Alisson

Estaba hecha un enorme desastre. La navidad no pasó como yo lo planeaba porque mi hermano mayor se puso una gran borrachera que lo llevó a decir y hacer cosas bastante imprudentes dejándonos a mi familia y a mí sin palabras.

Yo no sabía dónde esconderme de tanta vergüenza que sentía. Al principio actuamos como si fuésemos una familia llena de cariño y amor sin ningún secreto qué esconder pero cuando llegamos a la casa de los abuelos, nos encontramos a toda la familia, que obviamente presumía a cada rato los logros de sus hijos o nietos. Imagino que Jay se sintió muy presionado por ello, intentamos decir uno que otro logro o buena experiencia pero sabíamos bien que lo único que habíamos logrado era un infierno entre nosotros que cada vez se extendía más

En la universidad ya no paraban de preguntarme por mi hermano y me daba cuenta de que la gente me eliminaba de las redes sociales por miedo. No es algo que realmente me importe pero lo que me aterra es que llegue a oídos de Kyle, no sé qué voy a hacer cuando tenga que decírselo.

-Ordenen bien su cuarto, tenemos mucho que desempacar- habló mi madre cuando llegamos a casa en un silencio bastante incómodo

Mis padres estaban furiosos pero a la vez tristes por todo. Fue inevitable no sentir las miradas de algunas vecinas que estaban platicando acerca de sus fiestas en las calles de enfrente, tan pronto como vieron a mi hermano decidieron aislarse un poco más

-Ya les dije que me arrepiento de todo- trató de disculparse de nuevo mi hermano pero mi papá lo regañó peor

-No queremos escuchar ninguna estúpida palabra de tu boca. No te quiero ver, así que largo y regresa cuando te des verdaderamente cuenta de la mierda que has causado en nosotros- replicó mi papá muy molesto

-¡Nada de esto fue mi culpa!- gritó mi hermano con desesperación

Mi madre lo miró algo triste y sin decir nada se metió a la casa dejándonos a los tres solos

-No quiero hablar de eso ahora- le respondió mi papá para irse a meter a la casa

Yo estaba callada bajando mis maletas de una a una sintiendo la mirada de mi hermano y de la gente alrededor

-¿Tampoco me vas a hablar?- me preguntó con voz dolida

No era su culpa pero me arruinó toda la felicidad que creí tener en esa fiesta y no tengo ningún grato recuerdo de la navidad

-¿Qué se supone que debería decir?-le pregunté frunciendo el ceño poniéndolo de malas y azotó la puerta del coche

-Sabes bien lo que pasó y que no fue mi culpa. Todos se pusieron a presumir a sus estúpidos hijos y no fue justo, es obvio que saben lo que pasa en nuestra familia- se defendió con coraje y lo miré fijamente

-Eso no te dio derecho a hacer un espectáculo en frente de toda la familia cuando lo único que queríamos era pasarla bien- repliqué alzando la voz un poco por la molestia

Jay se me quedó viendo esperando a que dijese otra cosa como si fuese a explotar. Yo no quería corresponder su mirada, sólo quería desaparecer de aquí

Al último sólo escuché cómo bufó pesadamente

-Dile a mis padres que no regresaré hasta muy tarde- avisó de mala gana para sacar sus llaves de su chamarra y así se fue en la motocicleta dejándome sola

Solté un suspiro sin tener ganas de nada y me metí a como pude con las maletas para llevarlas a mi habitación escuchando a mis padres discutir otra vez sobre lo ocurrido

Tal vez ya esto será eterno y no podremos hacer nada al respecto. Tal vez es tiempo de acostumbrarse a lo malo y dejar que los viejos recuerdos se vayan

Toma demasiado tiempo cambiar a una persona, maldita sea. Es tan difícil sólo intentarlo.

La gente sólo cree en las cosas que escuchan o en las que leen a menudo por otras personas pero nadie se interesa en saber la verdad.

A veces pienso en que Dios o el universo me odia y sólo quieren hacerme pasar malos momentos a cada rato sin tener ni una cosa buena en la vida. Pienso que me están mirando desde arriba mientras se rien de lo patética que puedo llegar a ser.

Estoy comenzando a creer que la humanidad verdaderamente está perdida y que el infierno es real.

-¿Estás bien?-escuché la voz de mi madre con cansancio en su mirada. La voltee a ver en lo que desempacaba y asentí

Ella me miró no muy convencida hasta que miró por la ventana

-No sé si ya te diste cuenta pero hay un chico afuera esperando por ti- avisó.

Kyle.

Ahora no tenía ganas de verlo pero tampoco era su culpa la situación por la que pasé.

-Iré a ver qué quiere- respondí encogiéndome de hombros sintiendo cómo mi corazón latía a mil por hora con los nervios en mi piel. Cuando bajé las escaleras me apresuré a abrir la puerta encontrándolo apoyado en su coche con una media sonrisa

-Feliz navidad atrasada- habló felizmente al acercarse a mí y yo hice todo por poner la sonrisa más creíble que pude

Sus brazos se alzaron para abrazarme

-Hola, Kyle- respondí correspondiendo a su abrazo que se llevó toda la mala vibra que había en mí y por un momento me sentía segura

-Espero que ya tengas tus cosas empacadas- sonrió al decir aquello y fruncí el ceño

-¿De qué hablas?-pregunté con confusión

-¿No leíste mis mensajes?-preguntó confundido y me encogí de hombros en disculpa

No vi mi celular desde el día de navidad porque a parte de que se descargó, estaba muy mal para querer hacer cualquier cosa

-Lo siento- murmuré en disculpa y sonrió para mirar hacia las escaleras

-¿Pues qué esperas? Empaca todo lo que quieras porque tenemos un viaje por una semana y media en Arlington- avisó agrandando cada vez más su sonrisa

¿Qué?

-¿Hablas en serio?- le pregunté sorprendida y negué cuando vi que sí era así- Kyle, agradezco todo pero acabo de viajar y yo..- cuando quería decir algo más me interrumpió

-No te he visto en varios días y no te voy a dejar decir que no. Te doy media hora en lo que empacas, estaré afuera- habló sin dejarme decir nada más

-¿Te das cuenta de que mis padres están aquí?-pregunté en reproche

Vamos, Alisson. Vete con él y ya sé feliz de una vez.

-¿Y?- preguntó sin entender a lo que me refería

-¿Cómo se supone que les diré que me iré con chico a Arlington por una semana y media?-le pregunté cruzándome de brazos

-Sólo ve y pregúntales- respondió como si fuera lo más sencillo del mundo

-Kyle...- quise explicarle algo para que me dejase pero negó

-No quiero excusas, empaca y te espero aquí- respondió sin más.

Suspiré asintiendo sin saber qué demonios estaba haciendo con exactitud cuando subí las escaleras en dirección a mi cuarto y comencé a guardar todas las cosas bonitas que vi en una mochila

Tenía mi maquillaje y todo lo necesario empacado previamente por el viaje que recién había hecho

-¿A dónde vas?- escuché de nuevo la voz de mi madre cuando pasaba por el pasillo entre los cuartos y cerré los ojos agobiada

No podía irme como así o sería chica muy muerta

-Kyle me invitó a un viaje con sus amigos y amigas- expliqué mintiendo

Mi madre alzó una ceja al escucharme y sabía perfecto que estaba mintiendo. Me preparé para que liberase todo su enojo contra mí pero lo único que hizo fue suspirar.

-¿Ese chico te gusta?-preguntó mirándome fijamente

¿Qué digo?

Ay Dios.

Asentí tragando saliva expectante a cualquier cosa

-Quiero que me llames cada noche para saber que estás bien y mándame tu ubicación cuando llegues- me condicionó descruzando sus brazos accediendo a mi petición indirecta de ir con Kyle

-¿Lo dices en serio?- pregunté demasiado sorprendida al escucharla

Ella sonrió de lado mirando todo lo que llevaba empacado

-Pasaste una mala navidad a causa de los errores de tu hermano y no te mereces eso en absoluto. Ya eres mayor de edad y tu padre lo entenderá, así que quiero que vayas y que te la pases bien con ese chico, siempre y cuando ambos se cuiden- habló en condición haciendo que sintiera mil cosas en el estómago

Es increíble cómo cualquier cosa relacionada a Kyle puede hacer que lo malo se vaya y me ponga feliz

Estaba sonriendo como una idiota ahora

-Estaremos en Arlington. Si pasa algo, te marcaré- le hice saber mientras guardaba mis últimas cosas y bajé seguida de mi madre hasta encontrarme de nuevo a Kyle, que miró a mi madre con sorpresa al verla

-Ho..Hola, señora- tartamudeó siendo la primera vez que conocía a mi mamá

-Mucho gusto, Kyle. ¿En dónde estarán en el viaje?-preguntó estrechando su mano y Kyle me miró algo nervioso

-Tengo una propiedad ahí a la que suelo ir los fines de semana, no se hace mucho tiempo y está cerca de aquí. Lo que quiero es pasarla bien y poder convivir más con su hija, no debe de preocuparse por el dinero ni nada. Yo lo pagaré- avisó dándome ternura porque hablaba algo rápido y al último tragó saliva con dificultad

¿Dónde está eso de que decirle a mis padres que viajaría con él sería tan simple?

-Respira, cálmate- le sugirió mi madre riendo y era otra persona a comparación de la que tuve en el camino con mi hermano- No pasa nada, avísenme de cualquier cosa y por favor no hagan nada malo- nos suplicó mirándonos a ambos

-Hecho- dijimos los dos al mismo tiempo y antes de que pudiera pasar otra cosa ya me encontraba subiendo mis maletas al coche de Kyle. Mi papá bajó y al principio no estaba muy convencido de la idea pero mi madre logró convencerlo. Cuando menos lo esperaba, ya estaba en camino a Arlington con Kyle a mi lado y me empecé a reír porque todo se dio muy rápido que parecía una broma.

¿Enserio mis padres acaban de dejarme venir con Kyle a Arlington?

Es increíble pero no protestaré, es ventaja a la vez de haber tenido una mala experiencia en navidad que los hizo querer que me la pasara bien por fin

Al pensar en Jay mi sonrisa se fue desvaneciendo y así mismo escuché cómo se la había pasado Kyle en la navidad

-Ahora sí dime qué tienes- habló cuando estuvimos a unas casas de la mía

Yo lo miré confundida

-¿A qué te refieres?-le pregunté frunciendo el ceño y me miró rápidamente con obviedad

-Llegué a tu casa y en vez de estar saltando de alegría por verme y por haber pasado una navidad estupenda con tu gran familia, estabas tan seria y se veía a kilómetros que estabas mal- replicó haciendo una mueca

Quería hundirme por ello. Pensé que no se daría cuenta.

-Todo está bien, Kyle- le aseguré en mentira regalándole una pequeña sonrisa de mi parte y rió

-Suenas muy tierna cuando me mientes. Puedo sólo mirarte a los ojos y saber que no es cierto- habló negando levemente con la cabeza

Eso sonó tan malditamente adorable.

Todo lo que siempre quise que Kyle hiciera conmigo por fin estaba pasando.

-Habla, dime lo que quieres o tienes porque si no veo tus ojos es casi como la mentira perfecta- prosiguió con la mirada fija en el camino

Suspiré rendida

-Sólo no me la pasé muy bien en la navidad- contesté como explicación sin querer dar más detalles

-¿Se puede saber por qué?-preguntó haciendo una mueca y negué quedándome callada

Él bufó mirándome cuando se detuvo en un semáforo

-Todavía no sé nada de ti y yo te dije toda la verdad de mi vida, no es justo- se defendió y me sentí muy abrumada por todo

No podía decirle la verdad ahora.

-No te voy a decir mi vida aquí- repliqué mirando al techo

-¿Por qué no?-preguntó en contra de mí y lo miré confundida

-No es apropiado- me defendí

No quería peleas, de verdad que no las quería.

-Nada de esto es apropiado, así que dime- insistió- Se supone que el guardaba mentiras era yo, así que sé sincera conmigo si es que quieres que esto funcione

¿Qué hacía?

Si me negaba tendría una pelea con Kyle que ahora mismo no sería capaz de tolerar y si le decía la verdad no sabría cómo reaccionaría y a lo mejor arruinaría todo

Decidí decirle la verdad a medias

Parecía que habíamos intercambiado roles ahora pero es justificable mi acción.

O al menos a mí me lo parecía.

-Mi hermano se emborrachó y creó un muy mal ambiente en la navidad, así que ahora toda la familia nos está criticando en este momento y tenemos muchos problemas- expliqué rodando los ojos con las ganas de vivir otra vez por suelos

Kyle se quedó callado al escucharme y procesó la información. Suponía que pensaba que no le diría nada.

-¿Te sientes bien ahora?-preguntó con preocupación en su voz y negué sintiendo cómo mis ojos se llenaban de lágrimas de un momento a otro.

No contesté por ello queriendo retrasar mis lágrimas para que no viera en ese estado pero volteó a verme al ver que no dije nada y al notar que estaba llorando, frenó el coche sin importar nada.

-Hey. Todo está bien ahora, no llores- dijo con preocupación al intentar quitar mis manos de mi cara por la vergüenza que sentía

No me gusta hacer este tipo de espectáculos en frente de las personas

-Lo siento, no quería que me vieras así- murmuré en disculpa mientras me quitaba las manos de encima y se apresuró a limpiar mis lagrimas siendo muy cariñoso conmigo

Jamás pensé que Kyle haría esto por mí y menos que haría todas las cosas que ha hecho desde que lo conocí

-No importa, conmigo puedes bajar tus defensas. Ya no llores, llegando podemos salir y recorrer la ciudad o matar el tiempo al quedarnos en mi casa- sugirió con una sonrisa ladina procurando que no salieran más lagrimas de mis ojos y sonreí apenada

-No quiero quitarle todo lo romántico al asunto- repliqué consiguiendo cambiar un poco el ambiente y besó mis labios en cuanto lo dije

-Podemos omitir los osos de peluche, los pasteles o chocolates y sólo darnos más amor- volvió a sugerir

-¿Te das cuenta de lo romántico que sonaron tus palabras?- le pregunté queriéndolo besar otra vez y mil veces más

Él sonrió arrugando su nariz

-Cuando diga cosas así, no me las eches en cara por que es raro- advirtió riendo y besó mi mejilla antes de volverse a posicionar en el volante y asegurándose de que yo estaba bien- Serás como mi semana y media de San Valentín.

-Me parece perfecto- respondí siguiéndole la corriente para no arruinar las cosas más

Todavía me sentía de la fregada por dentro pero estar con este chico hacía las cosas mucho mejor y más tolerables. No tomó mucho tiempo el viaje y llegamos a la gran propiedad de Kyle, me explicó que su abuelo solía vivir aquí y se la dejó como parte de herencia cuando murió porque a cada nieto le dejó una propiedad y a Kyle le dejó la mejor.

-La gente no suele visitar como primer opción ésta ciudad pero para mí es una de mis favoritas- explicó bajando mis maletas frente a su casa y entré soprendiéndome al ver que todo estaba perfectamente decorado y que parecía literalmente una mansión de las Kardashian

-Wow- hablé viendo todo y subió las maletas con una sonrisa orgullosa al decirme que también era mi casa

Le di una vuelta a la cocina y a las diferentes partes de la casa que ni siquiera la mía tenía y ya me sentía en la gloria. Se sentía como si estuvieras visitando la casa de una persona famosa.

-¿Estás seguro de que tu abuelo no es cantante o algo?- le pregunté bromeando cuando el chico volvió a mí y soltó una carcajada

-Muy seguro, sólo era un hombre magnífico en los negocios- explicó y me guiñó un ojo- Siéntete especial por que eres la primera chica a la que traigo aquí, ésta casa es muy personal

Sonreí con amplitud ante lo que dijo y miré el reloj viendo que eran cerca de las siete de la tarde y mi estómago comenzaba a pedirme comida.

-¿Hay restaurantes cerca de aquí?-le pregunté con curiosidad para saber a dónde ir cuando tuviera hambre o cuando me aburriera aunque estando con Kyle eso no pasaría

-Estamos ubicados en un buen punto. Hay cafés y restaurantes o tiendas alrededor y no hace mucha falta ir en coche, así que podemos ir caminando- respondió sentándose en una de las sillas de la gran cocina

Esto parecía un sueño muy loco en el que Kyle es un joven multimillonario y podíamos hacer lo que se nos diera la gana. Definitivamente iba a ser una semana muy divertida.

-Mi estómago morirá si no come, así que vamos- le dije riendo y tomó las llaves de la mesa uniéndose a mis risas pero cuando abrí la puerta me tomó del brazo para jalarme a él y me dio un gran beso en los labios. Ahora se quemaba toda el alma.

Nunca me iba a acostumbrar a sus labios. El hecho de poder besarlos ya era algo mágico.

-No quiero llantos ni tristezas. Sólo quiero que te la pases bien y que seas feliz a mi lado aunque sea ésta semana. A pesar de que puede ser mucho o poco, necesito probar cosas nuevas contigo porque yo también anhelo ser feliz. Ya sabes toda la mierda que he tenido que pasar con mi familia y tú eres como la libertad ante mis ojos- habló regalándome un cálido abrazo

Sus palabras me hicieron muy muy feliz y me di cuenta de que hice algo bueno al no darme por vencida con este chico

Él tiene todo lo que quiero. Odio cuando no está conmigo.

Quería sentirlo hasta en mis venas.

Estoy malditamente enamorada.

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Se viene maratón, esperen los demás capítulos en el resto del día :)

Los quieroooo

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