Capítulo 6:Cena Laboral
Llegué al departamento y mi compañera me preguntó cómo me había ido hoy, le respondí que normal y luego me encuesto lo que temía. Al decirle que no casi me reprendió, pero me lo dejo pasar ya que sabía que no lo haría. Me senté junto con ella para cenar, esta vez había cocinado pizza con nuestros agrego favoritos, ella no era de cocinar, pero cuando lo hacía, tenía un buen sabor lo que preparaba. Seguí conversando con ella y le hablé sobre lo de mañana, en seguida como un flash se emocionó, sus ojos brillaban y empezó a decirme las varias ideas que se le ocurrieron. Esta vez al finalizar hizo mucho énfasis que hiciera, aunque fuera algo. Asentí mientras terminaba de comer, me puse de pie y tomé lo que había usado para fregarle. Luego me dirigí a mi habitación para buscar el cambio de ropa y bañarme.
El baño me sacó el cansancio y en cuanto salgo, voy directo a mi cuarto y me acuesto en mi cama. Me envuelvo en mis sabanas y antes de cerrar los ojos, configuro de nuevo mi alarma. Suspiro antes de acomodarme y cierro los ojos, me demoré un poco en dormirme ya que me puse a pensar en algunas cosas, sobre todo en él. Tome mis audífonos y los conecté a mi móvil, me los coloqué y seleccione alguna canción relajante para evitar seguir comiendome el coco.
Quiero salir a la calle
Y sentir el sol en mis ojos
Pero cada vez que lo
intentamos
Hay demasiadas nubes en el
cielo
Cerré mis ojos y trate de dejarme llevar con aquella melodía, no tarde mucho en dormirme y vuelvo a encontrarme en aquel infinito espacio blanco. Ya me preguntaba que sería en esta ocasión y solo vi a una de las ya conocidas figuras distorsionadas de mi ensoñación tirada en el suelo. Dibujaba algo con unos crayones en una hoja, cuando justo me acerco para ver lo que hacía, dobla el pedazo de papel y corre.
Hemos visto días mejores
Y no siempre fueron así
Sé que siempre digo que estaremos bien
Pero ahora me duele la cabeza como nunca antes
La sigo y se acerca a la otra forma distorsionada, la pequeña le da el papel y la grande la agarra, al principio no le dice nada y la otra se nota como baja lo que parecía ser su cabeza en forma de desánimo. Entonces con un gesto agradable, a través de una caricia en la parte posterior de la cabeza, la pequeña se vuelve a poner animada. Era una escena muy fraternal, parecían como hermanos y extrañamente un leve calor resurge en mi pecho como siempre, la rara nostalgia que llevaban estos sueños le reinaban. Cada uno era distinto, pero siempre eran protagonizados por ellos.
Y si quieres estar solo
Solo házmelo saber y me iré
Y si hay algo que olvidaste decir
Dímelo ahora
-Quiero saber…quiénes son ellos-solté observándoles.
Repentinamente vuelvo a despertarme, siempre ocurría esto, solo daba un vistazo y sin pleno aviso me despierto. Otro de los misterios de mi vida actual. Me quito los audífonos y los desconecto de mi teléfono, luego vuelvo a acostarme y trato de volver a dormir.
Al día siguiente me encontraba de nuevo en los archivos, organizaba los que me faltaron ayer y los ubicaba. Mientras lo hacía, escucho la puerta a mis espaldas abrirse, me volteo y no veo a nadie. Seguí en mis cosas y miro como en uno de las cajas de archivos que faltaba uno, según el orden de organización este cuarto, ese documento debería de estar en la fila superior a mano derecha. Moví una especie de escalera de biblioteca anclada a los soportes de los archivos y la coloque donde estaría, empecé a subir por ella hasta donde se supone que estaría el archivo, no le vi y seguí buscando en cuatro filas más arriba hasta que le encontré. Lo agarro y cuando voy a bajar un ruido proveniente de la escalera resuena, comienza a moverse ya que se había zafado al parecer algún agarre de la misma. Traté de bajar, pero perdí el equilibrio a la escalera tambalearse y caí, un grito se me escapo ante la prominente caída, aunque alguien evito mi llegada al suelo. Acabe en los brazos de alguien, su pupila bicolor azul y rojo brillaba al observarme.
-Gracias... Dust-le dije apenada, casi el corazón se me escapa del pecho.
-¿Estas bien? -pregunta bajándome con cuidado.
- Si, lo que me lleve un buen susto-le conteste.
Este mira a un lado y luego desvía la mirada a la escalera, la parte superior había caído a un lado.
-Qué raro, esta escalera la pusieron el mes pasado y estaba bien firme cuando le hicieron-expresa acercándose para verla con mayor detenimiento.
Yo recogí el documento que solté ante la acción de caer y lo ubique en el archivero, creo que era la primera vez que interactuaba con él. Usualmente suele ser silencioso, y por algunos comentarios que he escuchado de los demás, a veces habla solo, con su hermano creo. Justo ahora escucho que murmura algo, algo que no alcanzo a escuchar bien a esta distancia. Observo como se agacha y toma un tornillo, lo mira a detalle y lo guarda en un bolsillo.
-Notificare esto para que vengan a arreglarle-se dirige a mí-Por el momento, ubica solo a los que alcances por ti misma.
-Está bien-le dije y asintiendo con su cabeza, se marcha.
Continuo mi trabajo y al cabo de 20 minutos aproximadamente lo completo, miro mi reloj de muñeca y ya había comenzado el tiempo de almuerzo. Auto seguido salgo de los archivos y camino hasta mi escritorio, al entrar a la oficina veo que todos se habían marchado. Cuando llego a mi escritorio agarro mi cartera y veo una nota de Fell, diciéndome dónde me estaría esperando para almorzar. Al voltearme para ir al ascensor, miro la oficina de conferencias a mi lado, la silueta de alguien sentado dentro traspasaba las cortinas que cubrían los cristales. A medida que me aproximo allí escucho unas voces, como si fuera un programa de televisión. Mi curiosidad por saber lo que ocurría me pica, así que abro la puerta con cuidado y echo un vistazo al interior. Era él, mi superior que veía a través de uno de sus portales un Au que parecía más un programa de televisión, uno tipo telenovela de esas que ve mi madre, con casi los mismos dramas. Era entretenido y verle tan absorto en ello, disfrutando e incluso emocionándose, me gustaba ver esa faceta desconocida suya.
Me gustaría que llegara a actuar de esa manera conmigo. Pensé anhelando aquello.
Iba a cerrar la puerta para irme, pero algo o alguien me empuja, haciendo que entre a la sala de conferencia, casi cayéndome al suelo y en cuanto me volteo a ver quién fue, no había nadie. Lo peor era que ahora le había interrumpido y el me miraba, sentía tanta vergüenza que deseaba que la tierra me tragara.
-Lo siento mucho, no era mi intención-le dije tratando de actuar natural a pesar de que quería que la tierra me tragara.
Este me mira, había cerrado rápidamente el pequeño portal desde donde veía lo de su ¨programa¨.
-¿Me estabas espiando acaso? -pregunto glictheandose rápidamente.
-¡¿Eh?! ¡¿No, claro que no?!-sonreí nerviosa- Buscaba a Fell y pensé que estaría aquí, que torpeza la mía. Lo siento-le dije disimulando dando unos pasos antes de salir de la sala.
Camino rápido para el ascensor y presiono el botón, me toqué el rostro con ambas manos. ¨Qué pena, esto me pasa por mi maldita curiosidad¨ me decía entrando al elevador.
-Tonta…tonta-murmuraba martirizándome una y otra vez.
Cuando se iban a cerrar las puertas una mano se interpone en medio de estas. Me sorprendió notar que era… Error! ¿A que había venido? Extendió su mano y tenía la respuesta justamente ahí, al parecer la cartera se me había caído luego de haber entrado a la sala de conferencias. Le agradecí agarrándola nerviosa y se aleja en cuanto me la da para dejar que las puertas cerraran. La vergüenza resurge, cielos, solo se me puede ocurrir a mi hacer eso.
Salí del ascensor en cuanto se abríeron las puertas y me dirigí hasta donde estaría esperándome Fell. Llego cerca de la cafetería y le busco con la mirada, le veo haciéndome señas desde una mesa, ya había pedido la comida al parecer. Voy hasta donde está y me siento a su lado.
-Gracias Fell-le dije mientras sacaba el dinero para darle.
