—Asi Yoongi oh muy bien, ahora subelo contigo, tómalo en tus brazos y pega tu nariz a la del minino.

Yo hice lo que el fotógrafo me pedía, tomé a Minnie y lo elevé justo a la altura de mi rostro, él me miró obediente y sabiendo justamente lo que el camarografo pedía, elevó su carita gatuna y pegó su fria  nariz con la mía.

Sentí una calidez instalarse en mi pecho.

El fotógrafo tomó varias fotografías de esa escena.

     —Excelente Yoongi ¿Cómo haces para que obedezca y entienda?

     —Es un minino muy especial. —Respondí.

Bajé a Minnie y éste se acomodó en su cojín favorito que siempre llevaba conmigo cuando a Minnie le tocaban sesiones fotográficas porque sí,  mi minino ya era muy famoso.

Lo pedían para hacer comerciales de mascotas, documentales para canales de animales y hasta ya había sido mascota de la protagonista de un drama. Claro todo esto había sido hablado con él desde un principio.

Le pregunté si se sentiría cómodo haciendo eso y dijo que iba aprobar.

Le gustó.

Eso si, era el minino actor más caprichoso y mimado de la industria.

Lo trataban como a un rey incluso mucho mejor que a mi.

Pero yo odiaba que lo tocaran mucho, era mío,  Minnie era solo mio y Park Jimin también. 

El camarografo terminó de recoger sus cosas y yo fui rápidamente a traer a Minnie.

     —Hey pequeño, iremos ya a casa.

Él maulló restregando su rostro en mi ropa, en mi cuello y yo no pude evitar sonreír de lo feliz que Minnie me hacía sentir y las miles de emociones que me  provocaba.

Pero había algo que yo tenia ganas de hacer desde hacía rato y no quería postergarlo más y eso era presentarlo como Jimin a mis amigos para que supieran con quien salía, quien era el dueño de mi corazón.

Lo llevé dentro del auto y lo coloqué a mi lado en el asiento del copiloto.

     —Tengo una cena con mi hermano y mis amigos Minnie.

Él entonces se transformó en Jimin, yo rápidamente le pasé una chaqueta que le quedaba bastante larga y un pantalón de tela. Él se vistió rápidamente y se veía tan adorable.

     —¿Iras toda la noche Yoon? —Preguntó con sus ojitos brillositos.

     —Si bebé iré. —Me incliné para darle un beso en sus hermosos labios. —Pero tú vas a venir conmigo.

Jimin se sonrojó.

Amaba verlo sonrojado, era una visión totalmente hermosa.

Ya teníamos un mes de vivir Juntos, obviamente Jimin vivía conmigo pero nadie sabía eso así que  cuando tenia visita se transformaba en Minnie. 

Yo nunca había conocido un cambiaformas, pensaba que solo eran una leyenda. Recuerdo que cuando era niño mi abuelo nos contaba que antes existían otros tipos de seres vivos. Los llamaban cambiaformas porque eran  seres mitad humano mitad animal que podían  disfrazarse como  humanos
normales.

Mi abuelo decía que podían  transformarse en un animal, depende su especie y que habían desde  lobos, panteras,  zorros, todo tipo de felinos como tigres y hasta gatos como Minnie.

Según las histórias de mi abuelo y de la literatura que nos enseñaban en la escuela nunca se supo cómo surgieron estos seres quizá hayan sido producto de algún experimento o solamente cosa de la  naturaleza.

En el planeta hay muchas cosas aún por explorar así que puede ser posible. 

La élite de aquella época vio como los cambiaformas comenzaron a reproducirse rápidamente entre los humanos normales e incluso formaban pareja con humanos y eso no les pareció porque estaban ganando terreno así que prohibieron relaciones humanos/cambiaformas y comenzaron a cazarlos para su extinción.

Jamás desde hace más de medio siglo se habían registrado más avistamientos de cambiaformas.

Supongo que jamás se extinguieron como tal y solo se habían escondido los pocos que quedaron.

Jimin es el único cambiaformas de su familia por lo que me contó y cuando sufrió su transformación lo echaron de casa tachandolo de fenómeno.

¡Qué hijos de puta!

Me pongo furioso cuando recuerdo eso.

Desde entonces había vivido sólo hasta que por gracia y obra del destino llegó a mi.

Porque sí, para mi Jimin ha sido un regalo del destino.  No estaré más sólo. Pero no estamos listos para que que mundo sepa que mi adorado chico es un cambiaformas de gato montés.

