su inocencia a su hermano y avergonzado porque el todavía era virgen.
Remus suponía que James había sacado a Severus de sus casillas, así que solo esperaba que su azabache amigo tuviera un seguro medico y de vida.
Lucius por su parte estaba mas que impresionado, no cabía de impresión, Severus dijo que ellos habían tenido algo, no podía creerlo, miro a su amigo y noto que estaba nervioso.
- chicos digan algo - pidió Severus - se que hice mal, pero me saco de mis casillas, comenzó a insultar a mamá diciendo que ea una perra y que yo era igual a ella, que era tu perra Lucius y yo me desespere - comenzó a llorar - yo no se que me esta pasando
- espera - pidió Bastian - ¿Como que Potter insulto a nuestra madre?
- si, dijo que era una perra - sollozo
- eso no es cierto - lo miro Regulus - mamá Eileen era, es y sera una gran mujer
- ¿mamá Eileen? - pregunto Remus - ¡Espera!, ¿Eileen Prince?
- si, ella es nuestra madre - contesto Bastian
- ella nos amaba como nuestras madres nunca lo hicieron - aclaro Barty mientras entraba con Narcissa a la habitación - lamento interrumpir
- no pasa nada - dijeron todos
- ¿ocurrió algo? - pregunto Regulus
- nos preocupamos el porque no bajaban - suspiro Narcissa - vamos, pero antes tienes que arreglarte tus ojitos
Mientras las chicas ayudaban a Severus, los demás iban a la sala, donde los demás estaban.
- ¡chicos escúchenme! - llamo Lucius - James Charles Potter metió la pata lo que provoco que Severus explotara, atención lo que vamos hacer es que ustedes van hacer como si nosotros estuviéramos "enamorados", pero ustedes van a saber la verdad
- ¡No! - chilló alguien desde las escaleras - ¡No lo harás Lucius!
- Sev, sabes que Potter se va a poner con sus cosas - suspiro Regulus - deja que nos encarguemos todos, como una familia
La casa de Slytherin era una familia, mas unida que lo que Gryffindor puede ser, eso lo comprobó Remus Jonh Lupin, quien ahora se sentía mas que feliz de saber que ellos si eran una familia y que jamas se apuñalarían por la espalda.
Casa Gryffindor. Cuarto de los "prefectos".
Después de que pasara lo de Remus y los castigos, Sirius y James estaban en sus respectivas camas, sabían que ya no debían de estar en esa habitación, pero nadie le decía que no al príncipe de los leones. Peter no estaba así que no se preocupaban tanto, la puerta se abrió dejando ver a Lily Evnas y Nicolett Beckham quienes llevaban la ropa mas ajustada que se puede ver.
- hola - sonrieron las dos
- chicas - dijeron el par
En definitiva esos dos nunca aprenderían, Lily se sentó en la cama de James mientras que este cerraba las cortinas, Sirus por su parte sonrió a donde estaba la chica, a diferencia de Evans, Nicolett portaba un cabello negro sedoso, piel como la porcelana, y ojos de color claro.
Cuando la comenzó a besar, su mente comenzó a divagar, ya no era Nicolett, ahora era Regulus quien gemía su nombre, quien le pedía a gritos que entrara de una vez en el, todo estaba empeorando, cuando un sonido sordo se escucho. Los cuatro Gryffindor's vieron a la puerta y fue que la vieron, Minerva McGonagall estaba ahí impresionada.
- ¡Largarse de aquí! - grito Roja de rabia a las dos chicas - ¡Fuera!
Las dos chicas si es que se les puede llamar así, tomaron sus cosas y se fueron a de ahí, minerva vio a ambos chicos quienes trataban de "taparse", los miro con el ceño fruncido.
- hagan sus cosas - pidió Minerva - esta ya no va hacer su habitación
- ¡¿Que?! - gritaron los dos
- lo que escucharon, este ya no es su cuarto - los miro
- ¡si lo es! - exclamo Sirius
- se equivoca señor Black, este cuarto era del joven Lupin, como ustedes se metieron en la habitación con el, y él ya no esta así que este ya no va hacer su cuarto, agarren sus cosas y las del joven Pettigrew, esta habitación la va a ocupar alguien mas -
Ninguno de los dos dijo nada, sin remus, ellos perdían sus privilegios, los cuales les había "costado", se maldijeron mentalmente, tenían que haber hecho algo, pero les importaba muy poco, sin saber que iban a perder el cuarto que tanto querían.
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