Capítulo 51
Alisson
¿Cómo pude haber dejado que me pisotearan de esa forma?
Ah sí, lo olvidé. Dejé que me pasara todo porque se trata de Kyle Byrne.
Desde que lo conozco casi nada ha salido bien con él y ahí estuve siempre perdonándole todas y cada una de sus tonterías.
Aunque yo también tuve que ver en algunas cosas.
Pero ésta se vez es el colmo.
-No tienes tiempo para pensar en eso. Céntrate en lo de tu hermano- me recomendó un decepcionado Yoshua mientras se preparaba en mi cuarto para ir presentable al juicio
-No sé cuál de las dos cosas me pone peor- respondí soltando un suspiro pesado
Ésta vez ya no le iba a perdonar nada a Kyle.
Nunca más lo haré.
-Lo sé, pero importa más lo de tu hermano- replicó dándose la vuelta al colocarse bien la corbata
Teníamos que irnos ya al juicio porque empezaba en una hora. Mis padres ya se habían ido por cosas que tenían que hacer antes para asegurar la libertad de mi hermano.
Yoshua se ofreció a llevarme para no hacer más tensas las cosas.
-Sólo vámonos ya. No quiero saber nada- espeté sin mirarlo y me paré de la cama para reunir fuerzas y así bajar las escaleras seguida del ruloso
Ninguno de los dos emitió otro comentario más acerca de cualquier situación y el camino fue realmente incómodo para mí. Mis lagrimas amenazaban por salir de mis ojos en cualquier momento pero me repetía a mí misma lo mucho que valía para no hacer una escena enfrente de Yoshua.
Si hubiera dejado a Kyle antes, las cosas serían demasiado diferentes.
Debo admitir que la mayor parte de mi felicidad depende de él y no saben cuánto me odio por eso.
¿Por qué tuve que aferrarme a él? ¿Por qué creí que podría tener algo serio con él?
Nunca llegamos realmente a nada.
A lo mejor sólo quiso intercambiar un par de sentimientos conmigo para experimentar y no tener nada al final.
Duele la idea pero no me sorprendería que fuese real.
-¿Estás bien?-me preguntó Yoshua al notarme tan callada en mi lugar y asentí sin decir palabra alguna hasta haber llegado al lugar donde sería el juicio
Ya había gente a las afueras con la esperanza de enterarse de cada cosa que pase en este y ver eso solo me hizo sentir más nerviosa que nunca.
Me bajé del coche cuando estuve preparada y Yoshua no se despegó de mi lado en ningún momento. Mi vista trató de encontrarse con Kyle en cualquier parte como un masoquismo propio, pero creo que dolió aún más el no verlo entre aquella gente.
-¿Vino?-me preguntó el ruloso como si me leyera la mente mientras pasábamos alrededor de todos y logramos entrar para ir a la sala donde sería el juicio. Había mucha gente en traje que lucía demasiado formal dando un ambiente peligroso que daba miedo.
Me sentía como un zorro en medio de muchos cazadores.
Aunque ésta vez el zorro realmente era mi hermano.
-No creo que lo haga: No apoya a mi hermano ni en lo más mínimo- respondí juzgando al ojiverde que me dejó claro todo el día de ayer y mi vista se encontró ahora con mis padres hablando con un señor de mediana edad que vestía de traje y cargaba un cartucho negro perfectamente limpio.
La libertad de mi hermano dependía de ese maldito cartucho.
-Alisson, Yoshua. Él es Jason Stone: El abogado que hemos contratado para que pelee por el caso de Jay- nos informó mi madre con una sonrisa confiada que yo quería borrar lo más pronto posible
Nada de esto está bien. No se puede saber con exactitud si vamos a ganar por ese señor.
-Prometo hacer todo lo que esté en mis manos para liberarlo o darle la mejor solución posible- me habló el señor que me extendía la mano con una gran sonrisa segura que también quería borrar y se la estreché sin estar muy convencida.
-Con la libertad me es más que suficiente- repliqué un poco de mala gana y así mismo ganándome miradas acusatorias de parte de mis padres.
