Capítulo 19
Perfecta para mí

—Si necesitas algo más no dudes en decirme—HanSul sale de la cafetería conmigo.

—Gracias por darme un poco de información, lamento mucho lo que ocurrió con tu amiga—una sonrisa triste se dibuja en sus labios.

—No te mentiré, quiero verlo en la cárcel por lo que hizo. Debo regresar a clases, adiós.

La veo alejarse sintiéndome mal por ella, yo también perdí una amiga con la cual encajaba mucho, con esto sé que Tae le hizo algo a Tina y ser consciente de que él la asesinó...me hace sentir aterrada. Las personas salen con otras personas sin conocer en realidad como son, ahora entiendo la insistencia de TaeHyung en "demostrar" sus sentimientos, las supuestas "casualidades" al encontrarnos, todo. Ahora lo entiendo todo. Mi teléfono vibra de nuevo, es él.

Inhalo, exhalo y cuelgo una vez más. No quiero hablar con él, no necesito hablar con él tampoco, camino por la acera deteniendo un taxi. Creo que alquilaría una habitación por hoy en un hotel, el conductor es amable al llevarme al más cercano, bajo del vehículo pagándole, cuando doy un paso para acercarme a la puerta principal alguien toma mi mano dejándome inmóvil por los nervios.

—No necesitas quedarte aquí—TaeHyung está frente a mí como si nada raro o inusual ha ocurrido. Tiene un brillo de locura en sus ojos que me hace paralizar, sonríe con esa fingida dulzura apretando mi mano—Estás en mi ciudad después de todo.

Él no parece sorprendido de verme.

—¿Estabas siguiéndome?

—Sí—admite como si nada—Sé que hablaste con HanSul, es una chica un poco...extrovertida y ruidosa, no le creas lo que dice.

—Serás una buena psicóloga.

—Gracias.

—Pero me parece que tu amiga es muy extrovertida para esta carrera.

Mi corazón late rápidamente, no puedo demostrarle mi miedo, eso lo haría más poderoso, tampoco puedo ser agresiva con él o sería un detonante. Debo ser más inteligente, debo mantener la calma, respiro profundo y asiento con una pequeña sonrisa incómoda.

—Pensé que habías estudiado allí.

Ignora lo que digo deteniendo un taxi. Me obliga a subir sin darme oportunidad a negarme, no quiero estar a solas con él.

▪︎▪︎▪︎

El taxi nos ha dejado en la entrada de un camino que va hacia al bosque, el auto no puede ingresar ya que los árboles son más grandes haciendo el camino angosto. Al hombre del auto sólo le interesa su pago, Tae se ocupa de eso, quiero salir corriendo, pero me rehúso a hacerlo. Necesito mantener la calma, el chico toma mi mano de nuevo siendo un poco brusco al jalar de ella.

—Eres su novia, ¿No? —no me gusta que lo diga. Ya no me agrada decir que soy novia de un loco—NaHee fue encontrada en el bosque luego de un mes, estaba sin vida, la policía no arrestó a TaeHyung porque dijeron no tener pruebas suficientes, no importó lo que les dije.

—¿Trajiste a NaHee a este lugar también? —pregunto intentando caminar a su ritmo, siento que está arrastrándome.

—Sí.

—¿Vas a asesinarme?

Se detiene en el acto mirándome horrorizado. Retrocedo cuando toma mi rostro entre sus manos.

—Eres la mujer perfecta para mí, DaHee, debo demostrarte que soy perfecto para ti—deposita un beso en mi frente—No tengas miedo o me enojaré.

"Primera advertencia"

Vuelve a caminar jalándome.

—¿No debería conocer a tus padres?, los novios hacen eso.

—Pensé que ya no éramos novios—dice con ironía.

—Nunca dije que terminamos.

—Cierto, querías ese estúpido espacio.

—Dejaste de ir a clases.

—¿Me extrañaste? —sonríe mirándome. Su cabello despeinado lo hace ver más loco, ¿Cómo un chico tan guapo puede ser un...psicópata?, pienso en esas clases donde nos recalcan que las apariencias siempre engañan, no debemos dejarnos llevar por el paciente, de una u otra manera debemos entrar en su historia sin que lo note o se sienta juzgado.

—Siempre te extraño—finjo mi mejor sonrisa.

Caminamos por un rato hasta llegar a una especie de cabaña en medio del bosque, es de aspecto sencillo y dentro tiene un estilo minimalista. TaeHyung me hace sentar en el sofá, lo veo retirarse hacia la cocina preguntándome si NaHee también estuvo aquí. No hay fotos en la cabaña, sólo cuadros de paisajes naturales, no hay nada más que árboles rodeándonos, de inmediato tomo mi teléfono enviando un mensaje a papá con una dirección. Borro el mensaje al ser enviado, lo guardo rápidamente al escuchar que Tae regresa con una bandeja.

—Debes tener sed.

—Ya bebí algo.

—No seas modesta, sabes que no me molesta ocuparme de ti—me sirve un pequeño vaso—Un poco de limonada no cae mal.

La jarra está llena por la mitad, no hay dos vasos, sólo uno. Hay un plato pequeño con frutas, TaeHyung me da el vaso de limonada aumentando mis nervios. No quiero beber.

—¿No beberás también?

—Traeré otro vaso—vuelve a desaparecer por segundos. Regresa sirviéndose un poco como el mío, pero cuando creo que beberemos al mismo tiempo el muy tramposo no lo hace, sólo pretende hacerlo— ¿A tus padres no les preocupa que vengas sola a Daegu?

—Un poco—dejo el vaso en la bandeja—¿Vives aquí? —miro la sala. Hay una estantería con discos, libros, algunos jarrones de aspecto raro y cuadros en las paredes, no veo nada inusual además de lo que ya sé.

—Encontré esta cabaña abandonada hace tiempo, decidí retocarla yo mismo—parece orgulloso.

—¿Tus padres vienen a verte?

—No. Ellos no pueden venir.

—¿No les gusta cómo vives?, pensé que habías dicho vivir con ellos cuando estabas en Daegu—al levantarme siento el mareo regresarme al sofá. Mi visión de repente no es muy clara, parpadeo varias veces obligándome a levantarme sin tener éxito, sólo consigo caer al suelo de nuevo.

Sabía que la limonada tenía algo.

TaeHyung se acerca a mí quitándome el bolso, quiero alejarlo sin tener mucha fuerza, estoy indefensa por completo. No me sorprende cuando toma mi teléfono apagándolo.

—No lo necesitarás aquí.

—¿Qué vas...a hacerme?

—Cuidarte, amarte y protegerte—acaricia mi mejilla—El mundo tiene muchos peligros, DaHee. A diferencia de NaHee, viniste por mí, investigaste sobre mí—sonríe—Eres perfecta para mí, no puedo dejarte ir.

Mis párpados comienzan a pesar. Siento que sus brazos me levantan del suelo al tiempo que pierdo la conciencia.