Capítulo 24:"Ocho".

💧💧💧💧

Ella tenía razón, el trabajo sí ocupaba mucho tiempo, y aunque no deje de ir a las fiestas importantes, el correo no lo respondía a tiempo.

Logré publicar mi libro de poesía. En otro ambiente y con nuevas experiencias, resultó de mucha ayuda.

— ¿quieres firmar mi libro?

— claro... ¿Atzin? Cuanto has crecido.

Quedé perplejo. Luce incluso más bonita de lo que recordaba, su piel chocolate, ese rebelde cabello afro que antes estaba atado en numerosas trenzas, piernas más largas.— no tanto porque sigue siendo bajita para mi.— y fuertes, además de esos imnotizantes y brillantes ojos, como de una tarde de cielo anaranjado que rebota en las aguas cristalinas de una piscina.— miré demaciado.—

— vengo a darte las gracias... Por ayudarnos tanto. Claro, no es como el sol de verano que me gusta pero lo acepto.

— es bueno escucharlo.

— no puedo creer que tengas 31, te sigues viendo joven.

— lo soy.– me río con ella.

— no sé si es correcto...— piensa dudosa.

— hasta donde yo sé, no eres de las que pensaba sus movimientos.

— ¿me estas dando autorización?

— ¿de que hablas?

— ¿tienes novia o esposa?

— ninguna, pero que...

Su cuerpo estuvo velozmente sobre mi y como pude mantuve el equilibrio para no caernos de la pequeña silla, sus labios capturaron los míos con rudeza y exigencia. Ella se alejó diminutos centímetros para mirarme a los ojos.

— ¿sabes cuanto tiempo esperé para esto?

— me hago una idea.

Que bueno que me alejé de ella hace ocho años o a estas alturas estaria en la cárcel. Mis padres tenian toda la razon.

— tantos años y no te pudo gustar nadie más. Bueno, a parte de ese novio idiota que tuviste.

Recordé que seguíamos en una posición comprometedora, así que carraspee y la hice bajarse de encima.

— ya no puedes alejarme.

— si puedo.

— ¡me respondiste el beso!

— no lo hice... Atzin...

— no aceptaré nada de lo que digas.– se tapa los oídos y hace ruido con la lengua.

— que infantil.– ruedo los ojos.— pero estás joven, es normal.

Pago la cuenta y camino a paso lento, sabiendo que ella me seguiría.

— ¿no saldrás conmigo?

— ¿nunca quisiste hacer nada más? Algo que te guste.

— ya lo hice todo gracias a ti. Mi madre, amigos, vida poco normal pero estable y divertida. No me digas que tengo muchas cosas que vivir aún.

Nos pusimos frente a frente desafiándonos con la mirada. No dudaba que en algún momento esto pasaría, pero nunca me detuve a pensar en qué hacer cuando ocurriera.

— acepto ser tu hermano.

— eso no te lo crees ni tú y esa propuesta ya caducó.

Es una chica preciosa para mi ¿pero por qué aun me parece incorrecto estar juntos?

— admite que tu poesia está basada en mí.

Sí, es cierto, pero eso no le da ventaja. No es culpa mía que haya sido inspiradora en todos los años que he estado lejos de mi casa.

💧💧💧💧

31 y 22.
Ya no son ilegales ja, ja, ja.
🌟
Últimos dos capítulos a continuación, espero puedan disfrutarlos.
🌟
MV97