Meg

Despierto, pero aun así todo está completamente oscuro. Podría ver con facilidad, pero no veo ni una mierda. Intento moverme, pero mis manos están atadas. Entro en cuenta de que me tienen amarrada y con los ojos cubiertos. Una sonrisa juguetona cruza mis labios cuando siento pasos. Me quitan las vendas encontrándome con Adriel delante de mí.

-Buen día, Reina- deja un suave beso en mi frente, en lo que acaricia mi cabello.

Esta de pie frente a mi y mi cabeza le llega a su masculinidad, miles de cosas que pudiera hacerle así de rodillas cruzan mi mente haciendo que muerda mi labio inferior. Se que piensa lo mismo que yo por la manera en la que acaricia mi cabello y como su mirada lujuriosa me recorre. Siento el palpito en mi zona sensible, los fuertes deseos de que me coja duro me están volviendo loca. Paso la lengua por mis labios en un gesto inconsciente viendo como muerde su labio inferior, entreabro mis labios dejando a su imaginación lo que hecho y puedo hacer con ellos. Lo veo tragar grueso, mirando hacia arriba para calmarse.

-¡Oh, eres un psicópata!, ¡auxilio!-finjo terror.

-¿Qué haces?-pregunta algo irritado, en lo que me toma en sus brazos llevando a una silla dejándome ahí.

-fingir terror-hable, intentando contener la carcajada que amenaza con salir.

-Terror...terror debo tener yo con esos labios-hablo recorriéndolos con su pulgar.

Paso la lengua por el dedo tentándolo a introducirlo en mi boca. Lo veo debatir si hacerlo o no, cuando me lanza una mirada de súplica junto con una de lujuria. Atrapo con mi boca su dedo en lo que esta entretenido sacándolo y metiéndolo en mi boca, succionando, uso mi lengua enredándola en su dedo, lambiendo y dejando suaves mordidas. Con su otra mano me da una suave bofetada haciendo que lo muerda aun mas duro.

- ¡Joder!, que eres una jodida Obsesión-dice alejándose de mi-no voy a caer-sonrió.

-Ya lo hiciste-digo poniéndome en pie.

- ¿Qué...cojones? -suelta al verme desatada de manos y de pie.

-Ups...espera-me siento en el suelo, extiendo el paño de nuevo.

- ¿quieres que te amarre? -pregunta acercándose con precaución.

-No te hare nada, ¿me temes? - Una sonrisa ladina cruza mi rostro.

-No, solo quiero saber que pretendes-vuelve a atar mis manos.

-No, la que quiere saber que pretendes soy yo. ¿Secuestrarme?, ¡es enserio animal! -reclamo llena de enojo, pegándole un fuerte cabezazo.

- ¡Mostrarte que eres mía!¡solo mía, joder! -escupe lleno de ira- Los matare, a cada uno que te ponga una mano encima. Y si estoy loco, demente, enfermo, obsesionado, pero contigo...solo contigo -Masculla lleno de enojo, golpeando la pared.

- ¿Y qué haces con ella? -espeto tan furiosa como él.

-No, lo entenderías-bajo su voz alejándose de mí.

Lo analizó un momento...no, no.

<<La mato>>

-Te gusta Susan, ¿verdad? -digo negando.

-si-musita de espaldas a mí.

-Esa frase tiene tanta razón, no seas una reina porque las reinas al final de cuentas la mata hasta el caballo-habla más para mí misma.

-Mi reí...-lo corto.

-Ni se te ocurra una mierda decirme Reina...yo no soy una reina, yo soy...

<<-tú no eres una reina, tu eres mi luna roja-sus ojos Avellanas se achinan, y una linda sonrisa se asoma en sus labios.

- te quiero Oscurito-doy un suave beso en la comisura de sus labios, haciéndolo tragar grueso. >>

El recuerdo de Edén se esfuma tras eso.

-Yo soy una puta luna roja, reflejándose en un mar de sangre y oscuridad- me termino de zafar, levantándome.

<<no sabes hacer nudos>>

-Meg...-lo callo.

-I Hate you- pronuncio con una sonrisa llena de falsedad en mi rostro.

Me toma de la mano tirando de mi hacia él, Lo empujo alejándolo de mí. Le doy una fuerte bofetada dejando marcado los 5 dedos en su cara, lo veo reír mordiendo su labio inferior. Subo las escaleras llegando a una sala donde lo primero que veo es una foto de él con Susan. Sonrío por la idea que pasa por mi mente, y me apresuro por salir de ahí grabando la localización y cada detalle de la casa en mi mente. Camino hasta mi casa calmando la ira en mi interior.

(...)

Llego a casa empapada en sudor, hambrienta y sedienta. Al no haber nadie cojo cualquier sobra de la comida de ayer sentándome en la mesa y comiendo, cuando suena el móvil con un mensaje.

-Mi chica oscura, ¿te recojo a las 8?

Me quedo un minuto pensando en el beso del bar, si porque del resto no me acuerdo. Pero igual el chico esta bueno y Adriel... ese no me apetece verlo.

-si, 8:30 para darme tiempo alistarme.

-Vale, hermosa.

Tiro el móvil sobre la mesa, para subir a mi cuarto como planear lo que pienso hacer.

Adriel.

Después que la vi salir por la puerta sentí mi pecho doler. Soy un puto cabrón, pero debo protegerla, si Susan se entera que me la traje a la casa puede que ella este en peligro, solo debo aparentar un poco más que la amo. Todo cerca de saber porque saben tanto de ella, debo comportarme ya casi cree que enserio la amo. Estoy loco por poder acercarme a mis hijos, Near se parece tanto a ella y a mí, pero más a mí. Ya mi pequeña Kami se parece mas ella. Podría asesinar hasta los que se que quieren hacerles daño a ellos, pero sería ser tonto, debo llegar hasta el final del asunto. La puerta de la habitación se abre dejándome ver a la chica que quiere ganarse mi corazón de hielo. Se desviste lentamente lanzándome la ropa, fuerzo una sonrisa llena de diversión. La atraigo hacia mi pegando su cuerpo desnudo al mío, sus ojos se centran en los míos. Me lanzo sobre sus labios me dejo guiar por sus bruscos movimientos. No es que no me guste lo brusco es que simplemente...ella no es mi Reina. Siento sus manos buscar el botón del pantalón deshaciéndose de el con mi ayuda, sus manos recorren mi miembro que ni siquiera esta erecto. Se agacha frente a mí masajeando mi polla con sus manos. En mi mente inmediatamente se reproduce mi reina arrodillada frente a mí, su mirada juguetona, sus labios entre abiertos, su lengua, sus succiones. Siento como se pone poco a poco dura, pienso en los deseos que me dieron de ponerla en cuatro y entrar en ella violentamente, En azotar su pequeño trasero hasta que gritara mi nombre corriéndose. En sentir sus manos recorrer mi cuerpo.

-¡Joder!-suelto apretando los dientes.

-abre los ojos miram...-la callo, introduciendo mi polla hasta lo mas profundo de su garganta.

<<Mi reina eres mi veneno>>

Kamila

El sol que entra por la ranura de la ventana me despierta, todo a mi alrededor da vueltas intento levantarme, pero mis manos resbalan con algo haciéndome caer de nuevo al suelo. Abro bien mis manos para ver con que podría resbalarme cuando lo que veo delante me deja algo estática. Estoy envuelta en sangre, el suelo esta echo un charco de sangre. A mi lado se encuentra Logan con la cabeza hecha una puta mierda, literales ahí trozos de sesos en el suelo. Y tiene que ser porque es la misma ropa que tenia ayer sino no lo hubiera sabido.

<<Puré de Logan>>

Su cuerpo esta abierto como si fuera un puerco y sus órganos están colocados en un orden que solo yo haría, literalmente este vacío por dentro. Intento recordar, pero solo recuerdo que me lo tire drogada, pero nada más, de ahí para allá todo se queda en blanco.

Como mierda me deshago de esto si yo no tengo ni puta idea, pensé por un minuto intentando pensar en algo.

<<Asesinos + cómplices + ocultar pruebas = Erick Klein, Near Klein>>

<<Eso es >>

Busco mi móvil encontrándomelo en la meseta, lo tomo haciendo una triple llamada que después de tres tonos lo cogieron ambos.

-Dime-dijeron a la vez.

-Ayúdenme- digo desesperada.

-¿Qué sucede?-hablo Near preocupado.

-¿Qué tan urgente es?-pregunto Erick quitándole importancia.

-Sangre, Victima...yo-intente explicar en código.

-Mierda, ¿dónde estás? -dijeron a la vez.

-En la casa del al lado-Indique.

-vamos para allá-colgaron.

Recorrí con mis ojos la escena intentando entender que paso, pero no es que pueda hacer mucho con el cuerpo hecho picadillo.

(...)

Me levanto al ver a Erick y a Near entrar. Ambos observan el cuerpo mirándome para después mirarse entre ellos dos.

-¿Vendes órganos?-carcajea.

-Erick, tú no estás bien-le reclamo.

-Al igual que ustedes, todos son unos asesinos de mierda-aclara.

-No es verdad-sonó firme Near.

-No me digas, en serio ¿y Jade? -Dice sin dejar de reir.

-no se que te hace tanta gracia-espete molesta.

-Que el hijo de puta corrió con suerte de que fuiste tú, yo iba a por el-se sincera.

-Ignorare eso... que soy poli, yo salvo gente y encuentro el culpable-se lamenta.

-Ya. No me jodais, si fuera así Kam tu no te hubieras divertido con Jade o hubieras matado a este tipo-Se gira hacia Near-Tu no hubieras disparado, porque fue a pesar de ayudarme no lo pensaste mucho y lo disfrutaste porque lo se que lo hiciste, y yo...pues yo, soy un cabrón, un puto psicópata-completa con orgullo- los Klein somos unos asesinos.

-Ahora ignorando a Erick, dinos porque lo hiciste-interrogo.

-No recuerdo, tomamos una pastillita de color...Vamos droga, nos besamos, tu vimos sexo y luego...nada todo en blanco- Respondo con sinceridad viendo como Near, no le afecto el hecho de me acostara con él.

-Muy bien, ya saben...Kami báñate, Near entretenlos. Que yo me ocupo-Ordeno decidido.

-Vale, gracias hermano-agradezco apunto de correr a sus brazos.

-No...que me ensucias-Me detuvo.

-Vale, insoportable -Me gire para irme.

-Por cierto, excelente trabajo... estoy contento de tan brillante asesinato.

-Gracias, hermanito- salgo de la cocina.

-por cierto., ¿A cuánto el corazón? -bromeo, volviendo a reírse.

-Erick, no es gracioso-Advirtió Near serio.

Me perdí escaleras arriba entrando al baño, rápidamente abro la ducha para que el agua se vaya calentando, en lo que me despojo de la ropa metiéndome bajo del chorro de agua caliente. Me restregó haciendo que la sangre caiga con el agua, me Lavo la cabeza quitando la sangre de este también. Apago la ducha viendo con que me seco, cuando siento la puerta abrirse revelándome a un Near con una toalla y ropa en sus manos. Sus ojos recorren mi cuerpo con lujuria, muerdo mi labio inferior en un gesto inconsciente. Da uno pasos hacia mi ofreciéndome la toalla.

-te traje ropa- las pones en el lavabo, apunto de irse cuando lo agarro del brazo.

-No, Kamila-se soltó de mi agarre saliendo del baño.

Near

Me despierto de un fuerte jalón que me dan. Abro mis ojos encontrándome con Erick, rápidamente me incorporo.

-¿Qué sucede?-pregunto algo molesto.

-No tienes nada para la noche, ¿verdad? -Acierta, con una sonrisa de complicidad.

-No, ¿Por qué? -Me arriesgo a preguntar.

-Genial, vístete que nos vamos a salir. Tienes una doble cita-sale del cuarto dejándome comprometido.

Me meto en el baño a bañarme, para después de unos minutos salir envuelto en la toalla escogiendo unos pantalones ajustados al cuerpo negros y una camisa blanco entallada al cuerpo. Riego mi cabello dándome un toque despreocupado pero sexy. Salgo del cuarto bajando las escaleras encontrándome con Erick. En cambio, a mi el lleva un pantalón blanco ajustado y una camisa negra entallada a su cuerpo, con su cabello peinado perfectamente hacia atrás.

-¿A donde vamos?, y desde ahora me vas explicando lo de la doble cita-digo dejándole en claro que no estoy ni un poquito de acuerdo.

-A vender órganos-dice divertido, riendo en lo que salimos de la casa montándonos en su coche.

-Déjate de bromas- Advierto entornando los ojos.

-Vale, lo que pasa es que Grace y yo. ¿ te recuerdas que nos medio fajamos?- habla con sus ojos puestos en la carretera.

-Si-finjo saber, centrando mis ojos en el camino.

-Pues medio nos arreglamos, y la idea era que si yo y ella salíamos. Debíamos conseguirle una cita a la amiga- explica, volteando algunas veces mirándome.

-Aquí es donde entro yo, pero por que me pasa esto a mi-hablo lo último para mí.

-Por fa -suplica, casi hasta pucheros me hace.

-Esta bien, pero es por ti, luego de esto la mando lejos-aclaro, poniendo música.

Las notas de la canción nos hicieron mirarnos y sonreír en lo que la cantábamos en alto.

-Diles a todos tus amigos que soy loco, y que te llene de locura. Que soy todo un acosador, un observador, un psicópata. Después diles que me odias. Y que saliste conmigo solo por diversión, así que, ¿Por qué me llamas... y me dices que me quieres de vuelta? Estas maniática-cantamos a la vez, con una sonrisa maliciosa en el rostro. Y miles de pensamientos en la cabeza.

Creo que voy entendiendo los chistes de Erick, me gusta su compañía.

-¿sabes?-hable cantando su atención.

-No, si no me dices-bromea.

-Te daré 24 horas para que me corrompas, me demuestres porque es mas divertido ser un asesino y no un policía. Para que me lleves completamente al mundo oscuro de los Klein, de nuestro mundo oscuro-Digo con sinceridad.

-Sera un placer llevarte al mundo oscuro hermano, quiero ocultar cadáveres a tu lado-rio, y yo junto con él.

(...)

En unos minutos más llegamos a un café repleto personas hasta arriba. Grace nos hace señas desde un sitio pasamos entre las personas que bailan al ritmo de la música en directo. Llegamos a la mesa cuando mis ojos captan a la chica de ojos verdes de aquel día.

-Mi ángel-le da un corto beso Erick a Grace.

-buenas Rocío-sus ojos me captan, y yo trato de tranquilizarme mentalmente.

-¿Ustedes se conocen?-pregunta los tortolitos mirándonos con extrañeza.

-Pues casi lo atropellan un camión, como al gato de un amigo-estallo en una hermosa carcajada que fue música para mis oídos.

-Si, y no hagas preguntas-me dirijo a Erick haciéndolo callar.

(...)

Entre las ocurrencias de ellas, los chistes de mi primo debo admitir que termine con dolor en las mejillas, su sonrisa está bonita. Su voz tan dulce, la expresión de su rostro cada vez que ríe. Me tiene idiotiza por primera vez me falta valor y huevos para hablarle, se ve tan seguridad. Tan perfectamente imperfecta. No se que decirle. Se levantaron ambas para ir al baño a retocarse, a lo que le llamo yo chismorrear.

-te gusta esa chica, y por primera Near Klein no tiene valor. Sabes yo tu hago algo a posta para que tengan que quedarse solos, y pues ya sabes voy directo a lo que quiero-Me aconsejo, poniéndome una mano en el hombro.

-¿Tú crees?- pregunto inseguro.

-Claro, al igual que deberías matar al amigo del gato ahogado- Afirmo.

-Atropellado-corregí.

-Atropellado o ahogado. Lo estrangulo haciendo...-lo interrumpo.

-Hay vienen.

Miro al camarero que viene con la bandeja llena de tazas con café, las palabras de Erick llegan a mi cabeza y antes de lo que me doy cuenta. Estoy estirando el pie haciendo que el camarero tropiece vire el café arriba de mi chica. Quien suelta insultos peor que un camionero. Me acerco ayudándola a salir de ahí, cuando Erick niega con la cabeza y una sonrisa llena de diversión cruza sus labios.

-Dios, estoy hecha un desastre-admite, mirándose.

-Piensa por el lado positivo, al menos no estaba caliente-bromeo, pero al verla seria observarme dejo de reír.

-Sabes lo que es desperdiciar el café así.

-No, que torpe- niego, abriendo la puerta del auto para que se monte- venga te llevo a tu casa para que te cambies y regresamos.

(...)

Finalmente se monta después de convencerla como unas seis veces, hablamos de cosas sin mucho sentido, y entendí que Erick tenía razón debería matar al tipo del gato atropellado. Pero lo mejor que me iba calmando, ella entra a su casa y me hace esperar en el coche, según ella su casa esta regada. Me da igual, pero si la hace feliz que mas puedo hacer. Se cambio de ropa y su cabello esta mojado, se lavo la cabeza.

<<Claro, luego de que la bañaras en café que querías>>

<<silencio, fue un pequeño percance>>

Cuando se monta en el coche lo arranco conduciendo de vuelta. Como pasare por este vecindario por ''Casualidad''. Sonrió para mis adentros.

-No prefieres dejarlo solos, no se podríamos a por el café. Que me dijiste que me llevarías-indirectamente entendí que quiere quedarse sola conmigo.

-Por mi encantando.

-¿Tienes pareja?-su pregunta me toma por sorpresa.

-No, ¿y tú? -aproveche para averiguar.

-No-su no fue tan tajante que supongo que sucedió algo, pero mejor lo dejo ahí.

-¿Dime algo crees en el amor a primera vista?-suelto indirectamente.

-No creo en lo de los libros, voy a creer en el de la vida real. Mucho menos en una a primera vista -Responde con sinceridad.

-Entonces tengo que estar al borde de la muerte nuevamente para que me vuelvas a salvar y me veas, o simplemente te robo un beso haciéndote entender de que me gustas demasiado-Detuve el carro para voltear mi rostro encontrándome con sus ojos verdes.

Siento que estoy a punto de hacer una locura, pero es lo que dice Erick debo lanzarme. Así que eso hago corta la distancia entre nosotros pegando sus labios y los míos.

UFFF  ME QUEDE CON GANAS ASI QUE TRAJE OTRO.  QUE CREEN DE TODO ESTO.