Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Volumen 2. Capítulo 3. ¿Qué se le responde a alguien que dice "Te amo"?

Después de casi dos horas en las que Ren estuvo insiste e insiste en sacarle copias a las llaves de la habitación donde dormiría, por fin me las dio y pude retirarme de ese nido de locos.

Sobra decir que mi respuesta fue negativa ante tal solicitud. ¿Por qué demonios permitiría que una chica de la cual solo conozco el nombre tuviese en su posesión las llaves de mi apartamento?

En fin. Salí de ahí, despidiéndome de Ren quien, hasta antes de este extraño encuentro orquestado por el destino, fue una persona agradable con quien creí posible el llevarme de forma amistosa con él. Ahora mismo solo opino que está igual o más loco que su hermana. Claramente ese pensamiento no saldría de mi cabeza, ese chico es al menos 2 veces yo. Es capaz de mandarme a volar de un derechazo. Además, su padre es dueño de todo este edificio.

Yumeko no regresó en todo el tiempo que su hermano y yo pasamos ahí. Supongo que esos cursos de verano sí son extensos en cuestión de duración. ¿Saben qué? Es mejor. Así me evitaba los "Mi príncipe" salidos de su boca. No creo ser capaz de soportarle que me llame así más veces. Seré sincero, la primera vez fue lindo y, conociendo su historia, logré empatizar con ella. Incluso admito que mi corazón saltó y me imaginé montado en un corcel, yendo a un lejano castillo a rescatarla. No obstante, esa idea se diluyó tras sufrir un ataque de pena ajena al rememorar esa escena una segunda vez. Se continúo siendo apodado de ese modo tarde o temprano acabaré hartándome.

¡Nah! Problemas para el Akiro del futuro.

Me limité a suspirar pesadamente, no llevo ni medio día en Tokyo y ya quiero regresar a casa.

Ya estando enfrente la puerta, metí la llave a la perilla de esta y la giré. La habitación 4 sería la que me correspondería. La última en el segundo piso.

Si todas las habitaciones están hechas del mismo modo, probablemente sea muy grande como para que solo uno viva en sus interiores. No me quejaré, al fin y al cabo es más espacio a disfrutar. Aunque tampoco es que me agradara en demasía. Nunca tuve problemas respecto al espacio personal en casa porque tanto Aneko como yo teníamos habitaciones propias así que esa necesidad de tener mi propio sitio no era tan grande dentro mío.

Al abrir la puerta noté que las bisagras no chillaban. Eso reflejaba cuán nuevos son estos complejos.

Cuando por fin la gruesa madera de la entrada permitió que observara el interior del sitio al que llamaría "hogar" por casi 5 años, tiempo que la universidad duraría, noté que estaba... extrañamente amueblado.

Un sillón de tres asientos enfrente de una televisión no tan nueva como la de Ren. Supongo que esa también la compró y la usó de reemplazo por la que ya traía la sala del complejo.

También venía equipada con refrigerador, congelador, estufa, algunas sillas para poder comer en la barra que separaba la cocina de la sala.

Y, tal como esperaba, habían 3 puertas al lado derecho. Obviando el detalle de que debe haber baño, eso significa que dos de ellas corresponden a los cuartos.

Podría usar uno de ellos para guardar mis cosas. Algo parecido a la bodega en mi casa, donde almacenamos cajas repletas de recuerdos tanto nuestros como de papá y mamá. Recuerdo que una vez, curioseando ahí, encontré una foto de mamá sosteniendo un bate. A lo mejor era beisbolista ¿Qué se yo? Rara vez nos platica de su pasado y de la época en la que fue estudiante.

Ignoremos ese asunto.

-Supongo que no ha de haber problema en decidir cuál habitación me toca-.

Dije ante la falta de personas aquí. Yo estoy conforme con cualquiera pero hablar conmigo mismo evitaba que me sintiese solo.

Me dirigí a la última habitación al fondo a la derecha. Normalmente son los Baños que se hallan ahí. Posiblemente quisieron cambiar ese concepto tan estereotipado y por fin lo pusieron en la primera puerta a la derecha.

Caminé hacia dicho lugar, abrí el cuarto y...

-Je... cliché. Sí lo dejaron al fondo a la derecha-.

Recibí el golpe de realidad. Sobrestimé a los arquitectos de este edificio. Pudieron cambiar el curso natural de las cosas pero sus limitadas mentes les cerraron tales oportunidades.

Cómo sea. Fui a la anterior y ahí sí estaba la primera habitación.

No había mucho a resaltar.

Una cama individual pegada a la pared lateral derecha, la cual conectaba a la habitación número 1, y que a la izquierda tenía una mesa de noche donde dos cajones escalonados servían para guardar artículos varios.

También he de resaltar el estante de libros de al menos metro y medio de altura. Es perfecto para guardar todas mis novelas ligeras y mangas +18... d-digo, libros de estudio. Sí, es lo que quise decir. Libros de estudios que servirán a este joven y santo muchacho en su nueva etapa como estudiante universitario.

¿Por qué demonios me pongo nervioso y pongo excusas si estoy completamente solo aquí? Ni idea. La esquizofrenia me está pegando muy fuerte.

Dejando de lado aquella broma sobre dicha enfermedad, continuemos con el interior de donde pasaría las noches.

Junto al estante había un closet de pared de doble puerta. Es suficiente para alguien como yo, quien normalmente viste las mismas prendas a la semana.

Supongo que aquí habrá cuarto de lavado y sé usar las lavadoras perfectamente. No quiero que vengan con las tonterías de "Es que pareces foto al repetir tu forma de vestir". Uno elige la ropa que más le acomode.

Aunque... en la lista de Aneko estaba el punto de "Cambiar tu estilo". Supongo que haré compras mañana. El día en que salimos al centro comercial no pudimos visitar otras tiendas por el inesperado encuentro con Akina y las otras tres perras que me odian. Ni siquiera conozco sus nombres y la verdad nunca fueron objeto de mi interés.

¿Ren aceptará acompañarme al centro comercial? Luce idéntico al estereotipo de persona que se preocupa por su apariencia. Ha de tener conocimiento en asuntos de moda y afines a este. Igual requiero quien me guíen en esta gigantesca ciudad. Sé que soy mayor de edad y debo comportarme según mi edad pero... ¡SOY IDIOTA! ¡SÉ QUE TERMINARÉ EXTRAVIÁNDOME!

La segunda es opción es preguntarle a Yumeko. Sin embargo... significaría pasar tiempo con ella y, como ya se dieron cuenta, no soy exactamente la persona más social del mundo. Tal vez la asuste si se filtra parte de mi verdadera personalidad.

-Pero... serviría de práctica. Hablarle me ayudaría en demasía a entablar relaciones en la universidad. La única experiencia en ese ámbito que he tenido fue cuando crucé palabra con Hayami, la amiga de Aneko, en la tienda de ropa. Y no creo que cuente porque fue un intercambio entre trabajadora y cliente. Prácticamente estaba obligada a responderme y prestarme atención-.

Veo y considero mis opciones. Todo apunta a que la mejor es la segunda. De ser posible preferiría ambas. Así evitaría estar a solas con Yumeko.

No me malinterpreten. Cualquiera desearía pasar el tiempo con una belleza rubia extranjera. De hecho está en mi lista de deseos. ¡Las rubias son lo mejor que los occidentales tienen!

No obstante... no quiero dejarle una mala impresión. Es la primera chica que directamente dice que me ama o le gusto. No sé cómo reaccionar ante ella si tengo en cuenta eso en mente.

-Mentiría si dijese que mi corazón no saltó... que no estuve feliz de escucharlo...-.

Susurros de ese tipo se filtraban de mi boca mientras una estúpida sonrisa se dibujaba en la cara de este estúpido virgen sin experiencia en el amor.

¿Esa clase de poder poseen las mujeres? Solo con dos palabras, "Te amo" en este caso, fue capaz de causar estragos en mi mente y corazón.

¡Ugh! ¡Es frustrante!

Tomé asiento al borde de la cama, tirando las maletas al pie de esta.

Froté mis párpados, negando con la cabeza y suspirando pesadamente.

-¿Cuándo comenzó este periodo de popularidad? ¿Es el poder del corte de cabello? Hayami tenía razón. Si la veo en la universidad le agradeceré con un dogeza-.

La verdad dudo que ese sea el motivo por el que Yumeko se enamoró de mi. Según su hermano varios chicos se le confesaron. Dudo haber sido más guapo que ellos. Es más, dudo ser guapo.

-Le gusto... no, ella dijo que me ama... ¿Cómo se supone que reaccione a eso? Es la primera vez que experimento esto. Es agradable pero... aterrador-.

Me revuelvo el cabello en señal frustración.

¿Qué hago a partir de ahora?

¿Qué se le responde a alguien que dice "Te amo"?

No la aceptaré. Se lo dije a Ren, no la conozco y las relaciones que dan inicio desde el desconocimiento de las personas en cuestión están destinadas al fracaso. O al menos eso he leído en las novelas ligeras que he leído.

Entonces... ¿La frecuento y nos acercamos? En eso se basó la promesa que hicimos.

Y... ¿Cómo diablos hago eso?

Aunque, si consideramos la personalidad de Yumeko, es probable que ni siquiera deba mover un dedo. Ella misma insistirá.

¡Eso hiere a mi orgullo de hombre! Y sí, sí tengo. Puede no parecerlo pero hasta el enclenque guarda orgullo.

Ah... los párpados me pesan.

Tiré la espalda a la suave cama. Momentáneamente miré al techo mientras mi antebrazo me cubría la frente.

-Sé que dijiste que no hiera a terceros, Aneko. No obstante ¿Qué ocurrirá con Coleta? Dudo poder escaparme de ella y tarde o temprano se verá involucrada en el asunto de Akina-.

Sí. Si de verdad está enamorada de mi y esa emoción no se desvanece, conocerá el pasado de su "Príncipe". O sea, yo.

¡Ahhhhh qué cringe! ¡Debo dejar de autonombrarme así!

Cierro los ojos. En verdad estoy cansado y a penas son las 3 de la tarde.

Una siesta no ha de dañar a nadie. Dormiré y cuando despierte iré al supermercado más cercano. Compraré algunos víveres para no morir de hambre los próximos días, los cuales, en el papel, serán extremadamente agotadores.

¿Dónde quedó esa vida tranquila que tanto deseé? Supongo que se esfumó cuando por fin di marcha adelante en busca de un objetivo. No logras nada sin cambiarte a ti mismo y esforzarte. Y el esfuerzo trae consigo gasto de energía y tiempo.

Aunque... sinceramente... es divertido que por fin no me halle solamente flotando alrededor de este mundo sin ninguna meta.

¿Esto siente al gente cuando por fin se topa con su propia motivación? Así sea pequeña o grande.

Yo siempre tuve 2 enfoques en mi vida.

El académico, donde solo me limitaba a cursar los años de estudio y aprobar las materias. El pensamiento que predominaba en mí era "Si continúo de esa forma puedo obtener muchas oportunidades laborales y encontrar el equilibrio que tanto quiero". Luego de preparatoria quise aspirar a más porque comprendí que mis padres se esforzaron en darme lo necesario para triunfar en la vida. Por lo que apunto a convertirme en un empresario con sueldo alto.

Y el último, el familiar, donde solamente me concentraba en el bienestar propio y de las personas cercanas a mi. Claro que al entrar Akina a mi vida la incluí en esa meta. Al igual que Sachi. Pero, después de enterarme de que poco o nada significo para ella, solamente permanecen mamá, papá, Aneko y Sachi.

Sería un completo idiota si, luego de esa experiencia en la que la herí debido a mi propio dolor, no quisiera mantenerla a salvo y cerca de mi. Incluso una persona con cero tacto como yo lo comprende.

Cierto... Sachi.

Le mandaré mensaje, diciéndole que ya me instalé en el apartamento. Debe estar preocupada por mi.

Escribí el mensaje y, a medida que avanzaba, la luz del móvil golpeaba a mis ojos, cansándolos.

Y, sin darme cuenta, caí dormido, casi inmediatamente luego de que mandara el mensaje a esa pequeña diablilla.

Tal vez haya sido obra del destino o mis instintos pero evité comentarle sobre el asunto de Yumeko. Hay algo en Sachi que me causa terror y que provoca que mi subconsciente grite "¡TE MATARÁ SI SE ENTERA DE QUE UNA CHICA TE PRETENDE!". ¿Quién soy yo para ir en contra de tan claro mensaje?

-En serio Sachi, debes dejar de juntarte con Aneko-.

Murmuré antes de que el cansancio pasara factura a este cuerpo.

Tiempo después.

*¡Toc! ¡Toc! ¡Toc!*

-¿Uh?-.

De repente fui despertado por el golpeteo de la puerta de mi "hogar".

*¡Toc! ¡Toc! ¡Toc!*

La persona de fuera insistía fervientemente.

-¿Qué hora es...?-.

Hice esa pregunta al aire, sujetando el móvil y prendiendo la pantalla. La luz intensa de esta deslumbró mis ojos. En la pantalla de notificaciones tenía algunos mensajes de Sachi que por mi estado sonámbulo ignoré, concentrándome únicamente en los tres números en grande que ocupaba un tercio de la pantalla.

-¿8pm? ¿Dormí casi 5 horas?-.

Eso fue sorpresivo. ¿Tan cansado estaba? Creo que el haber comido en la casa de los Watanabe causó que me diera el denominado "Mal del puerco".

*¡Toc! ¡Toc! ¡Toc!*

Demonios. ¿Qué diablos quieren?

El ruido y la frecuencia de los golpes aumentaba mientras más segundos pasaba sin responder.

¿Será el casero o algo así? ¿No se supone que no debo de pagar absolutamente? Si solo viene y hace tal escándalo para darme la bienvenida me enojaré mucho.

Me separė de la suave y cómoda cama, estirando mis extremidades, al igual que la espalda.

*¡Toc! ¡Toc! ¡Toc!*

-¡Ya voy!-.

Grité, ligeramente irritado.

Salí de mi habitación mientras seguían llamando a la puerta.

Caminé a ritmo acelerado porque la persona del otro lado en verdad le urgía verme.

Giré la perilla y la abrí, sin quitar el seguro pasador. Pude ver quien era la visitante inesperada desde el picaporte pero olvidé que esa cosa existía.

Cuando la puerta se abrió y se detuvo debido al seguro antes mencionado, la cara de una chica se asomó con una sonrisa que me hizo saltar del miedo y que, gracias a esto, el cansancio de mi cuerpo me abandonó.

-¡¿Que demonios?!-.

Grité, dando un paso atrás.

-Príncipe-Sama...-.

Ese apodo provino de la pequeña separación entre la puerta y el marco de la misma.

Aguarden un momento...

Me froté los ojos y pude identificar a la extraña chica.

Ojos verdes.

Cabello rubio.

Mejillas sonrojadas.

Y ese inconfundible apodo.

Sí, definitivamente es Yumeko.

¡¿QUÉ MIERDA HACE AQUÍ?!

Casi me mata del susto.

-Príncipe-Sama... ¿Me dejarás entrar? Traje ingredientes para cocinarte la cena-.

Trague saliva ante aquella declaración.

Yumeko, eres aterradora... ¿En qué clase de problema acabo de meterme? ¡Ren! ¡Si tu hermana resulta ser una yandere, te mato!

*¡LAS IMÁGENES EN LOS CAPÍTULOS SON EDITS, CORTESÍA DE AlphonseMondragon. !*.

*¡CRÉDITOS A SUS RESPECTIVOS AUTORES!*.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro