→Este es un one-shot dónde Futakuchi es el seme. Los que me seguían en LadyPink178 y estaban al tanto de mis avisos deberían saber que nunca eh escrito un one-shot en donde Aone sea el pasivo de Futakuchi, es mí primer intento, así que espero me salga bien. Alguien me lo pidió y quiero intentar que salga lo mejor posible para que esa persona disfrute leyendo esto

Todos consideraban a Aone un chico raro que no dice ni pio, pero Futakuchi piensa lo contrario, Futakuchi sabe que es todo lo contrario, Aone es un gritón sin remedio. La única persona que puede hacer a Aone hablar y gritar es Kenji, Futakuchi Kenji

—Bebé

Dijo bajito el castaño en medio del camarín, el albino se acerco rápidamente y se sentó en sus piernas. Futakuchi colo sus manos en medio de la camisa del albino y subió del abdomen a sus pezones

—Estas todo sudado

Susurró ronco en su oído mordiendo el lóbulo de la oreja de su novio sacándole un pequeño gemido, ambos estaban solos en medio camarín ya que el entrenamiento había terminado y todos se habían ido

—Dime bebé..¿Lo hacemos aquí y gimes como una prostituta barata haciéndolo en un lugar público?

El albino negó cabizbajo y temblando un poco nervioso

—Entonces, ¿Quieres ir a mí casa a hacerlo?

Aone asintió levemente sonrojado, no le gustaba la idea de hacerlo en lugares públicos, no quería que nadie más lo viera o escuchará. Quería que su novio fuese el único que lo viera desnudo y escuchará sus vergonzosos y fuertes gemidos

—Admito que no me gusta que me niegues cosas.., pero no quiero que nadie te vea. Mí madre sigue de viaje, así que no hay nadie. Además si lo hacemos en mí casa podremos usar los juguetes. Vamos

El castaño se paro tomando su bolso y le tomo la mano a su lindo novio se fueron caminando juntos a la estación del metro

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Ambos estaban en la habitación del castaño, Aone estaba desnudo, de rodillas en el suelo, con unas orejas de perro, un juguete anal que tenía una cola de perro, penis plug, una mordaza y una correa en su cuello. Estaba completamente sonrojado, sentía mucha vergüenza, pero eso le excitaba, la idea de ser humillado y avergonzado por su castaño le encantaba, pero sólo si estaban ellos solos, no le gustaría que lo humillara y denigrará frente a otros, no quiere una relación tóxica

—Te retorciste como gusano con sal al poner el penis plug, realmente eres muy sensible perrita

Aone sólo respiraba agitado, podía sentir como su ano se tragaba esa cola de perro. Habían reglas en el juego, una palabra mágica, si Aone decía la palabra "rojo" era porque el dolor ya no era placentero, sino que era un dolor insoportable que realmente lo lastimaba, muchas veces el castaño le dejaba la mordaza puesta para que Aone no pueda pronunciar esa palabra

—Y, ¿Piensas quedarte todo el día ahí o vas a comer?

Pregunto ronco el castaño viendo fijamente a Aone. Aone desvió la mirada sonrojado, le avergonzaba mucho lo que estaba por hacer. Futakuchi le quitó la mordaza y el albino se inclino hacia adelante alzando más su culo, avergonzado a más no poder empezó a lamer la leche que había en el plato para perros. Kenji estaba completamente duro, ver a su novio tan sumiso y avergonzado era increíble. Era tan difícil tomar era leche con simple lamidas que a Aone se le terminó cayendo un poco de leche al castaño en el pie

—Lame, debes dejar completamente limpio

—…………

Era la primera vez que su novio le pedía algo así, pero planeaba cumplirlo, la mirada que tenía el castaño le estaba empezando a dar miedo. Saco tímido su lengua y empezó a lamer de leche del pie, pero no se detuvo ahí, empezó hasta a lamer en medio de los dedos, como si de una paleta se tratase

—Eres tan sumiso A-o-n-e

El castaño tomo de su caja de juguetes unas pequeñas pinzas y se las puso al albino en sus pezones

—¡A-ah!

Chillo avergonzado y algo adolorido, nunca habían usado las pinzas en los juegos sexuales

—Ahora viene la mejor parte

Gruñó ronco quitándole las orejas y la cola

—Tu ano no quería despegarse de esto, eres un sucio pervertido. Wua, quedó todo abierto, puedo ver todo dentro

—N..no digas eso

Susurró avergonzado el albino

—¿Aa?, ¿Qué dijiste? Hablas muy bajo, no puedo escuchar

Río con picardía poniéndolo una mordaza y amarrandolo a la cama con unas esposas. Futakuchi de una caja que tenía por ahí saco unas velas, las encendió y sonrió sádico

—Se sentirá bien bebé, no pongas esa cara de espanto

Puso la cera caliente de la vela justo en el pezón izquierdo de Aone haciendo al albino arquear la espalda, lloraba, lloraba del dolor y placer, nunca antes sintió ese ardor o ese nivel de dominancia, el no poder decir la palabra, estar entre la espada y la pared, era algo tan excitante

—Dime bebé, ¿Se siente bien?

Pregunto bajando la vela por su abdomen hasta el ombligo, estaba empezando a quedar lleno de cera caliente

—MhN, ¡HaHhH!

—Tu piel está quedando roja...llena de marcas que sólo yo tengo permitido ver, ¿Entendido Aone? Tu cuerpo es mío, yo decido lo que pasa con él

El albino asintió desesperado, quería más, después de todo su ano seguía ligeramente abierto por la expansión que quedó del juguete anal. Futakuchi bajo aún más la vela, estaba apunto de llegar a su miembro, lo estaba torturando

—¡NhB!

No se aguanto más y eyaculo haciendo que el penis plug saliera disparado

—¿Aa?..¿Quién te dio permiso de correrte?

Susurró ronco quitándose el pantalón y entrando de golpe en el apretado ano de su novio. Aone no paraba de temblar y llorar, dolía mucho

—Hoy hemos jugado mucho con tus pezones..tal vez deba darles un descanso luego

Se acercó a los pezones de su novio, los mordió levemente y los jalo provocando más gritos y lágrimas al albino, Futakuchi lo sabía, los pezones de su novio eran la parte más sensible de su cuerpo

—No te dejé ir al baño en todo el día... Así que adelante, hazlo ahora

Aone negaba llorando, ¿Enserio creía que quería orinar frente a él? Eso ya era demasiado

—Bueno, entonces sigo con los mío

Kenji tomo con fuerza a Aone de los muslos y lo empezó a embestir sin piedad, como si se tratase de un simple juguete para obtener placer. El albino no paraba de llorar y babear, era una sensación increíble, sus pezones estaban erectos, su vuelo y pecho lleno de mordidas, sus nalgas de un ligero tono rosa y además..

—¡GHk!

—¿Ves? Orinarte no era tan difícil

Lo había hecho..se había orinado frente a su novio, nunca en toda su vida se había sentido más avergonzado

—Eres todo un sucio

Susurró Futakuchi en su oído lamiendo después la quijada

—Apenas puedes respirar, así que terminaremos luego

Le quitó la mordaza a Aone y este lo miro con los ojos llorosos

—No creo poder aguantar más hasta dentro de una semana

—¿Te pregunté? Eres mí zorra Aone, mí zorra personal, nadie más que yo puede tocarte, ¿Entendido?

—..Si daddy