No sabemos que puedan llegar a pensar las demás personas al respecto y si quisieran hacerle daño.

Por lo pronto solo quiero que sepan que tengo un lindo novio que vive conmigo. Que todo el mundo lo sepa.

Así  no me estarán creando rumores a  cada rato de que ando con las actrices con las que hago películas. 

     —¿De verdad Yoonie? ¿No es muy pronto?

Negué.

Por supuesto que no era pronto. Es mas yo sentía que me estaba tardando.

     —No mi pequeño,  es mejor que te conozcan  ya, además me estoy hartando de que crean que me volví loco y mi novio existe solo en mi cabeza.

El sonrió, tan lindo como siempre.

Cuando llegamos a casa subi a prepararnos una ducha a ambos.

A Minnie le gustaba bañarse conmigo pero nunca lo hacía convertido en humano, le daba algo de vergüenza que lo viese desnudo lo cual me causaba gracia porque yo lo había visto desnudo varias veces ya.

Cuando se transformaba.

     —La ducha está lista bebé. —Hablé en voz alta para que me oyera desde el cuarto de baño.

Me desnude por completo y me metí a la tina soltando un jadeo de satisfacción al sentir mi cuerpo entrar en contacto con el agua.

Relajé mis músicos y eché mi cabeza hacia atrás en espera de Minnie.  Pensaba en como reaccionarian mis amigos al presentarles a Minnie y eventualmente debía decirle a mis padres también.

Sentí  la superficie del agua moverse ligeramente y entonces lo vi a él, a Minnie sumergirse al otro extremo de la bañera.

Sonreí.

     —¿Está bien la temperatura? —Pregunté.

Minnie maulló.

Alargue mis manos para tocarlo y le frote su lindo y  suave pelaje con shampu de almendras.

El ronroneaba satisfecho.

Tenía sus ojos cerrados, estaba muy relajado.

De pronto me quedé sin mover ni un  sólo músculo y con mis ojos bien abiertos porque lo que tenia frente a mi era a Jimin, con su cuerpo mojado y lleno de espuma, su cabello mojado que le hacía ver muy bien.

Sus mejillas estaban rojas y no me miraba directamente si no al agua.

Estaba nervioso. 

Parecía que se había relajado tanto que se había transformado sin querer pero no tuvo prisa por volver a ser Minnie.

Nunca lo había presionado u obligado a tener un acercamiento de ese tipo conmigo, no quería asustarlo y que se fuera otra vez.

Pero si él se transformaba en humano en un momento íntimo como el de ahora quizá significara algo para él y debía demostrarle seguridad. 

Lo atraje un poco más hacia mi y no le  dije nada no lo quería avergonzar, simplemente seguí pasando mis manos con jabón por su cabello haciendo suaves círculos por todo su cuero cabelludo.

Después bajé por la nuca y por sus hombros de manera lenta mientras esparcia más el jabón.

     —Puedes acercarte un poco más para que te ponga jabón en la espalda Minnie.  —Susurré bajito para que me tuviera confianza.

Era gracioso, como si le estuviera hablando a un gatito asustadizo.

Él lo hizo, se acercó un poco más a mi. Lo hizo a gatas como lo que era, un gatito. Lentamente se puso a cuatro patas y comenzó a venir hacia mí con la misma elegancia con la que lo haría Minnie con sus ojos verdes fijos en mi.

"Dios mio"

Me iba a dar algo, lo juro.

Era tan sensual la manera lenta en la que se acercaba a mi.

Cuando llegó justo donde yo estaba sentado se acomodó sobre mi regazo.

Traté de calmar mi loco corazón que no dejaba de golpear fuerte en mi pecho.

     —Jiminie. —Dije sin dejar de ver a sus hermosos ojos hipnóticos.

Seguí con mi trabajo de lavarle el cuerpo con el jabón y le dejaba caer agua caliente de la tina.

     —¿Yo puedo? —Preguntó de manera tímida.

"¿Pero que pregunta es esa mi amor? Haz todo lo que te plazca conmigo"

Me aclaré la garganta y la mente de esos pensamientos que acababan de invadirme.

No quería que se diera cuenta lo mal que me ponía estando así.

Aunque mi dureza abajo quizá ya me estaba delantando.

Él también se llenó las manos del jabón de baño líquido y comenzó a pasarlas sobre mis hombros y mi pecho, yo me quedé quieto y también cerré mis ojos porque me quería concentrar en sus suaves manos.

"¿Cómo se sentirían esas pequeñas y suaves manos en..."

