26
HOLAAAAA KAJSKDJ.
Disculpen la demora skfjfk, pero ustedes saben que cuando yo demoro lo compenso con un capítulo largo, así que disfruten. 😎💖
Los amo mucho. 💕
Por cierto, una recomendación. En el capítulo pasado (creo xd) yo dije que leyeran las advertencias y recomendaciones que están en la descripción de la historia (o sea, cuando uno recién la va a leer y eso xd), y no lo hice porque sí ksjdk. A partir de aquí van a aparecer ciertas cuestiones que pueden verse algo extrañas e incluso incómodas (weno, eso es dependiendo del punto de vista. En la personal, no hay nada malo, pero uno nunca sabe xdxd), y por eso están las advertencias del inicio. No quiero que algo que sí avisé los tome desprevenidos jajsjdk. Así que, si no han visto todavía lo que se agregó en la descripción de la historia, vayan a chequearlo ahorita antes de leer.💕
Por cierto, si pudieran recomendar esta historia con sus amigos o más people me ayudarían muchísimo. 🥺💕
Por cierto x2, hace poco inició finalmente mi nuevo taekook llamado Rich Love, he publicado el capítulo 1 kajdkd. Si alguien quisiera pasarse a esa historia estaría muy agradecida. 💜
Y eso, espero que disfruten la lectura. ❤️
~~~
YoonGi se sentía bien.
Y decir solo bien era poco para todo lo que estaba sintiendo en realidad.
En las nubes. Eso podría ser lo más cercano.
Pues los labios de JiMin lo hicieron abandonar el planeta tierra apenas estos se toparon con los suyos.
Dios.
YoonGi movía sus labios paulatinamente, y se sentía en un completo trance cuando notaba a JiMin moverse con la misma parsimonia, casi viéndose completamente regocijado ante los sentimientos existentes en los dos.
Se estaban besando. Oh Dios, se estaban besando y ninguno daba la sensación de querer separarse.
No se separen, por favor...
El mayor, quien seguía sosteniendo el rostro del contrario con delicadeza, y con el tacto de las manos de JiMin encima de las suyas, comenzó a moverlas suavemente, en un intento de alejarlas de ahí, todo esto sin dejar de besar al otro. Abrió los ojos apenitas, y quiso sonreír cuando vio al rubio fruncir el ceño, tal vez confundido por el que hubiera quitado las manos de su rostro.
Pero Min no lo hizo porque quisiera separarse. Por supuesto que no. Min YoonGi solo quería tomarlo de la cintura y seguirlo besando como se debía.
Y lo hizo.
Sus manos rodearon sutilmente la cintura ajena y rió poquito cuando notó las manos de JiMin algo vacilantes, tal vez no sabiendo donde colocarlas. Mas el menor no tuvo que pensar mucho en eso al parecer, pues el cuello del YoonGi fue rodeado por aquellas manos, y ahora ambos estaban más juntos que antes, tanto en cuerpo como en alma.
Mientras tanto, JiMin sencillamente se sentía perdido. Tan perdido por las emociones que hacían estragos dentro de su ser, y lo peor —¿o mejor? — de todo era que no deseaba apartarse por nada del mundo.
YoonGi, YoonGi, YoonGi.
Toda su mente estaba tan intoxicada de YoonGi, y JiMin no recordaba si alguna vez se sintió de esa manera; con el corazón latiéndole tan fuerte que dolía, y con tantas de ganas de estar así por más tiempo, que no sabía cómo sentirse al notar que estaba besando a aquella persona que debía odiar con todas sus fuerzas.
Porque se suponía que odiaba a Min YoonGi con todo su ser.
Pero ¿eso importaba ahora?
¿Algo externo siquiera importaba cuando tenía a Min YoonGi besándolo de esa forma y tocando su cuerpo con ese cariño contenido que nunca experimentó antes?
—Hyung... —apenas pudo murmurar mientras abría la boca una vez más a propósito solo para seguir siendo besado.
No obstante, el recuerdo de ciertas peleas vino a su mente como un rayo, y el trance en el que estaba poco a poco se iba difuminando logrando que la realidad volviera a él a pasos lentos.
Y cuando sintió su labio inferior ser mordido con ímpetu, JiMin se vio volver al mundo real, y la pesadez en su estómago fue prueba de que ya se encontraba totalmente consciente y no bajo los hechizos de unos labios tentadores que anteriormente lo habían besado a su antojo.
¡¿Se estaba besando con Min YoonGi!?
¡¿Con Min YoonGi?!
Sorprendido, y con el corazón latiéndole fuerte ahora por el desconcierto, dio un paso para atrás de manera casi brusca, y por ende, se separó del mayor quien todavía parecía seguir en un mundo aparte, pues este abrió los ojos lentamente y comenzó a parpadear viéndose algo confundido.
Un poco más y solo le faltaba mirar a los lados para decir que estaba realmente perdido.
Se quedaron viendo por al menos unos segundos, hasta que un poderoso sonrojo se apoderó de las mejillas de ambos, por lo que voltearon la mirada al mismo tiempo con el propósito de no verse en aquella escena tan vergonzosa.
¿Ahora qué demonios pasaría?
—J-JiMin... —comenzó YoonGi con algo de temor, no sabiendo qué esperar del otro. Pues JiMin tenía los ojos muy abiertos y había comenzado a respirar apresuradamente.
Min conocía esa expresión.
El rubio estaba a punto de entrar en pánico.
—¡¿Q-Qué mierda acabas de hacer?!
Sí, justo lo que temió.
Dio un paso al frente, y el mayor sintió su corazón doler poquito cuando el otro muchacho retrocedió dos, casi pareciendo asustado.
—¡No te me acerques! —JiMin fue claro y firme, y YoonGi tuvo el fuerte impulso de rodar sus ojos porque honestamente, el chico se estaba comportando demasiado exagerado.
Fue ahí que Min supo qué era lo que iba a pasar.
—¿Tienes que hacer tanto escándalo?
—¡¿Acabas de besarme y piensas que me voy a quedar callado?! —expresó Park mientras tragaba saliva de forma dificultosa—. ¿Es que comes plastilina o qué?
—Ahora estás hablando incoherencias.
JiMin quería golpearlo. En serio quería hacerlo.
Porque no era justo que el muchacho en frente suyo estuviera tan tranquilo mientras que él sentía todo un zoológico en su interior. No era justo.
No era malditamente justo ser el único que sintió algo.
Ignorando a su pancita hormiguear y a sus labios cosquillear aún, frunció el ceño y puso su mejor cara de molestia. Todo para hacerle ver al otro que nada de lo anteriormente pasado le había afectado de ninguna forma.
Pero JiMin sabía que sí fue afectado por ello.
—¿Por qué no te dejas de tonterías y me respondes lo que quiero saber?
—Define saber. —YoonGi se encogió de hombros. Ahora él también estaba enojado—. No me has preguntado nada. A no ser que lo de la plastilina fuera real.
Park suspiró fuerte, algo frustrado, y el solo pensamiento de tener que preguntar eso en voz alta le hizo saltar el corazón y nervios llegaron a él nuevamente.
Pero no, no podía dejarse llevar. Tenía que actuar como se debía.
No le des importancia...
No le des importancia...
No le des importancia...
—A ver... —comenzó, alzando un poco el tono de voz—. Responde ahora. ¡¿Por qué mierda me acabas de besar, Min YoonGi?!
YoonGi ahora sabía que debía meterse en aquel papel falso en donde odiaba a Park JiMin con todo su corazón.
Aun si el sentimiento era el contrario.
—¡¿Crees que lo sé?! —casi gritó como pudo, sintiendo su pobre corazón ser estrujado a causa de las conmociones realmente nada agradables—. ¡Mejor cierra tu puta boca!
—¡Imbécil!
Y tal vez YoonGi no debió ser tan iluso.
Y tal vez no debió pensar que las cosas cambiarían una vez que se separaran de aquel beso que lo dejó completamente atontado.
Y tal vez no debió pasar por su mente el pensamiento de dejar todo el odio atrás y comenzar algo nuevo.
Sonrió amargamente, pensando en que nada iba a cambiar.
¿Cómo algo podría cambiar cuando él era una persona demasiado soñadora, y JiMin era... solo JiMin?
El menor, sintiéndose aturdido aún, solo quería huir. Miles de pensamientos cruzaban por su mente, y la mezcla de sensaciones tanto buenas como malas no lo ayudaban a pensar para nada coherente.
Por un lado, esa sensación indescriptible de aquel acto íntimo entre ambos permanecía; mas por el otro, temía lo que pasaría.
¿Min YoonGi se burlaría por haber aceptado su beso? El mayor no lucía como alguien así, pero JiMin ahora no podía pensar con claridad.
Alejarse. Necesitaba alejarse.
—No te me vuelvas a acercar más —expresó JiMin mientras daba pasos para atrás en un intento de irse.
Min lo miró con una ceja alzada y soltó una risita burlona, aquella acción siendo realmente ajena a lo que verdaderamente pasaba en su interior.
—No es como si quisiera hacerlo, Park.
El nombrado solo asintió y se dio media vuelta, y soltando un suspiro por última vez, comenzó a caminar a pasos rápidos con el único fin de alejarse de ese lugar, esperando de algún modo, que en ese sitio se quedaran todos esos sentimientos que parecían abrumarlo y hacerle sentir cosas que hace tiempo no presentaba.
YoonGi miró a JiMin alejarse y mordió sus labios al mismo tiempo que asentía con la cabeza, aun si no entendía nada de lo que había pasado.
Se había besado con JiMin.
¿Y por qué demonios creyó que las cosas acabarían bien después de eso?
Tan iluso.
Caminó un pequeño tramo y acto seguido se sentó en un asiento vacío para después tapar su rostro con sus manos y soltar un gritito ahogado en un intento de expulsar toda la frustración que sentía.
La había cagado. La había cagado completamente y el sentimiento de impotencia era tan grande que YoonGi casi no podía respirar.
¿Por qué demonios lo hizo?
JiMin, por su lado, se sentía demasiado ansioso. Aquel momento entre ambos se repetía una y otra vez en su mente y se odió por completo al sentir mariposas cada vez que lo recordaba.
No se suponía que eso debería pasar.
No se suponía que ese beso debió haberle gustado.
Debió odiarlo, sentirse reacio a ello; pero JiMin se vio a sí mismo queriendo más.
No, no, no.
JiMin no podía volver a sentir algo por alguien. Se lo había prometido a sí mismo, e incluso se lo prometió a su mejor amigo hace años.
Mucho menos sentir algo por su peor enemigo.
Solo... no.
Detuvo su caminata por unos segundos en tanto que sacaba su celular y con manos temblorosas lo desbloqueaba para posteriormente marcar un número que tenía en la sección de favoritos.
—Contesta... Contesta... —susurró mientras movía uno de sus pies contra el piso en un gesto impaciente—. Contesta, por favor.
Por favor...
—¿JiMin? —Escuchó decir al otro lado de la línea, y el aludido casi suspiró fuertemente, sintiendo un poco de paz al fin después de tener toda su cabeza hecha un desastre.
—¿T-Tae? —habló de forma temblorosa—. ¿Estás ocupado?
—¿Minnie? —preguntó el castaño con voz ahora preocupada—. ¿Estás bien? ¿Ocurrió algo?
—¿Estás ocupado? —volvió a preguntar el rubio, ahora temeroso de recibir una respuesta positiva.
—Yo... Estaba haciendo unas cosas, pero dime, ¿necesitas algo?
—¿Puedo ir a tu casa... por favor?
—¿Qué pasa, Minnie? ¿Por qué te escuchas así?
—Tae... —murmuró, casi suplicando.
—Ven. No me encuentro ahora, pero estoy cerca. De igual manera, si llegas antes puedes entrar con las llaves de repuesto. Ya sabes dónde están. —TaeHyung suspiró—. Voy por ti enseguida, ¿sí?
—G-Gracias, Tae. Te quiero mucho.
—Yo más, Minnie querido.
JiMin colgó y caminó más rápido, todo para llegar pronto a la casa de su mejor amigo.
Quería tener un poco de paz en su mente y ver si al menos con algo de compañía, podía olvidar a Min YoonGi aunque sea un poco.
❤️
—Supongo que ya te tienes que ir. —TaeHyung escuchó una voz hablarle, y sintió un nudo en la garganta al asentir con la cabeza. Se acercó unos pasos y posó sus manos en los hombros ajenos, mirando fijamente al contrario.
—Sí, en serio perdón —murmuró—. No me hubiera ido, lo juro, pero es que Minnie sonaba tan... decaído, y yo solo... no puedo...
Sintió un beso en su mejilla.
—No tienes que darme explicaciones, Hyung. Es tu amigo y te necesita.
TaeHyung suspiró, algo más tranquilo, y sonrió muy bonito y con toda la sinceridad posible con el fin de expresarle al otro lo tonto que lo tenía.
Apoyó su frente en la contraria, y cerró los ojos sintiendo un pesar en su pecho, porque realmente no quería irse, pero tampoco podía dejar a su mejor amigo a la deriva. No cuando sonaba así.
—Prometo recompensarlo, ¿sí, JungKookie? —prometió, y el contrario esperaba que aquello fuera cierto—. Te debo una cita, cariño. Y serán dos porque te pediré otra después de que acabe.
JungKook sonrió y mordió sus labios en señal de nerviosismo. Con algo de timidez, tomó las manos ajenas y comenzó a dar caricias al mismo tiempo que miraba a TaeHyung fijamente a los ojos, de alguna manera esperando que el otro muchacho pudiera notar los sentimientos que él todavía no se atrevía a expresar abiertamente.
—TaeTae Hyung... —habló, completamente anonadado—. Dilo otra vez.
Y TaeHyung rió mientras dejaba un beso en su mejilla.
—Cariño —repitió, sonriendo abiertamente cuando vio al otro hacer lo mismo—. Ay, vas a matarme de ternura un día de estos.
El menor rió y aprovechando un momento de distracción, se acercó a dejar un leve beso en los labios ajenos, separándose a los dos segundos y sintiéndose cohibido al notar a TaeHyung sonrojarse fuertemente, no esperando aquello.
Y es que ninguno podía todavía creer lo que habían avanzado en un solo día. En unas horas para ser precisos.
Kook se separó por completo y sonrió muy lindo, intentando que los sentimientos que le daban felicidad sean aquellos que se notaran, y no aquella leve —casi imperceptible— sensación de pesar que se asentó en su pecho en el momento en que escuchó que el chico que le gustaba tenía que irse.
Céntrate en lo bonito...
Nada más que en lo bonito...
Vio a TaeHyung reír en chiquito e hizo lo mismo. Y se sonrojó cuando en menos de un segundo, otro ligero besito fue dejado en su boca.
—Te escribo más tarde, ¿sí, bebé?
JungKook solo asintió y dio un pasito para atrás, y tres segundos después, TaeHyung ya se encontraba fuera de su campo de vista.
Hizo un puchero y agachó la mirada. Cerró los ojos y sacó su celular para llamar a otra persona.
Y quizá se sintió un poco mal de convertirse en aquella persona que llamaba a su amigo cuando la persona que le gustaba se iba, pero JungKook quería un poco de compañía.
—¿Hyung? —habló cuando la llamada fue abierta.
—¿Kook? ¿N-Necesitas algo? —contestó YoonGi al otro lado, y su tono de voz hizo al menor fruncir el ceño.
—¿YoonGi Hyung? ¿Se encuentra bien?
—Sí... —El nombrado se aclaró la garganta—. Todo bien. Yo... solo no he tenido un buen día. Pero nada de qué preocuparse.
JungKook conocía bien a su Hyung favorito, y sabía cuando este le mentía, al menos la mayoría de las veces; por lo que no pudo evitar preocuparse un poco, porque su tono de voz sonaba de todo menos a que estaba bien.
