Narra Ofelia Blues

—Contento ahora déjame trabajar.

Salí de la barra, subí las escaleras para salir del bar me metí por la cocina y allí se encontraba mi mejor amigo me acerque a él y lo abraza por detrás, él se encontraba lavando los trastes muy concentrado y cuando siento mi abrazo dejo de hacer su trabajo para girase y seguir abrazándome de frente.

—¿Que fue lo que pasó pequeña? —susurro sobre mi oído.

—Me han invitado una copa y me sentí como una puta —susurre.

—Maldita sea Lia, no debes tomar copas son horas de trabajo.

—Lo se, pero no podía dejarlo así, podría reportarme y quedarme sin trabajo.

—Yo te cubro, ve a casa y trata de descansar hoy no fue tu día pequeña traviesa.

—Gracias grandulón —me burle.

—Aahh —se tocó su pecho—. Me has ofendido.

—Y no soy Lia Luke, soy Ofelia.

Los dos nos burlamos y me despedí de Luke mi mejor amigo, cuando estaba con él mi vida era otra cosas se alegraba mi corazón y me sentí especial.

Pase por los casilleros de empleados y abrí el mío y saqué mi mochila después salí por la puerta de atrás al abrirla me recorrió un frío intenso, se sentía el invierno aproximarse.

Cuando salgo completamente, mi mirada viaja a el chico de la máscara sentado gusto a lado de la puerta trasera.

—Te esperaba —se levanta y se acerca.

Mi cuerpo estaba parálisado no sabía que hacer, pensé que se quedaría en aquel trajo todo.

—¿Que es lo que quieres?

—Que salgas conmigo.

—Pero ni siquiera te conozco, estás detrás de esa máscara estúpida.

—Quieres saber quién soy —cuestiono.

—Claro que quiero.

—Si quieres saberlo te veré después de clases en el salón en donde nadie entra.

—¿Ese salón donde todos van a hacer cochinadas?

—Que descripción tan más directa.

—¿Y cómo sabes de ese salón?

—Puede que estudie en tu escuela —termino de decir guiñandome su ojo derecho.

—Te veré allí —termine de decirlo y camine por la calle pero me detuve al escucharlo.

—Te llevo

—No gracias, puede que seas un secuestrador y me violes y mates.

—Ooww que mala prespectiva tienes de mi.

—Se con quién debo ir, y contigo no lo haré.

Sin darme cuenta el tomo mi mano y tiro de mi llevándome a su coche.

—Es muy noche para que tomes un transporte.

—Claro papi llévame a casa.

se burló de aquel apodo. —Me gusta ese apodo —termino de decir en carcajadas.

—Estupido.

—Oye esa boquita.

—¿Es preciosa no lo crees?

—Claro que sí, muero por besarla.

—Hijo de puta —me solté de sus agarre y le solté una cachetada para terminar golpeadolo en sus partes.

—Aagghh creo que debería ahorrarme ese tipo de comentarios.

—Así es estúpido, te cuidado.

Abrí la puerta de copiloto y me subí el espero un poco afuera pero después de unos segundo subío a su auto colocandose el cinturón de seguridad, opte por hacerlo también.

—A la residencia cierto —cuestiono el chico aún con la máscara.

—¿Por qué no te quitas la máscara?

—¿Tanta curiosidad tienes?

—No lo se, al menos cuando te encuentre por la calle te saludaré.

—Prefiero que no lo hagas.

—Entonces no lo haré.

—Puedes hacerme cinco preguntas pero a cambio te haré también las preguntas.

—De acuerdo.

—Comienzo, Cómo te llamas —cuestiono él.

—Ofelia Blues ¿Cómo te llamas tu?

—Blake...

—¿Solo Blake?, Sabes lo difícil que será saber de ti.

—¿Tan pronto quieres saber de mí?, ya lo se soy perfecto e inresistible.

—Deja me burló un momento ¿Si? —comence a reír.

—Por qué trabajas —pregunto Blake.

—No tengo apoyo de nadie —respondí dando una sonrisa triste.