Abrí mis ojos no era buena idea cerrarlos. No... pésima idea cerrarlos.

Y abrirlos también ¡Joder! Él estaba tan cerca de mí, su nariz casi rozaba la mía y me miraba con sus verdes ojos intensos.

¿Y si él lo quería?

Mierda...

¿Qué quería?

¿Quería que yo hiciera algo?

Estaba dudoso aún así lo hice pero fue de manera tan sutil, tan tenue para que a penas lo perciba.

De  manera ligera y perspicaz moví mis caderas hacia arriba, ya mi pene palpitaba duro, grueso y caliente.

Solo un poco... sentí que toqué su piel de sus glúteos.

Jadeó...

¡Jadeó un poco!

¿Eso significaba que si? ¿Si quería? ¿Le gustaba?

Me acerqué para atraer su boca, primero un beso suave para después abrirme paso en su interior y saborear su lengua.

Mis manos se posaron en su diminuta cintura para apretarlo contra mí y volví a subir mis caderas, mi miembro le volvió a rozar por entre sus glúteos. 

Volvió a jadear, no se hizo hacia atrás, no se asustó ni se alejó. Entonces él si lo quería.

"También yo bebé"

Volví mis besos un poco más insistentes pasando la punta de mi lengua hasta por el cielo de su boca, eso lo estremeció haciéndolo jadear y yo sonreí internamente porque ese lugar es tan olvidado aunque sea uno de los más erogenos que poseía el cuerpo humano. 

A él le encantó, mis manos aún sostenían con posesividad su cintura y sin darnos cuenta ya estábamos envueltos en un suave vaivén que nuestras propias caderas protagonizaban marcando el ritmo,  sintiendo ambos nuestras durezas dejándonos llevar por el calor del momento. 

¡Dios Jiminie sabía tan bien!

Podía sentir como nuestros penes se rozaban entre sí haciéndose fricción y ¡Dios! Eso era tan delirante. 

Deslicé una mano entre ambos logrando así rodear nuestros penes y comencé a moverla rápido hacia arriba y hacia abajo, su dureza palpitaba contra la mía y eso era delicioso.

Jadeamos ambos a la vez.

Sentí aquel jalón en mi interior y mi escroto se endureció, me iba a correr.

Jadeé desesperado.

Moví más rápido apretando con algo de fuerza y mi dedo pulgar se deslizó sobre nuestros glandes que se sentían calientes mientras que nuestros gemidos se ahogaban con nuestros besos.

     —Oh Jiminie bebé.  —Gemí con fuerza cuando finalmente me corrí y él junto a mí también se dejaba abandonar por el orgasmo.

Yo estaba eufórico y con nuestras respiraciones aceleradas aún le volví a besar. Cuando corté el beso él dejo caer suavemente su cabeza contra mi pecho con una suave sonrisa y sus mejillas rojas.

Estaba avergonzado.

Se veía totalmente hermoso.

Cuando nuestras respiraciones estaban totalmente estables de nuevo le hice un poco para atrás para verlo a los ojos.

     —Bebé eso fue...

     —Increíble. —Terminó por mi.

"Lo fue"

No era lo mismo tumbarte en el sillón y fantasear mientras te tocas. Esto fue mucho mejor.

Hacia años que no mantenía relaciones con nadie porque al iniciar mi carrera artística maduré de un solo golpe. Mi lívido sexual se había quedado atrás en la Universidad y después no volví a estar con nadie en primer lugar porque quería cuidar mi imagen como figura pública y en segundo lugar porque realmente nadie llamaba mi atención tanto como para querer si quiera acercarme.

Hasta ahora.

Con mi lindo Jiminie.

     —¿Estás Bien bebé? ¿Te ha gustado?

Él asintió sin borrar esa linda e inocente sonrisa.

     —Es la primera vez que hago algo así con alguien.

Mis ojos se agrandaron ante la sorpresa.

     —¿De verdad?

     —Si Yoonie Hyung,  pasé tanto tiempo siendo gato que nunca conocí a  nadie, hasta ahora.

"Hasta ahora"

Lo volví a abrazar, ahora con más cuidado. Porque Minnie merecía cuidados y amor.

     —Entonces si no has estado jamás con nadie, haremos esto despacio ¿si bebé? No te quiero lastimar y que tu primera experiencia sea un mal recuerdo.

Se quedó mirando las ya escasas burbujas en  el agua ya fría, pensando seguramente en mis palabras.

      —¿Te parece bien? —Volví a hablar.

     —Si Yoonie.  —Sonrió.

Yo también sonreí dejando un beso ruidoso en su frente. 

Entonces jalé el tapón de la bañera para vaciar el agua y cuando estuvo lista la llené de agua caliente y limpia de nuevo para terminar se asearnos.

Nos esperaba una cena.

...

El restaurante a donde me llevaba Hyung lo había visto antes pero no había entrado ninguna vez.

No tenía dinero para hacerlo antes.

Ahora ganaba dinero como Minnie y me gustaba posar para fotos y comerciales pero me gustaba más cuando eran con Yoonie. 

Esperaba algún día poder salir en una portada como Jimin.  ¿Cómo sería eso?

¿Qué pensarían mis padres y hermanos si me vieran?

Sacudí la cabeza no quería pensar en eso.

Ellos solo eran un mal recuerdo de mi triste pasado.

Ahora era feliz.

Sentí la calida mano de Yoongi Hyung tomar la mía y vi que me sonreía mientras me guiaba adentro.

El restaurante estaba a rebozar de personas que nos veian y hablaban entre ellos y yo me puse nervioso porque caí en cuenta de lo que estaba pasando.

Estaban viendo a Min Yoongi de la mano con un chico desconocido. 

El famoso modelo  y actor... de la mano de alguien.

¡Dios mío!

Casi me da un ataque de ansiedad ahí mismo.

Yoongi Hyung lo notó porque me miró sonrió y me apretó un poco mas mi mano. Era como si me dijese que todo estaba bien.

"¿Seguro Hyung?" Pregunté con la mirada.

Entonces paramos antes de entrar a otra estancia más privada.

     —Todo está bien Jiminie,  es mejor que nos vean juntos de una vez y que las personas se hagan a la idea de que somos novios.

Sentí mis mejillas arder como llama viva.

"Novios"

     —Pero no somos novios Yoonie Hyung.

Me colocó las manos en mis mejillas y me miró directo a los ojos.

     —Jiminie ¿Quieres ser mi novio?

Jamás había sentido mi corazón latir tan rápido como ahora, excepto cuando estábamos en la bañera esta tarde.

No pude evitar recordar eso y sonrojarme más.

     —Yo, yo si Hyung si quiero.

Sonrió satisfecho y me dejó un beso en la frente. 

     —Gracias Minnie,  veras que todo estará bien. 

Luego seguimos al área reservada y en una mesa alejada habían varias personas ya esperándonos.

Yo los reconocí tan pronto ellos me vieron. Estaban Namjoon, Jin, Hobi y Su hermano Jungkook.

Él sonrió mientras se acercaba y saludaba.

Jungkook me reconoció de inmediato.

     —¡Hey te Conozco! Eres él chico que mi hermano persiguió en el centro comercial.

Sonrió teniéndome la mano.

     —Hola. —Saludé cortés. 

     —Entonces eres real. Eres de carne y hueso. —Fue Hobi quien me habló también sonriendo.

     —Realmente pensé que Yoongi estaba perdiendo la cabeza. Hablaba de un chico misterioso que aparecía  en sus sueños. Yo hasta llegué a creer que eras una especie de aparición fantasmal o algo así.

Todos comenzaron a reír.

     —Me tomaban como loco. —Yoongi se cruzó de brazos.

Yo solamente sonreía tímidamente.

     —Oh por favor eres adorable. 

Yoongi arrastró la silla para que yo tomara asiento.

     —Gracias. —Susurré.

     —¿Y como te llamas?

     —Me llamo M... Jimin,  Park Jimin.

Casi decía Minnie.

Lo extraño que hubiese sido que el novio de Hyung se llamase igual que su gato mascota.

     —¿Y donde se conocieron? —Preguntó Jungkook ahora.

Todos parecían ansiosos por saber nuestra historia y la verdad ni él ni yo hablamos sobre que decir.

Así que simplemente se me ocurrió decir  lo primero que pensé.

     —Oh, Yoonie casi me atropella una noche.

Todos se quedaron en silencio esperando a que alguno de los dos dijera que era broma.

     —¿Entonces?...

     —Asi fue. —Intervino Yoongi Hyung.  —Él se atravesó en mi camino la noche de los premios  y ahí lo conocí,  ahí lo vi por primera vez y me enamoré.

     —Aww que tierno. —Gritó Hobi.

     —Tienes que saber que Hyung es la persona más fría y seria del mundo y siempre está con cara de poker pero es muy leal y entregado cuando hace las cosas muy en serio.  Si te escogió como su novio y pareja es porque realmente le interesas Jimin. Así que felicidades a los dos.