—¿Quiere que vaya allá?
—Por favor... Ven, Kook. Estoy llegando a mi casa.
Y Kook no necesitó otro llamado para ir enseguida en busca de su mejor amigo.
💖
TaeHyung abrió la puerta de su hogar y lo primero que hizo fue ir directamente a su habitación, no sorprendiéndose de ver a JiMin acostado en su cama, pues era común que el rubio se metiera a su casa cuando quisiera, pero sí frunció el ceño al verlo hecho bolita entre sus sábanas.
Como pudo, se recostó a su lado, consiguiendo que el otro se sobresaltara. JiMin alzó la mirada por encima de su hombro, pues se encontraba de espalda, e hizo un puchero que fue tierno para Tae.
—Tardaste... —murmuró, recibiendo una risita en respuesta.
—Lo siento, Minnie. Había mucho tráfico.
TaeHyung se acomodó y lo primero que recibió fue un abrazo por parte de su mejor amigo, abrazo que correspondió enseguida. Se acomodó mejor haciendo que la cabeza del rubio quedara recostada en su pecho mientras que el abrazo permanecía.
—¿Minnie, qué ocurrió? —Y pudo sentir el cuerpo ajeno estremecerse.
La habitación quedó en silencio por unos segundos y Tae comenzó a ponerse nervioso por alguna razón. Temeroso de lo que podría escuchar a continuación, porque si alguien se había atrevido a hacerle daño a su amigo tal como la vez pasada, no sabía de lo que sería capaz de hacer esta vez.
—Hoy alguien me besó. —Finalmente JiMin habló.
Y esa fue toda su explicación.
TaeHyung arrugó la frente al no entender, mas al mismo tiempo tenía muchas dudas en su cabeza.
Park JiMin no era una persona nada romántica. Era arisco como un gatito con absolutamente todo el mundo, y las únicas veces que se metió con personas en ese sentido, fue con el único fin de molestar a Min YoonGi, pues esas personas eran precisamente sus ahora exnovias. Pero Park JiMin hace tiempo que dejó de hacerlo también.
TaeHyung, temiendo lo peor, se separó un poco para tomar el rostro de Park entre sus manos y obligándolo a mirarse fijamente.
—¿Esa persona te obligó?
Y JiMin sintió sonrojarse porque ese beso fue de todo menos obligado.
Su corazón volvió a palpitar de más y las palabras quedaron atascadas en su garganta, logrando que no pudiera hablar. Por lo que, únicamente negó con la cabeza y volvió a colocar su cabeza en el cuello de su amigo, esperando que aquello lo tranquilizara un poco.
—Yo lo besé también... y no debí hacerlo. Tú sabes que yo no...
TaeHyung entendió todo. Por supuesto que lo hizo.
—¿Lo besaste de vuelta? —cuestionó.
JiMin asintió y se aferró más a Kim, esperando que el otro no preguntara de más, a pesar de que ahora deseaba desahogarse más que nada.
Mas no lo hizo.
—Minnie... Te has besado con varias personas antes... ¿Cuál es el problema ahora? —murmuró el castaño con un poco de confusión. Sin embargo, su mente hizo click enseguida, haciendo que tragara saliva y se tensara notablemente—. A no ser que tú...
—¡No! —interrumpió JiMin—. No lo digas. Te lo pido, no lo digas.
"... Hubieras sentido algo."
—JiMin, tú...
—No quiero, Tae... —habló bajito, tan bajito que casi no fue escuchado—. Ya no quiero que nadie me lastime. No quiero. Yo... en serio no lo soportaría una vez más.
Y TaeHyung se sintió tan mal, porque no había visto a este JiMin temeroso desde hace mucho tiempo, e incluso había pensado que no lo vería más. Sin embargo, estaba aquí, aferrándose a él como si buscara su protección, y quiso incluso llorar de frustración, porque a veces olvidaba que Park JiMin realmente cargaba con muchas cosas en su interior, y era tan bueno escondiéndolas que él mismo siendo su mejor amigo no podía notarlas.
No obstante, Tae sabía que JiMin tendría que superar ciertas cuestiones y aprender otras, y una de esas era que no todas las personas eran iguales. No todos eran malos, y por supuesto, no todas hacían daño. Él tendría que decírselo, tendría que hacerle ver esa realidad para que así JiMin saliera del caparazón en el que estaba, ese en el que la única persona buena en el mundo era Kim TaeHyung.
Aun así, el mismo Kim TaeHyung hizo caso omiso a sus pensamientos y sólo se acercó a su mejor amigo para apoyar su frente con la de él al mismo tiempo que tomaba sus manos para besarlas ligeramente. Lo miró, y le sonrió intentando transmitirle alguito de confianza, más que sea un poco.
—Todo estará bien, Minnie. Tata te protegerá por siempre. Lo prometo.
—¿Estarás siempre para mí?
—Siempre para mi Minnie.
Y JiMin soltó unas lagrimitas mientras asentía con la mirada y sonreía, sincero. La opresión en su pecho haciéndose casi nula.
Mas el cosquilleo que se presentaba cada vez que aquel beso venía a su cabeza seguía tan presente que todavía podía recordar con todo detalle lo bien que se sintió ser besado por aquel chico quien se suponía, debía ser su enemigo.
Pero JiMin se había prometido no volverse a enamorar, y estaba dispuesto a cumplirlo.
Y Kim TaeHyung volvió a sentirse mal, porque una vez más, no lo estaba ayudando con únicamente su consuelo. Porque si bien se veía que estaría ahí para él por toda una eternidad, sabía que palabras bonitas y muestras de afecto no ayudarían del todo.
TaeHyung lo sabía, y aun así él no...
—Minnie —llamó—. ¿Puedo saber quién es esa persona?
Arrugó el entrecejo cuando notó al contrario sonrojarse mucho para posteriormente negar con la cabeza y colocarla una vez más en su pecho, quedándose ahí mientras respiraba bajito.
Y quizá Park JiMin no era el único egoísta que quería a su mejor amigo solo para él.
❤️
Min YoonGi estaba caminando a su curso al mismo tiempo que gemía de cansancio. El día anterior, después de lo ocurrido, se dio una maratón de películas con su mejor amigo, quien llegó a su casa unos 15 minutos después de que este avisara que iría. Pudo notar que su menor tampoco se encontraba con el mejor de los ánimos, y aunque se moría por preguntar, al final optó por distraerlo con diferentes actividades, como ver esa dichosa película.
Aunque ninguno de los dos le prestó atención en realidad.
Después de meditarlo cientos de veces, Min decidió que lo de ayer, en efecto, fue un completo error de su parte. Se dejó llevar por lo que había estado sintiendo en todo este tiempo, y su inocente mente había comenzado a hacerse pajaritos en el aire planteando historias de amor que jamás en la vida le pasaría.
JiMin jamás lo vería como algo más que... ¿enemigos? Y después de regañarse hasta el cansancio, decidió que si Park imbécil JiMin quería ver al YoonGi mamón y molesto de antes, entonces lo obtendría.
Nada de tratos bonitos. Nada de palabras de aliento.
Y por supuesto, nada de otro beso.
Min YoonGi se haría el digno y daría la espalda a todos esos sentimientos que se iban acumulando dentro de él cada vez más.
Estaba seguro de que lo conseguiría.
Bueno, casi seguro.
Por lo pronto, se enfocaría en eso importante que pasaba por su mente desde el día de ayer.
Entró la salón y sonrió al ver a su objetivo. Se veía tranquilo e incluso algo agotado. Parecía no haber dormido bien.
Caminó lentamente, casi con cautela, y suspiró bajito cuando llegó al asiento establecido y se posó en frente de él.
Recibió una mirada de desconcierto.
—¿YoonGi Hyung?
—Kim TaeHyung —respondió YoonGi como saludo.
—Buenos días, Hyung —murmuró el menor mientras tallaba sus ojitos con sus dedos y soltaba un bostezo. En serio lucía con sueño—. ¿Qué lo trae por acá?
Oh, cierto, Min tendría que decirle la razón de su visita.
Se sintió avergonzado.
—Tengo que... pedirte algo. —TaeHyung alzó una ceja al escuchar aquello. Okay, Min YoonGi casi no se acercaba a él a no ser que fuera algo extremadamente importante.
—¿Pasó algo malo?
El recuerdo de un beso llenó la mente de YoonGi en menos de un segundo, mas evadió el pensamiento de inmediato y agitó la cabeza para concentrarse una vez más.
—No... Es solo que... —Rayos, esto era más difícil de lo que esperaba—. Tú eres el capitán del equipo de fútbol, ¿no?
Kim ladeó la cabeza, confundido por la pregunta que realmente no esperaba para nada. Mas se encogió de hombros y negó con la cabeza.
—No soy el capitán, Hyung.
—Pero eres el casi capitán. Todos te obedecen a ti y hasta el entrenador te da ciertos privilegios. —El castaño se sonrojó y se encogió poquito.
—P-Pero eso es porque me desempeño bien. No es mi culpa.
—No dije que lo fuera —aclaró Min—. Por esos privilegios que tienes es que sé que puedes ayudarme.
—Te escucho.
Bien, había llegado el momento.
—¿Crees que puedas ayudarme con la lista de los integrantes de todos los equipos y miembros del club deportivo? Sé que tienen una hoja de vida con todos sus datos y eso, pero yo no quiero todo eso. Solo quiero sus nombres y sus fotos... por favor.
Y YoonGi se sonrojó cuando una mirada de extrañeza se asentó en TaeHyung, viéndolo como si tuviera algo extraño en la cara.
No obstante, tres segundos después, el menor soltó una risita y sonrió ampliamente mostrando su característica sonrisa cuadrada al mismo tiempo que se balanceaba de un lado a otro.
—Awww, Hyung —comenzó—. ¿Acaso alguien te llamó la atención en el partido de ayer y quieres conocerlo? Qué lindo~. Aunque admito que no me lo esperaba de usted.
¡¿QUÉ?!
—Oye —habló el aludido—, eso no...
—Pero no te recomiendo que te fijes en los del club de deportes, Hyung. Los chicos ahí son unos completos salvajes y usted es muy bonito para eso.
—Pero yo no-
—¡Pero tengo amigos en el club de arte! Ellos pegarían mejor contigo.
—TaeHyu-
—Si quieres te los presento. Hay uno que se llama Jae-
—¡Kim TaeHyung!
Y automáticamente, el nombrado dejó de hablar.
YoonGi bufó, ahora más avergonzado que antes.
—No es para mí, ¿okay? Hay un... amigo que siente algo por unos de esos chicos, y yo quiero saber quién es.
Silencio.
—¿A JungKook le gusta un chico del equipo de fútbol?
Y Min YoonGi quiso golpearse a sí mismo por no tener más amigos y haber quedado en evidencia en un santiamén.
Se prometió ser más sociable en el futuro.
Iba a hablar, pero parpadeó al ver a TaeHyung soltar una risita mientras se sonrojaba un poco.
Okay, eso era nuevo.
—N-No estoy seguro —respondió—. Pero eso no te incumbe. Quiero saber si mis sospechas son reale-
—Espera ¿sospechas? ¿De qué sospechas hablas?
—¿Qué te importa? —soltó YoonGi mientras golpeaba su pie en el suelo. A veces le frustraba que Kim sea demasiado hablador—. Solo quiero... saber si es verdad.
—Pero Hyung, si JungKook no te ha dicho nada debe tener sus razones. No creo que sea porque... no confía en ti. Debe haber algo más para que no te diga que se está viendo con una persona.
—¿Y qué puede ser? Yo le he dicho que no importa quien sea. Yo lo respetaré porque es mi mejor ami- —YoonGi se interrumpió a sí mismo para después mirarlo de reojo—. Un momento...
TaeHyung parpadeó—. ¿Qué?
—Yo nunca te dije que se estaba viendo con alguien más.
El castaño se tensó considerablemente y sonrió de forma incómoda al mismo tiempo que sentía sus manos sudar y sus piernas ponerse débiles.
—¿Yo dije eso? Je, qué loco. No sé por qué lo hice.
—Kim TaeHyung, ¿hay algo que sabes acerca de este tema?
El menor sintió su garganta seca, y quiso mirar alrededor en busca de alguien que pudiera salvarlo, pero supuso que se vería demasiado sospechoso, por lo que evitó hacerlo. En su lugar, mordió sus labios y su mente solo pensaba en excusas que podría dar, comenzando a descartar hasta que se quedara con la más válida.
—Bueno... —empezó—. Puede que lo haya visto una vez con alguien fuera de clases.
Y casi festeja de alivio cuando vio los ojitos del mayor brillar, atento a la respuesta.
—¡¿En serio?! ¿Pudiste ver quién era?
El castaño se sintió mal por mentir, mas lo siguió haciendo, esta vez sin mirarlo porque realmente tenía vergüenza de hacerlo.
—No pude, lo siento... Ese chico estaba de espaldas.
—Rayos —se quejó el otro—. ¿Y viste si lo trataba bien? No quisiera que JungKook estuviera con alguien que no lo trata como se lo merece.
TaeHyung frunció el ceño, casi luciendo indignado.
—¡Por supuesto que lo trataba bien! Es más, JungKook se veía muy feliz —respondió con ahínco sin poder evitarlo. Después, se encogió de hombros—. O eso fue lo que alcancé a observar.
Bueno, esto ya era sospechoso.
YoonGi jamás había visto a TaeHyung con una expresión de querer acabar la conversación de una vez por todas, y no pasó por alto el que aquello pasara cuando mencionó al otro menor.
Ahora tenía un sospechoso que realmente no esperaba.
¿Sería posible que...?
—Entonces ¿me ayudarás con lo que te dije? —volvió a indagar YoonGi, sin perder más el tiempo.
—¿Se refiere a lo de los nombres y las fotos? —Kim se rió algo incómodo al inicio, pero después asintió—. Está bien, Hyung. Mañana te traeré esos datos que necesitas.
—¿Podría ser hoy? —TaeHyung hizo un puchero ante lo escuchado para después negar con la cabeza. YoonGi comenzó a parpadear consecutivame mientras sonreía—. ¿Por favor?
—Hyung, tus ojitos bonitos no me van a convencer —resopló el menor—. Mañana tengo una reunión con todos los del equipo, me será más sencillo hacerlo ahí porque si lo intento hoy no me dejarán tomar información porque, aunque no lo creas, pedir ese tipo de datos es muy difícil. Mañana estará, ¿sí?
—Aish, está bien. Ah, y también agrega una foto tuya, por favor.
El nombrado boqueó varias veces, luciendo sorprendido. Tampoco pudo evitar sonrojarse.
—¿Y yo por qué?
—Porque eres un miembro del equipo también —explicó el pelinegro—. Y hasta que no descubra quién es el chico que le gusta a JungKook, serás un sospechoso más.
—Pero yo-
—Sin peros, TaeHyung —interrumpió, para después sonreír hasta el punto en que se vieron sus encías—. Muchas gracias, de verdad. Significa mucho para mí.
Pero TaeHyung no le devolvió al sonrisa.
—YoonGi Hyung, ¿qué harás cuando descubras quién es esa persona?
Ay, cierto. La verdad YoonGi no tenía un plan.
—Mmm... No sé, ¿felicitarlo?
—¿Y si es alguien que no te agrada o una persona cercana a alguien que no te agrada?
—Bueno, supongo que ahí se pondría fea la cosa. —YoonGi realmente quería decir que tampoco importaba eso, porque el que estaba saliendo con ese alguien era JungKook, no él; mas respondió lo otro para estar atento a la reacción del muchacho, pues TaeHyung se tensó mucho y las dudas de YoonGi cada vez eran menos.
Pero no podía sacar conclusiones apresuradas sin haber visto nada ni tener pruebas existentes.
TaeHyung volvió a bostezar, llamando la atención del mayor, quien rió en chiquito ante ello.
—¿Te fuiste a dormir muy tarde? —preguntó Min.
—Algo así. Estaba conversando con... una persona y se nos fue la hora.
Así que Kim TaeHyung estaba saliendo con alguien...
—Vaya, ¿nueva pareja? —volvió a preguntar YoonGi, esta vez riendo, atento a absolutamente todo.
Más que atento cuando Kim se sonrojó y al final negó con la cabeza.
—No es mi pareja aún.
Y YoonGi realmente sentía lástima por la persona que se estuviera viendo con aquel chico en frente suyo, porque Kim TaeHyung era la definición de meloso, cursi, amoroso, dramático, y todas esas mierdas que él honestamente odiaba.
—¿Y por qué no le pides que sea tu pareja?
—Es más complicado que eso, Hyung. No lo entenderías.
Y esas palabras fueron las mismas que Jeon JungKook le dijo una vez.
Min YoonGi sentía que estaba a punto de entrar en un colapso, por lo solo negó rápidamente y alzó la mirada con el fin de decir algo. Mas los ojos del menor estaban pendientes en algo detrás de él, y casi se veía aliviado por aquella cuestión.
Estaba a punto de voltearse, hasta que...
—¡Minnie, Buenos días!
Oh.
Por.
Dios.
Min se quedó ahí, estático, incapaz de moverse. Por alguna razón, pensó que estaba siendo un completo cobarde, y como pudo, se volteó lentamente topándose con el joven llamado anteriormente.
Quiso gritar de frustración.
Porque Park JiMin también se veía sorprendido de verlo, y si bien sus ojos fijos en él eran sumamente preciosos, estos lucían incómodos.
YoonGi por un momento pensó que incluso estaba exagerando un poco las cosas.
Es decir, sólo había sido un beso. ¿Qué demonios había de malo en eso?
Park sacudió la cabeza y miró detrás suyo para después esbozar una pequeña sonrisita.
—Tata, buenos días —habló el rubio, y con un ligero temblor en su voz continuó—. B-Buenos días, YoonGi.
Pero YoonGi solo asintió para nuevamente mirar a Tae, esta vez un poco más serio de lo que anteriormente estaba. El poco buen humor que tenía se le había ido en un segundo.
—Hablamos después, TaeHyung. —Y Min, con todo el esfuerzo del mundo, miró al otro chico también—. Hasta luego, Park.
Hacerse el digno...
Hacerse el digno...
Hacerse el digno...
Y joder con hacerse el digno, porque ahora Min YoonGi quería besarlo de nuevo hasta que sus labios y los de JiMin no pudieran más, y tuvo que poner todo su autocontrol para que su cuerpo no se volteara ante la tentación y realizara aquella acción que moría por ser llevada a cabo. Caminó más rápido, y suspiró, sintiéndose triunfante cuando pudo llegar a su asiento sin cometer una cagada más.
JiMin, mientras tanto, estaba demasiado sonrojado y no sabía qué hacer para que el corazón le dejara de latir tan rápido. Mas a pesar de que aquella sensación era muy bonita y agradable, el amargo momento de ayer más la gran cadena de pensamientos dentro de él diciéndole que no se dejara llevar, lo hacían sentir demasiado decaído. Porque quería besar a Min YoonGi y al mismo tiempo golpearlo por hacerle pensar eso.
Porque ahora no sabía dónde estaba el JiMin que siempre sabía qué decir ante una situación inusual, pues el JiMin de ahora no hacía nada más que sonrojarse y ponerse nervioso con un chico que supo sonreírle muy bonito en varias ocasiones y que le dio un beso que lo dejó con ganas de más.
Pero no podía dejarse llevar por todo eso que sentía.
No, no, y no.
Se sentó a un lado de Tae, y colocó su cabeza en la mesa de su pupitre, luciendo casi enfadado, ganando una mirada del otro.
—JiMin —llamó TaeHyung, viéndose un poco inquieto—. ¿Pasó algo con YoonGi Hyung?
Y JiMin, muy cansado, solo se encogió de hombros.
—¿Cuándo no pasa algo con Min YoonGi?
Y aunque su voz sonó fastidiada, su rostro se veía demasiado agotado y TaeHyung decidió no preguntar más al respecto, sencillamente porque no quería abrumar a su mejor amigo de más.
Por lo que, con cautela, se fue acercando un poco más a él y posó su mano en el rubio cabello del contraído para comenzar a dejar leves caricias en un intento de animarlo. Sonrió para sí mismo cuando escuchó un ronroneo bajito y vio una expresión de satisfacción en el rostro ajeno.
Min YoonGi, por su lado, miraba su reloj una y otra vez; faltaban sólo 3 minutos para que el timbre de la primera hora sonara, y su mejor amigo todavía no estaba en su puesto, a su lado. Le marcó, mas este no le contestó y se le hacía demasiado extraña la tardanza puesto a que JungKook siempre era alguien puntual con al menos 15 minutos de anticipación.
Estuvo a punto de llamar una vez más, pero el sonido de unos pasitos rápidos hizo aparición y alzó las cejas al ver al rey de Roma justo en la entrada, con la respiración agitada, la mochila en su mano agarrada de forma descuidada, su cabello algo despeinado, y luciendo prácticamente como si hubiera venido corriendo desde su casa hasta acá.
JungKook llegó rápidamente a su lugar y se sentó como de costumbre. Volteó su mirada topándose con YoonGi, quien no hacía más que mirarlo con ímpetu, y su rostro que denotaba desconcierto e incluso algo de gracia no lo hacía sentir mejor.
—Hyung, buen día —saludó de forma tímida mientras acomodaba sus cosas.
—Buenos días —respondió el mayor de vuelta—. ¿Podrías decirme por qué llegaste tarde? Quiero decir, no te estoy reclamando ni nada, pero es extraño puesto a que eres algo así como una alarma humana. Además tienes ojeras. ¿No pudiste dormir? ¿Pasó algo malo?
Kook se encogió poquito y sintió sonrojarse levemente, por lo que bajó la cabeza y negó de forma lenta para después sonreír.
—No pasó nada, Hyung, solo me quedé dormido y mamá tuvo que levantarme. Yo solo... me dormí tarde porque estuve hablando con alguien y nos nos fijamos en el tiempo.
YoonGi alzó una ceja.
—¿Oh? ¿Ese chico?
Ese chico cuya identidad se hacía más clara para él.
El menor se removió y optó por asentir.
Y nada estaría raro si no fuera porque Min YoonGi ahora sabía que Jeon JungKook no fue la única persona que se desveló ayer hablando con alguien.
Por el amor de Dios...
—Hmm, está bien, Kook. Solo no te vuelvas a desvelar así. Tú necesitas dormir y tu pobre chico también.
... ¿Cómo pudo ser tan ciego?
Y YoonGi sintió su corazón detenerse cuando comenzó a prestar atención a pequeños detalles, y ya en hora de clase, notó claramente como su mejor amigo volteó a ver al pupitre del otro aludido y el castaño ya estaba mirando hacia él con el único fin de dedicarle un guiño y volver a sus asuntos, con una sonrisa de oreja a oreja que por suerte nadie cercano podía ver puesto que el rubio que se sentaba con él se encontraba profundamente dormido. Y si YoonGi no estuviera tan desconcertado por toda la situación, se hubiera muerto de ternura al ver el rostro de Kook sonrojarse con fuerza para después mirar en otra dirección con una sonrisita confidente.
Luciendo tan encantado con ese gesto recibido que Min al final sintió náuseas de lo meloso que todo eso se vio.
¿Qué cosas más habían pasado en ese lapso en el que él se dedicaba a dormir en clases?
Bueno, al menos ya había descubierto su gran misterio, y fue en menos tiempo de lo esperado.
Kim TaeHyung y Jeon JungKook estaban de alguna forma saliendo, y eso era un hecho.
Lo había logrado. Lo había descubierto.
Ahora solo necesitaría pruebas verídicas para demostrar que su teoría era cierta.
Y por supuesto que Min YoonGi las conseguiría.
~~~
AKDJKDKD HOLI AGAIN 🌸
¿Qué les pareció el cap? 🥺💕
Disculpen si tal vez no hubo cosas tAAAAN interesantes, pero les prometo que todo va a cambiar pronto para AMBAS parejas. Mamá, estoy emocionada akdkdkd.
¿Qué creen que pasará ahora que YoonGi descubrió al Taekook? D: Bueno, casi descubrió, aún le falta confirmarlo con sus propios ojitos, y según YoonGi sólo miraditas y guiños no cuentan JAJAJA(?)
Por cierto, quiero hablar del VMin.
Esta relación de amistad es un poco más complicada de lo que se ve, hay demasiado amor y no tan sano que se diga(?), pero quiero aclarar que no es que sean malas personas o algo así, nI LO PIENSEN, SON MASITAS, LO DIGO YO COMO LA MAMÁ, pero están haciendo ciertas cosas de forma incorrecta. Poco a poco van a ir apareciendo ciertos datos que explicarán el porqué JiMinnie y TaeTae actúan así entre ellos. Pero tampoco quiero romantizar que esté bien que se aferren así el uno al otro, por eso digo, hay que esperar nomas xd.
Por eso les dije que leyeran la descripción con sus advertencias, porque puse mención VMin y otra cosilla por ahí. Porque si bien el VMin no tiene absolutamente NADA romántico entre ellos (de una vez lo aclaro), hay y habrá momentos de dudosa procedencia que se pueden volver tantito incómodos(???, pERO DON'T WORRY, que no será para siempre xDDD
¿Qué creen que pasa con ese par? ¿Alguna teoría de que pasó, pasa, y pasará? KAJDKDKD
Por cierto, ¿QUÉ PIENSAN DEL BESO YOONMIN? JSJSKSKKSKSKS
Sé que al final fue medio sad todo, pero les prometo que todo saldrá bien al final JAJAJA
Y eso, y ahora quisiera también que me dijeran qué tal les parece la historia en general hasta ahora. 🥺💕 Le estoy echando muchas ganitas y no saben lo feliz que estoy de que les guste. Gracias por todo el apoyo. ❤️
Asimismo, no olviden que también tengo más fanfics Taekook y YoonMin en mi perfil por si quieren pasar a verlos. 🌸
Y eso, nos vemos 💕
Pd: Un pequeño spoiler que les puedo dar es que vengan súper preparados el siguiente capítulo porque el Taekook oMGGGG KAJDKSJDKDFKDKFKD
AHORA SÍ, BAI JAJAJAJA❤️
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro