
Capítulo 1: Primer Encuentro
(amo ese video)
AVISO
Esta es la "precuela" de "En la Guerra y el Amor", pero también es considerada una "secuela" esto a partir del final canon, pero decidí dejarla como precuela ya que estoy haciendo otra cosa como secuela. Si aún no has leído "En la Guerra y el Amor" no importa, podrías leer esto primero y luego ya irte en orden, o leer primero "En la Guerra y el Amor" y luego esto, como gustes :D
~~~
~~~
Tessa era una niña de tez morena, con un cabello negro y largo que siempre caía en dos coletas que reposaban sobre su pecho, enmarcando su rostro con una elegancia inusual para alguien de su edad. A pesar de su corta edad, su inteligencia desbordante era evidente; era capaz de reparar los drones descompuestos de la compañía para la que su familia trabajaba, algo que pocos adultos podrían lograr con la misma destreza. La fortuna nunca había sido un problema para ella; vivía en una mansión opulenta, disfrutando de una vida cómoda y lujosa, propia de la clase extrema alta a la que pertenecía su familia. Sin embargo, esta vida de lujo venía acompañada de un precio alto: Tessa soportaba constantes abusos físicos y psicológicos por parte de sus padres, una carga pesada que contrastaba con su entorno de confort material.
Pero en este momento, lo que más importaba no era el sufrimiento que enfrentaba en su hogar, sino la situación crítica que tenía ante sí. Su andar torpe, una mezcla de desesperación y determinación, era provocado por la carga que llevaba consigo. Sobre sus hombros, con gran esfuerzo, transportaba un dron averiado. Este dron tenía unos ojos blancos, casi amarillos, que parecían opacos y apagados, reflejo de su estado deteriorado. El dron estaba visiblemente herido; su estructura metálica presentaba múltiples abolladuras y rasgaduras, resultado de un intento fallido de desmontaje. Tessa lo había encontrado en un basurero, casi como un despojo, y no podía permitir que ese ser mecánico, que había sido tratado con tanta crueldad, se perdiera sin luchar por su reparación.
Al llegar a la entrada de la biblioteca, Tessa buscó rápidamente a su compañera más cercana, una dron vestida de mucama. Esta dron, de nombre S, tenía unos ojos blancos brillantes y un cabello largo que caía libremente por debajo de su cintura. Sus lentes de moldura delgada eran grandes y redondos, añadiendo un toque de sofisticación a su aspecto.
- ¡S! -exclamó Tessa con urgencia, mientras se acercaba con el dron maltrecho colgado de sus hombros-, necesito tu ayuda con esto...
S, con su movimiento meticuloso y eficiente, se aproximó y, con cuidado y precisión, tomó al dron herido en sus brazos. Su capacidad para manejar objetos delicados era evidente, y su expresión reflejaba una mezcla de preocupación y comprensión.
- Los señores no van a estar felices con esto -comentó S, su voz tenía un matiz de preocupación que contrastaba con su habitual tono profesional.
- Lo sé, pero tú y yo sabemos que no podía dejarla morir -respondió Tessa con firmeza, mientras observaba cómo S examinaba al dron con una mirada experta.
S estudió la criatura en sus brazos, notando la cinta que aún estaba adherida a su cuerpo. La cinta tenía inscrito el mensaje: "Marcado para ser desmontado, comportamiento erróneo, Nombre de unidad: Cyn". Esta etiqueta, que parecía un simple pedazo de papel, era un recordatorio cruel de la vida que el dron había llevado antes de ser desechado. Tessa sabía que, a pesar del maltrato que había sufrido, Cyn merecía una oportunidad de reparación, al igual que ella misma había luchado por encontrar la suya en un mundo que a menudo le era hostil.
- Está bien... -asintió S con un suave suspiro mientras que Tessa y ella comenzaban a caminar hasta el sotano.
Una vez en el sótano, Tessa depositó a Cyn con el máximo cuidado sobre una mesa de trabajo. El sótano era un espacio abarrotado de herramientas y refacciones, una auténtica caverna de tesoros técnicos para cualquier reparador de drones. Las luces del lugar eran algo opacas, emitiendo una luz tenue que creaba sombras danzantes en las paredes. Aunque la atmósfera era un tanto lúgubre, la determinación en los ojos de Tessa y la delicadeza con la que manejaba a Cyn eran evidentes.S, con su típica eficiencia, observaba a Cyn con una mezcla de compasión y profesionalismo. Para ella, Cyn no era solo un objeto, sino una entidad que había sufrido y que merecía una segunda oportunidad. Mientras tanto, Tessa se preparaba para el proceso de reparación. Con movimientos precisos y familiarizados por la práctica, tomó las herramientas necesarias: un destornillador de precisión, una pinza, y un pequeño equipo de diagnóstico.Primero, Tessa se inclinó sobre Cyn, apagando el dron con un interruptor situado en su pecho. Esta acción no solo cesó cualquier funcionamiento activo de Cyn, sino que también minimizó el riesgo de daño adicional durante la reparación. Luego, comenzó a abrir el panel de acceso en el torso de Cyn con el destornillador, desatornillando con cuidado los tornillos que aseguraban el panel en su lugar. Cada giro del destornillador era calculado, evitando cualquier presión innecesaria que pudiera dañar los delicados componentes internos.Con el panel finalmente desprendido, Tessa empezó a examinar el interior del dron. Los cables y circuitos expuestos eran un entramado complejo, y el olor a metal y circuitos quemados era notable. Tessa comenzó a revisar los componentes internos, utilizando una pequeña lámpara para iluminar las áreas más oscuras. Su mirada se detenía en cada módulo y conector, buscando signos de daño o mal funcionamiento. Encontró algunos cables sueltos y un par de conexiones dañadas que necesitaban ser reparadas o reemplazadas.Mientras Tessa trabajaba con concentración en el interior de Cyn, S se movía por el sótano con una intención clara. Sabía que una vez completada la reparación, Cyn necesitaba ser presentado de una manera que cumpliera con las expectativas estéticas de la compañía. S comenzó a buscar entre las pilas de ropa y accesorios en el rincón del sótano, donde los artículos para drones en proceso de reparación estaban almacenados. Su primer objetivo era encontrar un vestido adecuado que pudiera usar Cyn una vez que estuviera reparada. No era un vestido común, sino uno que se ajustara a los estándares de la compañía para drones de servicio. S también buscó un gorro que era parte del uniforme estándar para los drones de trabajo, así como una peluca diseñada para cubrir la cabeza robótica de Cyn. El gorro tenía un diseño funcional y simple, mientras que la peluca, de un color gris metálico, casi blanco puro, ayudaba a ocultar la estructura del cabezal del dron y a darle un aspecto más humano y presentable.De vez en cuando, S echaba un vistazo hacia Tessa para asegurarse de que el proceso de reparación avanzaba sin problemas. Aunque S tenía un papel diferente en la operación, entendía la importancia de lo que estaban haciendo. La sincronización entre ambas, una reparadora y una asistente, era esencial para asegurar que Cyn no solo fuera funcional nuevamente, sino también adecuada para su entorno de trabajo.Tessa finalmente terminó de reemplazar los cables dañados y de asegurar las conexiones con precisión. Mientras se preparaba para volver a montar el panel, sabía que aún quedaba trabajo por hacer. El proceso de reparación estaba lejos de estar completo; había que probar el dron, realizar ajustes finos y posiblemente lidiar con problemas adicionales que podrían surgir durante la puesta en marcha. Pero al menos, Cyn estaba en buenas manos y el primer paso crucial hacia su recuperación ya había sido dado.
~~~
~~~
- ¡Quítate idiota! -exclamó J a N, empujándolo con una brusquedad que hizo que N cayera al suelo. Sin embargo, al percatarse de la presencia de Tessa cerca de ellos, su expresión cambió inmediatamente a una de fingida amabilidad y dulzura. Su tono se suavizó y adoptó una postura más cortés y complaciente-, Ey... Tessa... ¿Otra más?
Detrás de Tessa, se asomó Cyn, cuyos ojos amarillentos, que reflejaban un estado de desorientación, cambiaron rápidamente a un blanco puro, indicando que el dron estaba completamente operativo. Cyn había sido arreglada y ahora estaba vestida con el uniforme de mucama. Su cabello, previamente desordenado, había sido recogido en cuatro largas coletas: dos caían hacia el frente, enmarcando su rostro, y dos más descendían por su espalda. La imagen de Cyn, tímidamente aferrada al vestido de Tessa y asomándose con cierta incertidumbre, mostraba la mezcla de vulnerabilidad y nueva funcionalidad del dron.
Tessa, con una sonrisa alentadora, animaba a Cyn a salir de su escondite detrás de sus piernas. La pequeña dron, aún un poco insegura y consciente de su nuevo entorno, hizo un esfuerzo por avanzar hacia N, quien la observaba con curiosidad y una expresión de sorpresa.
- N, ella es tu hermana menor, Cyn -dijo Tessa con un tono cálido y orgulloso, mientras veía la reacción de N ante la revelación.
- ¿Hermana? -repitió N, su voz llena de asombro mientras procesaba la información. La idea de tener una "hermana" en el contexto de los drones era algo nuevo para él.
- Es del mismo lote de producción que tú, solo que un año después del tuyo -explicó Tessa-, es probable que incluso los armaran con las mismas herramientas.
N, con una sonrisa suave y sincera, se acercó a Cyn con una actitud amigable y acogedora. Sus movimientos eran lentos y cuidadosos, demostrando que no quería abrumar a la pequeña dron con su presencia.