Agradecí totalmente las palabras de Jungkook quien parecía ser el menor de todos pero era bastante maduro.

     —gracias.

    —Gracias hermano. —Dijo Yoongi.

Entonces Namjoon levantó su vaso de bebida y la elevó al aire.

     —Por la nueva pareja, Yoongi y Jimin para que sean muy felices.

Sonreí.

Antes no tenía amigos o conocidos y ahora sonreía ahí reunido con amigos y de la mano con el chico más guapo y atento que en mi vida había conocido.

Estaba tan feliz.

     —Jiminie. —Susurró en casa una vez habíamos llegado.

     —¿Si Hyung?

     —Gracias por aparecer en mi vida, estaba tan solo y amargado y tú la has llenado de colores y sabores nuevos.

Sonreí acercándome más a él.

Me tomó en brazos y subió conmigo a su habitación dejándome sobre su cama.

     —No es nada Yoonie créeme que yo también estoy tan agradecido como tú. No estoy más sólo y gracias a ti no me siento un fenómeno.

Sonrió dejándome varios besos en todo el rostro.

     —Me encantas así como eres,  Minnie o Jimin para mí eres el mismo y eres único. No lo dudes.

Sonreí.

Cerré mis ojos y me concentré.

     —¿Me quieres así Hyung? Mitad humano y mitad gato?

Él se quedó de piedra un momento cuando vio mi colita de gato y mis orejitas sobresalir de mi cuerpo de humano.

Al poco tiempo recuperó el habla.

     —Joder,  eso es tan caliente ¿Sabias?

Sonreí, no lo sabía pero ahora lo usaría a mi favor. 

Me volvió a besar mientras acariciaba mi cintura y mis orejas de gato.

Jadee feliz y ansioso.

Eramos un humano y un cambiaformas, diferentes pero iguales en nuestro interior, queríamos las mismas cosas y nos queríamos así.

Quizá nuestros hijos salieran como yo, mitad gato y humano pero sea lo que sea se que Yoongi tambien los iba a amar.

Pero para eso aun faltaba mucho. 

Lo vi como sacaba de un cajón un sobrecito y lo rasgaba.

Era un preservativo.

     —Ven precioso, no te haré daño lo prometo.— Me dejé guiar por él.

La primera sensación cuando sentí sus dedos entrarse ahí en mi interior fue de ardor que poco a poco fue sustituida por algo más, una calidez combinada con un tipo de satisfacción.

Sigió así por un rato hasta que no se como sus dedos eran sustituidos por su lengua.

¡Dios! No tenía idea de que podía llegar a sentir tanto placer así de esa manera. Mis manos se agarraban a las sábanas y mis caderas subían al encuentro de su boca por si solas.

Yo quería sentir más de eso.

Su lengua entraba y salía de mí y me hacía temblar por completo. 

     —Minnie sabes tan bien.  —Susurró. 

Cuando su boca abandono mi entrada  se internó de manera lenta en mi y  tenía miedo pero él fue muy cuidadoso conmigo. 

Jadeamos ambos cuando estuvo totalmente adentro. 

Mi cuerpo me pedía más contacto así que moví mis caderas pidiéndole más y fue así que se comenzó a mover dentro de mí peovocandome miles de sensaciones a la vez.

Quería gritar, enterrar mis uñas, era algo intenso.

Sus dedos pellizcaban mis pezones y sus dientes mordían mi cuello, mis claviculas dejando marca en mi piel.

     —¡Yoonie! —Gemí sin evitarlo.

Él me presionaba adentro un punto que yo no sabía que existía pero que me hacía delirar.

     —Si bebé, lo sé.

Arremetió más duro ahí en ese lugar sin dejar de besarme. Todo lo que me hacía me tenía temblando totalmente de pies a cabeza. 

Los dedos de mis pies se contrajeron al igual que mi vientre.

Él también jadeó fuerte cuando mi interior se apretó.

Grité fuerte cuando llegó finalmente aquella explosión deliciosa que invadió todo mi ser.

El cayó rendido sobre mí después de tener su propia liberación.

Acarició mi cabello y mis orejitas.

     —Te amo Minnie. 

Bostezó.

     —Yo también te amo Hyung.

Ambos nos quedamos dormidos soñando con la promesa de una vida feliz junto. 

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🐾𝓞𝓱 𝓜𝔂 𝓒𝓪𝓽🐾

  
                              𝓕𝓲𝓷

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