Vistes una sabana sedosa y hermosa, que se remueve como una silenciosa y talentosa osa. Eres el corazón de esta vía láctea, tienes la plenitud de la galaxia meciéndose para darte a conocer, luz que alumbra todos los lares y sorprende a muchos por iguales.

Pequeño polluelo, gran dragón, núcleo perpetuo de este infame corazón, cuyas telas entiernan y enarbolan a todo ser viviente, puedes ser la gracia y la desgracia de este ser sintiente.

Fuiste el símbolo de dioses, los incas se enloquecen, los egipcios te respetan, Jesús se dislumbra contigo y Buda te iguala mi amigo.

Eres el mayor amigo, igual que tú contraria amiga, que se enrosca en nuestro entorno, ¡que nos sonríe cada día!.

Eres el comienzo del tiempo, del ver, del creer, el signo para Platón del Bien.

¿Qué puedo hacer para darte a conocer?¿qué manera tengo de agradecerte por mi releer?