- Bienvenida a casa, hermanita -dijo N, extendiendo su mano hacia Cyn con una calidez que contrastaba con la brusquedad de antes. Su gesto era un símbolo de bienvenida y aceptación, algo que Cyn necesitaba en ese momento.
Cyn, con una sonrisa tímida que reflejaba tanto su gratitud como su nerviosismo, tomó la mano de N con suavidad. La interacción entre ambos drones era delicada, marcada por un sentido de familiaridad y la promesa de apoyo mutuo. Cyn se dejó guiar por la mano de N, saliendo finalmente de su escondite detrás de las piernas de Tessa.
- ¿Todo bien, peque? -preguntó N con un tono de preocupación y ternura, al observar que Cyn parecía moverse con cierta dificultad. La pregunta mostraba un genuino interés en el bienestar de su nueva hermana.
- Es normal que le cueste moverse los primeros días -dijo Tessa, con un tono que mezclaba comprensión y paciencia-, tuve que reemplazar casi todas sus partes.
La rehabilitación de Cyn era un proceso complejo, y Tessa estaba al tanto de que la adaptación a su nuevo estado tomaría tiempo.
N asintió con la cabeza, reconociendo el esfuerzo y dedicación de Tessa en la reparación de Cyn. Mientras tanto, Cyn se apoyaba en N para poder caminar con más estabilidad. La conexión entre ellos, aunque aún reciente, prometía una relación de apoyo y compañerismo en el futuro.
Quizás... demasiado a futuro...
~~~
- Yo jamás dije eso, Dopa! -exclamó S, sentada en el suelo de la biblioteca con una actitud relajada. Estaba en medio de su descanso, y el líquido de un pequeño recipiente de gasolina, que utilizaba para su mantenimiento interno, se derramaba lentamente mientras ella bebía de él. La biblioteca, con sus estantes llenos de libros y el silencio interrumpido solo por el murmullo ocasional de las páginas, proporcionaba un ambiente de tranquilidad que contrastaba con la vivacidad de la conversación.
Dopa, un dron algo más alto que S, con un traje ajustado que acentuaba su figura y un cabello chino blanco que caía en mechones, ajustó sus lentes ovalados mientras miraba a S con escepticismo. Su expresión mostraba una mezcla de sorpresa y diversión, mientras escuchaba la acusación de S.
- Pues sonó como si dijeras que te gusta Cyn -dijo Dopa, levantando una ceja. Su tono era ligero y juguetón, como si estuviera buscando una confirmación para una suposición hecha en broma.
S, sin perder la compostura, le propinó un golpe amistoso en la cabeza al otro dron. El golpe fue suave, pero lo suficientemente contundente como para transmitir su desdén hacia la acusación.
- Pues tú también eres bisexual y yo no te ando diciendo nada de que se nota a kilómetros que te gusta N -respondió S con un tono desafiante, sin poder evitar una pequeña sonrisa. La conversación, aunque cargada de insinuaciones, mantenía un matiz de camaradería y humor entre los dos drones.
Dopa sacudió la cabeza, visiblemente sorprendido por el comentario inesperado. El golpe le había desorientado momentáneamente, y su rostro reflejaba una mezcla de incredulidad y resignación ante el enfrentamiento verbal.
- Falsas acusaciones a mi persona -replicó Dopa, tratando de mantener su seriedad a pesar de la situación.
- Por favor, Dopa, soy tu exnovia y tu amiga, no puedes mentirme -dijo S, su tono revelando una combinación de afecto y franqueza. Aunque su relación había cambiado, la confianza y la familiaridad entre ellos aún eran evidentes.
Ambos continuaron conversando apaciblemente mientras S seguía bebiendo el contenido de la botella de gasolina. La conversación fluía con naturalidad, y las bromas entre ellos parecían fortalecer su vínculo, a pesar de las tensiones anteriores.
De repente, S hizo una pausa en su bebida y miró a Dopa con una expresión pensativa. Su rostro se iluminó con una sonrisa nostálgica mientras hablaba, como si estuviera compartiendo un pensamiento que había estado contemplando en silencio.
- Quizá sí me guste un poco -dijo S repentinamente, su voz cargada de sinceridad y un toque de timidez-, Cyn -añadió, mientras dirigía su mirada hacia el espacio donde Cyn estaba cerca, inmersa en su propio mundo. S continuó con su confesión-, creo que es bastante linda, ¿sabes?
Dopa la observó con una mezcla de sorpresa y comprensión. La admisión de S sobre su afecto por Cyn añadía una nueva capa a su conversación, revelando aspectos más profundos de sus sentimientos y opiniones. La atmósfera en la biblioteca, aunque serena, ahora estaba impregnada de una sensación de revelación personal y conexión emocional entre los dos drones.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro