| ¿Por qué? | ☆ Cap 2°
Hola mis niños, ya les traje otro capítulo, la escuela últimamente me ha estado molestando durante estas semanas y no me dio tiempo de traerles su comida, perdón por eso, disfruten el capítulo ♡
Tus ojos se abrieron con dificultad al sentir una fuerte luz dar contra tu cara, al abrir los ojos viste la silueta de alguien que conocías... Era él, era tu novio, él extendía su mano hacia ti, sentiste un nudo en la garganta, ¿Realmente era él? Extendiste tu mano con dificultad, rogabas que realmente fuera él, que fuera ese chico que en algún momento llegó a hacerte feliz, el chico que más amaste en tu vida. Tus ojos se cristalizaron mientras tu mano se acercaba a la suya, mientras más de acercabas más podías sentir las ansias de volver a tenerlo contigo, volver a sentir su tacto de nuevo, poder sentirte amada otra vez. Desde que tu novio murió por culpa de la Raiden Shogun, quien lo encontró y le dio el mismo destino que su mejor amigo, Tomo, no pudiste seguir viviendo en Inazuma, no solo por la muerte de Kaedehara, si no por que oíste rumores por ahí de que Raiden Shogun te buscaba para hacerte lo mismo, no sabías que tipo de fetiche tenía con matar a la gente pero lo que sí sabías es que ella tenía un "hermano", llamado Kunikuzushi o algo así, dicen que ese niño se volvió un Fatui, quizás ese chico que te secuestro haya sido él, no podías estar segura de ello; puesto que, nunca lo viste en persona ni nada similar o por el estilo. Te pusiste a analizar todo eso en tu cabeza, mientras estabas a milímetros de tocar la mano de tu amado, volviste al trance de tu cerebro al escuchar su voz... Antes de llegar a sentir su tacto con el tuyo sentiste como te sacudían, tomándote por los hombros muy bruscamente.
— Creo que se murió — Dijo la jovencita que estaba al costado del joven que te sacudía bruscamente.
— ¿Tú crees? — Proclamó el joven. — Pues no creo que ella uhm...- — La chica se detuvo al ver que abrías lentamente tus ojos y viste como se iluminaban.
— ¡Si está viva! — Dijo la chica con entusiasmo, no sabías quien era; sin embargo, viste que sus ojos eran de un color verdoso fino y tenía... ¿2 colas? su cabello era color rubio ceniza pálido, parecía un tipo de Yokai extraño...
— Tranquilízate, Kirara... — Dijo el joven, a él lo viste con más detenimiento, su cabello era rubio también, solo que era un rubio más vívido, ojos de la misma tonalidad de rubio, su vestimenta era bastante peculiar, siendo sincera, te sería bastante difícil describirlo.
— Aether, ¿Cómo dijiste que la encontraste? — Pregunto la de ojos verdosos, ¿"Encontrarte"? No sabías a qué se referían, estabas bastante confundida con la situación, no sabías ni que día era o en que año estaban, estabas mareada y aturdida.
— Bueno, como te comenté anteriormente, la encontré tirada no muy lejos de Tatarasuna y me preocupé, no creí que ella fuese capaz de soportar tanta energía eléctrica, así que la traje aquí. — Dijo el de cabello rubio, pero... ¿Qué era Tatarasuna? No sabías donde se encontraba ni nada por el estilo... Tal vez sea donde ese chico "Scaramouche" encerraba a sus 'víctimas' o como sea que él llamara a las personas que secuestrara...
Por un momento te pusiste a reflexionar, ¿Por qué te eligió a ti y no a otra persona? Era interesante el simple hecho de asimilarlo de esa manera... Saliste de tu mundo por un momento al sentir la agitación de algo enfrente tuyo.
— ¿Hoooola? ¡Teyvat llamando a la realidad! — Dijo la chica, agitando su mano en frente de ti, volviste a concentrarte en tu entorno de nuevo.
— Tranquila, Kirara... — Dijo el de cabellos rubios, intentando calmar a la chica que aún tenía su mano frente a tu cara
Viste a los dos jóvenes aún algo confundida. — Uh... ¿Qué hago aquí? Y- ¿Quiénes son ustedes? — Dijiste con incredulidad. —Oh, disculpa la grosería... Soy Aether, y ella es- — El chico no logró completar la palabra; puesto que, la chica al instante lo interrumpió. — ¡Soy Kirara! Es un gusto, jiji — Dijo la de ojos verdes, denotaste entusiasmo y energía en su tonalidad de voz, te parecía algo... Irritante lo activa y enérgica que era.
— Uh... ¿Ok? Saben como llegar a Sumeru? — Preguntaste, los dos jóvenes se miraron. Kirara por su parte negó con la cabeza, el final ella era de Inazuma y solo conocía Liyue por haber ido de vacaciones allí; sin embargo, Aether sí conocía Sumeru. — Yo podría llevarte, si no es molestia... — Dijo el de cabellos rubios, un leve rubor se formaba en sus mejillas respecto a la propuesta, quizás solo le daba algo de vergüenza o le avergonzaba el hecho de estar cerca tuyo, no lo sabías por completo de todas maneras.
— Claro, me gustaría que me lleves a Sumeru. — Dijiste mientras le dirigías una leve sonrisa al chico, este te sonrió de vuelta. — ¡Bien! Entonces mañana salimos en la mañana. — Dijo el de cabello rubio. Odiabas el hecho de despertarte temprano, pues tu horario de sueño estaba bastante alterado... Dormías muy poco (4-5 horas), o dormías muchísimo (13-14 horas), ni siquiera tú sabías como funcionaba tu horario de sueño a largo o corto plazo, le rezabas a los arcontes que por favor como mínimo durmieras 7 horas, y eso que era mucho pedir para alguien como tú.
( . . . )
Pasaron los minutos, Kirara de dio una habitación para quedarte a dormir, Aether por su lado se durmió en el sillón de la sala, se veía bastante cómodo pero si te preocupaste un poco. No podías dormir, sabías que era tu maldición por que una semana atrás decidiste faltar a una reunión familiar solo por querer dormir luego de haber leído libros hasta el amanecer, nunca te gusto leer, pero era lo único que hacías en todo el día, a veces te parecía entretenido los libros que leías, te quedabas despierta cuando más pudieras hasta cansarte, no entendías muy bien tu 'raro' comportamiento, pero sabías que era por algo, aún que todavía no descubres el por que.
Sentiste como abrían la puerta de tu habitación, viste los ojos del rubio, pidiéndote que lo siguieras.
Y como no lograbas conciliar el sueño, decidiste acompañarlo, quizás así te daría algo de sueño y volverías a la cama a dormir profunda y cómodamente.
( . . . )
A la mañana siguiente, sentiste como alguien se agitaba de forma regulada, tomándote por los hombros y diciendo — ¡___! ¡Despiértate! — Supiste que era Aether, por un momento olvidaste que debían volver a Sumeru, o bueno, él en este caso te llevaría allí, por lo que debías despertarte temprano para eso, sabías que algo malo sucedería, pero intentaste ignorar ese fuerte sentimiento.
Ya les traje su pancito "diario", espero lo hayan podido disfrutar, las ideas no están circulando en mi cabeza pero de igual forma logré llegar a las mil palabras. Me siento orgullosa de mi propio trabajo ♡
Hanni. 02/08/24
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