La lluvia golpeaba afuera mientras Jinsoul miraba por la ventana. Estaba sentada en su clase de Biología y apenas escuchaba lo que fuera que decía el profesor. Tal vez si ponía atención podría hacerlo bien en la prueba que iban a tener a la mañana siguiente, pero a la rubia no le importaba. Realmente sentía que sus esfuerzos eran inútiles y que no tenía mucho sentido hacer nada.

Continuó viendo caer la lluvia mientras la voz del profesor se oía de fondo. Sus ojos color caramelo parecían distantes. Aunque estaba físicamente en la habitación, mentalmente, estaba de regreso en casa pensando en el encuentro que había tenido con su madre la noche anterior. Ella suspiró profundamente, la culpa la devoraba al saber que le traía a su madre una cantidad excesiva de estrés. No era justo. Jinsoul sabía que tenía que estar más agradecida con ella, después de todo, era la única familia que le quedaba.

"Recuerden que la prueba comienza a las 9 am, así que asegúrense de llegar temprano". Jinsoul escuchó a su profesor decir e instantáneamente volvió en sí.

A su alrededor, los estudiantes estaban guardando sus cosas y comenzaban a dirigirse hacia la puerta. Jinsoul concluyó que la clase había terminado, soltó un suspiro de alivio mientras seguía a la pequeña multitud de personas que salían.

Salió del aula, caminando por el pasillo. Su teléfono en su bolsillo izquierdo comenzó a sonar. Metió una mano para sacarlo, mirando el identificador de llamadas vio que era Eunbi, ya sabía para qué la estaba llamando, así que decidió ignorarla. Simplemente no estaba de humor para estar rodeada de gente en este momento.

Su teléfono sonó de nuevo y Jinsoul siguió caminando, fingiendo no escucharlo mientras se abría paso entre las personas que quedaban en los pasillos.

En el segundo en que salió, el aguacero la golpeó.

Viviendo en una ciudad como Appleton, uno pensaría que cualquier persona sabía que debía tener un paraguas a mano siempre. Pero este no era el caso de Jinsoul. Constantemente se mojaba ya que los fuertes aguaceros de la ciudad siempre la tomaban desprevenida. Sin embargo, sin importar la frecuencia con la que ocurriera, simplemente no podía molestarse en estar preparada.

El campus comenzaba a escasear a esta hora del día. No muchas personas tomaban clases nocturnas, la mayoría de los estudiantes preferían tener su última clase por la tarde para tener el resto del día para ellos. Sin embargo, a Jinsoul no le importaba; cualquier cosa para mantenerla fuera de su casa y la mirada atenta de su madre era lo suficientemente buena para ella.

Ahora estaba en el estacionamiento principal del campus, ubicó su auto en su espacio de estacionamiento habitual. Entró, abrochándose el cinturón de seguridad antes de salir del estacionamiento. No se dirigió a casa, sino que condujo hasta el aparcamiento más desierto del campus: el de la biblioteca. Casi nadie usaba ese estacionamiento, ella venía cuando quería que la dejaran sola. Haciendo una revisión rápida para asegurarse de que no hubiera nadie a su alrededor, la rubia metió la mano en su mochila, que había colocado en el asiento del pasajero, y sacó un cigarrillo.

En ese momento su teléfono sonó, sorprendiéndola. Ella miró hacia abajo para ver que era un mensaje de Eunbi preguntándole dónde estaba e informándole que iban a fumar en su lugar habitual en el bosque detrás del Colegio.

La chica ignoró completamente el mensaje de texto y encendió el cigarrillo mientras inhalaba profundamente. Bajó el cigarro un par de veces más mientras sentía que su cabeza se mareaba y las tensiones que estaban constantemente en todo su cuerpo comenzaban a disminuir. Al instante se sintió más relajada.

Jinsoul se quedó en el estacionamiento de la biblioteca fumando, escuchando la lluvia afuera y sintiéndose cada vez más mareada. Sus párpados comenzaron a sentirse pesados, un efecto secundario de estar drogada tan rápido. La rubia tiró el cigarrillo a un lado antes de cerrar los ojos y quedarse dormida.

***

"¡Oye!"

Jinsoul mantuvo los ojos cerrados eligiendo ignorar a la persona que llamaba a su lado, con suerte, si la ignoraba el tiempo suficiente, simplemente se iría.

Desafortunadamente para ella, la persona comenzó a golpear el costado del auto. La rubia realmente quería seguir durmiendo, pero decidió no hacerlo por temor a que su querido auto sufriera aún más daños.

"Está bien, está bien". Jinsoul dijo abriendo los ojos y levantando las manos en señal de derrota mientras se volvía para mirar a la persona que estaba fuera de su ventana.

Bajó la ventanilla e instantáneamente se encontró cara a cara con una chica. Parecía familiar y Jinsoul reconoció instantáneamente a la chica de la clase de biología. Por lo general, se sentaba al frente y siempre respondía preguntas durante la clase. No podía recordar su nombre, pero ahora la miraba con los ojos entrecerrados, bajo un enorme paraguas negro, la lluvia caía a su alrededor.

"Um, ¿puedo ayudarte?" Preguntó Jinsoul, parpadeando, todavía estaba bastante drogada y la cara de la chica parecía girar.

"¿No te vas a ir a casa?" La chica dijo mirando a Jinsoul a través de la ventana del auto, "es bastante tarde".

Jinsoul miró el reloj en su tablero y vio que ya era pasada la medianoche. Se dio cuenta de que incluso si quisiera no podía ir a casa, su madre se enojaría si la veía en este estado. Después de todo, ayer mismo le había advertido que no lo hiciera.

"Espera un minuto." La chica de afuera dijo de repente, se inclinó hacia Jinsoul y olfateó el aire, "¿estás drogada?"

Ella arrugó la cara con disgusto mientras negaba con la cabeza.

"¿Qué eres? ¿Mi mamá?" Jinsoul replicó con dureza.

En ese momento sonó el estruendo de un trueno y Jinsoul vio como la chica saltaba del susto.

"Como sea." La chica murmuró un poco avergonzada mientras se apartaba de la rubia y comenzaba a alejarse.

Jinsoul la miró, sintiéndose extremadamente mareada.

"¡Espera!" Jinsoul gritó saliendo de su auto bajo el aguacero.

Si la chica la había oído o no, no lo supo porque continuaba alejándose. Todo estaba oscuro, la única iluminación provenía de algunas luces de la calle y la luna llena más adelante.

Jinsoul gimió mientras agachaba un poco la cabeza bajo la lluvia y aceleraba el paso para intentar alcanzar a la chica.

Hubo otro trueno y esta vez Jinsoul saltó levemente. Refunfuñó para sí misma y comenzó a acelerar su paso, su cabello y ropa estaban empapados y pegados a su cuerpo.

"¡Por favor espera!" Jinsoul gritó una vez más a través del fuerte golpeteo de la lluvia, "¡Necesito preguntarte algo!"

Jinsoul vio como la chica finalmente se detuvo y se dio la vuelta. Estaba de pie junto a la estatua de Tom Appleton, el hombre que se había establecido por primera vez en la pequeña ciudad hace unos 200 años. La estatua estaba hecha completamente de hierro y medía 3 metros de alto, estatuas similares como esta estaban esparcidas por toda la ciudad de Appleton. En la mayoría de las estatuas estaba sentado leyendo un libro y tenía gafas puestas. En esta, sin embargo, Appleton estaba de pie con los brazos extendidos y una sonrisa extrañamente esculpida en su rostro.

"Bien." Dijo la chica cuando Jinsoul finalmente se dirigió a donde ella estaba parada. Estaba empapada y la chica extendió generosamente su brazo para que el paraguas protegiera a la rubia también. "Jung Jinsoul, ¿no es así?"

"Solo Jinsoul." La mencionada dijo secamente, corrigiéndola.

"Está bien, solo Jinsoul." la chica pareció volverse más irritable, "¿qué quieres?"

Jinsoul se fijó en los rasgos de la chica con la que estaba ahora frente a frente. La chica era de piel bastante clara y ojos cafés. Tenía el cabello rubio. Miró la ropa que ambas estaban usando. Parecían tan fuera de lugar dado que estaban paradas bajo una lluvia torrencial alrededor de la 1 de la mañana.

"Hey." La chica dijo, arrastrando la palabra, "¿Sabes hablar?"

Jinsoul se contuvo de poner los ojos en blanco sabiendo que no le haría ningún bien por lo que estaba a punto de preguntar.

"Estás en mi clase de biología, ¿no?" Preguntó Jinsoul aunque ya sabía la respuesta, "Me preguntaba si habías hecho como una hoja de repaso o una guía de estudio para el examen de mañana-"

Jinsoul se quedó callada cuando vio la expresión en el rostro de la chica.

"¿Cuál es mi nombre?" Dijo la chica de repente.

¿Qué?

"¿Cuál es mi nombre?" Repitió.

Jinsoul parpadeó sin comprender y se preguntó si esto era una broma. Sabía que había escuchado el nombre de la chica un par de veces, pero generalmente no era buena con los nombres. Y, francamente, estaba demasiado drogada para hacer conjeturas inteligentes.

La chica frente a ella se burló y negó con la cabeza. "¿Ni siquiera sabes mi nombre, pero quieres usar mis notas para el examen de mañana? Las personas como tú son las peores, no te preocupas por los demás, solo los usas donde mejor te parezca".

Jinsoul parpadeó mientras miraba a la chica, no podía comprender lo que estaba pasando. Todo lo que había pedido era que le prestara sus notas, ¿por qué se estaba volviendo loca?

"Trabajo muy duro". La chica dijo exasperada: "Trabajo muy duro. Presto atención en clase, estudio, hago mi tarea. Y la gente como tú que hace poco o ningún esfuerzo se me acerca y trata de sacar provecho de mi arduo trabajo. Seguro que tienes todo resuelto. No eres más que una chica privilegiada con cara bonita, nada que no haya visto antes, conozco tu tipo".

"No soy privilegiada, no valgo ni un centavo." Jinsoul dijo mientras una sonrisa crecía en su rostro, "Pero lo de 'cara bonita' te lo concedo".

La chica frente a ella de repente se sintió realmente estúpida por juzgar apresuradamente, arrastrándose nerviosamente sobre sus pies.

"Entonces, um, ¿el resumen?" Preguntó Jinsoul.

Honestamente, estaba empezando a sentir un dolor de cabeza y no podía molestarse en lidiar con las nociones preconcebidas que la chica tenía de ella.

La chica la miró fijamente por un momento y luego suspiró mientras le entregaba el paraguas a Jinsoul y comenzaba a escarbar en su bolso. Jinsoul sostuvo el paraguas con fuerza mientras se inclinaba y se acomodaba contra la estatua de Tom Appleton.

La chica encontró el papel que estaba buscando y se lo mostró a Jinsoul, "Toma una foto con tu teléfono porque necesito usar esto para estudiar".

La mencionada asintió con la cabeza y extendió la mano para tomar el papel de la mano de la chica. Justo cuando lo hizo, sucedió algo raro.

Hubo un rugido de trueno seguido de un relámpago que pareció convertir todo el cielo en un color plateado violáceo. Jinsoul observó con asombro cómo el rayo golpeó la estatua de Tom Appleton en la que estaba apoyada, sintió una corriente correr a través de ella y vio con horror cómo el papel que le entregaban se incendiaba.

La chica soltó un pequeño grito. Jinsoul dejó caer el paraguas de su mano y agarró a la chica, alejándola de las llamas mientras tiraba el papel lejos de ambas. La corriente que Jinsoul había sentido hace unos momentos ahora la sentía la chica frente a ella, que estaba paralizada mientras su labio inferior temblaba ligeramente.

Hubo otro fuerte trueno y parecía que una fuerza invisible se había interpuesto entre las dos mientras ambas se lanzaban hacia atrás en direcciones opuestas. Jinsoul tropezó, pero pudo recuperar el equilibrio mientras la otra chica cayó al suelo. Se levantó lentamente del suelo húmedo, mientras la lluvia caía silenciosamente a su alrededor, preguntándose qué era lo que había ocurrido.

"¿Sentiste eso?" Jinsoul preguntó con incredulidad, "o simplemente estoy mucho más drogada de lo que pensaba".

La otra chica de repente se sintió realmente extraña. Una expresión de molestia apareció en su rostro. Había perdido suficiente tiempo hablando con Jinsoul cuando debería estar en la biblioteca estudiando, pero ahora ni siquiera tenía un resumen, ya que de alguna manera se había prendido fuego.

"Oye, ¿estás bien?" Dijo Jinsoul, notando la mirada que se extendía por el rostro de la chica.

La chica miró hacia arriba. "¡Esto es tu culpa! ¿Por qué diablos te apoyas en una estatua de hierro durante una tormenta?"

Jinsoul tuvo que admitir que la chica tenía razón. De repente se sintió terrible al saber que su resumen fue destruido y que básicamente fue su culpa, "Lo siento. La verdad es q-"

"¡Déjame en paz!" gritó la chica enojada mientras giraba sobre sus talones y comenzaba a caminar hacia la entrada de la biblioteca. La lluvia caía sobre ella pero no se molestó en darse la vuelta y recuperar su paraguas. Si se hubiera dado la vuelta, habría descubierto que su paraguas no estaba a la vista.

Jinsoul la miró, antes de girar sobre sus talones y regresar al estacionamiento de la biblioteca.