-Créame que así será, entonces- me respondió el señor de inmediato.
Antes de que yo pudiese decir una de las mías, mi padre se adelantó para presumir cuántos casos había ganado ese señor y lo muy cotizado que era.
Hasta lo halagó diciendo que era un honor que nosotros lo tuviésemos de abogado.
Vaya tontería.
No sé, pero no me gustaba nada esto.
-Ni siquiera lo conoces, dale la oportunidad y deja que maneje el caso de Jay. Te has portado muy grosera con él- me aconsejó Yoshua cuando logramos irnos de ahí para entrar y nos sentamos en las sillas de hasta adelante
Todo me intimidaba demasiado.
Enfrente de mí estaba la barrera de madera que nos separaba a los testigos del juicio y a los abogados con el juez y todas esas autoridades. La mesa en la que estaría mi hermano con Jason estaba justo en mi centro de vista y no pude evitar tragar saliva con dificultad cuando la sala se fue llenando de gente que no conocía ni de vista.
¿Qué hacen todos ellos aquí?
-Es la libertad de mi hermano, no cualquiera la puede llevar en manos- me defendí a lo que dijo Yoshua mientras yo observaba con inquietud a cada persona que cruzaba la puerta hasta que estuvo totalmente llena y en eso mis padres entraron para sentarse en la fila de atrás de la mía.
Sentía unas ganas inmensas de salir por esa gran puerta, esconderme y no saber nada de esto hasta que mi hermano quede completamente libre.
-Dale la oportunidad, de todas maneras no tienes de otra- respondió mi amigo que observaba todo también y me tensé cuando vi que el juez que llevaría el caso salió de la nada y se sentó en su lugar más alto al lado de dos banderas. La bandera de la paz y la de nuestro país.
-¿Dónde está mi hermano?-pregunté con frustración y no pasaron ni cinco minutos cuando vi a mi hermano salir vestido de traje con la mirada perdida. Ni siquiera me miró, caminó en medio de todos con unos nervios impresionantes hasta quedar sentado frente a mí con Jason que lo acompañaba desde el principio.
-Todo va a salir bien- susurró Yoshua contra mi oído para darme ánimos
Mi vista se posó ahora en uno de los chicos responsables de hacer que mi hermano estuviese aquí y Yoshua pareció darse cuenta de que me quería levantar para decirle hasta lo que no, pero logró contenerme.
-Idiota- espeté en voz baja para no meter en más problemas a mi hermano.
El señor que era juez se presentó como Steve Lackoan y optó por escuchar las defensas y al ministerio público. Mi hermano estaba pálido, sabía que tenía mucho miedo.
El juicio transcurrió muy lento para mí porque no dejaba de pensar en todo lo malo que podría salir. Muchas personas hablaron, tanto el abogado de mi hermano como los otros que defendían el por qué mi hermano debería de estar tras las rejas.
No le encontraba sentido.
Los chicos que habían intentado violar a aquella chica estaban presentes y estaban intimidados a causa de mis fulminadas con la mirada que les daba a como podía.
¿Por qué no decían la verdad? Ya vivieron toda una vida libre de todo mientras mi hermano se pudría.
¿Qué mas da?
El juez mandó llamar a los cuatro chicos para pasarlos al asiento de testigo y el primero dijo su relato incierto de cómo estuvieron las cosas. Yo quería golpearlo porque estaba mintiendo y además agregaba más cosas a la historia que acababan con todo.
Jason Stone hizo lo posible para defender a mi hermano de las acusaciones del primer chico y logró dejarlo callado cuando les hizo preguntas que los dejaban en evidencia.
El abogado sabía nuestra historia y estaba luchando por sacarles la verdad para dejar a mi hermano en libertad.
Era la única opción.
El segundo chico que pasó a dar su versión no dijo realmente nada por todo el miedo y los nervios que tenía. Apenas y lograba decir una palabra sin tartamudear porque sabía que él tuvo la culpa y habrían consecuencias si lo declaraba.
Yo de verdad que le rogaba a Dios que uno de ellos dijese la verdad y que afrontaran las consecuencias.
Pero prácticamente estaba pidiendo más que un milagro.
Jason aprovechó su estado para sacarle un poco de la verdad que el chico no negó y las piezas del rompecabezas se fueron armando un poco hasta que se vio interrumpido por el sonido de la puerta de atrás.
Bufé volteando para ver quién estaba llegando tan tarde al juicio y mi corazón se puso loco cuando vi a Kyle entrando por aquella puerta con un traje azul marino. Lo miré sorprendida y enojada porque estuviese aquí, Yoshua lo miraba de igual manera y le lanzó varias miradas de advertencia para que no se me acercara mientras yo hacía todo por fingir que me daba igual que estuviese aquí
-¿Dónde está sentado?- le pregunté al ruloso sin querer voltear
-En la última fila- respondió en voz baja mientras su cabeza volteaba hacia atrás varias veces
¿A qué demonios había venido? No tiene absolutamente nada que hacer aquí
-De seguro viene para reírse de mí al final y expandir rumores entre los suyos para humillarme- hablé con odio en mi voz pero sin hacerme audible. Yoshua no me comentó nada al respecto y siguió con la atención en frente.
El juez y las personas que estaban adelante se decían muchas palabras entre ellos que parecían interesarles bastante a toda la gente a mi alrededor. Hasta se fueron casi a los gritos cuando todo se veía casi perdido y mi hermano no dijo ni una palabra hasta que Jason consiguió que el último chico de los verdaderos responsables pasara.
Todo está perdido.
Ninguno de ellos dijo la verdad y este tampoco lo va a hacer.
Ya no fui capaz de contener mis lagrimas y comencé a llorar sin importarme nada. Cuando Yoshua se dio cuenta de ello, se apresuró para abrazarme y me aseguró que todavía había esperanza.
¡Pero claro que no la había!
Ni siquiera mi madre pudo soportarlo todo porque se levantó de su asiento y se retiró de la sala sin más.
Yo quería hacer lo mismo pero no iba a dejar a mi hermano.
Estaría con él hasta el final.
-Nosotros fuimos los verdaderos responsables de todo- escuché para mi sorpresa esas palabras salir de la boca del chico que estaba sentado al lado del juez como testigo.
¿Qué?
Levanté rápidamente la mirada con incredulidad de que esas palabras fueron mencionadas.
El juez se mostró interesado y le pidió que dijera todo lo que tenía que decir de una sancada.
Sus tres amigos estaban en la fila de al lado y lo miraban con terror.
El chico intercambió miradas con ellos mientras estos le decían que no lo hiciera con señas lo más disimuladas posibles.
Al último, el chico dejó de mirarlos y su vista se posó en Jay
-En esa fiesta, nosotros estábamos enojados porque una chica se estaba pasando con nosotros al expandir rumores que no iban bien con nosotros cuando no le habíamos hecho caso nunca. Ni sabíamos que existía hasta que las cosas empezaron a ponerse gruesas y decidimos cometer el error de vengarnos, no sabíamos qué hacer pero era tanto el enojo que la emborrachamos y la llevamos a la habitación para sacarle fotos y con eso amenazarla a que pare con sus estupideces. Todo se nos fue de las manos porque algunos estábamos muy borrachos como para pensar en lo que estábamos haciendo y cuando menos lo pensamos, ya uno de nosotros estaba casi desnudo e intentado cometer el acto sexual con aquella chica. No sé cómo pasó, pero Jay subió de la nada a la habitación y nos encontró, él trató de impedir que hiciéramos algo pero no nos dejamos y al último la policía llegó y la chica le echó la culpa cuándo él fue realmente quien la ayudó. Nosotros logramos escaparnos y nunca dijimos una palabra al respecto- explicó diciendo la verdad que dejó atónitos a todos
-¡Eres un idiota!- exclamó uno de los chicos en su lugar al escuchar lo que dijo y el juez lo mandó callar
La expresión de mi hermano no tenía precio.
Jason Stone hizo todo lo posible aprovechando ello para sacarle más preguntas y así dar con la verdad. El juez intercambió más palabras con los cuatro chicos que negaban todo menos el último .
Yo miré a este con total agradecimiento.
Después como que ya no le vieron caso al esfuerzo de mentir y sólo uno alegaba que era mentira lo que se acababa de confesar.
-Ya no sé si sea capaz de seguir con esto- hablé colocando una mano en mi frente pero ya estaba más que aliviada que antes
Yoshua me abrazó fuertemente:
-Tu hermano va a salir libre, piensa en eso- me recomendó con una sonrisa y trató de darme todos los ánimos posibles en ese momento porque el juez había dado un descanso de 5 minutos en lo que él deliraba para tomar una decisión.
Mi padre y mi madre estaban hablando como si nadie más existiera y Jason salió de sala para caminar a ellos. Les dijo un par de palabras y se regresó para seguir con lo suyo.
Mis padres no denotaban ninguna expresión, lo que más se escuchaba eran los gritos de uno de los chicos que les reclamaba lo idiotas que había sido todos por haber confesado tal cosa
-Estoy a nada de ir y romperle su boca- dije mirándolo con odio y quise dar un paso pero Yoshua me detuvo recordándome a mi hermano de nuevo
De verdad que no sabía qué hubiera hecho sin Yoshua.
-¿Alisson?- escuché la voz de Kyle atrás de mí, me puso la piel chinita y el estómago se me contrajo al sentir ira
Yoshua lo miró con sorpresa por que se había atrevido a hablarme después de todo
-¿Podemos hablar?-me preguntó el chico al ver que yo ni me moví de entre los brazos de Yoshua y negué aunque no pudiese verme
Yoshua suspiró:
-Alisson no quiere hablar contigo, Ky- habló con la mejor amabilidad posible para que no se armaran broncas entre los dos ahora
Me sorprendió que Kyle no se puso a la defensiva al decir que Yoshua no era nadie para hablar por mí como siempre hacía cuando él intervenía en mi defensa porque yo no quería saber nada de él.
Definitivamente somos muy tóxicos el uno para el otro.
-¿Qué haces aquí?- le pregunté de golpe cuando tuve el suficiente valor para encararlo sin llorar y su mirada al posarse en la mía denotó mucho arrepentimiento
Como siempre lo hacía cada vez que venía a pedirme perdón.
Luego me diría que lucharía por mí, lo perdono y vuelve a destruirme,
Es todo un ciclo.
-Te dije que estaría aquí- respondió sin quitarme la mirada y suspiró- También sabes que siempre voy a buscar por ti
Reí con ironía sin apartar los brazos de Yoshua de mi alrededor aunque este quería hacerlo y a la vez no.
Se notaba que Kyle se esforzaba por no hacer una escena por esto.
-No te necesito, puedes irte- repliqué con indiferencia
-No quise decir nada de lo que dije ayer- se defendió de golpe antes de que yo me fuera
-Nunca quisiste decir nada de lo que siempre has dicho- le respondí negando con la cabeza
Kyle pasó una mano por su cabello con desesperación.
-¿Cuando estés más tranquila puedes hablar conmigo para arreglar las cosas?- me preguntó en susurro como un perrito regañado por miedo a que yo le dijese que no
Claramente eso iba a hacer.
-¿Arreglar las cosas?- le pregunté frunciendo el ceño y ladee la cabeza mirándolo detenidamente
Ahora yo quería herirlo.
-La gente como tú siempre quiere de vuelta el amor que alguna vez dio. Yo siempre quiero creerle a la gente cuando dicen que cambiaron pero ahora sólo sé que tú nos conduciste a este desastre. No quiero saber más de ti- contesté con seriedad
Yoshua permanecía callado y fue soltando sus brazos para colocarlos en su cintura sin decir ni una palabra
Agradecía que estaba aquí y que no se había ido por más incómodo que fuera.
-¿Qué hago para que me perdones?- me preguntó el ojiverde pasando su mano por su cabello por segunda vez.
Eso lo hacía cuando estaba desesperado.
-Todo lo que tenías que hacer era quedarte- respondí haciendo una mueca
Esas palabras nos dolieron a los dos y me preparé para seguir con mi discurso auto destructivo soltando una risa irónica.
-Me tenías en la palma de tu mano. ¿Por qué siempre buscaste la manera de destruirme cuando te deje entrar a mi corazón sin problema? Siempre haces eso y me dices que cambiarás, ahora todo es muy diferente y no te va a ser tan fácil- repliqué sin quitarle la mirada de encima
-Va a ser difícil, pero voy a recuperarte- aseguró Kyle al escucharme y ahora Yoshua soltó una risa
-Ya mejor no le intentes- le advirtió cruzándose de brazos
-Tú no te metas- le espetó el ojiverde de mala gana y hablé antes de que lo suyo llegara a más
Tenía que terminar esto cuanto antes.
-He estado tratando de limpiar todo el desastre que causaste desde el momento que te conocí, me hiciste mucho daño y he llegado a mi límite. Ya no quiero saber nada de ti- le dije a Kyle para darme la vuelta e irme antes de que me derrumbara y me pusiera a llorar por lo débil que soy
Un momento puedo ser fría y dura pero pasan los minutos y me rompo completamente al pensar de nuevo en todo.
¿Ven qué patética soy?
-No te rindas conmigo, te lo suplico- me rogó Kyle sin saber qué más decir mientras me miraba con desesperación
Le di una última mirada diciéndole a Yoshua que se adelantara para tomar asiento, ya que el descanso estaba por terminar y debía de ocuparme de mi hermano.
Era más importante.
-Es muy tarde, Kyle. Te recuerdo que todo esto lo causaste tú y era lo que querías- respondí negando con la cabeza y no pude evitar decir lo siguiente- Tú eras todo lo que yo quería.
Los ojos de Kyle se aguaron y creí que estaba a punto de llorar por mí pero logró contenerse quedándose callado frente a mí
-Pero no de ésta manera- le dije para finalizar todo y me di la vuelta para irme hacia mi lugar con Yoshua antes de que Kyle me lanzara otra bala que podría darme en toda de nuevo para volver a lo mismo.
Ya nada va a ser lo mismo.
Todo este día ha sido verdaderamente un drama para mí y de verdad que ansío por que termine lo más pronto posible. El juez volvió a su lugar y yo solté varios suspiros con miedo por todo mientras Yoshua tomaba mi mano para acariciarla mientras Kyle observaba desde atrás.
Aunque todo el tiempo estuvo mirándonos de reojo y se notaba que le costaba contenerse para hacer cualquier estupidez.
Él se lo buscó, más le vale no hacer nada o le irá peor conmigo.
-Hiciste bien con Kyle- habló Yoshua en susurro distrayéndome de mis pensamientos y le respondí diciendo que no quería hablar de eso aunque tenía razón
Por primera vez actué con madurez y vi por mí misma
Las cosas entre Kyle y yo nunca van a funcionar y debo de aceptar esa idea.
¿Qué más me queda? Me dolía lo que hice y me sentía entre la espada y la pared de nuevo.
Obviamente voy a seguir queriéndolo hasta que llegue la persona correcta a mi vida.
-Sólo te digo algo: Sí realmente tú y Kyle están destinados a estar juntos, hagas lo que hagas van a terminar volviendo. Tampoco te aferres a tu odio y pongas todos tus muros porque si no llega nadie, te vas a destruir más porque Kyle será el único que pueda llenar ese vacío- aconsejó con otro de sus sermones muy típicos de él y bufé
-Kyle y yo no estamos destinados a nada. De todas maneras a su lado siempre consigue destruirme aunque fuese el destino estar con él- repliqué neutralmente tratando de esconder mi emociones
-Jay Holland queda libre- fue lo único que alcancé a escuchar luego de hablar yo mientras el juez lo hacía también y sentí cómo se me helaba la sangre
¿Qué?
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