Alisson

Tengo que decírselo. Tengo que decirle la verdad acerca de mí

¿Cómo diablos va a reaccionar?

Las flores no fueron el motivo por el que estaba llorando pero fue lo único que se me ocurrió al ver las imágenes de Yoshua

El motivo por el que me puse mal fue que un par de chicas me mandaron indirectas por facebook y después me etiquetaron advirtiendo que no se acerquen a mí o a mi familia porque hay un loco entre nosotros que era mi hermano

Ya hasta dicen que mis padres y yo somos cómplices de su "loquera" porque no hacemos nada al respecto.

¿Qué carajo quieren que hagamos?

La vista de la gente está en nosotros y cualquier cosa que hacemos es tomada para mal.

Lo que tengo miedo es que una versión más fea llegue a oídos de Kyle y eso lo haga alejarse de mí

Pero de todas maneras con la versión real no sé cómo se lo va a tomar.

-Eres un encanto- le dije en susurro mientras dormía plácidamente a mi lado y lo contemplé por unos segundos queriendo decir la verdad de una maldita vez. Sentía cómo me ardía la boca por querer hacerlo.

Se lo diré antes de irnos, ya sea mañana o el domingo.

-Se te va a caer la baba de verme tanto tiempo- habló dándome a entender que ya se había levantado y me reí callándolo con un par de besos en la boca

Olía demasiado al perfume que me regaló hace unos días por navidad.

-¿Qué quieres hacer hoy? Nos quedan tres días en el paraíso- habló haciendo una mueca en lo que yo me levantaba tomando mi típica taza de café

El labial ya estaba muy marcado en la esquina donde le tomaba.

-Lo que tú quieras, iré a hacer el desayuno- avisé queriendo caminar hacia la puerta pero sus brazos me rodearon para tirarme a la cama con él y entre risas le dije que me soltara pero me calló a besos reteniéndome en la cama por media hora más.

-

El sábado no pude decirle ni una palabra a Kyle debido a que quiso pasársela increíble estando fuera de la casa hasta llegar a las nueve de la noche más o menos y nos emborrachamos hasta tarde. Fue algo muy divertido pero lo que arruinó todo fue que el chico vio una foto que subió su madre a sus redes sociales y comenzó a decir cosas muy feas acerca de su familia que ni yo entendía las referencias.

Al último tuve que llevarlo a la cama para que durmiese pero ya estaba más consciente.

-Odio estar mintiéndote por tanto tiempo- murmuré por su estado sin dejar de observarlo casi durmiendo tranquilamente

-¿De qué hablas?-preguntó sobresaltándome después de unos minutos en silencio cuando pasó su brazo alrededor de mi cuerpo

-No dije nada- mentí aprovechando también su estado y rió levemente

-Algo tienes- dijo entre risas haciendo que un par de lagrimas brotaran de mis ojos

Si estuviera más consciente no estaría así después de lo que dije.

-Mañana lo sabrás- aseguré para mí misma también y ya no me contestó por lo que supuse que se había quedado dormido

Lo estuve pensando toda la noche y llegué a la conclusión de que realmente no tenía nada que temer porque si teníamos un lazo de amor o lo que fuera que somos ahora, él debía de creer en mí y en mi versión. No en lo que la gente diga.

Eso tiene lógica y hace las cosas más fáciles.

Pero este chico suele ser impredecible, por lo que el miedo no se me iba por completo y buscaba alternativas por cualquier cosa.

A la mañana siguiente me desperté sin hacer ruido para cocinar el último desayuno aquí en la ciudad. No me quería ir, me esperaba un infierno en casa que no estaba tan lista por afrontar pero si Kyle logra entender lo que pasó, sería mi gran apoyo.

-Buenos días- escuché su voz a mis espaldas y le sonreí de lado cuando coloqué los dos platos de hotcakes en la mesa junto con un jugo de naranja y mi típica taza de café que tendría que dejar.

También iba a tener que lavarlo perfectamente porque mi labial estaba bastante marcado y por lo que sabía era de la abuela de Kyle o algo así y no podía dejarlo así

-Buenos días- contesté sentándome a su lado sin querer mirarlo a los ojos

En todo el desayuno nos la pasamos comiendo y como había prendido la televisión tenía la mirada fija en este pero su mirada estaba puesta en mí.

Sabía que tarde o temprano me iba a interrogar por mi actitud.

-¿Tan feo estoy para que evites mirarme?-bromeó al comerse el último bocado de su desayuno y mirándome con diversión de igual manera

-Me encanta lo que hay en la televisión. No quería perder la atención de ahí- me expliqué siguiendo sus risas aunque las mías salían a medias

El chico se volteó para mirar lo que había en la televisión y frunció el ceño

-Cuando tenías diez años odiaste la yoga porque te molestaban por tus malas posiciones. ¿Por qué estás viendo un programa de yoga, entonces?- preguntó dándome en toda con su pregunta

En este momento me arrepentí de haberle contado casi toda mi maldita vida al chico en estos días.

-Los miedos se superan- me limité a responder queriendo hundirme en la tierra y escuché una sonora risa de su parte que me volvía loca

¿Por qué se lo tomaba tan divertido?

-Ayer me dijiste que me estabas mintiendo, así que estoy esperando a que me expliques- habló después de quedarse callado por unos minutos con la vista fija en la televisión al igual que la mía

Ay no.

-No quiero hablar de eso ahora- protesté negando con mi cabeza

Su mirada divertida se hizo más seria al igual que el ambiente entre los dos.

-Antes solía ser yo el que mentía y ahora lo eres tú. Qué rápido cambiamos los roles- respondió con ironía al levantar los platos de ambos y puse una mano sobre mi frente con cansancio

Me sentía entre la pared y la espada. Podía estar exagerando aunque sea un poco pero se siente de la chingada.

No cualquiera reacciona bien ante un pasado tan crítico por la gente como el mío. Todos tienen sus versiones y Kyle tiene que creerme o no sé qué más voy a hacer.

No pensaba tampoco rogarle: Si de verdad me quería, debía creerme.

-Te escucho- insistió sentándose de nuevo en frente de mí.

-No quiero hablar de eso- espeté alzando la voz un poco sintiendo un miedo infernal en el estómago

-¿Y tú crees que fue fácil contarte toda mi vida cuando nadie la sabe a pesar de mis amigos?-preguntó mirándome sin estar enojado ni nada

Debía mantenerlo paciente para que no explotara y esto fuera peor.

-Eso fue porque tú quisiste decirme. Yo no te obligué- le recordé posando la vista por fin en sus ojos

Kyle alzó una ceja con la vista fija sobre mis ojos.

-Siempre has sido la chica que se esforzaba por tener un romance perfecto y no te gustaban las mentiras, así que te pido que seas coherente contigo misma y me digas la verdad porque a mí tampoco me gustan las mentiras- habló casi en orden sacándome de quicio al final.

-¡Lo sé! Créeme que lo sé y sí, definitivamente hay algo que tienes que saber pero no estoy preparada- me defendí esperando que así me dejara en paz y pudiéramos disfrutar de este último día en Arlington

Se quedó callado asintiendo con la cabeza un par de veces y al último me miró con seriedad.

-¿Estás embarazada?-preguntó de golpe haciendo que casi escupiera el café que estaba tomando en esos segundos y negué absolutamente segura de ello

-No.-respondí algo sorprendida por la manera tan firme en la que me lo preguntó

El chico era casi millonario. No había tanto problema.

Ahora mismo quería decirle que sí estaba embarazada para librarme de todo pero obviamente no se lo iba a decir.

-¿Entonces qué puede ser peor? Anda, dime- insistió de nuevo al tomar una mano mía y la entrelazó con la suya

-Dime qué hay dentro de tu cabeza. No importa lo que me digas, no te voy a dejar por eso y estaría mintiendo si dijera que lo haría- prometió dándome tanta paz de la que pensé que tendría

¡Vamos, cobarde! ¡Dile!

-¿Me lo prometes?-pregunté tragando saliva sin alejar la vista de sus ojos y asintió al escucharme

Solté un millonésimo suspiro en el día.

-Mi familia y yo tenemos una mala reputación- respondí en resumen deseando librarme con ello y huir pero me quedé sentada esperando su reacción.

-Yo también- habló sin verle la gravedad al asunto y bufé.

-¡Tómate las cosas más enserio!- lo regañé de forma pesada

-Lo estoy haciendo. Tu familia tiene problemas, la mía también. ¿Cuál es el problema?- preguntó y le respondí al instante

-Tus problemas familiares son demasiado diferentes a los míos. Yo estoy más jodida- repliqué sabiendo que me iba a poner a llorar como una estúpida en cualquier momento pero me aguanté

-Mientras no me digas nada, no voy a poder entenderte- habló de igual manera que yo y me crucé de brazos

-Mientras no dejes de hablar, no te voy a explicar nada- repliqué igual

En ese momento se calló y supe que ya debía de decir la verdad

-Todo se trata acerca de mi hermano- murmuré con dolor, era como si las palabras fueran fuego en mi boca y me quemaba.

Noté que quería decir algo pero se quedó callado por lo que dije y verdaderamente lo agradecí.

-He tenido mucho miedo de decirte esto pero creo que ya es tiempo: Hace unos años, mi hermano estaba en la misma universidad que cursamos. Era el típico chico demasiado popular pero diferente entre los demás por no ser un cabrón en pocas palabras- expliqué soltando un suspiro como si me estuviesen apuntando con un arma para decir la verdad

Me tuve que tranquilizar aunque sea un poco y de verdad me esforcé en ello.

-El punto es que mi familia y yo somos muy conocidos ahora porque mi hermano asistió a una estúpida fiesta en donde sus amigos estaban intentando abusar sexualmente de una chica. Mi hermano se enteró de ello y obviamente fue en defensa de la chica procurando buscar toda la ayuda posible pero cuando llegaron las autoridades, él era el único presente y lo tomaron por culpable- expliqué sintiendo cómo palabra por palabra me iba matando cada vez más.

-¿Tu hermano es Jay Holland?-preguntó de golpe sin dejarme acabar nuestra verdadera versión y lo miré con molestia asintiendo.

Su mirada estaba atónita mientras procesaba las cosas y el miedo se apoderaba más de mí.

Tienes que creerme, Kyle.

Me llené de valor para seguir hablando con paciencia y sin explotar porque veía que sí sabía algunas cosas de mi hermano.

-Todo el mundo lo acusa de ser un violador y de más cosas que le han agregado a la historia pero ésta es la verdadera. Mi hermano no es ningún asesino o violador, es completamente inocente. Lo malo es que nadie lo cree y no se nos acercan por nada del mundo por miedo a que mi hermano haga algo. Está bajo observación por un año o puede ser arrestado, cuando a los que verdaderamente tuvieron la culpa no les pasó nada- espeté con horror en mi voz.

El chico se quedó sentando enfrente de mí con una expresión pensativa que me mataba y no decía ni pío. Yo esperaba que dijese que me cree al final pero dijo todo lo contrario a lo que tanto me había aferrado en esperar de él.

-¿Estás segura de que tu hermano es inocente?- preguntó con duda en su voz mientras pasaba una mano por su nuca con nerviosismo y lo miré más que sorprendida

-¡Mi hermano es completamente inocente!- exclamé enojada y asegurando al cien que era inocente.

Kyle alzó las manos con inocencia y se acercó a mí.

-Cálmate, Alisson. Mira, yo sé que es tu hermano y es tu deber defenderlo pero toda la escuela habla de él desde que pasó todo. Ahora es una especie de leyenda entre todos, ¿Cómo estas tan segura de que lo que dices es verdad cuando medio mundo no piensa lo mismo?- preguntó haciendo que me enojara cada vez más.

-No puedo creer que estés diciendo eso- le dije parándome de la silla en cuanto antes.

Podía ver en su mirada que me quería creer pero estaba asustado por ello.

-Tienes que creerme. Te estoy contando la verdad de las cosas y si tenemos un vínculo o algo, tienes que creerme- le dije casi en súplica para que no me dejara sola en esto

-Me estás pidiendo prácticamente que me vaya al matadero- habló al final con el ceño fruncido

Idiota.

Lo miré disgustada por unos segundos por esa actitud que me empezaba a encabronar demasiado y bufé al final con decisión a irme a otro lugar.

-No puedo creer que no pienses que digo la verdad. ¿Le vas a creer al estúpido mundo y no a mí?- grité enojada y me devolvió el grito

-¡No te pongas así! ¡Intento ponerme de tu parte!- me respondió alzando la voz y me crucé de brazos con ironía

-Se ve que te esfuerzas tanto en ello- espeté

Kyle se quedó viendo al suelo dudoso entre todo y al final alzó la mirada para verme.

-Tengo una hermana menor. Relájate y hablemos mejor de las cosas, así podemos llegar a un acuerdo y ver qué pasará con tu hermano- propuso tratando de calmarme

Enserio que no puedo creerlo.

Creí que iba a creerme y pensaría diferente a todos los idiotas que se dejan llevar siempre por lo que escuchan y nunca buscan la verdad.

-¿Sabes qué? Cuando te des cuenta de si me quieres o no, me buscas. No estoy dispuesta a ver cómo te pones del lado de todos cuando yo misma te estoy diciendo la verdad. Lo único que te pedí fue que me creyeras, es todo lo que pido- le dije al borde de las lagrimas cuando abrí la puerta de la casa.

-Esto no se trata de si te quiero o no. Lo que me pides es muy difícil, me soltaste todo de golpe y ¿quieres que te crea tan rápido?-preguntó incrédulo

Lo contemplé por unos segundos y al final azoté la puerta

-¡Idiota!

Definitivamente iba a encarar las cosas yo sola.