26 | "𝐄𝐬𝐭𝐚́𝐧 𝐬𝐚𝐥𝐢𝐞𝐧𝐝𝐨"
Él timbre sonó, tome mis cosas y con Brenda dejamos todo en nuestros casilleros. Caminamos hasta la cafetería y después de sacar algunos snacks de la máquina expendedora, nos sentamos en la mesa de siempre.
Me contó sobre una historia de Wattpad que había leído y la hizo llorar muchísimo con el final, me dijo el nombre pero no entendí bien. Mientras me hablaba animadamente desvío su mirada a mis espaldas y se puso totalmente seria.
Me gire para ver lo que la había puesto así e inmediatamente un nudo del tamaño de una nuez se formó en mi garganta.
Una morena de cabello largo, sonrisa encantadora y de silueta perfecta, estaba sentada en las piernas de James. Ambos se reían de algo que veían en su móvil.
Conocía perfectamente a la chica, su nombre era Caroline Nereida y la mayoría en preparatoria la llamaban "La zorra"
No tenía buena reputación, siempre se la veía andar con chicos diferentes todo el tiempo y eso dejaba mucho de que hablar.
-¿Qué hace tu hermano con Caroline?- la pregunta se escapó de mis labios.
-La maldita zorra y él, están saliendo.- dijo apretando los dientes.
Mi corazón se rompió al escuchar esas palabras y sentí una punzada en mi pecho.
-¿Qué?- trate de calmarme. -¿Cuando paso todo esto?
-El sábado.- dijo mirando hacía otra parte. -Cuando te fuiste, ella llegó y se la presentó a mi madre.
Mi mirada todavía estaba encima de los dos, los cuales no dejaban de reír.
Hace mucho tiempo no lo veía de esa manera, parecía feliz junto a ella y eso me lastimaba, me dolía profundamente.
-Dijeron que llevaban un mes viéndose y después de una larga espera, James le pidió de ser novios a lo que ella aceptó encantada como vez...
Él corazón se me encogió, mis ojos picaba amenazando con soltar lágrimas gruesas y pesadas, cargadas de tristeza.
Respire profundamente para no echarme a llorar. Me levanté y me disculpe con Brenda diciéndole que iva al baño.
Me marché pero antes de adentrarme en el pasillo volví a observarlos y mi respiración se detuvo al ver cómo sus ojos celestes me dedicaron una mirada que no duro más de dos segundos y luego fue besado por su novia.
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