-Sabes que no es necesario que me pagues cielo-me dice sonriente.
-Sí que lo es, no puedes seguir invitándome a comer todos los días- le recalque extendiendo mi mano con el dinero.
-Lo hago con gusto si es para ti-dijo aceptando el dinero.
-¿Están bien los tortolitos por aquí? -menciona de la nada una voz molesta, acercándose nos.
Ambos miramos en la dirección, justamente era quien nosotros pensábamos.
-¿Qué quieres Killer? - le pregunta Fell, pero los dos sabíamos que era para soltar algún comentario venenoso.
-Nada, solo pasaba por aquí-me mira-Por cierto pasante, tienes que tener cuidado por donde andas, te te puedes "caer" repentinamente- advierte resaltando lo último, por supuesto, había sido su culpa lo de hace unos minutos.
-Lo tendré - le contesté sonriente-Gracias por el aviso.
Se fue con la misma energía con la que había llegado, el esqueleto a mi lado se quedó medio confundido con lo que había dicho y no me quedó más remedio que explicarle.
-Ya veo, con que eso fue lo que sucedió - dijo pensativo-Sabes, deberías espiarme a mi en vez de a ese amargado, te aseguro que te gustara lo que verás .
-No le espiaba-le corregí nerviosa y apenada-el problema es que tenia curiosidad por saber lo que veía.
-Tranquila, es normal ya que nunca habías visto algo como eso-daba un mordisco a su comida, un poco de mostaza salía por el borde-En lo personal, odio esas jodidas cosas.
-¿Por qué? - le pregunto.
-Tengo algunas malas experiencias y problemas con ellas-me responde con seriedad.
"Otra de las razones de los problemas entre ellos dos" me dije en mi mente y continúe disfrutando de la comida. Al terminar nos dirigimos a nuestro piso, vimos a Blue por el camino, se le había hecho tarde para comer y tenía que apurarse. Tomamos el ascensor y mientras nos desplazabamos me percate de una mancha en su rostro.
-Fell tienes de nuevo mostaza en tu rostro-le digo a lo que etse se mira en las paredes reflectantes.
-Es verdad... - sonríe - Me la vas a limpiar esta vez? - me dice con picardía.
-.... Sí lo hago no me lo volverás a pedir-le aclaro de vuelta sacando de uno de los bolsillos de mi uniforme un pañuelo.
Asiente y baja un poco la cabeza para que lo limpiará más cómoda, cuando terminé de retirarle e iba a apartar mi mano me la retiene.
-Gracias cariño-me dice con una voz grave y suave antes de besarme la mano.
Me sonrojo inmediatamente por la sorpresiva acción.
-No_o tenias que...-me libera la mano-hacer eso-dije nerviosa bajando la mano.
-¿Por qué? No me ha parecido nada malo. Además-aproxima su mano a mi cabeza y me acomoda unos mechones-tu cara sonrojada es más linda, nena.
Las puertas del ascensor se abre y él se aleja de mí para salir primero, yo le seguí, preguntándome sobre lo que había acabado de pasar. Por que tiene que seguir actuando como un galán conmigo? Parece que le divierte molestarme de esta manera.
La tarde comenzó a caer y la hora de salida llegó, empecé a recoger las cosas de mi escritorio para irme con los demás. Fell llegó con un par de documentos que dejo en una de las gavetas del escritorio, organizó algunas cosas que tenia por la mesa y me mira sonriente.
-Por fin tomaremos unas copas juntos cielo-me dijo con entonación de coqueteo.
-Sí, junto con los demás-especifique terminando de guardar las cosas en mi bolsa.
-No importa, de todas formas, lo tomare como una cita-expreso confiado agarrando su maletín.
Todos se fueron moviendo y Fell me toma por el brazo para caminar juntos hasta el ascensor, fuimos de agrupo, primero 4 y luego 3, para subir a tomar el tren. Subí junto con Fell y Error, ambos ni se dirigieron palabra alguna como esperaba. Al salir del compartimiento fuimos para tomar el tren, el de los ojos carmesí se mantenía a mi lado mientras que mi superior caminaba atrás de nosotros. Subí de primera ya que Fell muy caballerosamente me cedió el paso y nos sentamos donde siempre, nuestros compañeros iban atrás de nosotros y se nos voltearon a ver. Horror se asomó por el lado vacío del asiento frente a nosotros y apoyando su brazo por el espaldar de la misma exclama de forma burlona:
-¡¿Error vienes con nosotros?! ¡Que sorpresa!
-Y yo que pensaba que no quería volver a comer con nosotros-dijo Dust asomándose por el otro lado.
Mi superior suspira.
-Y yo me estoy arrepintiendo –les dice con pesantes.
-Vamos Error, hace mucho que no te diviertes. Estas más serio que Cross-le dijo el del ojo bicolor.
-Yo? -escucho al monocromático.
Siguieron bromeando con él el resto del viaje, la cara de molestia era constante mientras yo trataba de no reírme por lo gracioso de la escena. Fell se mantuvo sin hacer algún comentario, parece que quería evitar iniciar alguna discusión con Error. Pasaron unos 15 minutos aproximadamente antes de llegar a nuestro destino, no pude ver cuál era el Au en el cártel ya que estaba tan entretenida observando el exterior. Era de noche y el lugar estaba repleto de edificios con bares y restaurantes, los carteles neones indicaban el nombre de cada uno de los locales, había muchos monstruos y algunos humanos caminando por las calles. La locomotora universal se detiene, mis compañeros se van levantando para bajarse del transporte, agarro mi bolso y los sigo.
-Mi estómago me gruñe, ya quiero llegar y comer-menciona el del cráneo quebrado a la par que se palpaba el vientre.
-Ni que lo digas-le complementaba Dust desanudándose la corbata.
Cross se les suma a los comentarios a la par que Killer guiaba a la cabeza del grupo, Error se mantenía en silencio atrás, mirándonos con una expresión que helaba. Se notaba que no le apetecía para nada estar aquí. Fell lucia emocionado y no perdía el tiempo en decir las ganas que tenia de beber. A veces me sentía rara ya que era la única chica en el grupo, incluso algunos volteaban a vernos por esa razón quizás. Llegamos a un local llamado Sweet Pea, era tipo un restaurante-club que se podía reservar en una de las habitaciones privadas. Killer hablo con el dependiente de la recepción y nos dejó pasar, el interior tenía el área donde era barra libre y disco, según un cartel que vi la parte del restaurante estaba en el fondo y nosotros seguimos en dirección a los cuartos. Estos estaban a través de un pasillo, eran varios, algunos llenos y otros vacíos. Nosotros fuimos a una que se encontraba al fondo, nos detuvimos en la puerta y Killer la abrió, pero puso un brazo en medio del paso.
-Chicos, cuiden sus modales. La pasante debería ir de primera-nos dijo sonriendo.
La vista de todos se voltearon a mi.
-No se preocupen, yo pue_.
-Vamos entonces-me interrumpe Fell poniendo sus manos en mis hombros y empieza a empujarme para que entre.
No me quedo más remedio que caminar adentro, había unos asientos y una mesa en medio de estos, me senté a inmediación con Fell a mi mano derecha. Los demás se fueron ubicando y para mi mala suerte quedo Killer frente mía, trate de no prestarle atención y me enfoque en pasarla bien. Error se sentó a mi otro lado, se zafó un poca la negra corbata de su cuello y se recostó al asiento. Las paredes tenían pinturas de diversos colores con temática moderna y se escuchaba una canción de fondo, era suave y agradable. Cross fue repartiendo los menús que tenía a mano a cada uno, cuando lo tuve en mis manos empecé a leer, no sabía bien que pedir y en lo que leía, los demás fueron diciendo sus pedidos a Killer que los fue seleccionando en la Tablet para ordenar.
-Mi pedido que sea doble-dijo Horror, me sorprendí un poco al escuchar aquello ya que de por si era bastante comida.
-Sí, lo sé.
-Vas a comer todo eso?-le pregunto.
-No hehe-rió divertido-Le voy a llevar a mi hermano, seguramente este hambriento a esta hora-me contesta.
-Ah, eso es un gesto muy lindo Horror-expresé sonriendo, a pesar de la imagen que daba tenía una parte tierna.
Horror se sonrojo levemente y se puso algo nervioso.
-¿Y qué quiere la pasante?-pregunta sonriente Killer.
-No me decido todavía-sigo mirando indecisa.
-¿Qué tal el número 4?- me recomienda Dust.
-Oh sí, ese es muy bueno. Pero si te gusta mucho la carne mejor el que pedí-le complementó Horror.
Mire lo que contenía el 4: Como entrante tenía una ensalada mixta y el plato fuerte era un gran plato de espaguetis a la carbonara junto unas albóndigas. Me parecía muy bueno así que opte por ese. A continuación, me toco decidir que bebería, todos habían pedido cerveza y yo no sabía bien que pedir, nunca he sido de beber este tipo de cosas y las pocas veces que lo he hecho han sido…Difíciles.
-Vamos, deberías pedir un trago de cerveza, aquí la tienen muy buena-me dijo Fell.
-O quizás no sea resistente al alcohol-incoó Killer.
-No es por eso...-sonreí-Pero tomare igual-dije finalmente.
-Así se habla-me dijo contento Fell zarandeándome suavemente con júbilo.
Luego de realizar el pedido, esperamos un par de minutos y trajeron las jarras de cerveza. El de las cuencas completamente oscuras se quedaba expectante porque bebiera, tenía mis dudas, pero esa mirada solo me hacía querer demostrarle que se equivocaba. Empecé a beber suavemente aquello, el amargo sabor de la cebada no me resultaba del todo agradable. Solo bebí hasta la mitad y la deje en la mesa, los demás continuaron, miraba a veces a mi izquierda, Error igual se lo había acabado.
Así siguieron llegando las jarras de cervezas hasta que vino la comida. Cuando tuve el plato delante mío me sentía algo mareada, comí tres bocados y tuve que ir al baño a refrescarme un poco. Pasé por arriba de mi superior con cuidado de no caerme arriba suyo y salí con tranquilidad por la puerta. Mi cara me ardía, no pensé que el alcohol me hiciera sentir de esta manera en tan poco tiempo. Entro al baño y abro la llave del lavamanos, recogía un poco de agua con mis manos y me la echo en la cara. Lo hice como tres veces más y miré mi reflejo en el espejo. El poco maquillaje que me puse se había caído con el agua, me lo fui quitando con ayuda de un poco de papel que tenían para secarse las manos colgando en la pared. Me arreglé el cabello y salí, me detuve al lado del baño secándome las manos con uno de los papeles hasta que repentinamente alguien choca conmigo.
-¿Cuidado! ¿Qué no ves? -exclama quién me había chocado, era una monstruo tipo ave humanoide.
Iba acompañada de otras más, una felina y la otra parecía humana, pero con la piel azul y el pelo blanco.
-Disculpa, pero yo estaba aquí parada, tu eres la que no vio-le respondí a lo que su cara más se tensó.
-Por eso detesto a los humanos, son tan idiotas-insulto a lo que me di la vuelta para ignorarla y seguir.
Ella me retiene por el brazo, negándose a soltarme hasta que no le pagara por los daños.
-Lo siento, pero no y ya suélteme-moví mi brazo con fuerza y me libré de su agarre.
-Tienes que compensarla por su vestido-dijo el monstruo felino.
-No lo haré, no es mi culpa que ella se haya chocado conmigo-le respondí de vuelta.
-Escucha bien, tonta humana, pagaras por las buenas o-me empuja por el hombros-por las malas.
-No me vuelvas a tocar-le advertí, estaba muy molesta y mareada todavía.
- ¿Qué pasa…-vuele a hacerlo-Si lo hago? -cuando volvió a tocarme le detuve la mano y se la aparte.
-Detente ahora-dije.
Su otra compañera me empuja a la par que me reclama y acabo chocando de espaldas con alguien. ¨No de nuevo¨ pensé sintiendo una mano en mi hombro izquierdo, miré a aquel sujeto y era mi superior, fumando su cigarrillo y observando todo con ese aire helado característico de él.
-¿Haciendo amigos T/N?-pregunto sarcástico.
-Claro no-le respondí rápidamente.
-Esta tonta nos debe dinero por esto-dijo con arrogancia señalando la mancha en su vestido.
Las demás le apoyaron, parecían unas urracas hablando una tras la otra mientras yo me mantenía junto con mi superior. Este último interrumpe las palabrerías con una simple frase:
-Maldición, hay mucho ruido aquí-me mira y sin dejar mi hombro me guía a su lado-Regresemos con los demás, detesto los sonidos fuertes-nos damos media vuelta y caminamos de regreso.
Ellas continuaron por un par de minutos más y terminaron yéndose ofendidas, vi sonriendo de lado a mi superior al mismo tiempo que le daba una calada a su cigarro. Se veía tan bien como siempre.
-Sí que te gusta causar una buena impresión-menciona sarcásticamente.
-Simplemente estaba parada ahí y ella choco conmigo-le dije devuelta.
-Parece que no eres la única despistada aquí-se burla sonriente.
-Ah sí, creo que si-exprese, ¿acaba de bromear?
Me sentía muy confundida con ello.
Seguimos caminando hasta que nos detuvimos en la puerta de la habitación, antes de que pudiera abrir la puerta el me detiene. Suelta el cabo de cigarro en un cenicero que se hallaba junto la puerta y me dice.
-Antes de que entremos, tengo que decirte algo-suelta poco a poco el humo-No tienes que estar bebiendo sino quieres. Ni siquiera sé cuan resistente eres ante el alcohol.
-Eso no es un problema-le respondí ante su preocupación.
-¿Segura? -soltó con tono de desconfianza-Espero que no des más problemas, menos con ellos.
Hizo un gesto con la cabeza señalando adentro. Sabía lo que quería decir y me enojaba esa actitud suya ahora, como si fuera mi niñero.
-No te preocupes, se perfectamente cuál es mi limite-le respondí y entre.
Me senté junto a Fell y comencé a disfrutar de mi comida, a pesar de lo que le había dicho me sentía tan molesta que seguí bebiendo sin que nada me importara. Ellos empezaron a bromear y como si la timidez se hubiera ido me incluía en sus charlas. Reía con ellos y hablábamos de diferentes cosas, pude conocer más cosas acerca de los demás, Killer se controló con sus comentarios y Fell, bueno, el simplemente actuaba más jovial que siempre. Con cada copa que bebía, más rara me sentía, pero trate de que no se me notara mucho, que él no lo notara.
Eso continuo un largo tiempo, en cierto momento me quede en silencio a recostada al asiento mientras observaba la habitación, Killer había salido con Horror y Dust por un rato, creo que querían tomar un poco de aire fresco. Mientras Cross creo ya se estaba quedando medio dormido, Fell buscaba el mando para cambiar la música, como no le encontró salió a hablar con algún encargado. Una canción con un ritmo suave empezó a escucharse, mi vista se desviaba a Error, se hallaba tomando un trago de su bebida. Apoya su brazo sobre el espaldar del asiento y tenía algo desabotonada la camisa, se veía tan sexy que mi corazón latía como si quisiese salírseme del pecho. A pesar de los efectos de la bebida, podía percibir que me sonrojaba, mi cuerpo ardía por una rara necesidad de su atención que emanaba fuertemente de mi interior. Pareciese que su presencia a mi lado desordena mis sentimientos, los alborota de tal forma que me siento intranquila; "creo que ya estoy ebria" pensé desviando la vista a la mesa, estaba tan agotada y mareada que los ojos se me fueron cerrando.
Mis intentos por mantenerme despierta fueron inútiles, llegue a un estado de estar dormida y a despertarme para estar consciente por momentos. Muchas veces escuchaba una voz llamarme o decir algunas cosas, la voz profunda de mi superior, era como una melodía escuchar mi nombre provenir de su boca. Además, pude percatarme de un olor que me resultaba tan conocido, se hallaba mezclado con unas notas leves de perfume, por alguna rara razón me gustaba. Mis ojos se entreabrieron en una ocasión y vi que me desplazaba por la calle. Luego de ello no recuerdo más nada hasta que me desperté y me encontré en mi habitación.
Me levante alarmada y extrañada de mi cama, seguía todavía con la ropa del trabajo y me preguntaba cómo había llegado a aquí. Salí de mi cuarto y busqué a mi compañera, ella me explica que un compañero de trabajo me llamo usando mi celular y que me cargo hasta el departamento. En seguida le pregunte quien había sido y me dijo que no le había dicho el nombre, simplemente me hizo una descripción: Un esqueleto oscuro con marcas azules bajos sus cuencas.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro