Edad: ??

Personalidad: Puede parecer muy seria al ser la reina del infierno, pero le encanta divertirse con sus súbditos. Es muy calculadora, tiene un plan para todo, como también le emociona siempre aprender cosas nuevas. Ya que, más sabe el diablo por viejo que por diablo. No hay mucho más, ya que son pocos los que puedan verla y viven para contarlo

Gustos: Le encanta la sangre, el dolor, ver como sus víctimas piden por piedad que no merecen. Ser la dominante, la jefa de todos y que hagan lo que ella pide. Y los waffles. 

Disgustos: La ternura le causa asco, como también esos Ángeles que siguen la palabra de Dios. Son unos imbéciles para ella. Seguir las reglas de otros.

Fetiche: Masoquismo, casi extremo

Sexualidad: Bisexual 

Historia: Ella era la mano derecha de nuestro Dios, era su más respetada súbdita, y hasta se podría decir que era la hija que nunca tuvo. Pero pronto, ella descubrió que no se estaba divirtiendo con lo que hacía allí, y buscó como divertirse. Una mala idea.

Dios pensó que ella lo había abandonado, y que prefería irse a otros lugares que estar a su lado. Un Dios que no soporta que nadie se vaya, parecía más una tiranía, todos debían obedecer lo que Dios pedía sin poner objeciones, y si así lo hacía serían llevados a lo más profundo del infierno donde solo había oscuridad.

Dios en uno de sus tantos berrinches decidió obligar a Lucifer a quedarse junto con él, pero ella se negó. No iba a mantenerse allí todo el tiempo, moriría de aburrimiento. Eso colmó el vaso, y con una simple frase la ángel fue enviada al infierno.

Fue difícil, y duró muchos años, pero cuando se dio a la idea de que ahora este era su mundo, decidió hacerlo a su manera. No habían reglas, sólo sufrimiento, pero ella al ser un ángel y haber hecho nada realmente malo solo iba a vagar por ahí. Ahí comienza su estrategia, y años después se había hecho con el poder de este reino, quitándole así el poder a Dios que tenía sobre el Reino de los malos muertos. Lucifer mientras de convertía el reina, descubrió varias facetas que no sabía que tenía, como el masoquismo, y el gusto por ver la sangre. Pero desde que era ángel recordaba que le gustaban los waffles, por lo que ordenó hacer un día waffles en el infierno, pero no eran lo mismo...