Taehyung

Nos besamos apasionadamente pero aun lo sentía tímido como para tocarme y eso solo logró ponerme más caliente. Me separo de sus labios para dirigirme al lóbulo de su oreja, donde chupo con avidez, logrando que todo su cuerpo tiemble.

— Relájate, amor — pido en susurros.

— Baek...— soltó un jadeo fuerte y podía sentir como el bulto crecía en sus pantalones.

Quisiera decirle que gima mi nombre.

Taehyung.

Levanto su camiseta con rapidez, retirándola por completo, me quedo asombrado por el cuerpo marcado que tiene a comparación de hace años en el instituto que parecía un palito andante.

Acaricio sus fuertes brazos con el deseo de tenerlo de una vez empujando dentro de mi.

— Jungkook, querido mío —digo y dí una mordida a su oreja, en plan de excitarlo más.

Y funcionó.

Arrastro las manos de Jungkook por mi cuerpo para que me toque y él lo hace, un poco nervioso. Me saca la pijama, hasta quedar desnudo ante sus ojos, sus manos temblorosas acarician mi pecho con suavidad.

— Tu piel se siente diferente — murmura expectante y logra asustarme un poco — Debe ser porque no te toco desde hace tiempo  — suspiro aliviado al escucharlo.

Una parte de mi quiere que se de cuenta y se sienta satisfecho conmigo, como Taehyung.

Eso no pasará y debo hacerme la idea.

Desecho esos pensamientos para concentrarme en el presente.

— Chupame los pezones — le ordeno.

Jungkook asintió sorprendido por el control dominante que estoy teniendo.

Acerca su boca a uno de mis pezones y chupó aun nervioso, pero se sintió tan bien que suelto gemidos por lo bien que lo hace, hundí mis dedos en su cuero cabelludo para incitarlo a que continue haciéndolo.

— Lo haces bien mi amor — lo motivo para que se sienta en confianza conmigo.

Minutos chupandome los pezones y quise más. Hago que Jungkook quede acostado en la cama y bajo sus pantalones con todo bóxer, asustandolo un poco pero ignoro eso para ver su pene perfectamente erecto, no lo dudo y lo meto a mi boca para darle una mamada.

— ¡Ah! Baek...— siento como Jungkook se retuerce de placer.

Mientras ingreso dos dedos a mi trasero para prepararme, y estar listo para él. Jungkook seguía retorciéndose por el placer que le hago sentir y su expresión de placer es algo que quisiera grabar en mi memoria.

Ahora lo comprendo.

Tal vez Baekhyun es del problema en la cama, no Jungkook, que gruñía como lobo en celo por una mamada.

— Me... vengo — avisa entrecortado.

Saco su miembro de mi boca porque quiero que se corra en mí.

Me siento a horcadas sobre su cuerpo, dispuesto a montarlo pero él me detiene — ¿No usaremos protección? — preguntó Jungkook aun jadeante por la mamada.

— Quiero sentirte asi, amor — hago un puchero.

— Pero tú dijiste que no te gusta hacerlo sin protección y la única vez que lo hicimos así, quedaste embarazado —contó dejándome asombrado.

Eso significa que Jungkook tiene una puntería fuerte.

Para mi sería la primera vez que tengo sexo sin protección y quiero sentirlo sin nada de por medio, pero eso será después de averiguar si soy fértil o no.

— Olvida lo que haya dicho.

Entonces, Jungkook rebusca entre uno de los cajones de la mesita de noche y saca un preservativo. Se lo coloca nervioso ante mi mirada lujuriosa, sonriendo tomo su erección y lo dirijo a mi trasero, bajando despacio hasta meterlo por completo. Ambos soltamos gemidos nada silenciosos al sentirnos unidos. Colocando mis manos sobre su pecho, empecé a mover mis caderas haciendo retorcer a Jungkook de placer. Sus manos más confiadas van a mi cintura, sujetándome y dejando caricias, hasta sentí que él se movía haciendo placentero nuestros encuentros.

— Baekhyun, te he extrañado — menciona cerrando los ojos.

— Yo también te he extrañado, mi amor —respondo sin dejar de moverme.

Algo se activó en Jungkook porque me tumbó a la cama y se subió encima de mi, para penetrarme. Al parecer lo logré, lo excité un montón.

Emocionado rodeo su cadera con mis piernas y disfruto de los movimientos freneticos. Jungkook se mueve con rapidez y no pude evitar arañar su espalda y después bajar por su trasero, acunando sus nalgas y logrando que se hunda más en mi, así llego a mi orgasmo y me corro entre nuestros abdomenes.

— Correte mi amor —ordeno pervertidamente dándole algunas palmadas a su trasero.

Jungkook se libera cayendo agitado sobre mi cuerpo, lo beso apasionadamente, para luego separamos y tomar aire.

— No recuerdo que alguna vez hicieramos el amor con tanta pasión  — comentó él, sonriendo al techo.

— Te aseguro que regrese más apasionado por ti — y no mentía.

No sé, si dejaré salir a Jungkook de la cama ahora que lo probé. Es inexperto, se nota, pero debía tener en su interior a un hombre apasionado y yo quiero descubrir todo de él.

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Jungkook

— Kook, dame m... más, más — mi esposo gime en mi oido.

Clavo mis manos en su cintura y sigo embistiendolo con fuerza, el placer que estoy sintiendo es nuevo para mi.

No recuerdo que alguna vez hicieramos el amor más de dos veces en una misma noche y con tanta pasión como ahora, me gusta que estemos conectados y al parecer el viaje lo ayudó mucho para que ambos sintieramos deseo, lo que debería ser normal en una pareja de casados como nosotros.

— Mierda, siii — grita Baekhyun clavando sus uñas en mis brazos.

Me gusta este Baekhyun, apasionado y deseoso de mi, no el anterior que parecía que lo aburría. Eso me ponía muy mal.

Porque pensé que era un fracasado y nunca sería suficiente para alguien.

—Te amo, Baek — dije besándolo para luego llegar juntos al clímax.

Agotados nos abrazamos en la cama mientras lo miro de pies a cabeza, amando su cuerpo sudado, hasta que algo llama mi atención — ¿Y la cicatriz del parto? —reviso la zona de su vientre y puesto que no veía nada.

Baekhyun abre los ojos de más y baja la vista pero segundos después, sonríe.

— Estoy aplicándome un tratamiento en la piel y eso hace que no se me note mucho. No mires ahí que me pones nervioso...— pide.

Dejo de ver esa zona pero me sorprendo al notar otro detalle.

Que extraño.

— No recuerdo que tuvieras un lunar cerca al ombligo.

— Seguro nunca te diste cuenta que lo traía — murmuró mi esposo.

— Tienes razón. Ahora sí me aprenderé tu cuerpo de memoria porque te prometo que hare que te sientas feliz y sastifecho conmigo, no quiero que sientas que te aburro — le aseguro.

— Créeme que no me pareces aburrido Jungkook. Eres el hombre que desde que conocí me pareció diferente a todos los demás, hubiera dado todo para que te fijes en mi —dice pensativo.

Alzo mi rostro confundído y lo miro a los ojos los cuales están más alegres y lindos que antes.

— Pero me he fijado en ti — le recordé y él sonríe.

—Así es.

Bueno, ambos sabemos que al principio no me fijé en él.

— ¿Aún me amas? —quise saber.

— Estoy enamorado de ti desde el instituto. Si no te tuviera, haría lo que fuera para tenerte — expresa Baekhyun con los ojos brillosos.

— Te amo —lo abrazo apegandolo a mi cuerpo.

Baekhyun es mi esposo, quién me dió un hermoso hijo. Él que me dió amor y cariño... él que correspondió mis sentimientos.

Al principio me sentí confundido con algunas cosas pero me dí cuenta que Baekhyun me ama y me acepta como soy.

Por un momento llegué a pensar que escogí a Baekhyun por estar con el corazón roto gracias a la primera experiencia amorosa que tuve. Ahora siento que no es así.

Esto puede funcionar, una luz de salvación en este matrimonio.

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