CAPÍTULO TREINTA Y OCHO . . .
━━ resistir en la estación

MUCHAS COSAS habían sucedido en el transcurso del año, pero Lexi nunca creyó que tendría un arma apuntando a su cabeza, especialmente por el propio Matt, alguien con quien había asistido a la escuela desde que era muy pequeña, todo el tiempo. La cosa parecía un sueño loco, incluso más extraño que el drama sobrenatural que estaba pasando a su alrededor, esto coronaba el pastel. Todo lo que le había sucedido hasta ahora había sido bastante extraño, pero ver a Matt apuntándole a la cara con un arma no era algo que creyera que podría superar, porque parecía errático con sus asesinatos, y dado que lo habían empujado a en la piscina, se veía más enojado que Lexi lo había visto alguna vez, y honestamente sintió un miedo que nunca antes había sentido mientras lo miraba, un miedo que hizo que le doliera el pecho. —Matt... —Lexi comenzó a hablar, sin estar segura de cómo iba a ser esta situación y qué le iba a pasar a ella; no podía entender por qué él estaba haciendo todo esto, y el hecho de que ella no sabía su motivo, la asustó muchísimo, y la única persona que quería a su lado en este momento era a Stiles.

—No hables, sólo muévete —espetó Matt, apuntando con su arma en la dirección en la que los chicos y Noah estaban esperando a que ella regresara y decidiera su próximo plan de acción, Lexi no podía entender cómo Matt supe cómo encontrarlos a todos aquí, y cómo incluso tenía un arma; era obvio que Jackson también estaba aquí, entonces, ¿por qué necesita un arma? Nada de eso tenía sentido para ella, pero tampoco perdió el tiempo en hacer lo que Matt le ordenó que hiciera, no queriendo que le dispararan. La chica comenzó a caminar de regreso a la oficina de Noah, poniendo un pie delante del otro temblorosamente y concentrándose en no tropezar y golpear la cara contra el suelo, porque estaba segura de que molestaría al chico con el arma en sus manos - deteniéndose junto a la puerta de la oficina y viendo primero el rostro de Stiles, el chico feliz de volver a verla, pero su expresión facial se convirtió rápidamente en completo horror cuando vio quién estaba detrás de ella, el chico que sabían que era el que estaba asesinando a todas estas personas en maneras tan horribles.

Noah instantáneamente levantó las manos en señal de rendición al ver a Matt apuntando con una pistola a la cabeza de la novia de su hijo, sabiendo que este era el chico del que estaban hablando los niños, y sabiendo que era peligroso, no queriendo que la pobre chica Martin fuera sujeto a su venganza. —Matt, eres Matt, ¿verdad? —Preguntó con calma, no queriendo molestar al chico y lastimar a Lexi en el proceso, quien todavía era el centro del arma del chico, completamente inmóvil con los ojos fijos en Stiles para ayudarse a calmarse—. Matt, pase lo que pase, te garantizo que hay una solución que no involucra un arma —Noah dijo, mirando entre el arma en la mano de Matt y Lexi, quien era el objetivo del arma.

Matt se rio levemente detrás de Lexi, lo que provocó que la chica se encogiera un poco y cerrara los ojos para tomar una respiración profunda y tranquilizadora, diciéndose a sí misma una y otra vez que todo estaba bien y que Noah podría sacarlos de esta situación. —Sabes, es gracioso que diga eso, porque no creo que sepa cuanta razón tiene —Matt explicó, moviendo su arma de nuevo y haciendo que Lexi se sintiera aún más ansiosa con él detrás de ella; la mirada en el rostro de Noah tampoco la hizo sentir mejor, ya que claramente estaba nervioso por lo que estaba pasando ahora con ella.

—Sé que no quieres lastimar a nadie —Noah continuó, tratando de usar sus habilidades policiales para que el niño soltara el arma y dejara a Lexi y a los otros niños en paz.

—En realidad, quiero lastimar a muchos. Ustedes cuatro no estaban exactamente en mi lista, pero pueden convencerme. Y una forma de querer volar la cabeza de esta chica por toda esta oficina, es intentar llamar a alguien en tu teléfono celular, como lo está haciendo McCall —Matt explicó, mientras Lexi le daba al chico una mirada de '¿qué demonios?', sin saber por qué estaba tratando de enojar a Matt aún más de lo que estaba ahora—. Eso definitivamente podría lastimar a alguien —Continuó, sosteniendo el arma más alto para que los niños y Noah pudieran ver que podía dispararle a Lexi muy fácilmente. Scott inmediatamente dejó de escribir en su teléfono celular cuando Matt hizo esto, temiendo por la vida de Lexi—. Todos —Dijo, indicándoles que salieran de detrás del escritorio, pero nadie se movió, así que gritó muy cerca del oído de Lexi, haciendo que la chica se encogiera y saltara por el repentino estruendo—. ¡Muévanse! —Matt gritó, mientras todos colocaban sus teléfonos en los escritorios, cansados ​​del próximo movimiento de los chicos.

Y solo unos minutos después, Matt estaba haciendo que Stiles esposara a su propio padre en la sala de detención, asegurándose de que el hombre no pudiera salirse de ellos y detener cualquier plan que tuviera para ayudar a detenerlo; Lexi todavía tenía el arma apuntando a su cabeza, para asegurarse de que Stiles no hiciera ningún movimiento brusco o planeara algo estúpido. —Más apretado —Matt le dijo a Stiles, cuando apenas apretó las esposas en la muñeca del hombre mayor, asegurándose de que pudiera escapar. Agitó el arma levemente cuando Stiles dudó, lo que provocó que Noah le dijera a su hijo que apretara las esposas para que Lexi no se lastimara.

Lexi observó cómo Stiles ajustaba las esposas en las muñecas de su padre, antes de que Matt lo empujara hacia adelante y fuera de la habitación, Lexi siguió de cerca a Stiles cuando sintió que el arma presionaba su espalda ligeramente, una lágrima caía por la mejilla de la chica cuando sintió el miedo patear de nuevo y abrumarla. Caminando por el pasillo, Lexi se detuvo detrás de Stiles cuando ella y los otros dos chicos miraron a través del pasillo a tres policías muertos que yacían allí, asesinados por el Kanima de una manera brutal; Lexi rápidamente miró hacia otro lado, no quería ver ningún cadáver, sintiéndose disgustada cuando Matt hizo un pequeño comentario y se rio del hecho de que había matado a tanta gente sin sentir ningún remordimiento por ello.

Luego, el grupo terminó de regreso en la oficina de Noah, donde Matt les había ordenado a los tres que borraran cualquier detalle en el que Matt pudiera estar que lo haría parecer culpable de alguna manera, desaparecido, y cualquier evidencia en su contra ya no sería nada.
—Eliminados. Y hemos terminado. Y, entonces, Matt, ya que todas las personas que asesinaste brutalmente se lo merecían porque te mataron a ti primero, lo que sea que eso signifique... Estamos bien aquí, ¿verdad? Voy a buscar a mi papá, y nos iremos... Ya sabes, tú puedes continuar con todo el asunto de la venganza. Disfruta del Kanima —Stiles dijo, rezando a Dios para que estuviera de acuerdo y los dejara ir a todos, odiaba cómo Matt apuntaba constantemente con su arma a Lexi para tratar de obtener una reacción de él y Scott, lo odiaba. Es decir, cuando la luz de un vehículo brilló a través de las persianas de la ventana, lo que indica que la madre de Scott debe estar llegando para identificar a Matt a partir de las imágenes de seguridad.

—Parece que tu mamá está aquí, McCall —Matt anunció, sabiendo que tendría otra ventaja si su madre estuviera aquí.

—Matt, no hagas esto —Scott casi amenazó, no queriendo que su madre sufriera ningún daño; Lexi sintió que su pecho comenzaba a oprimirse y sus piernas hormigueaban, pero no podía entender por qué, todo era demasiado abrumador y no sabía cómo manejarlo—. Cuando ella entre, solo le diré que se vaya. Le diré que no encontramos nada, por favor, Matt —Luego suplicó, sabiendo que amenazar a Matt simplemente no funcionaría.

La puerta de la estación de policía se abrió, y Lexi ahora sintió que su cabeza daba vueltas, sabiendo que algo andaba muy mal. —Si no te mueves... ahora, voy a matar primero a Lexi, luego a Stiles y luego a tu mamá —Matt le dijo a Scott, mientras Lexi tragaba saliva ante sus palabras, sabiendo que no estaba mintiendo; así que se pusieron en marcha de nuevo, esta vez, hacia la puerta principal donde Lexi sintió que sus piernas se debilitaban una vez más, llamando la atención de Stiles, quien instantáneamente envolvió su brazo alrededor de su cintura y la sostuvo en posición vertical, en silencio preguntándole a la chica si estaba bien, solo para que ella negara con la cabeza, ya que realmente no sabía lo que le estaba pasando y por qué sus piernas se sentían así, era casi como la sensación del incidente de la piscina y el incidente del garaje...

Al abrir la puerta, los tres adolescentes suspiraron aliviados cuando Derek estaba del otro lado, pero Lexi lo sabía mejor, sabía que algo andaba mal, especialmente porque sus piernas habían comenzado a entumecerse, la chica agarraba a Stiles aún más fuerte que antes, el chico de nuevo, mirándola con nerviosismo. Hasta que Derek finalmente cayó al suelo, Stiles finalmente tuvo que sostener a Lexi cuando la parálisis también la golpeó, Matt sonrió al verlo, contento de que finalmente estaba vengándose de estos tipos por interferir con sus planes.

Lexi gruñó cuando Stiles trató de sostenerla. —Solo déjame caer, Stiles, está bien —La chica susurró, sabiendo que él no podría retenerla para siempre. No quería simplemente dejarla caer al suelo, quería sostenerla con él, protegerla en caso de que Matt fuera a por ella otra vez, pero la mirada que Matt le dirigió le dijo al chico todo lo que necesitaba saber y suavemente bajó a Lexi al suelo, apoyándola contra la pared detrás de ella para que pudiera ver todo lo que estaba pasando, Stiles parado frente a ella, aunque sabía que no podía protegerla como Scott o Derek, de hecho, aún arriesgaría su vida por ella.

Derek gruñó desde su lugar en el suelo cuando Matt se agachó para verlo más de cerca. —¿Él es el que lo controla? ¿Este niño? —El hombre mayor preguntó con incredulidad, sin entender cómo este niño pudo haber hecho todo esto con éxito, sin ser atrapado por tanto tiempo. Nada de esto tenía sentido.

—Bueno, Derek, no todo el mundo tiene la suerte de ser un hombre lobo grande y malo —Matt respondió, sacudiendo la cabeza hacia el hombre molesto—. Oh, sí, es cierto. He aprendido algunas cosas últimamente, hombres lobo, cazadores, Kanimas, Émpatas. Es como una maldita fiesta de Halloween cada luna llena. Excepto por ti Stiles, ¿en qué te conviertes? —Preguntó, enviando un insulto a Stiles ya que era prácticamente el único humano de su grupo. Lexi podía decir que Stiles iba a volver con un comentario inteligente que iba a molestar a casi todos aquí; le encantaban las bromas y los comentarios sarcásticos del chico, pero con Matt empuñando un arma y Jackson a su entera disposición, no era el mejor momento para molestarlo.

—En el abominable hombre de las nieves —Stiles respondió rápidamente, Lexi suspiró ante sus palabras porque sabía que Matt no lo tomaría a la ligera—. Pero, eh, es más como una cosa de invierno, ya sabes, estacional —Continuó, cuando Matt puso los ojos en blanco, dándole a Jackson una mirada que luego actuó, sacando las uñas y cortando la parte posterior del cuello de Stiles, el chico luego cayó y aterrizó justo encima de Derek, Lexi incapaz de sostener reprimió la pequeña sonrisa en su rostro ya que sabía que Derek lo odiaría. Sabía que no era la situación adecuada para estar sonriendo, pero no pudo evitarlo con la mirada de disgusto en el rostro de Derek hacia el chico encima de él como un peso muerto.

—Quítamelo de encima —Derek gruñó, deseando nada más que tener a este chico lejos de él.

—Oh, no lo sé, Derek. Creo que ustedes dos hacen una muy buena pareja —Matt bromeó, antes de volver a mirar a Lexi—. Sin ofender, Lexi —Agregó, mientras la chica simplemente lo miraba, no le gustaba cómo estaba haciendo bromas en esta situación cuando era un asesino. Por sus palabras y la forma en que miraba a Derek, Lexi no pudo evitar pensar que Matt odiaba a los hombres lobo, por supuesto, Derek podía ser un poco malo a veces, pero no podía decir que lo odiaba, después de todo, estaba tratando de salvar Beacon Hills tanto como todos ellos—. Sin embargo, debe ser terrible que te quiten todo ese poder con un pequeño corte en el cuello. Apuesto a que no estás acostumbrado a sentirte tan indefenso —Le dijo a Derek, ya que el hombre lobo no parecía desconcertado por las palabras del niño, Lexi observaba ansiosamente mientras se preguntaba qué haría Matt a continuación.

—Aún tengo algunos dientes. ¿Por qué no te acercas un poquito, eh? Verás que indefenso estoy —respondió Derek, sin inmutarse por los insultos de Matt.

—Sí, perra —Stiles habló, ahogado debido a que su rostro estaba aplastado contra el pecho de Derek, paralizado e incapaz de mover la cabeza hacia arriba para hablar. Lexi lo encontró divertido, pero sabía que Matt no lo haría, y en el momento en que escuchó su comentario, ella sabía que Matt iba a usar el poder que tenía para hacerlo callar. Sin embargo, otro vehículo se acercó a la estación, lo que significa que la madre de Scott finalmente llegó para identificar a Matt en el hospital en el momento del asesinato, y el corazón de Lexi se aceleró aún más de lo que ya estaba, lo que hizo que le doliera el pecho.

—¿Es ella? —Matt preguntó, mientras Scott miraba hacia el suelo con un suspiro, odiando que su madre estuviera a punto de meterse en esto, sin saber qué podía hacer para asegurarse de que estuviera a salvo; Lexi sintió lo mismo, sabiendo que Melissa no sabía nada de lo que estaba pasando, no era justo de su parte entrar en esto desprevenida—. Haz lo que te diga y no la lastimaré. Ni siquiera dejaré que Jackson se acerque a ella —Dijo, como Lexi sabía que no estaba diciendo la verdad; ¿Qué impide que este chico lastime a Melissa solo porque le da la gana? Nada.

—Scott, no confíes en él —Stiles habló con su voz apagada, sacando las palabras de la boca de Lexi, mientras la chica le lanzaba a Scott una mirada que decía exactamente lo mismo, una mirada que Matt no se perdió. El chico volteó a Stiles sobre su espalda, no suavemente, antes de presionar su pie contra el pecho del chico, deteniendo la respiración de Stiles instantáneamente, el chico jadeando y tratando de tomar algo de aire. Al mismo tiempo, Jackson sacó las uñas y se agachó hacia Lexi, sosteniendo las garras en su cuello, mientras los ojos de la chica se agrandaban, Scott miraba entre la chica y el chico sin saber qué debía hacer, temeroso de empeorar las cosas más de lo que ya estaban.

—¡Está bien, ya basta, detente! —Scott gritó, con los ojos muy abiertos cuando Stiles comenzó a enrojecerse por la falta de aire, y a Lexi se le cayó una lágrima por la cara al sentir las garras clavándose suavemente en su garganta, un movimiento del Kanima hizo que su garganta se abriera, algo que estaba segura de que pasaría si respiraba más fuerte de lo que respiraba ahora.

—Entonces haz lo que te diga —Matt le dijo, causando que Scott se rindiera instantáneamente, no queriendo que Lexi o Stiles resultaran heridos. Eventualmente, Matt levantó su pie de la garganta de Stiles, pero Jackson nunca movió sus garras de la garganta de Lexi, y en ese momento, la chica no quería nada más que poder moverse y alejarse de su viejo amigo que actualmente era medio lagarto—. Tú. Llévatela primero, luego a los demás —Matt comenzó a instruir a Jackson, y obedeció al instante, apartando las uñas de la garganta de la chica y agarrándola del brazo, así como a Stiles, antes de arrastrarlos a la habitación de al lado, Lexi asustada por lo que podría pasar a continuación con Melissa.

La chica cayó básicamente encima de Stiles, antes de que trajera a Derek, justo al lado de Lexi, haciendo que la chica quedara intercalada entre los dos, afortunada de que no pudiera sentir nada que la incomodara. —¿Estás bien? —Stiles le preguntó en voz baja, mientras los ojos de la chica se posaron en los suyos para verlo ya mirándola preocupado; no quería nada más que tirar de ella para abrazarla, protegerla con su propio cuerpo, pero no podía sentir su propio cuerpo, y lo odiaba. Odiaba lo impotente que se sentía cuando se trataba de la chica que amaba—. ¿Te lastimó? —Continuó preguntando, sus ojos recorrieron su cuello para ver algunas marcas rojas donde Jackson había sostenido sus garras contra su piel - nunca quiso matar a Jackson más que en este momento por lastimar a Lexi, la chica que no merecía nada de esto.

Lexi ni siquiera tuvo tiempo de responder la pregunta de Stiles; podía sentir el dolor en su cuello, pero estaba adormecido debido a la parálisis, aunque sabía que le dolería cuando finalmente pudiera sentir de nuevo. Antes de que siquiera abriera la boca para responder, sintió un hormigueo en el estómago, lo que la confundió ya que estaba paralizada del cuello para abajo, y en el momento en que sucedió, todo comenzó a suceder como si fuera un avance rápido, escuchó un disparo, seguida por Melissa gritando de miedo, y Noah gritando todos sus nombres para asegurarse de que todos estaban bien - le habían disparado a Scott. —Le disparó a Scott —La chica habló en voz baja, sus ojos parpadearon nerviosamente hacia Jackson en la esquina de la habitación, ya que se le ordenó que los vigilara, no sabía qué podía decir.

Derek miró a Lexi frente a la puerta de la oficina, sin ver realmente la habilidad de Lexi trabajando en persona; había oído hablar de eso por Deaton y Scott, pero nunca lo había visto antes. Había oído hablar de los émpatas, cómo trabajaban, qué hacían, y sabía que era bueno tener a la chica cerca, ya que podía saber quién había resultado herido sin verlo por sí misma.

Pero, él no sabía lo bien que su habilidad los ayudaría a todos esta noche...