Chocolate, ¡oh, chocolate!
Del cacao un extracto,
inigualable variedad,
eres más que dulce y amargo,
sí, un deleite al paladar.

Chocolate, ¡oh, chocolate!
Para instantes de alegría,
y cuando deseas llorar,
pero, ¡qué ironía!
¿Haces más que solo animar?

Chocolate, ¡oh, chocolate!
Exaltas las emociones,
narcótico para las arterias,
oh, neurotransmisores,
qué placer desencadenas.

Chocolate, ¡oh, chocolate!
Pero más que complacencia,
eres sutil perdición,
confusa conveniencia,
de esas calorías sin control.

Chocolate, ¡oh, chocolate!
De tu aroma y sabor,
consiento mi debilidad,
por ello apelo a mi razón,
cuando te intento a comprar.

Chocolate, ¡oh, chocolate!
Pero aun así agradecidos,
de poder tenerte y disfrutar,
pues eres el preferido,
cuando deseamos enamorar.