one hundred thirty six.

"lo siento, me dejé llevar." el pelirrojo mencionó, alejándose de luke.

"está bien, só-sólo no puedo." el rubio estaba apenado. "no después de que tú..." lo miró y se quedó callado.

"de que me acostara con ashley. lo entiendo, luke." michael miró hacia el suelo.

el silencio reinó y ambos se sentaron sobre la cama matrimonial de su habitación.

"¿esto está funcionando, luke?" el oji-verde habló luego de un rato. "nosotros." aclaró.

el rubio lo miró unos minutos, su mirada suave como algodón y profunda como el pacífico.

"podemos hacerlo funcionar, mike." estrechó la mano del mayor. "siempre y cuando los dos vayamos al mismo ritmo, ¿si?" michael asintió. "sólo tenemos que ir un día a la vez."