Capítulo dedicado a ver la relación de Obito y su nieto, Kakashi Hyuga.

No se me confundan de Kakashi xd

Konoha era, actualmente, una aldea bastante prospera y pacífica. Después de la destrucción de todos y cada uno de los marcianos, digo, Otsusuki, la aldea había prosperado verdaderamente rápido.

Si antes los ninjas eran esenciales, lo dejaron de ser hace años.

Bueno, excepto por un período de dos a tres años hacía ya diecisiete años, cuando una "secta", dirigida por Nohara Haruka, había intentado destruir la aldea, siendo detenida por tres miembros del clan Uchiha y uno del clan Hyuga.

Aquellos Shinobis fueron Raiden, Osamu y Akemi Uchiha, hijos de Obito  Uchiha y Kakashi Hatake, junto con Naoko Hyuga, hijo menor de Sakura y Hinata.

Los cuatro shinobis sacrificaron su vida para que la paz perdurará en su villa, se les honró en la piedra de los héroes, siendo despedidos por sus familiares y compañeros.

Unos días después, Eiji, el único hijo vivo que tenían Obito y Kakashi, se entero que esperaba un hijo de su fallecido esposo, Naoko.

Y las sorpresas no pararon ahí.

Kakashi, tras una consulta que se hacía regularmente, supo que aquella enfermedad que le ocasionó problemas en el pasado volvió, pero mucho más agresiva, lo que terminó por matarlo a dos cuando Eiji tenía ocho meses de embarazo.

Solo quedaron Obito y Eiji. Hinata iba todos los días a visitar a los Uchiha y asegurarse que todo estuviera bien, hablaban, ayudaba a preparar la cena (algunas veces sus hijos o Sakura los acompañaban) y se retiraba ya en la noche.

Los Hyuga no pusieron pero con que Eiji se quedara fuera del complejo, ni tampoco que no quisiera que su hijo viviera ahí.

Y al fin llegó el tan esperado día. 16 de Enero. En medio de una nevada.

Estando únicamente Obito y Eiji en casa. Con la nieve dificultando la movilidad. Para rematar un ataque a la aldea y con ninjas médicos a mínimo 30 minutos (tomando en cuenta los ataques enemigos).

Para cuando alguien llegó, se escuchaban dos llantos. Uno de un bebé y otro de un adulto.

El mismo día en que su hijo llegó al mundo, Eiji se fue de este.

Así dejaron de ser solo Obito y Eiji, para pasar a ser Obito y Kakashi.

[×××]

—¿'On 'ta bebé? ¡Aquí 'ta! ¿'On 'ta bebé? ¡Aquí 'ta!

En la casa de Uchiha Obito se escuchaban fuertes risas de un bebé acompañado con aquellas cariñosas palabras.

Kakashi, el nieto de Obito, tenía ya siete meses. Era un sano, inquieto, curioso, traviesos, hasta cierto punto hablador, mordedor y tierno doncelito de siete meses.

Obito lo cuidaba con todo su ser. Hasta cierto punto consintiendolo mucho.

—Pero que buen niños eres, si lo eres... Y también un niño bastante oloroso puagh — Obito cargo a su nieto, quien seguía riendo pese a que su pañal se había llenado... Realmente el Uchiha se arrepentía de haberle dado papaya a Kakashi

Una vez cambiado el pañal, el peli-negro aprovecho para darle un baño a su nieto y así mismo para poder salir más tarde a hacer las compras de la semana.

Ya una hora más tarde, con Kakashi vestido con una pijama de perrito, ambos salieron de su casa para dirigirse al mercado.

Tendían a saludar mucho a Obito, acercándose aveces para apachurrar las mejillas del bebé, por lo que tardaron media más de lo que comúnmente tardaban.

—Señor Obito — hablo Inojin — Buenas tardes

—Buenas tardes — correspondió al saludo — ¿Vienes solo?

—Para nada, Shikaku viene conmigo — destapó el rostro de su hijo, que había estado cubierto por una manta verde

—Vaya que ya está grande — el Uchiha se acercó a ver al menor de los Nara, 4 meses menor que su nieto — ¿Tiene tres mese, no?

—El doctor dice que es más grande de lo que debe — suspiro — Supone que se nutrió de más

—¿Qué pasa, Kakashi? — preguntó el Uchiha al ver que su nieto se removida mucho — ¿Quieres ver al bebé?

El peli-negro acomodo al pequeño como si estuviera sentado, permitiéndole ver al pequeño Nara, al verlo, el pequeño de ojos blancos empezó a reír con alegría.

—¿Y por qué estas tan feliz o qué? — preguntó en broma

—¿Se imagina que en un futuro se casen? — bromeó Inojin, haciendo que la risa de Obito cesará al instante

—Antes muerto

[×××]

—¡Pero quiero domiiiiiir! — exclamó Kakashi de seis años, que estaba siendo arrastrado al baño por su abuelo

—¿No me estabas diciendo ayer que estabas emocionado por tu primer día en la academia? — preguntó mientras hacía más fuerza, su nieto se estaba aferrando con uñas y dientes a su cómoda cama

—¡Fue antes de saber que me tendría que levantar tan temprano!

—¡No me hagas enojar, jovencito!

—¡Tú no me levantes a las tres de la mañana!

—¡Son las dos, no las tres!

—¡Eso esta peor!

Luego de media hora, Kakashi logró volver a dormir hasta las seis, cuando no pudo librarse de su destino y tuvo que enfrentar su peor enemigo: la regadera.

—¡Apresúrate a bañarte o no te comprare dulces! — amenazo Obito

[×××]

A eso de las siete ya se encontraban fuera de la academia, varios niños despidiéndose de sus padres con un beso o un abrazo, mientras Obito le daba las mil y un bendiciones a su nieto, mientras este le daba una lista de las cosas que él Uchiha debía comprar para la despensa de la semana.

—¡Ya me voy, abuelito! — exclamó Kakashi mientras besaba la mejilla del más alto, que se encontraba de rodillas para poder ver a su nieto a la cara — ¡Nos vemos en la tarde! — y se fue corriendo hacia su salón, donde su maestro titular, Uchiha Menma, los esperaba con una sonrisa

—¡Ten cuidado!

—¡Sí, sí, que no se le olvide comprar arroz!

[×××]

—¡Abuelitoooooooo! — dos años más tarde, Kakashi llegaba muy feliz de la academia.

Ese 14 de febrero había convencido a su abuelo de dejarlo ir a comer ramen con sus amigos y regresar a casa el solo. Obito no dejaba de morderse las uñas, pero, al ver que su querido y único nieto abría la puerta, se sintió aliviado.

—¿Cómo te fue, Kakashi?

—¡Miraaaa abuelitoooo! — exclamó... Si que estaba emocionado

De su mochila sacó un paquete de chocolates... Con la caja en forma de corazón.... Y una rosa... Y tres cartas con corazoncitos.... Y llavero en forma de corazón... Y un osito de peluche con un corazón bordado... Y un cartel que decía "Me gustas"... Todo firmado por Shikaku Nara

A Obito no le gustó... Para nada.

—... Es la última vez que te devuelves tu solo

—¡¿Eh?!

[×××]

Si antes a Obito no le caía bien el niño Nara, ahora menos.

Les había tocado juntos en el equipo genin.

En la graduación los había visto agarrados de las manos.

Y el niño Nara se la vivía regalandole a Kakashi Ramos de tulipanes, gardenias y orquídeas.

—¿A dónde vas? — preguntó mientras giraba la silla giratoria hacia su nieto, que intentaba salir por la ventana... Del cuarto de Obito... Aveces no es muy listo ese niño

—¡A-Abuelo!— exclamó mientras se caía al suelo del cuarto, quedando con una pata atorada en la ventana — ¡J-Juro que no planeaba escaparme para ir a ver a Fuyu, Makomo y a Shikaku-kun!

—Castigado — sentenció

—¡¿Eh?!

[×××]

—Neh, abuelito

Algo andaba mal. Desde que tiene diez, Kakashi solo le dice Abuelito cuando debe de darle una noticia o muy mala o muy buena.

El Uchiha bajo el periódico, y miró firmemente al menor, que tenía un pequeño-gran sonrojo. Eso hizo que Obito sospechara más.

—¿Qué sucede, Kakashi?

—¿Recuerdas a Shikaku-kun?

—¿Ahora que hizo el mocoso ese?

—Etto... Que hicimos...

—¿Qué?

—Es que... — el sonrojo creció

Obito comenzó a analizar.

Estuvieron de misión con su equipo. Durante tres semanas. Donde, a la mitad el jounin a cargo regresó por no sé qué. Ahora, adolescentes de dieciséis años, hormonales, solos. En medio del bosque y sin un adulto.

Regresaron ayer a la aldea. Donde Fuyu no de aja de molestar ni a Kakashi ni a Shikaku.

Kakashi estaba más nervioso que de costumbre.

¿Eso en el cuello de su nieto era un chupón?

—J-Juro qué usamos protección — soltó, para cuando el peli-plata acordó, su abuelo ya estaba saliendo de su casa para dirigirse a la residencia Nara a vengar la inocencia perdida de su nieto.

—¡Abuelo!

[×××]

Para suerte de Shikaku, no hubo consecuencias por el frutifantastico en medio del bosque.

Claro, exceptuando la costilla rota y el pulmón perforado.

Cómo sea.

Llegaron los veintitrés años.

El año donde a Obito casi lo mandan a la cárcel por intento de asesinato.

O si, Shikaku y Kakashi se comprometieron.

La aldea pensó que se desataría una guerra mundial en aquel momento.

Pero nada malo pasó.

A excepción del casita asesinato de Shikaku, claro.

—¿En serio no te molesta? — cuestionó Kakashi a su abuelo

—No

—Abuelito

—... Mande

—Sí no te molesta... ¿Por qué no dejas de amenazarlo con ese kunai?

—Me estoy asegurando de que sea bueno para ti

—E-Esta bien, no me molesta — intento calmar Shikaku

—¿Se te permitió hablar?

—Lo lamento, Obito-san

—Es señor Uchiha, para ti, mocoso

—S-Sí, señor Uchiha

[×××]

—¿No cree que el kimono me hace ver gordo? — cuestionó Kakashi mientras se veía al espejo

—Ya te dije que esta perfecto

—El señor Itachi me dijo que el día de su boda ya no se quería casar

—¿Por qué le sigues preguntando cosas sobre mi?

—¿Y por qué no hacerlo?

—Solo vamos antes de que me arrepienta de dejarte casar con ese

—Bien

Esa tarde, Obito entregó en el altar a su nieto, quien lució una radiante sonrisa toda la ceremonia y la fiesta.

Ya al anochecer, Obito invitó a su nuevo ¿yerno? A tomar una copa de sake.

—Más te vale cuidarlo

—Téngalo por seguro, no dejaré que le pase nada

—Eso espero o te mandare a conocer a Kaguya

—¿Qué?

Diría que esta historia tiene final feliz.

Hasta cierto punto lo tiene.

Cuando Kakashi tenía veinticinco años, Obito falleció junto a las tumbas del sus hijos y su esposo.

Un año después nacieron dos gemelos, hijos de Kakashi y Shikaku, en honor a sus fallecidos abuelos, fueron nombrados como Obito y Shikamaru.

Fin :v

Wenas xd

Se nota que actualizo esto porque no tengo imaginación?

jajajajajjajaja

Ahora... Volveré a desaparecer unos días... Tal vez

Because estoy entregando proyectos finales y ya vienen los exámenes ahre

Les dejo esto en recompensa(?

Byes <3