Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 18: La Venganza Es Un Plato Que Se Sirve Frío

Kiba veía sorprendido a todos ahí, cada uno lo veía con enojo y seriedad, nadie, absolutamente nadie estaba de su lado. Lo supo con sólo sentir las miradas, así como lo que pasaba ante sus ojos, ya no tenia salvación, de eso no había duda y aún si su corazón se destruía por lo que veía no pensaba caer solo y tampoco se iba a quedar de brazos cruzados.

- ¡Se equivocan! ¡Yo...! - Dijo Kiba que se encontraba de rodillas, pero apenas dio inicio a su explicación.

Sintió un golpe sobre su espalda que lo dejó inmóvil, al sentir un peso más que le impedía moverse. Y al girar su vista, vio quien lo había derribado, el "Joker" del cielo estaba sobre el deteniendo sus movimientos con sus brazos así como con sus alas.

- Nada de lo que digas cambiará lo que sabemos Portador - Dijo Dulio con una seriedad aterradora.

- ¡E-Estoy demasiado débil...! ¡En este estado...! ¡¿Crees que podre escapar?! - Pregunto Kiba con ira mientras Dulio mantenia su expresión.

- No lo hago para detenerte Yuuto-kun, lo hago para mantenerte con vida por más tiempo - Dijo Dulio con calma.

Logrando hacer que Kiba notará que de lado de los Demonios, tanto Sirzechs así como Serafall tenían auras que decían a todos que deseaban acabar con su vida.

- Aunque no tiene caso si vive o muere ahora, lo importante es saber si el es... - Dijo Azazel tranquilo antes de parar.

- ¡Maldita sea! ¡Yo no soy el Portador de los Ojos De Serpiente! ¡Se equivocan en verdad! ¡Al que deberían de atrapar es sin duda a...! - Grito Kiba antes de parar al por un poderoso grito.

- ¡Cállate! - Grito Serafall que elevo su aura ante todos. - ¡Di una palabra más Yuuto! ¡Y yo misma te mataré!.

- Serafall... Tranquila - Dijo Sirzechs a su amiga que respiraba agitada. - Con los testimonios de Rías y compañía...

- ¿Testimonios? - Pregunto Kiba con duda.

- Todos ellos han dicho lo mismo, Kiba Yuuto es el Portador de los Ojos - Dijo Michael que miró hacia los jóvenes.

- ¡Eso es una maldita mentira! - Grito al instante Kiba.

- Nosotros también lo pensamos, pero las cosas hablan por si mismas - Dijo a un lado Ajuka que veía al chico con la misma seriedad, solo que también veía el par de alas que tenía.

- Rías dijo que intentaste culpar a Issei nuevamente cuando oíste que Koneko tenía una relación amorosa con el, ¿Es correcto? - Preguntó Sirzechs a Rías.

- Así es, Kiba vino ayer conmigo y me dijo que vio a Koneko hablando con su Hermana Kuroka, en esa conversación Koneko recibió una advertencia, que a Kou lo controlaba el Portador, que ahí no estaba segura - Dijo Rías con pesar mientras miraba su escritorio con los dedos entrelazados.

- Intento llevársela pero no pudo, por el simple hecho de que Koneko respondió, que ella estaba a salvo ahí, que Issei iba a protegerla de todo peligro, por que el era el hombre con que había decidido compartir su vida y en ello llevó a que entregará su virginidad - Dijo Akeno a lo cual Ajuka miró hacia la Nekomata.

- ¿Son ciertas esas palabras? - Preguntó Ajuka.

- Si, lo son Ajuka-Sama, me entregué a Issei-sempai hace un día, todo por que íbamos a ser trasladadas al Lugar que nos mantendría a salvo del Portador - Dijo Koneko que tenía la cabeza baja evitando ver al rubio en el suelo.

- Es por eso que Kiba intento culpar a Issei, sabía que al haber sido culpado una vez, podría serlo nuevamente si agregaba esto al culparlo - Dijo Rías al momento de soltar un débil suspiro.

- Pero aun con eso, ¿Como supieron en verdad que quería inculpar lo? Parece que lo estaban enteradas que Koneko tenia esa relación con Issei-kun - Dijo Sirzechs que giro su mirada a Kiba.

- Por qué Akeno tiene una relación con Issei al igual que yo - Dijo Rías mientras Sirzechs al igual que los demas Líderes mostraban una ligera sorpresa.

- Yo también me entregue a Issei-kun por la misma razón, no sabía si iba a volverlo a ver... Así que decidí que le entregaría mi virginidad también, es algo que Rías puede sabe - Dijo Akeno mientras Rías asentía. - Claro que esto es algo que Kiba no sabía, así que uso únicamente lo que escucho durante la conversación de Koneko con Kuroka para así poder inculparlo.

- Fue cuando intuimos que algo andaba mal - Dijo Rías mientras Kiba miraba a la pelirroja con rabia.

- Si tenían una relación con el, ¿Por qué dejaron que lo inculparan antes? - Dijo Gabriel mientras veía a Issei que aún se encontraba abrazando a Tsubaki.

- Eso algo que a mi también me gustaría saber, jamás me lo mencionaron antes - Dijo Sirzechs a Rías que iba a decir algo.

- Rías... - Dijo Issei llamando la atención de todos, viendo como la mencionada y la chica que abrazaba a sentían.

Todos enfocaron su atención en Issei, al igual que Kiba que lo veía con odio, iba a decir algo en más de una ocasión. Esa era su intención pero la mano de Dulio sobre su cuello le dificultaba hablar, lo que solo le permitía observar lo que se acontecía.

- Me disculpo de ante mano, me llamo Hyoudou Issei, es un placer conocerlos al fin Líderes de Facción - Dijo Issei al momento de hacer una leve reverencia hacia los tres grupos.

- Hyoudou-kun, ¿Desde cuando tienes una relación con el grupo Gremory y sus miembros? - Preguntó Barakiel al joven castaño.

- Cadre Barakiel, por favor acepte mis disculpas, la forma en que se entero de mi relación con su hija no fue la mejor y me apena que se enterara de... - Dijo Issei mientras Barakiel levantaba el brazo.

- Eso no es importante, este no es lugar ni el momento para daictirlo, aún así es grato ver que Akeno es feliz, ahora por favor responde la pregunta - Dijo con la mayor calma Barakiel.

- Entiendo, en respuesta a su pregunta, conozco a Rías y compañía desde hace ya un año, fue cuando entré aquí en la Academia cuando nos conocimos - Dijo Issei mientras Rías sonreía levemente.

- ¿Un año? ¿Por qué no dijiste nada de el Rías? - Preguntó Sirzechs mientras la mencionada veía al chico.

El cual sonrió amablemente a la chica, y sin decir algo, activo un objeto sobre su brazo izquierdo. Causando la sorpresa de todos los presentes al verlo, nadie se le hizo desconocido el Guantelete de un característico color carmesí.

- Fue por que yo se lo pedí, como ve, yo soy el Sekiryuutei, y como saben, estoy destinado a pelear algún día contra el Hakuyuurkou - Dijo Issei mientras veía el Guantelete. - Sabia que llegaría el día en que nos encontremos, pero antes de eso quería vivir una vida tranquila y el destino hizo que me encontrara con un par de sucesos que me llevaron a estar cerca de Rías.

- ¿Es acaso el tema de los Renegados de hace un año? - Preguntó Sirzechs ante lo cual Rías asintió.

- Así es, Issei nos ayudó a deshacernos de ellos, desde entonces lo conocemos - Dijo Rías mientras Issei desactivada el Boosted Gear.

- Si ese es el caso, el que no dijeras una palabra del Despertar del Sekiryuutei así como tu relación con el, hizo que a nadie se le ocurriera que se conocían, incluso Sona, es por eso que inculpo a Issei-kun antes - Dijo Ajuka mientras veía hacia Sona.

- Ciertamente, después de eso Issei se acercó a mí y me explicó la situación, también me dijo que su identidad se debía de mantener secreto, así aun si apareciera el Portador tendríamos al Sekiryuutei para protegernos - Dijo Sona mientras Issei asentía.

- Correcto, yo era el As de Rías para así protegerse del Portador, algo que Sona sabía, es por eso que no les preocupo mucho por que yo estaba aquí - Dijo el castaño mientras Azazel que se había mantenido en silencio decía.

- A juzgar por la forma despertada que tenía el Boosted Gear, puedo decir con seguridad que te has adecuado de una forma perfecta con el, tu afinidad debe de ser alta si has alcanzado ese punto - Dijo Azazel mientras veía a Sirzechs. - Con sólo ver el Boosted Gear, estoy en verdad seguro que este chico pase que aún es un Humano, es capas de pelear contra nosotros, incluso podria llegar a ganar si somos descuidados.

- Pienso lo mismo, su poder es enorme, de saber que había alguien así detrás protegiéndolas me habría dejado mas tranquilo - Dijo Sirzechs que miro con seriedad a Kiba. - Pero volviendo a lo importante, ¿Cómo supieron que Kiba era el Portador?.

- Eso se responde el día que lo acuse, en el momento que culpe a Issei, y después de saber que mi acusación era en más de un sentido inválida, quise ir al Club de Rías a disculparme, pero cuando iba camino a buscarlo me percate de que un par de alumnas actuaban extraño - Dijo Sona que mostró las imágenes de al menos dieciocho alumnas en varios hologramas que todos vieron con total atención. - Todas ellas actuaban raro, parecían débiles e incluso un par de ellas terminaron en un Hospital.

- Esto llamó la atención de Sona, que no tardo en decirme después del paseo con Sairaog, esto nos alertó, por lo que sin si quiera levantar sospechas decidimos ir a investigar - Dijo Rías con calma antes de mostrar un video con ayuda de otro holograma. - Y descubrirnos esto.

Todos observaron la imagen de como la joven perteneciente al Club de Natación estaba semi desnuda con los tirantes de su traje de baño sobre sus brazos, algo que permitio dejar libre sus pechos así como la parte inferior movida a un lado donde el miembro de un joven entraba y salía.

Todos en la sala reconocieron al joven en la imagen, algo que dejó a Kiba con un rostro sorprendido. Antes de tomar el Linaje de Katase, había tomado el de la Sub Capitana del Club de Natación, y ese mismo Linaje era el que había sido usado en su combate contra Sona.

Todos veían perfectamente como Kiba embestida a la joven que ahora tenía a sus brazos contra la pared, mientras el rubio la sujetaba de la cintura aún con ferocidad embistiendola. La escena no fue de agrado para los Angeles que se limitaron a apartar la mirada, pero la regresaron en el momento que todos abrieron los ojos con sorpresa.

Viendo que en el momento que ambos Jóvenes llegaron al clímax, los Ojos de la Joven cambiaron a un debil tono en donde cualquiera podría decir era un verde Esmeralda bastante diluido. Lo cual ocasionó que girarán sus miradas al joven tirado en el piso, todos sabían perfectamente que eso solo significaba una cosa, algo que Kiba mandecia con todo su ser.

- En un principio no lo creímos, por lo que seguimos investigando y llegamos con otra de sus víctimas, Katase Reiko, una joven que fue encontrada muerta lejos de aquí - Dijo Rías mientras Kiba abría los ojos sorprendido.

- La última persona en estar con ella fue Kiba-kun por el testimonio de varias de las alumnas, que mencionaron ver que a Reiko se le veía realmente pálida así como enferma por alguna razón - Dijo Akeno mientras colocaba algo sobre el escritorio.

Algo que Kiba reconoció al instante, al punto que instintivamente tocó uno de sus bolsillos como pudo notando que lo que buscaba no estaba ahí.

- Este Brazalete es un artefacto que una vez una mujer se lo pone, cambiará los sentimientos que ella tiene y los volverá a quien se lo haya entregado - Dijo Sona mientras suspiraba.

- Después de averiguar eso, le dijimos a todas que tuvieran cuidado con Kiba, al tener esas pruebas sabíamos que era el más probable a ser el Portador - Dijo la pelirroja mientras veía a Tsubaki.

La cual seguía detrás de Issei con miedo hacia el rubio tirado en el piso, algo que no pasó desapercibido por todos.

- Tsubaki no nos creyó - Dijo Sona que apretó las palmas de sus manos sobre su falda. - Y fue a confrontar a Kiba, el resultado al ver que lo descubrieron, fue violar a Tsubaki para intentar de esa forma tomar el poder de su Screed Gear, [Mirror Alice], algo que casi logra.

- Ninguna de nosotras era consciente de que Kiba estaba abusando de Tsubaki, y en el momento que lo notaramos, iba a ser demasiado tarde - Dijo Sona que se encontraba temblando de rabia como impotencia. - De no ser por Issei, Kiba habría logrado su cometido.

Diciendo esas palabras Tsubaki cayó al suelo mientras cubría su rostro, donde todos pudieron ver las lágrimas caer y pasar a través de sus dedos. Pero lo que llamó más su atención fue el uniforme roto que tenía, que de no ser por el saco de Issei, todos podrían ver sus pechos e incluso las rupturas de su falda no se podían ocultar, eso sí no tomaban en cuenta la sangre que era apenas visible en su falda y calcetines.

- ¡¡¡¿QUÉ CLASE DE MIERDA ES ESA?!!! ¡¡¡YO NO SERIA CAPAZ DE ESO!!! ¡¡¡ME MATARÍA ANTES DE HACERLE DAÑO!!! ¡¡¡YO AMO A TSUBAKI!!! - Grito Kiba al momento de que su cabeza chocaba en el suelo rompiendolo.

- Será mejor que mantengas esa boca cerrada - Dijo Sirzechs que veía hacia Serafall que estaba siendo detenida y sostenida por Ajuka.

Kiba simplemente veía al Maou con la misma ira que veía a Issei, dado que el Maou Sirzechs como todos los que se encontraban ahí presentes estaban en las manos de Issei. Estaban haciendo exactamente lo que él quería, algo que simplemente le causaba una gran rabia al verlo.

- ¿Que me amas? - Dijo Tsubaki con una voz temblorosa así como dolorosa. - Eso es mentira... ¡Es mentira!.

- Tsubaki... - Dijo Kiba mientras veía a la mujer que amaba llorar frente a todos.

- ¡Si en verdad me amaras no habrías abusado de mi! - Grito Tsubaki ante lo cual Kiba la observo sorprendido. - ¡Si me amaras de verdad Kiba! ¡Tu no me habrías llevado a ese salón! ¡Donde te asegúrate de que no pudiera escapar! ¡Rompiste mi camisa mientras decías que yo no te servía! ¡Usaste tu poder para debilitarme! ¡Solo podía gritar mientras rompias mis bragas y metías sin mi consentimiento tu pene dentro de mi! ¡Aun si lloraba no te detuviste! ¡Seguiste abusando mientras lloraba pidiendo que te detuvieras! ¡Y aun si pedía que lo hicieras solo te reías!. ¡Si no fuera por que Issei entro! ¡Tu no te habrías detenido hasta terminar!

Los gritos de Tsubaki habían sido de los más desgarradores que alguna vez ellos habían oído, todos podían verla llorar y gemir de dolor y tristeza. Los Hombres ahí simplemente sentían rabia desde el interior de sus seres, incluso Dulio con Michael tuvieron que suspirar más de una vez para calmarse, un acto atroz a sus ojos seguia siendo atroz, pero solo Serafall, Penemune y Gabriel podían al menos comprender en parte el dolor que experimentaba la joven Demonio frente a ellos.

- Tranquila... - Dijo Issei con la voz más amable y gentil posible mientras se iba arrodillando a lado de Tsubaki. - Ya no debes llorar por el, por que ahora no se podra acercar a ti otra vez, jamás va a hacerte daño, si lo intenta yo mismo lo asesinare.

- Issei... - Dijo Tsubaki mientras solo se dejaba abrazar por el castaño, aun sin detener sus lágrimas. - ¡Por favor! ¡No quiero verlo de nuevo! ¡Quiero que mi dolor termine!.

Todos observaron en silencio lo que se acababa de desarrollar, incluso Kiba no mostró señal de moverse mientras aún veía el abrazo de Issei con Tsubaki. Que gracias a su posición, pudo ver como la mirada de Tsubaki se encontraba con la suya, notando al instante como los ojos de Tsubaki lo veían con burla, algo que se repitió en el momento que su vista se topo con la de Issei, notando la burla, el desprecio y humillación que le daba su mirada, una que nadie noto gracias a la posición que estaban.

- "¡Maldito seas Issei!" - Pensó Kiba en el momento que se disponía a gritar, pero se detuvo con las palabras de Sirzechs.

- Con lo que acabamos de oír, podemos decir que ya no es necesario tener una prueba más - Dijo Sirzechs mientras la mirada de todos se centraba en Kiba.

- Sus actos han sido atroces e incluso el poder de los Ojos a desaparecido de su cuerpo - Dijo Michael que veia las alas de Kiba. - Incluso abuso de un Angel y obtuvo sus Alas... No existe perdón en este mundo para ti Portador.

- Es probable que se trate de alguna de sus Habilidades, puedo sentir que hay una gran cantidad de poderes dentro, por lo tanto debe contar con alguna de las Habilidades que permite un cambio de cuerpo como podía hacer uno de los anteriores Portadores - Dijo Azazel con seriedad mientras todos veían con la misma seriedad a Kiba.

- En ese caso explicaría por qué este se encuentra tan débil, debió hacer algún tipo de copia en otro cuerpo diferente, tal parece que está Guerra aún no se acaba - Dijo Ajuka que giro su mirada hacia Issei. - Aún así, es agradable ver como saber que de nuestro lado ahora están los dos Dragones Celestiales.

- Es un punto a favor, y el que seas así de fuerte hace mejor las cosas - Dijo el pelirrojo mayor que miro a Michael. - Piensas lo mismo que yo, ¿No?.

- Sería lo más sensato, un Dragón en las afueras cazando y el otro cuidando a lo que podría llamarse un Tesoro - Dijo el Overlord del Cielo que miró a Issei. - Si no te molesta Hyoudou-kun, ¿Podrías ir y cuidar el lugar donde enviaremos a la mayor parte de las mujeres? ¿O acaso te es más cómodo estar fuera cazando? De ser así intercambiarias lugares con...

- No es necesario, me sentiré mejor si soy yo quien cuida a Rías y las otras - Dijo Issei mientras Michael asentía.

- Muy bien, en ese... - Dijo Michael antes de parar de hablar.

- ¡¿Acaso están locos?! ¡Si dejan que ese mal nacido de Issei entre en ese lugar y este con todas esas mujeres las cosas se tornaran más difíciles que nunca! ¡Eso es llevar básicamente al peligro dentro de un nido de aves desprotegidas! - Dijo Kiba mientras levantaba la cabeza para ver hacia donde estaba Issei - ¡Después de todo Issei es el Portador de los Ojos De Serpiente original! ¡Todo esto no es más que un plan para dejarlo entrar a ese lugar! ¡Piénsenlo bien malditos! ¡El sería el único hombre en ese lugar! ¡No habría nadie que lo detenga! ¡Abran los ojos antes de que sea tarde!.

Grito Kiba mientras todos lo veían en silencio, tanto que Issei se levantó con Tsubaki del suelo captando la atención de todos.

- Si, seré el único hombre en ese lugar, pero a diferencia de ti, yo jamás haría algo que una mujer no desee - Dijo con seriedad Issei mientras bajaba con un poco de torpeza su cabeza ante todos los líderes. - Mis intenciones al ir ahí serán únicamente proteger a todas las mujeres en ese lugar, aun si eso llega a costarme la vida las protégere, pero si quieren reconsiderar su decisión de...

- No hay nada que reconsiderar - Dijo Michael mientras avanzaba hacia el castaño y colocaba su mano sobre su hombro. - Puedo verlo con claridad, dentro de ti hay bondad y amabilidad impresionantes, jamás había visto un sentimiento así desde... Bueno, eso no importa, lo importante es que gracias a esto se a organizado una gran alianza contra un solo enemigo.

- Un enemigo caerá sin importar que, de eso puedo estar seguro - Dijo Issei ante lo cual Michael sonrió.

- ¡Son unos idiotas! ¡Se arrepentirán de esto! ¡Lamentarán este...! - Grito Kiba y antes de terminar recibió un pisotón en la cabeza por parte de Serafall.

- Ya estoy harta... Ahora que sabemos es un simple recipiente de muchos, ya no necesitamos manterlo con vida - Dijo la Maou Leviathan con rabia mientras iba levantando su pie para aplastar al fin la cabeza de Kiba.

- ¡Espere Serafall-sama! - Dijo Rías de la nada mientras todos giraban su vista a la chica. - Por favor... Les suplico que el castigo de Kiba sea impartido por mi.

- Rías... - Dijo Sirzechs mientras veía a su hermana menor que apretaba con furia sus puños.

- Kiba es una mancha en el nombre del Clan Gremory, sus actos deben de ser la responsabilidad de los Gremory y mía al ser su Rey - Dijo Rías mientras Sona se levantaba de su lugar.

- Kiba también lastimo mucho a una de mis sirvas así como mi mejor amiga... ¡Yo también pido esa responsabilidad! - Grito Sona mientras Serafall la veía con sorpresa.

Los líderes estaban sorprendidos, todas las palabras de Rías tenían sentido, por lo que Sirzechs miró a Azazel, que sólo alzó los hombros restando importancia al asunto, por lo que miró a Michael, el cual después de meditarlo asintió.

- Comprendo los sentimientos que las dos deben de tener, por lo que no veo problema en esto - Dijo Michael en el momento que giraba su mirada hacia Dulio que aún estaba sobre Kiba. - No debe escapar así que sella todo poder que tenga.

Oyendo las palabras de Michael, Kiba abrió los sorprendido antes de sentir como la palma de Dulio se posaba en calma sobre su espalda. Donde de un segundo para otro sus poderes habían sido suprimidos, dejándolo perdido e impotente por lo que sucedía.

- Ahora que sabemos esto es un paso a la victoria - Dijo Azazel que giro hacia Penemune. - Con la amenaza latente y las consecuencias que podria haber te pediré que vayas al lugar que Michael preparo, lleva contigo...

- Lo se, ya me encargue de eso, apenas regrese partiremos a ese lugar cuando Michael diga que ya es posible ir - Dijo Penemune mientras acomodaba parte de su cabello para luego mirar a Issei. - Aunque ser protegida es algo que yo no me plantee jamás, pero en este tipo de situación que me proteja uno de los Dragones Celestiales me deja bastante tranquila.

- Ninguna de nosotras es débil, pero con un enemigo así, tendremos que confiar en alguien fuerte como tu para estar lo más seguras posible - Dijo Gabriel antes de ver a Serafall, la cual suspiro.

- Ciertamente, aún si somos fuertes, el enemigo a vencer esta vez es nuestro depredador natural, así que lo mejor sera mantenernos lejos y protegidas por un Dragón Celestial - Dijo Serafall mientras inclinaba la cabeza.

- Mi fuerza ya es grande, pero aún soy joven, me falta mucho por crecer pero aún así daré todo de mí para proteger el lugar donde serán enviadas - Dijo el castaño mientras Sirzechs sonreía.

- "Me deja más tranquilo saber que aún si el Portador encuentra ese lugar, Rias junto con Grayfia y mi madre estarán a salvo al no tener que enfrentarlo cara a cara" - Pensó Sirzechs aliviado.

Todos tenían sus propios pensamientos aún así estaban aliviados de que el otro Dragon Celestial no fuera el Portador de los Ojos de Serpiente. Ya que de haberlo sido, con su talento natural de atraer al público femenino con más facilidad les habría costado caro a todos ellos, más si este sabía como usarlo a su favor.

- Con este asunto ya aclarado, iré con el Viejo de Odin a decirle la situación, así como prepare para enviar a las Diosas y Valkyrias a ese lugar - Dijo Azazel antes de irse en un Círculo Mágico.

- Nosotros también nos retiramos, nos reunimos para emboscar al Portador y tal parece que escapo antes de que se nos presentará la oportunidad - Dijo Michael mientras se iba dentro de un resplandor dorado junto con Gabriel y Dulio.

- Nosotros también, tenemos mucho de lo que debemos ocuparnos, con Issei en este lugar podemos estar tranquilos - Dijo Ajuka mientras Sirzechs asentía.

Ambos Maus vieron a Serafall abrazar a su hermana con cariño, algo que imito con Tsubaki quien parecía un poco más tranquila que antes.

- Tranquila, nos aseguraremos de que nadie te vuelva a lastimar así, además - Dijo Serafall mientras le susurraba algo a Tsubaki. - Parece que tu caballero de armadura dorada ya está a tu lado.

Sus palabras sorprendieron a Tsubaki que miro a Issei, algo que Serafall vio con una leve sonrisa antes de caminar hacia Sirzechs y Ajuka.

- Chicas recuerden que hoy se van a ese lugar, sería preferible que vinieran con nosotros pero con Issei aquí no hay por que preocuparse - Dijo Sirzechs con su sonrisa habitual mientras creaba bajo los pies de los Maus un Círculo Mágico

- Recuerden mis palabras... - Dijo Kiba al momento que los Maus estaban por irse. - Lamentarán el día en que todos ustedes confiaron en Issei... Perderán todo cuando ese día llegue.

Diciendo eso los Maus desaparecieron del lugar dejando solo a Kiba que no se molesto en levantarse de su lugar, sino que pensaba como escapar de ahí, si el lograba llegar con ese hombre, podría sobrevivir sin duda alguna.

