Prólogo
¿Qué debería hacer con su amo? ¿Debería matarlo? No, eso sería una acción demasiado extremista, incluso para él. Entonces, ¿debería encerrarlo en su habitación, al menos un mes? O ¿debería castigarlo con algunas nalgadas? No, eso sería un premio para él, lo cual incumplía con las reglas que él mismo se impuso cuando inició ese tipo de trabajo. ¿Qué más podía hacer con un chico de apenas veintiún años que no sabía casi nada de la vida "normal"? Él no había conseguido ese trabajo para enseñarle los valores básicos de una persona, por algo tenía madre y padre, aunque estos pasaran la mayor parte del tiempo viajando y no precisamente por trabajo, como suele pensarse de una familia con mucho dinero, no, ellos simplemente disfrutaban malgastar su dinero en viajes innecesarios, desde la perspectiva de Park.
JungKook tenía todo, desde que nació. Jamás se esforzó por nada, ya que tuvo la suerte de nacer en una familia en donde el dinero sobraba. En cambio, Jimin ha tenido que ganarse el dinero desde joven con mucho esfuerzo y así poder mantener el pequeño departamento en donde vive él y su hermana de diecisiete años. Sus padres murieron cuando él tan sólo tenía quince años, desde entonces ha cuidado de su pequeña hermana con pequeños trabajos, pero por falta de ingresos, dejó sus estudios. Ya con veintitrés años, seguía teniendo la esperanza de que en algún momento podría terminar sus estudios.
Un día vio un anuncio, en el cual necesitaban a una niñera, incluso un niñero estaría bien, por lo que, decidió dirigirse hacia la dirección de dicha casa. Se arrepintió apenas el chico le enseñó el contrato, hecho por él y sus padres. Jimin pensó en no aceptar cuando vio el tipo de trato que haría, pero al ver la cantidad de dinero que podría ganar por cuidar a un inútil de veintiún años, aceptó, recordando su situación y, sobre todo, a su hermana menor.
Sólo constaba de tres condiciones:
Contrato de trabajo entre el amo y el sirviente:
1.- Vivir en casa de la familia Jeon.
Tendría que hablar ese tema, ya que no quería dejar sola a su hermana de diecisiete años. Aún era joven para vivir sola.
Las siguientes dos condiciones le parecieron un tanto... curiosas.
2.- El sirviente no desobedecerá al amo.
3.- Este contrato no se puede anular a menos que así lo decida el amo, de lo contrario, el sirviente tendrá que ser su esclavo de por vida, a menos que el sirviente logre cumplir un año y medio trabajando para el joven amo.
Esta última le pareció demasiado exagerado, pero en ese momento, no pensó que las ocurrencias del menor le harían dudar, en muchas ocasiones, el de si abandonar el trabajo.
Jeon JungKook realmente llevaría hasta el límite a Park Jimin. Sus ocurrencias, sólo para fastidiarlo y verlo molesto, harían que el mayor llegara a su límite de la paciencia poco a poco.
Jimin tendría que ser el niñero del joven amo, de lo contrario, sus castigos por no obedecerlo, le harían dudar de lo que llevaba creyendo durante años. Su heterosexualidad. ¿Por qué nadie le mencionó que debía leer las letras pequeñas de un contrato? Jamás le mencionaron que aquel chico tenía una vida sexual tan activa y que, aparte de ser el niñero, sirviente del joven, tendría que ser, prácticamente, un esclavo sexual, pero algo diferente de lo que se suele creer...
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