Erick

Llegue a la sala justo en el momento en que Near le disparó, no se porque lo hizo. Le hubiera sido fácil el hecho de ayudarla y vengarse de mi, pero no. En ese momento lleno de caos el me miro... Me miro lleno de temor y sin temblarle la mano saco el arma y disparó. La sangre salpicó su cara y cómo si de otra persona muy distinta se tratase, una sonrisa torcida llena de frialdad y maldad asomó en su rostro. Por primera vez sentí temor, Kami llego a la sala y al verla manchada de sangre me di cuenta que no solo yo. Sino ellos también habían participado éramos tres asesinos con un cuerpo. Nos miramos entre los tres entendiendo que la habíamos liado y de qué manera.

-¿Y ahora que hacemos?, porque es obvio que no la podremos dejar aquí -pregunta Kami algo alterada.

-¿cuanto tiempo tenemos antes de que llegue tía?-hable dirigiéndome a él.

-no, podemos limpiar todo esto antes de que mi madre llegue, lo mejor que haremos será tomar lo necesario. Prenderle candela a la casa y huir-hablo decidido.

-meterán a la poli en esto-hablo mi hermana nerviosa.

-tienes razón, ¿pero qué más podemos hacer?-pregunto Near intentando hacerla entrar en razón

-regla número uno Kami, nunca te desesperes-me acerque tomándola de la barbilla obligándola a mirarme-está vez no te dejaremos sola, no te llevarán a ningún lado. Solo te pido de favor que solo por esta vez confíes en mi-intentó calmarla.

-Odio admitirlo pero Erick tiene razón, estamos juntos en esto, así que apresurémonos-su seguridad era como un calmante para mi hermana.

-no yo tengo un plan mejor-hable captando la atención de ambos.

-Haber sorpréndeme-había un cierto desafío en su voz.

-Tú y Kami me harán tiempo, en lo que yo limpio el desastre. Nos mantendremos informados por el celular por si uno no pudo lograr alertar a los otros-dictamino.

-ya y como estaremos seguros de que enserio podrás lograrlo -intervino Kam.

-tendremos que confiar en él supongo-afirmó Near.

-tienes razón, espero que de verdad puedas hacerte cargo de esto hermanito.

-en esto, estamos metidos los tres. Solo les pido de favor que por una puta vez en su vida confíen en mí-solté molesto.

-Vale, hermanito confiaré en ti por primera vez. Ahora iré a entretener a mamá-salió por la puerta dejándonos solos.

-bien, supongo que yo también tendré que hacerlo-giro sobre su eje para marcharse.

-Gracias por lo de antes-espete tratando de no mirarlo a lo ojos.

-No me lo agradezcas, tú y yo no nos llevamos bien... pero Erick lo volvería hacer porque a pesar de todo tú eres mi familia. Y en un momento así el odio hay que dejarlo de lado-su voz esta llena de sinceridad.

Cada palabra me llego hondo, puede que yo y él nos odiamos. Pero aún dentro de mi vive ese niño que se desespera por la atención de su hermano. Y creo que en un momento así debemos dejarlo todo de lado y confiar, los tres formamos parte de esto.

-yo también mataría por ti-Esas palabras salieron sin más.

<<no seas débil, aún es tu enemigo>>

<<calla de una puta vez>>

Con eso se giró marchándose del sitio dejándome completamente solo, delante de un buen desastre. Debería darme prisa si quiero acabar cuanto antes. No puedo contar con que los chicos las entretengan mucho, primero que todo porque para ellas será raro. Y mi madre tal vez no pero mi tía tal vez sospeche.

Near

Tal vez pueda aprovechar este tiempo a solas con mi madre para calmar mi mente, ni siquiera puedo todavía asimilar la imagen de mi mente. El cuerpo de Jade cubierto de sangre ante mis pies, me vuelve loco. Me asegure de no querer sacar esos genes asesinos nunca más, se lo prometí a mi madre desde el día del gato. Pero ver a Erick en esa circunstancia me lleno de temor y sabia que debía hacer algo, no podía dejar a Jade huir y contar todo. La llame para saber donde se encontraba, y a pesar de que fue un parque podría tratar de hablar con ella de que pasaría si hubiera roto mi promesa. Sentados en aquel banco bajo la sombra del hermoso, pero inmenso árbol nos cubría de los rayos del sol.

-¿qué sucede hijo?, ¿quieres hablar del tema?- pregunto sería, sin apartar sus ojos de los míos.

-verás mamá. Yo...-paso mis manos nerviosas por mi pantalón limpiando el sudor de estas-Que pasaría si hubiera roto una de mis promesas.

-pues solo me demostrarías que eres un hombre que no tiene palabra, que no puedo confiar en ti -hablo amarga.

-¿y no estás preocupada por cuál falte?-pregunte directamente, sin dejar ni un solo momento de mirarla a los ojos para que vea que voy enserio.

-Cariño ya eres lo suficiente grande como para saber lo qué haces mal, yo como buena madre debo dejar que te des los golpes para que aprendas. Pero como buena madre me quedare a tu lado, ayudándote a superar el obstáculo y haciendo hasta lo imposible por ti- puso sus manos en mi hombro, volteándome verla.

-Mamá la verdad yo...-no puede continuar.

-buenas, podrían uno de los dos ser tan amable de prestarme su celular para realizar una llamada. Utilizaría el mío pero es que me lo acaban de robar-su voz hizo que mi madre se paralizara.

Se giró lentamente nerviosa. En el momento en que sus ojos hicieron contacto con los ojos miel de aquel hombre. Estos se llenaron de lágrimas, de sorpresa y tristeza. Permaneció inmóvil observando aquel hombre. No sabía porque a mi se me hacía tan jodidamente familiar, mi madre seguía sin moverse. El chico al igual la observaba embelesado, pero que mierda sucede.

-¿ustedes se conocen?-pregunte mirándolos a ambos.

-no...bueno si la conociera lamento mucho no acordarme de una mujer tan hermosa, pero es que tuve un accidente que me hizo perder la memoria. Aún así preguntare porque por alguna razón se me hace familiar, ¿nos conocemos?-pregunto centrando sus ojos en ella.

Volví a mirar a mi madre para ver como cada lágrima contenida se desbordaron, caían por su mejilla como si de una fuerte lluvia se tratase. Levanto apresuradamente tomándome del brazo y a pasos apresurados salió de ahí, ya lejos se dejó caer en el suelo cubriéndose el rostro. Sollozos descontrolados que la hacen temblar es lo único que la compone ahora mismo, susurros muy difíciles de entender salen de su boca. Verla así de débil, perdida, tan llena de dolor. Me da un fuerte dolor en el pecho; me tiro en el suelo junto a ella tomándola en mis brazos, apretándola fuertemente contra mi clamándola. Tantas preguntas desbordan mi mente como ¿quien sería aquel sujeto?, ¿Por que mamá al verlo se puso así?, ¿sería alguien de su pasado? Pero más desconcertado que al entender algunas de las tantas palabras poco entendibles .

-Mi rey... mi obsesión-musitó suave sin dejar de llorar.

-¿mamá qué ocurre?-la tome con ambas manos  del rostro obligándola a mirarme.

Pero eso solo provocó que al verme llorara aún más. Me desespera el hecho de que solo llore y no me diga, me enfurece. Me hace sentirme inútil, porque a mi mente no para de hacerme preguntas. Me siento nervioso y no entiendo porque, si tan solo tuviera la manera de calmarla.

<<Erick, debo llamarlo>>

-Un segundo mamá-me alejo unos pasos de ella.

Esta tan ida que apenas lo nota, estoy asustado. Ni siquiera sé si se a tomado las pastillas. Tomo el celular marcando a Erick, después de dos timbres contesta.

-dime n...-se detuvo cuando dije lo siguiente, que no se si me entendió de lo rápido que lo dije.

-mamá está teniendo un ataque de llanto y no se que hacer. Erick te necesito-supliqué desesperado.

-enseguida hoy para allá, no cuelgues te dire lo que tienes que hacer-el miedo en su voz me asusto.

-bien, rápido estoy desesperado.

-¿primero que todo donde están?

-en el parque que esta cerca de la casa.

-¡mierda!, no pudo ser en otro sitio-la desesperación en su voz, eran tan parecido al mío- bien, escúchame con atención primero te sentarás en el suelo con ella y la abrazaras desde la espalda. Harás que recueste la cabeza en tu pecho, le dirás que todo va estar bien. Harás algo que solo tú como hijo sabes que podría calmarla.

-te espero, corre por tu vida. Te necesito-digo desesperado.

-allí estaré hermano, solo aguanta-su voz es calmada, suave. Que logró calmarme.

Me tiro en el suelo haciendo lo que dijo Erick. La sentí temblar pero aún así tomo una de mis manos y la apretó con fuerza junto a su pecho.

(...)

Al cabo de unos minutos llego Erick, se que me mataría la escena que vería ahora. Que le tomaría más odio, pero al revés solo me dolió pero no de la manera que creí. Los ojos de este se llenaron de lágrimas al verla así. Y al dejarse caer al suelo tomándola del rostro obligándola a mirarlo, ella dijo esas palabras que me destrozaron pero que a él más.

-hermano-se tiro encima de él aferrándose a su torso.

Erick desde que crecimos  ha odiado que le digan mini Lex nunca entendí porque, es su padre a mi nunca me molestaría que me dijeran mini Adriel. Pero a él, si y lo entendí más cuando sus ojos se encontraron con los míos, y con tanto dolor como si de una ser mal herido se tratase sus ojos cayendo lágrimas hablo.

-si, sólo respira. Todo estará bien, yo estoy aquí-la apretó fuerte contra el.

Ya entendí porque él siempre lograba calmarla, porque ella piensa que es su hermano en medio de su ataque. Sentí dolor, siempre lo hemos juzgado porque él siempre tenía la atención de todos sin saber que él sufría. Vive bajo la sombra de su padre luchando por ser reconocido por ser el y no su padre. Me siento como un maldito egoísta, que en vez de haber sentido odio por el debía de haber estado ahí para él. Tantas veces que lo rechazábamos que se encerraba en su cuarto a llorar y eso nos hacía sentir bien, sin saber que lloraba más de lo que creíamos. Pero a pesar de lo malo que éramos siempre estuvo dispuesto ayudarnos cuando nos hacía falta. En ese momento sentía el odio disolverse, un dolor, culpa  crecer. Coloque una mano en su hombro en señal de fuerza, cuando sus ojos se encontraron con los míos le ofrecí una sonrisa llena de calidez. Y a pesar de la situación me regaló una sonrisa melancólica, admiro lo fuerte que es o finge ser.

(...)

Después de unas horas mamá se calmó. Le agradeció a Erick dándole un beso en la mejilla, este solo le sonrió acariciando su cabello. Luego me abrazo a mi, por un buen tiempo.

-me alegra tanto verlos juntos-sonrió llena de melancolía.

-¿qué te sucedió?-preguntamos a la vez Erick y yo.

-mis niño... vamos a un lugar más tranquilo- levantó del suelo, ayudándonos a levantarnos.

-yo...mmm prefiero ir a casa que estoy trabajando en algo-se excuso Erick. Sabia a que se refería.

-si claro-hablo mi madre.

por la cara que ambos pusimos soltamos un gran suspiro mental. Mamá me tomo del brazo y Erick se marcho. Se será importante por los nervios que tiene arriba y trata de disimular.

<<Que le sale fatal>>

Kamila

Después de estar aquí por más de unas horas con mi madre decido llamar a mi querido hermanito, que después de dos timbres lo coge.

-ya esta todo limpio, puedes venirte-luego de eso colgó.

-¡ash!,-me queje para mi.

Salí a toda prisa de ahí antes de que mi madre me hiciera presentarme delante de todas sus compañeros.

<<Uy asco>>

(...)

Llego a casa encontrándomela completamente limpia sin nada de cómo la había dejado la ultima ves. Hay demasiado silencio y eso me preocupa, subo a la habitación de mi hermano. Sin tocar la puerta la abro encontrándomelo completamente dormido, salgo para ir a la habitación de Near cuando siento el sonido de gemidos providentes de ahí. Mi corazón se detiene paso por paso que doy, abro la puerta con delicadeza para no hacer algún ruido. Necesito confirmar esto que por mi cabeza me ronda, al abrir la puerta me llevo una sorpresa que hace que estalle en una sonora carcajada. Near está acostado en su cama en la tele hay un video porno y este con su miembro dándose amor, que debo repetir que menudo monumento de 19.5cm. Enseguida su cara se vuelve roja, mete un brinco que de milagro no atravesó el techo.

-¡Kamila Klein!-ruge.

-¡Ostia!,  supongo que esta es la parte en la que corro-digo, tirando la puerta detrás mío.

Corro a mi habitación cerrando la puerta, siento sus pasos pasos apresurados por el pasillo. Sus golpes son fuerte y llenos de enojo.

-porque te molestas Klein, si total todos nos damos cariño una vez en nuestra vida-grito con burla.

-baja la voz-susurra.

-debería haberte tirado una foto-sugerí llena de diversión.

-ni se te ocurra. ¡Abre la puerta!-suelta otra fuerte golpe.

-¿o sino que?-respondí llena de diversión por la situación.

-solo te dire esto-sentí sus pasos alejarse de la puerta.

Creí que se había ido pero a los segundos sentí sus pasos de vuelta, y por debajo de la cama pasó un papel al tomarlo el corazón comenzó a latirme a mil:

Te lo haré tan fuerte que gritaras mi nombre hasta en sueños, y cuando te roce terminarás corriéndote solo de recordar lo que te hizo este hombre.

Imágenes de aquella noche atravesaron mi mente, la humedad en mis piernas se hicieron presente. Abrí la puerta tirando de él hacia dentro de la habitación, cerré la puerta tras el con seguro. Fue articular palabra pero yo me lancé sobre sus labios, devorándolos. Me tomo de los muslos cargándome. Puedo jurar que esta noche Near Klein lo hago mío.

Jessie

Después de tomar mis medicamentos que nunca me han gustado porque me siento como una zombie, me dejo caer en la cama. No podía ser él debe ser alguien parecido a él, aunque esos ojos miel los reconocería donde sea. Su voz llena de frialdad con ese toque  tentador, es que debía ser el. Pero él está muerto... hace mucho Adriel murió dejándome sola como todos los que me rodean, tengo tanto miedo de estar tanto tiempo cerca de alguien y le suceda algo que no lo hago. Me tranco aquí en esta casa, soy como un fantasma trato de que me noten poco, me sientan poco, relacionarme poco solo lo que necesitan. Se que soy egoísta que yo debería estar más tiempo con los chicos pero el temor me gana. Verlo hoy o ver a un clon de él fue un choque mental y sentimental para mi, desde que murió no he vuelto hacer la misma. Desde que ambos lo hicieron mi hermano también, siento tanto en mis ataques confundir a Erick. Soy una maldita egoísta...

<<Meg nunca tuviste que desaparecer yo debí haberlo hecho>>

Siento mis palpados cansados cerrándose poco a poco, me hace tan feliz porque cuando duermo puedo ver a todos aquellos que no tengo y quiero.

<<tonta, no vivas del pasado>>

<<¿Meg?>>

<<no tu conciencia, no te jode>>

<<te extrañe, ¿tú no habías desaparecido? >>

<<si pero cierta persona me necesita tanto,  que me trajo de vuelta>>

<<odiosa>>

<<princesita>>

<<ja...Te eché de menos >>

<<yo no>>

<<mentirosa>>

-Jess, jess...-la voz de Kayle se oye tan lejos.

Me dejo guiar por la voz de Meg. Cayendo a un profundo sitio vestido de negro, el silencio reina en este sitio. Me siento cómoda siento la tristeza abandonarme poco a poco, siento la voz de Meg en todo el sitio. Recuerdos de ella aparece frente a mi, se que estoy loca por llamar a mi doble personalidad como una persona. Para mi lo es... mi sicóloga dice que no estoy bien, qué tal vez estoy empeorando. Que tengo etapas en las que mejoró y recaigo pero no me importa.

<<Princesita debes ser fuerte>>

<<no quiero... yo solo quiero descansar Meg, no me siento bien. Todo era más sencillo cuando estabas y te quiero de vuelta>>

<<Entonces dilo...solo dilo>>

<<Me haces falta>>

           Cuéntenme que creen 😏