- ¿No me digas que aún piensas que es posible escapar? - Dijo la voz de Issei.

Misma voz que reavivó su cólera contra el chico, por lo que sin importarle nada más, se levantó rápidamente aún con su dolor infernal para atacar a Issei. Pero su intento fallo, justo cuando levantó su cuerpo, sus piernas fallaron, haciendolo caer al suelo una vez más. Cerrando sus ojos por el dolor, Kiba con la fuerza que aún le quedaba uso sus brazos para así poder detener su caída.

Algo que funcionó al sentir el frío del piso entre sus dedos, incluso el viento helado se hizo presente. Dejándolo lo más confundido posible, tanto que al abrir los ojos se percató de que ya no estaba en el Club del Ocultismo, sino que estaba en medio de un bosque.

Uno que estaba cubierto de nieve, así como de la noche, dejando la luz de la Luna como única fuente de luz.

- ¿Donde...? - Dijo Kiba confundido al ver los alrededores.

Pero antes de si quiera terminar sintió un fuerte golpe sobre su mentón, algo que lo hizo caer hacia atrás avanzando por unos metros antes de parar. Sentía su cabeza dar vueltas una y otra vez, lo cual lo dejó desorientado por al menos veinte segundos, mismos que al pasar instintivamente movió su cabeza.

Esquivando de esa forma un pie que se estrelló contra el suelo rompiendolo, lo cual dejó claro que eso pudo matarlo al instante. Por lo que giro su mirada a la duela, viendo a Koneko parada con una mirada seria hace el, una que lastimo el fondo de su corazón.

- ¿Koneko...? - Diencido eso Kiba tardo un segundo antes de sentir una patada sobre su costado.

Una que lo envió cerca del lugar donde había caído, donde al estrellarse, sintió la sangre salir por su garganta. Incluso el dolor abrasador sobre su costado no tardo en aparecer, diciéndole que con la patada que recibió se habían roto o fracturado varias de sus costillas.

- "C-Carajo..." - Pensó Kiba mientras se intentaba reincorporar.

Donde al intentarlo, noto que algo se encontraba cayendo hacia el, así que usando las alas se impulso moviendo por poco su cuerpo. Antes de ver que algo se estrellaba en el lugar donde a sólo unos segundos estuvo por morir, estaba sorprendido por la potencia y poder del ataque.

Era claro que todos estaban destinados a matarlos, por lo que giro la mirada a donde estaba Koneko. Notando que en su costado estaba Akeno, lo cual dejó al rubio claro quien lo había pateado, por lo que regreso su mirada notando que la que había caído a esa velocidad era Rías.

Que como las otras dos tenía los Ojos de un Verde Esmeralda, dejando claro que ya estaban completamente sometidas a Issei. Quien se encontraba sentando en lo que parecía ser un trono de piedra, y sus costados estaban Sona con toda sus siervas observando con calma.

- Es impresionante que resistas hasta este punto - Dijo Issei simplemente mientras se acomodaba en el Trono observándolo.

- M-Maldito bastardo... - Dijo Kiba que sostenía su costado izquierdo.

- Realmente eres una plaga Kiba, aún así fuiste de gran ayuda, como espere con anterioridad, los Líderes estaban tan desesperados por buenas noticias que aceptaron todo lo que oyeron, si hubieran estado más tranquilos ellos habrían hecho más preguntas con lo que respecta a mi - Dijo Issei que rio levemente. - Pero gracias a todas las cocas que las chicas dijeron, ellos se tragaron la mentira sin problemas.

- Bastardo... - Dijo Kiba mientras Issei sonreía.

- Tus insultos no son importantes, algo que quedó claro cuando los Líderes no mostraron interés en ellas, aunque eso también se lo debo a la gran actuación de Tsubaki - Dijo Issei mientras veia al lugar donde estaba parada.

La cual aún bajo la mirada de Kiba fue hacia Issei, y sin decir algo se sentó en las piernas del joven pelinegro que no se molesto por la acción. Al contrario, simplemente abrazo a la pelinegra, la cual no mostró rechazo aún si Issei le estaba tocando el trasero, sino que se mostraba contenta por eso, al punto que beso el cuello del chico que aún estaba con la mirada a Kiba. Quién al ver eso sintió su ira volver en gran medida, tanto que ignoro su dolor y rápidamente se levantó del suelo.

- ¡Pagaras por haber violado a Tsubaki maldito...! - Dijo Kiba antes de ver una oscuridad rodearlo.

Algo que lo sorprendió, dado que no importaba a qué lugar mirara, todo, absolutamente todo se habia tornado completamente negro. Uno que fue cambiado lentamente, revelando más de una cosa en ese lugar que Kiba no tardo en reconocer.

Estaba dentro de la sala del Consejo Estudiantil, mismo lugar donde pudo ver como Sona estaba dormida en la mesa principal, pero eso no capto su atención. Dado que eso se había ido a donde estaba el sofá del Consejo, en el que se encontraba Issei sentado con calma mientras Tsubaki se encontraba arrodillada frente el, haciendo lo único que hizo con el en casi todas sus citas.

- Impresionante, eres muy buena en esto, ¿acaso lo has hecho antes? - Dijo Issei.

Escuchando su pregunta, Kiba vio como Tsubaki dejaba de lamer el miembro de Issei, para así mirarlo directamente. Lo cual causó su rabia, pero al querer dar un paso se topo con una pared que no le dejaba avanzar más.

- Si, tengo experiencia, ya que e hecho esto con Kiba algunas veces - Dijo con gran culpa Tsubaki.

- Entonces, ¿Han tenido Sexo? - Preguntó Issei mientras Tsubaki mostraba algo de sorpresa al oírlo.

- No, cada que estamos por hacerlo el me dice que aun no es el momento correcto - Dijo Tsubaki con notable tristeza.

Algo que sorprendió a Kiba, ya que el siempre dijo eso únicamente por ese gran riesgo de robar por accidente el Linaje de Tsubaki, la cual volvió a su labor de lamer el pene de Issei.

- Es curioso que lo digas, ya que Kiba Yuuto no es Virgen - Dijo Issei con la misma calma.

Oyendo eso, Kiba vio como Tsubaki se sorprendia y dejaba de lamer el pene del chico antes de enfocar su mirada sobre el.

- Seguramente piensas que te estoy mintiendo ¿No? Pero lo que digo es verdad, Kiba Yuuto no es Virgen, y ¿Como lo se? Eso fue gracias al olor, dado que este aparte de decirme a que especie pertenecen, tambien me dice si son vírgenes o no, en tu caso puedo oler un aire de Demonio, pero aparte de eso puedo oler un aroma puro, lo que me dice que aun eres Virgen - Dijo Issei sorprendiendo a Tsubaki.

Algo que Kiba imito al ver como se iba desarrollando la situación, haciéndole ver lo que realmente había pasado. Lo cual rápidamente causó un gran temor en su corazón al pensar en algo, que el deseaba no fuera cierto.

- Y en Kiba no sentí nada de ese olor, ya que es algo normal que despues de la primera vez aun conserves algo de ese olor. Pero en Kiba no había ni un rastro de él, lo que solo significa que desde ya hace mucho tiempo que el perdió su Virginidad, además de que si tienes Sexo con la misma persona mas de una vez, el olor queda grabado en tu cuerpo por un tiempo antes de desaparecer. Pero entre más fuerte es el olor mas veces lo han hecho, y Kiba tenía un fuerte olor a una chica, ¿Quieres saber quien es la chica? Ademas de que es seguro que fue con ella con la que tal vez perdió su virginidad - Dijo Issei sorprendiendo a Tsubaki la cual lo miraba atentamente.

- ¿Con quien...? - Pregunto Tsubaki.

- Con la chica del Club de Kendo Katase Reiko, ya que ella tiene un fuerte aroma de la esencia de Kiba dentro de ella, ¿Y sabes lo que eso significa no? - Dijo Issei a Tsubaki que quedó en shock.

Algo que Kiba observo con sorpresa y temor a ver lo que seguía, más al ver que algunas lágrimas se formaron en sus ojos de Tsubaki que fue tomada del mentón por Issei.

- Debe de ser duro ¿No? Enterarte que el chico que amas solo te a estado usando para divertirse - Dijo Issie mientras unía su frente con la de Tsubaki para verla a los ojos.

Algo que Tsubaki no se molesto en ni si quiera evitar, dejando claro su estado a Kiba que veía sorprendido lo que ahora estaba por suceder.

- Pero te preguntarte esto, ¿Vas a serle fiel a alguien que no lo fue en ningún momento contigo, y que solo te haya usado para divertirse? - Dijo Issei con seriedad mientras Tsubaki solo lo veía sorprendida.

Algo que Kiba observo aterrado, ya que observo como Issei retrocedia aún sin si quiera despegar su frente de Tsubaki. A quien sin apartar la mirada de sus ojos, le siguió inconscientemente, al punto que estuvo sentada a Horcajadas sobre Issei.

- ¿Y bien? ¿Cual es tu respuesta? ¿Aún le seras fiel a Kiba que te engaño solo para usarte cuando el quisiera? ¿Para luego abandonarte una vez que se aburriera de ti? - Dijo Issei mientras veía a los ojos de Tsubaki.

- No... - Dijo Tsubaki con odio.

Algo que fue una apuñalada para Kiba que no podía apartar la mirada de todo lo que pasaba ante sus ojos.

- Issei, ¿Puedo pedirte algo? - Dijo con odio Tsubaki.

- Adelante, soy todo oídos - Respondió Issei con calma.

- Issei, quiero que me sometas, quiero ser tu incubadora, tambien quiero que me hagas olvidar todos los sentimientos que tengo hacia Kiba, y no solo eso, quiero que le des una muerte mas que dolorosa tambien - Dijo Tsubaki mientras Issei le mostraba una débil sonrisa.

- Claro, ¿Por que me negaría? Solo un verdadero idiota dejaría ir a una gran mujer como tu, además, si quieres que te someta debes hacerlo por tu propia voluntad - Dijo Issei mientras Tsubaki asentía antes de besar a Issei.

Algo que Kiba solo observo en completo shock, vio como Tsubaki, bajo su propia voluntad. Besaba a Issei, viendo como a ambos les dejaba de importar todo aún cuando sus lenguas se unían en la boca del otro.

- "Por favor no..." - Pensó Kiba con gran terror al ver como la mano de Tsubaki se adentraba bajo su falda.

Algo que deseaba no ver más, ya que el pudo oír claramente como Tsubaki dejó escapar un débil suspiro cuando separo sus labios de los de Issei.

- Hazlo, y te haré olvidar a Kiba Yuuto para siempre - Dijo Issei mientras veía como Tsubaki asentía a lo dicho.

Causando que Kiba quisiera cerrar sus ojos al ver como Tsubaki iba bajaba sus caderas lentamente, donde pudo ver la mueca de dolor de Tsubaki al sentir en ese momento la intrusión del pene del chico en su vagina.

Y para cuando vio que Tsubaki dejó de moverse, supo que le había entregado su Virginidad a Issei, el cual solo sonrió mientras tomaba del mentón a Tsubaki y la besaba con suavidad. Algo que para mala suerte de Kiba duró unos minutos
antes de notar que Tsubaki comenzaba a mover lentamente sus caderas hacia arriba y hacia abajo. Dejandole oír los débiles temidos de Tsubaki, la cual se seguía auto penetrando antes de sentir las manos de Issei sobre su trasero.

Kiba fue testigo de cómo la velocidad de ambos iba aumentando con la ayuda de Issei, algo que disfrutaba. Algo que solo se confirmaba con el sonido Lacsivo de sus movimientos que se oían por todo la sala del Consejo Estudiantil.

Kiba podía oír todos los gemidos de la chica que amaba, la cual cambió con rapidez la posición en la que estaba, y ahora se encontraba en cuatro sobre el sofá, donde Issei la penetraba con una gran fuerza haciéndola gemir más de una vez.

- ¡Issei! ¡Me~ Me vengo~! ¡Issei! - Grito Tsubaki en extasis haciendo sonreír a Issei.

Que era diferente en Kiba que veía con horror todo lo que sucedía, viendo a la pareja cambiar de posición. Tsubaki se encontraba ahora acostada en el sillón, mientras Issei estaba sobre ella, donde sin temor rompía su bracier, dejando a la vista sus pechos, los cuales tomo con fuerza mientras aumentaba la fuerza en sus embestidas.

- ¡Ah~! ¡Issei! ¡Mas fuerte~! ¡Ah~! - Dijo Tsubaki mientras cruzaba sus piernas sobre la espalda de Issei.

Una acción que dejaba claro cual era la intención de Tsubaki, la cual beso con pasión a Issei apenas acerco su rostro.
Donde podían verse perfectamente sus lenguas unirse dentro y fuera de sus bocas, mientras la saliva de ambos se mezclaba.

- ¡Tsubaki ya estoy en mi límite! - Dijo Issei al separar sus labios de Tsubaki.

- ¡Hazlo! ¡Acaba dentro de mi! ¡Por favor convierteme en una de tus incubadoras! - Grito Tsubaki pedida dentro del placer.

Algo que Kiba simplemente oia ahora de rodillas, sus piernas habían fallado nuevamente. Algo que ya parecia no importarle, en un principio creyo que Tsubaki había sido sometida contra su voluntad. Pero lo que acababa de ver decía lo contrario, Tsubaki se habia entregado voluntariamente a Issei, quien ni había tenido la necesidad de usar el poder de los Ojos De Serpiente en ningún momento.

- ¡Entonces recibe lo todo y serás mía por la eternidad! - Grito Issei ante lo cual Tsubaki respondió.

- ¡Si! ¡Soy tuya y de nadie mas Issei! - Grito Tsubaki mientras Issei le daba sus últimas embestidas antes de llenar por primera vez su útero con su semen.

Algo que obligó a Tsubaki a arquear su espalda, mientras se corría al sentir el Semen de Issei. El cual llenaba todo su útero por completo, algo que Kiba ni se atrevió a ver, dado que aún si no veía eso estaba seguro que podría ver algo de semen salir de la vagina de Tsubaki.

Podía oírlo claramente, como ambos se encontraban respirando agitadamente, señal de que habían disfrutado de todo lo que habían hecho. Algo que Kiba no quería ver, ver como los ojos de aquella chica que amo cambiaban de color a un color Verde Esmeralda, así como una de las marcas del Sekiryuutei aparecía en su vientre.

Deseaba salir de ese lugar, tanto que al igual que un pequeño niño asustado, se limito a cerrar los ojos. Los cuales no se atrevió a abrir hasta el frío del bosque se hizo presente nuevamente, y al abrir nuevamente sus ojos, noto que Tsubaki se encontraba frente a él parada con la misma mirada.

- ¿Sigues creyendo que fui violada? - Dijo Tsubaki mientras Kiba solo veía esos ojos Esmeralda, esos ojos que un día no muy lejano eran de otro color.

Días en los que la mirada de la Joven frente a él eran de amor, y no de odio ferviente que lo lastimaba. No sabía que decir, lo que vio lo lastimo como jamás habría pensado, en más de un momento quiso gritar de rabia, quiso entrar ahí para golpear a Issei, y así poder llevarse a Tsubaki lejos.

Pero tan pronto esa idea aparecio, fue derribada por su sentido común, todo lo que hizo fue por su deseo de vengar a sus amigos Caídos. ¿Se detuvo a ver por los que lo rodeaban ahora? No, el no lo hizo, simplemente pensó en el y en nadie más, siguió creyendo que lo que hacía era lo correcto. Que esto era lo que debía hacer, no importaba que estuviera en su camino, el seguiría sin mirar atras, siguió ese camino hasta el final.

Fue ese camino el que lo trajo ahí, este era su castigo, sus acciones le hicieron llegar a esto, derrotado y humillado en ese lugar. Con la mujer que ama, que a diferencia del pasado, ahora lo veía de forma diferente, no podía juzgarla, sus acciones la lastimaron y eso lo vio con claridad. Era por eso que no podría ser capaz de gritarle a Tsubaki, ella solo se limito a buscar refugio en alguien que la valorará y ese fue Issei, el hizo algo que el jamás hizo, y eso no ya no podía cambiarlo.

- Tsubaki... - Dijo Kiba mientras bajaba la mirada lentamente. - Perdón... Yo no quise lastimarte así, deseaba tanto ser capas de vengarme que no me importo el método...

- .... - Tsubaki.

- Quería vengarme aun si ese costo era alto... Lo único que me importo en este mundo fuiste tu... Lo que te hice no es algo que pueda perdonarse, es por eso que te pido perdón - Dijo Kiba aun con la mirada baja. - Quería ser el Héroe en el que pudieras confiar para aliviar tu dolor, pero termine siendo el villano que solo lo aumento.

Sus palabras tenían arrepentimiento genuino, era algo que las presentes notaron rápidamente. Incluso Issei, quien simplemente observaba lo que ocurría desde su trono de piedra.

- Es por eso que te pido perdón - Dijo Kiba mientras reunía el valor para al fin levantar la mirada. - Tsubaki yo...

Justo cuando iba a decir lo que sentía en el fondo de su corazón, el puño de Tsubaki se estrelló fuertemente en su rostro. Mandando a Kiba contra gran parte de los árboles, algo que Issei se limito a observar.

- ¿Que te hace pensar que quiero tus disculpas? - Dijo Tsubaki que camino hacia Kiba.

El cual vomito una gran cantidad de su sangre, así como algunos de sus dientes cayeron al suelo.

- ¿Dolor? ¿Venganza? ¿Por qué crees que necesito oír eso de ti Kiba? Todo eso no me importa, lo que te pase me dejó de importarme hace mucho, las cosas que deseas no me interesan, lo único que quiero de ti - Dijo Tsubaki mientras llegaba frente al chico. - Es verte morir, ver como la vida escapa lentamente de tu cuerpo, ver como sufres cada maldito segundo antes de morir maldito.

Dijo mientras Kiba la miraba con gran sorpresa, donde sin poder defenderse, Tsubaki lo pateo contra los árboles del lugar nuevamente. Cayendo otra vez, Kiba intento levantarse aún si todo su cuerpo gritaba de dolor.

- Te odio con todo mi ser, el que estes vivo me enferma, deseo con todo ver como mueres - Dijo Tsubaki mientras caminaba hacia el.

Las palabras de Tsubaki lastimaban en más de una forma a Kiba, que sentía su cuerpo desmoronarse lentamente. Aún si sentía un gran dolor recorrer todo su cuerpo, Kiba mantenía la esperanza de salir de ahí,

- "Necesito más tiempo" - Penso Kiba en el momento que se levantaba.

Y observaba a Tsubaki, la caminaba en completa calma hace el, ignorando que el rubio hacia todo lo posible por tener su mano izquierda oculta de la vista de Tsubaki.

- Te lo pido... Detente Tsubaki, esta no eres tu, la Tsubaki que conocí no sería capaz de esto - Dijo Kiba mientras iba retrocediendo lentamente.

Necesitaba tiempo y lo sabía, aún si iba a terminar lastimado o torturado como en ese momento, iba a escapar. Sabía lo que debía hacer, únicamente tenía que asegurarse de que se cumplieran todas las condiciones, y dos de ellas se habían cumplido.

- Tu ingenuidad si que es repugnante, mantienes viva una esperanza que no te salvará, simplemente te da la falsa ilusión que necesitas para vivir - Dijo Tsubaki mientras Kiba sentia el poder de su brazo llegar al límite.

- Ciertamente, la falsa esperanza acaba de darme la oportunidad que necesito - Dijo Kiba mientras apuntaba su mano con el símbolo del arbol a Tsubaki.

La cual se sorprendió al verlo, más en el momento que una luz apareció por algunos segundos. Cegando a Tsubaki que cerró sus ojos, algo que aprovecho para acercase rápidamente a ella. Una acción que sorprendió incluso a Issei, que mostró cierta sorpresa al verlo, y contrario a estar preocupado solo dio un suspiro al verlo.

- "Lo logré" - Penso Kiba mientras veía a Tsubaki frente a él.

La distancia entre ambos era de solo un solo paso, por lo que apunto su mano al pecho de Tsubaki, donde aún estaba un tatuaje de árbol.

- "¡Con esto podré escapar!" - Penso con satisfacción Kiba mientras su mano se encontraba a un par de centímetros de tocarla.

- Que predecible... - Dijo Issei con gran decepción mientras veía como la mano de Kiba estaba por tocar al pecho de Tsubaki.

La cual no levantó su guardia aún si el chico estaba por tocarla, algo que Kiba no se preocupo en pensar. Ya que solo podía pensar en reforzar el vínculo de ambos a través de la marca del Árbol.

Algo que creyó lograr en esa pequeña oportunidad, una que aprovecho todo lo que pudo. Pero al final, el resultado de su intento fue el mismo desde que pensó en escapar.

- Jamás podrá tocar a Tsubaki con ese movimiento desesperado - Dijo Issei a forma de burla mientras algo caía del cielo hasta el suelo.

Aterrizando al lado de Kiba, el cual se mantuvo quieto, ignorando todos sus alrededores. Moviendo lentamente su mirada al suelo, donde pudo ver parte de su brazo, por lo que regreso su vista al frente notando que la mitad de todo su brazo ya no estaba.

- ¿De verdad creíste que me podrías tocar? - Dijo Tsubaki con seriedad y burla. - El único que puede hacerlo...

Dijo mientras algo golpeaba a Kiba una vez más, estrellando su cuerpo sobre la tierra una vez más.

- Es Issei-sama - Dijo Tsubaki mientras a su espalda aparecía una gran figura.

La cual lentamente comenzó a hacerse visible, revalando un enorme caballo y un Jinete montandolo. El cual movió su guadaña para limpiarla de la sangre de Kiba, el cual se encontraba en el suelo sosteniendo su brazo.

- ¿Duele no? ¿Deseas que termine con tu sufrimiento? ¿Deseas morir ahora? ¿Quieres morir para no sufrir? - Dijo Tsubaki mientras Kiba levantaba con lentitud su mirada.

La cual por primera vez, demostró un gran temor al ver los ojos sádicos de la chica. La cual sintió unos brazos pasar por su cintura rodeándola, algo que le sacó una sonrisa mientras volteaba.

- ¿Te estás divirtiendo? - Dijo Issei ante lo cual Kiba lo observo con sorpresa y Tsubaki con amor.

- Bastante~ - Respondió Tsubaki ante el hombre que amaba y el mismo que se encontraba acariciando su cuerpo.

- Me alegro, después de todo, te prometí que Kiba tendria una muerte dolorosa - Dijo Issei mientras besaba el cuello de Tsubaki que soltó un leve gemido. - Aún así, ¿Te importaría compartirlo?.

Oyendo la pregunta de Issei, Kiba sintió un gran escalofrío recorrer su cuerpo y ese sentimiento se transformo en terror al ver que alrededor de él estaban todas las chicas de la Nobleza Sitri y Gremory.

- Después de todo, no eres la única que quiere desquitarse - Dijo Issei mientras Tsubaki hacia un ligero puchero.

- Humm~ no es justo~ - Dijo Tsubaki en el momento que miraba a Kiba, el cual simplemente la veía con el miedo más grande. - Pero~ supongo que no puedo negarle ese derecho a mis hermanas~.

Oyendo las palabras de Tsubaki, Issei le sonrió, antes de darle un pequeño beso en la frente.

- Hagan lo que quieran - Dijo Issei con calma mientras se alejaba de ellas.

Dejando a Kiba rodeado, el cual intento moverse rápidamente, pero cuando sus pies intentaron moverlo. Reya pateo su rostro, lo suficientemente fuerte para el dejarlo parado, algo que dejó a Kiba un momento perdido, mismo que cambió en el momento que Momo golpeó todo su estómago con una gran fuerza.

Una que lo habría alejado de ellas, pero apenas se alejo unos metros Tsubasa lo tomó de la parte posterior de su cabeza y lo dirigió hacia el suelo. Donde llegó a chocar contra la rodilla de Roruko, que lejos de detenerse giro para pataearlo y dirigirlo al aire.

Donde Tomoe lo esperaba con su puño, golpendolo una vez más envío a Kiba al suelo. Donde se estrelló violentamente, teniendo unos segundos de descanso, el chico vomito grandes cantidades de su sangre manchando la nieve, donde aún sus dientes eran visibles.

- Yuuto-Sempai~ - Dijo Koneko con una sonrisa. - Por favor no mueras aún.

Diciendo eso, tomo del cabello al chico obligandolo a levantarse. Donde no se mantuvo antes un puñetazo de Koneko que lo hizo dar un paso atrás, donde la pequeña Nekomata no se detuvo, sino que continuo desatando una ráfaga de puñetazos que dejaban aún más herido al rubio.

- ¡Sigue así Sempai! - Grito Koneko con felicidad antes girar y dar una patada.

Una que lo hizo chocar contra una roca que se agrieto, sin más fuerza, Kiba vio como Koneko le sonreía. Causándole un dolor emocional indescriptible, pero en el momento que estaba por caer, un par de manos lo sostuvieron.

Levantando su mirada, Kiba observo a Akeno sosteniendolo, la con sonrió con la misma sonrisa abitual que tenía.

- Aún es muy pronto Yuuto, debes de pagar todo lo que hiciste - Dijo Akeno mientras conectaba un puño sobre la garganta del chico destrozandola en segundos y sin detenerse le arranco ambas alas de su espalda.

Algo que no noto al haber atravesado la roca sobre su espalda, dejándolo caer a la orilla del Bosque. Donde podía verse un ligero claro, algo que no podía notar claramente gracias a la sangre sobre su ojo aún funcional.

Todos los ataques que había sufrido le habían roto uno de ellos, así como todo hueso que tuviera su cuerpo. Todo fue roto o dañado, estaba seguro que todo su cuerpo tenía hemorragias mortales que tarde o temprano acabaron con su vida.

Algo que aún le causaba terror, tanto que aún teniendo sus huesos rotos se movió a través del suelo. Arrastrando su ya casi inservible cuerpo, usando como apoyo su único brazo Kiba fue capaz de moverse ligeramente. Aún cuando su rostro ya no era capas de sentir el frío de la nieve cada que se movía dejando un cahrco de sangre.

- ¿Es curioso no lo crees? - Dijo la voz de Rías detrás de él. - Que todo termine en el mismo lugar donde todo comenzó.

Apenas dijo eso, la mente ya dañada de Kiba le arrojo un recuerdo, uno que se reprodujo rápidamente una y otra vez.

Dejandole comprender al chico el por qué estaban ahí, de todos los lugares a donde pudieron llevarlo para morir la pelirroja había elegido el mismo lugar donde lo encontró.

Incluso si concentraba su mirada, era capas de ver el edificio donde habían experimentado con el y sus amigos. El recuerdo de esos días regresaron a su mente rápidamente, dejando salir más de una lagrima de sangre.

- Es una lástima Yuu... No, Isaías - Dijo con una sonrisa Rías. - Al final de todo terminaste mordiendo la mano que te alimento todos estos años.

- Pagaste con Traicion la Bondad que te dieron Isaías - Dijo Sona a un lado de la pelirroja. - Ni siquiera mereces usar ese nombre que Rías te dio esa noche.

- Cometiste tantos errores y este fue el resultado - Dijo Tsubaki con calma a un lado de Rías.

- Si no hubieras hecho nada de esto es probable que hubieras muerto como lo hizo Gasper - Dijo Rías mientras en su memoria venia el rostro de su antiguo Alfil. - Tuvo una muerte pacifica, el no sufrió, simplemente murió sin saberlo.

Oyendo sus palabras Kiba apretó con la fuerza que le quedaba su puño, no sólo Saji había muerto Gasper también fue asesinado.

- Aún si le extrajimos todo su poder y su Screed Gear, Gasper no sufrió, durmió y soñó de principio a fin - Dijo Rías a lado de Kiba, el cual giro lentamente para el poder verla. - Una muerte pacifica para alguien inocente, esa fue la amabilidad de Issei-sama.

- Una amabilidad que no mereces en lo más mínimo - Dijo Sona que usando un par de tentáculos levanto a Kiba.

El cual ahora se encontraba suspendido en el aire observando a todas las chicas presentes, donde Rías levantó la mano y le apunto con esta mientras un aura de color negro la rodeaba.

- Considérate afortunado, vas a ser el primero en quien uso el poder que se encontraba dentro de Gasper - Dijo la pelirroja mientras sus ojos cambiaban de igual forma. - Ahora la Oscuridad y Tiempo están del lado de Issei-sama.

Diciendo eso de la palma de Rías, más de una estaca de oscuridad apareció, y sin piedad atravesaron todo el cuerpo de Kiba. La muerte era inminente, eso era obvio, aún así Rías tuvo cuidado de no matarlo al instante, puesto que ese honor lo tendría la que más sufrió al haberlo amado, algo que Sona sabía, por lo que dejó caer a Kiba boca arriba.

Todas observaron el cuerpo del chico, el cual parecía más muerto que vivo, incluso lo confundirian con un muerto si no fuera por el débil movimiento de su pecho que decía que aún respiraba con dificultad. Por lo que sin tener un poco de prisa Tsubaki se acercó, ahora quedando a un lado de Kiba el cual ya parecía no poder distinguir nada con su mirada.

- Aquí termina tu patética vida Isaías, no esperes que el Cielo o el Infierno reciba tu alma - Dijo Tsubaki con la mayor calma mientras concentraba el poder del Jinete de la Muerte sobre su pie. - Ya que no perteneces a ninguno de ellos, lo que te espera es la nada.

Diciendo eso, Tsubaki aplasto la cabeza de Kiba Yuuto, el antiguo huérfano del orfanato donde lo nombraron Isaías, al fin había muerto. La sangre manchaba la nieve, sus sesos estaban adornando parte del lugar atrayendo a más de una Bestia hambrienta al lugar.

El chico que había deseado llegar más lejos que cualquiera, había terminado siendo asesinado por los que creyó el podría manipular. Jamás se entero, ni pensó que su vida ya no le pertenecía cuando decidió aliarse con "El", como interponerse en el camino de Issei.

Quien simplemente observaba lejos de ahí lo ocurrido, desde el principio supo que el no asesinaria a Kiba. Por que ese derecho le pertenecía a Tsubaki, el que lo torturaron era un derecho que todas ellas tenían así como el derecho se ser ellas quienes terminaran con esto.

- "Con la muerte de Isaías, estoy seguro que comenzarán a moverse, la carrera por la victoria en este Guerra ya dio su primera vuelta, es cuestión de tiempo para llegar a la segunda" - Pensó Issei mientras oía los pasos de alguien a su espalda. - Debo admitir que no me esperaba que vieras personalmente.

Dijo Issei mientras un viejo se paraba a su lado, el cual usaba un Bastón para el poder estar de pie a su lado. Aunque la vestimenta del Anciano no podía ser la mejor, dado que vestía algo parecido a una Túnica marrón.

- Fue una invitación tuya, no la podía rechazar - Dijo el Anciano con calma mientras veía al grupo de chicas a lo lejos. - Tengo que admitirlo, no soy el mayor fan cuando se trata de este tipo de espectáculo.

- Te acostumbras - Dijo Issei mientras le daba un Brazalete al Anciano, el cual lo recibió con su mano libre. - ¿Conoces el trabajo?.

Pregunto Issei mientras el Anciano veía el Brazalete con cuidado, tomándose un par de segundos antes de suspirar.

- Si, lo reconozco - Dijo el Anciano que guardo el Brazalete en su Túnica. - ¿En que forma lo quieres?.

- En forma de un Anillo - Dijo Issei a lo que el Anciano asintió. - La forma que tiene ahora es demasiado evidente, es algo que tu antiguo aprendiz Cedalión no pensó.

- Lastimosamente la frase, "El Alumno Superó al Maestro" no se aplica aquí - Dijo el Anciano que no se mostraba un poco sorprendido por que Issei supiera quien había fabricado el Brazalete.

- Deberías ser más amable debes en cuanto con tus Aprendices - Dijo Issei mientras el Anciano reía.

- ¿Como tu lo eres con tus enemigos? No gracias, tengo mi propia forma de ver la vida - Dijo el Anciano causando al fin el que Issei lo mirara de reojo.

- Me doy cuenta, aún si eres un Dios, te vistes de una manera bastante simple - Dijo Issei mientras encaraba al Anciano que hizo lo mismo al girarse hacia el. - Los Dioses deberían aprender eso de ti Efesto.

Dijo Issei mientras el Dios Herrero del Olimpo se reía levemente al oírlo, algo que no molesto a Issei que lo observo.

- Los Dioses son mezquinos, nada que no brille les importa un carajo - Dijo Efesto mientras veía a Issei. - Aunque fue gracias a eso que pude contactar contigo Portador-Dono.

- Con Issei basta, aunque debo admitir que no esperaba que usaras el poder que tiene Asia para encontrarme - Dijo Issei mientras el Dios Herrero reía.

- Pensé en muchas formas para poder buscarte, pero al final ninguna iba ser lo suficientemente para encontrarte - Dijo Efesto mientras sonreía. - Si no es por que ese Niña uso la Espada que yo forje hace mucho tiempo, yo no habría podido encontrarte.

- Un vínculo compartido, no esperaba que dejaras eso impreso en la Espada - Dijo Issei mientras veía como todas las chicas iban regresando.

- Forge la espada para alguien que no recuerdo, la verdad no confiaba en el por su actitud, así que le dije que una vez cumpliera con toda su ambición, me regresara la espada - Dijo Efesto molesto al recordar ese joven. - No lo hizo como pensaba, así que forje un Vínculo Visual Compartido dentro de esa Espada.

- La cual no uso ni una vez y terminaste por perder el rastro de la Espada - Dijo Issei con calma mientras las chicas se mantenían alejadas al ver que estaba hablando con Efesto.

- Así es, ese maldito de Gilberto... ¿O era Famberto? - Dijo confundido Efesto por un momento. - La verdad no recuerdo y me alegro saber que se murió, aún así a esa Espada la olvide hasta hace un par de meses que esa niña lo uso.

- ¿Por qué no fuiste por la Espada en el momento que supiste su ubicación? - Preguntó Issei mientras Efesto hacia un gesto de desinterés con sus manos.

- Demasiado trabajo, además, si Zeus se esteraba de eso seguramente se habria puesto furioso - Dijo Efesto mientras se reía. - Lo cual me sirvió al final, gracias a eso pude encontrarte y hablarte.

- La próxima no hables a través de esa Espada, por un momento creí que era ese rey de pacotilla de Gilgamesh - Dijo Issei mientras Efesto se reía de buena gana.

- Mi error, aun así espero que el trato este vigente - Dijo Efesto mientas sus ojos veían a los de Issei.

- Mantendré mi palabra mientras tu cumplas la tuya - Dijo Issei con calma mientras le sostenía la mirada.

- Seré el Dios Del Olimpo cuando hayas masacrado a todos y sometido a todas las Diosas a excepción de Atenea - Dijo Efesto ante lo cual Issei río.

- No tengo problema, solo me interesa su poder, una vez se lo tome te la daré sin problemas - Dijo Issei ante lo cual Efesto asintió. - Después de todo, nadie sospechara del Dios Herrero como un Traidor.

- Naturalmente, toda burla que me han hecho la pagaran con sus vidas - Dijo el Dios Herrero antes de darse la vuelta y caminar. - Ya estuve mucho tiempo, en cualquier momento Zeus sospechara y hará alguna estupidez, te deseo suerte aunque no la necesites.

Dicho eso el Dios desapareció entre la oscuridad del Bosque, dejando a Issei, quien no tardo en ser rodeado por las chicas.

- ¿Confías en el? - Pregunto Rías.

- No, esto es solo un intercambio, sabe que traicionarme no le traerá nada, es por eso que se alió conmigo después de ver mi poder en la Pelea con la Facción de los Héroes - Dijo Issei con calma. - "Y si soy sincero, necesitare de su ayuda".

Pensó Issei antes de mirar a las chicas, las cuales sonrieron ante su mirada, lo cual hizo lo mismo sobre su rostro.

- Es hora, dentro de poco se van para el Sitio Seguro, yo llegare después de unas 48 horas, hasta entonces preparen todo, no debe haber un margen de error para esto - Dijo Issei ante lo cual las chicas se limitaron a asentir antes de irse dentro de un Círculo Mágico.

Las cosas iban avanzando rápidamente para Issei, que sabía el momento de ver cara a cara ese hombre se acercaba. El tiempo no iba a su favor ni en contra, y eso lo sabía perfectamente, aún así las cosas estaban llendo por un rumbo por el cual el Mundo terminaría sufriendo.

El mundo sería testigo de una Guerra monstruosa, una que acabaría con la vida existente. Una en donde sólo un bando se alzaria con la Victoria, tres bandos y ganador, la carrera por ser completamente los vendedores había iniciado.

Ya que pasadas las horas, en el lugar en donde Kiba había sido asesinado, como devorado por alguna Bestia que pasaba estaba un hombre observando lo que le quedaba a su cadáver.

- Otro fracaso... - Dijo el Hombre que se mantenia tranquilo.

El hombre no mostró emoción al ver el cadáver, contrario a eso suspiro al ver el fracaso que Kiba Yuuto había sido. Y eso era algo que le habían dicho desde ese día, por lo que giro su mirada hacia su espalda donde alguien más venía.

- Te dije que sería un Fracaso - Dijo con calma el hombre que se detuvo a lado del Cadáver.

- Ensayo y error, son las bases para ir avanzando - Respondio el Hombre a lo cual el otro dijo.

- Pero este ensayo le dijo al Issei que ya están despertado - Dijo el Hombre que acaba de llegar.

- Lo se, crei que sería un éxito por que podía usar el poder de [The Kinght], al final fue un fracaso más - Dijo el que se mantenía con la vista en el cadáver de Kiba.

Algo que el recién llegado había notado con rapidez, al punto de causarle algo de gracia. Normalmente el hombre en frente suyo sería lo más tranquilo, no mostraba emociones tan seguido por lo tranquilo de su carácter, pero ahora el aura a su alrededor le decía que no se encontraba feliz con el resultado.

- No actúas como de costumbre - Dijo el Hombre mientras veia al otro romper toda su túnica ante la ira del fracaso de Kiba Yuuto. - Antiguo Rey Salomón.

El hombre sólo se mantuvo tranquilo al ver que Salomón no respondió ante sus provocaciones. Sino que observo con la misma calma el cuerpo de Kiba Yuuto, y aun si estaba furioso no mostró alguna intención de enfrentar al hombre a su lado.

- Sólo necesito tiempo - Dijo Salomón.

- Toma el que necesites, recuerda que debes esperar el despertar del resto o de lo contrario perderán ante Issei - Dijo el encapuchado con calma.

- Tu obsesión con el Portador de los Ojos De Serpiente me enferma - Dijo Salomón mientras suspiraba. - Hasta ahora hemos despertado siete, faltan cinco y los doce nos reuniremos.

- Cuando eso pase podran enfrentar a las Mujeres Sometidas por Issei - Dijo con calma el Hombre encapuchado.

- ¿Mientras tu y el se enfrentan en una batalla a muerte? No olvides cuál es el objetivo que nos... - Dijo Salomón antes de caer arrodillado gracias al toque de la mano del que aún mantenía puesta su túnica.

- Y tu no olvides que estas vivo por mi, si no fuera por que te entregue "Eso" te habrías muerto hace años - Dijo con la mayor calma el Hombre encapuchado, una que causaba terror. - No sabes el tiempo que e esperado por esto, estos años habrán valido la pena, así que te recomiendo mantenerte al margen o buscaré a alguien más adecuado para tu poder.

- ¡Hugh! - Gimió de dolor Salomón en el momento que un hilo de sangre caía de su boca.

- Nadie detendra mi enfrentamiento, el día que Issei y yo nos enfrentemos, los cimientos de los mundos temblaran, es este el momento por el que estado vivo, con la existencia de Issei cumpliré con mi objetivo principal, ustedes doce son simples Peones en este tablero - Dijo el encapuchado a Salomón que solo se mantuvo sumiso. - A los cuales puedo cambiar si deseo, así que ten cuidado Salomón, cualquier cosa que digas de ahora en adelante podría ser la última.

- Tu objetivo nos asesinara a todos - Dijo Salomón en el momento que el Hombre encapuchado lo soltaba.

- No me importa, cumpliré esto y voy a poder descansar en paz - Dijo con una sonrisa el Hombre Encapuchado. - Las cosas que pasen después de esto no me importan.

Diciendo eso el Hombre Encapuchado se alejo lentamente de Salomón, que a diferencia del Encapuchado tenía sus propios planes. No le interesaba ser el anfitrión de "Ese" poder mientras aún pudiera experimentar con todo lo que deseaba.

Ya había descubierto los secretos del Cielo, y con ellos la forma de obtener todo lo que deseaba. ¿Enfrentarse al Portador de los más fuerte? Eso no le interesaba, lo único que quería estaba dentro del Cielo, y si enfrentar a Issei era necesario para obtenerlo lo haría.

- Muy pronto obtendré lo que deseo, y hasta entonces ayudare a ese Hombre, después no me importa lo le que pase - Dijo Salomón mientras creaba otra de las túnicas que usaban.

La cual se puso antes de apuntar con calma su mano al cuerpo de Kiba, el cual exploto un segundo después. Con la evidencia destruida, camino hacia donde "Ese" hombre se había ido en silencio.

Los engranes del destino, ya se habían comenzado a mover, la balanza igual, cualquiera podría ganar la guerra que acabaría con el mundo. Pero hasta ese día, sólo podían prepararse, un paso en falso y terminarian perdiendolo todo, era por eso que todos eran precavidos, la victoria en esta Guerra lo era todo y eso era un hecho que nadie podía negar.

Continuará...

Lo prometido es deuda, ustedes Cumplieron su parte y ahora yo cumplo la mía. Espero que les gustará y si es así dejen su estrella que de esa forma se que les gustó.

Eso sin mencionar que tuve que reescribir una parte, lo cual me hizo pensar en hacer un editando en el fic ahora que estaré de vacaciones.

Ya veré si lo hago o no, en fin eso era todo así que sin nada más que decir me despido.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro