Veintiuno
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Jungkook observó la botella mientras leía el nombre del licor, un whisky muy popular del país que según tenía entendido había que pedirlo con anticipación. Le sorprendía la alta gama de la vida de JiAh, pues podía hacer cosas que la mayoría no podía permitirse hacer.
JiAh desde el otro lado de la isla de la cocina lo observó fijamente mientras colocaba los vasos en el mármol. Hoy él se veía espectacular, pues tenía su cabello más largo; tanto así que le llegaba a la curva del cuello y los hombros; un cabello tan oscuro y sedoso que sólo lo hacía ver más excitante cuando lo echaba atrás por estorbarle la vista. Tenía una camisa blanca de botones arremangada a los codos, y un pantalón negro con sus típicas botas negras... Al parecer tenía muchas porque cada vez aparecía con un modelo distinto.
— ¿Te gusta el whisky? — preguntó con un murmullo intentando sonar seductora, pero él sólo miraba la botella sin prestarle atención a lo que decía.
— No mucho, la verdad... — contestó dejando la botella sobre el mármol, levantó la mirada y conectó sus ojos con los de ella en una mirada fija que quería expresar lo que sentían al verse.
— Bueno, entonces también compré estas por si acaso. — se dio la vuelta abriendo el refrigerador y JungKook aprovechó de ver su cuerpo debajo de ese corto vestido de seda negro; uno que dejaba ver su espalda blanquecina a raíz de su cabello recogido en un moño bajo con algunos cabellos sueltos cayendo por su rostro bien maquillado.— Pensé que te gustarían por la última vez que me comentaste sobre tu favorita. — se dio la vuelta nuevamente y colocó sobre la mesa unas cervezas de lata para luego buscar unas jarras pequeñas donde servirlas.
— Estas sí me representan. — sonrió de lado tomando la lata para verla y leer el nombre de esa cerveza que en definitiva le encantaba.
— Pues me alegro de haberlas comprado. — sonrió ella destapando y sirviendo en la jarra, JungKook también destapó la suya y repitió la acción. Ambos levantaron las mismas y chocaron los cristales para brindar.— Hace mucho que no tomaba con un hombre aquí en mi casa. — rio suavemente para luego beber un poco de la cerveza, relamió sus labios y luego miró a JungKook hacer lo mismo.
— Es una buena causa. — sonrió de lado.— has hecho un trabajo fenomenal y gracias a ti pudimos ser oídos por un juez nuevamente... — borró un poco su sonrisa y la miró con sus ojitos redondos brillantes.— Gracias JiAh... de verdad. — asintió un poco con su voz seria y JiAh sonrió de forma sincera.
— Es mi trabajo JungKook... y... luego de leer el caso de SunJi supe que debía ayudarla. — confesó, JungKook la vio fijamente y se enfocó en cada parte de su rostro hasta que se detuvo en sus ojos.
— Nadie la había ayudado tanto, gracias. — volvió a agradecer y levantó su jarra para volver a tomar de la cerveza.
— JungKook... necesito de verdad hablar con SunJi antes de presentarme al juez con el caso, necesito tener todos los detalles del mismo para no dejar escapar algo importante en el juicio. — le dijo con sinceridad y él bajó la mirada a su jarra mientras apretaba los labios.
— Nosotros sabemos todo, hemos estado con ella desde el principio... ¿No es suficiente con nosotros? — JiAh lo miró a esos ojitos brillantes y suspiró negando una vez de forma lenta para verlo bajar de nuevo la mirada.
— Ella es la demandante y la víctima... su testimonio es primordial para el caso. — colocó su mano por encima de la muñeca de él, eso hizo que este levantara la mirada nuevamente a sus ojos.
— ¿No podríamos evitar que ella lo sepa hasta el día en que se tenga que presentar? No quiero que se preocupe en todo este tiempo... no es bueno para su salud. — añadió y JiAh miró a otro lado pensando en alguna solución.
— Debe presentarse, ella es la demandante...
— Mi padre es su tutor. — respondió interrumpiendo.
— Ella es la víctima, JungKook.. es el testigo clave para un buen resultado. — murmuró otra vez mientras se veían a los ojos, era la primera vez que se veían de forma no sexual por tanto tiempo.
JungKook suspiró sin querer preocupar a Suni por cosas que ella aún no sabía que se hacían. Había estado haciendo todo a escondidas de ella porque sabía que la misma sólo pondría trabas y no pelearía por justicia; pues, según ella ya no valía de nada.
Y él sabía que era verdad, que ella tenía razón, pero no podía permitir que se salieran con la suya.
— Le contaré antes de presentarse, pero... no quiero preocuparla antes, entiéndeme JiAh. — ella asintió entendiendo perfectamente que por la enfermedad no podía ni quería hacerla cargar con algo más fuerte.
— Te entiendo. — contestó suave para verlo bajar la mirada, allí ella decidió presionar un poco más el agarre en su muñeca para hacerlo mirarla otra vez.— JungKook no quiero ser entrometida o algo así pero... ¿Por qué tu padre tiene la tutoría de SunJi? ¿Quién es ella en tu familia? — preguntó viendo al chico mover su mandíbula inconforme.
Él parpadeó rápidamente y quitó su brazo de su agarre para erguirse y carraspear la garganta al tomar su jarra de cerveza.
— No quiero hablar de eso. — se dio la vuelta y caminó hacia la mesa de madera que JiAh tenía para sus desayunos. Tomó una de las sillas y se sentó para ver a JiAh hacer lo mismo a un lado de él.
— ¿Quieres embriagarte? — preguntó con una sonrisita para cambiar el tema y él sonrió amargamente.
— Sí. — susurró para reír un poco después de ello. JiAh se le unió y ambos se bebieron lo último de la cerveza.
— Iré por más. — se levantó y JungKook le tomó la muñeca para mirarla desde abajo al estar sentado.
— Trae el whisky. — pidió en un susurro y ella miró sus ojitos brillantes, asintió y él la soltó viéndola irse con un caminar sensual hacia el mármol donde había dejado la botella.
Se quedó unos segundos pensativa por la actitud totalmente cambiada de él, la manera de desviar el tema al querer saber de SunJi y las ganas de tomar algo fuerte después de nombrarla. Era extraño, pero no quería indagar en su vida si él no quería hablar de ella.
Volvió a caminar a la mesa bajo la mirada de JungKook; quien no dejaba de ver su cuerpo adaptado a esa delgada tela que dejaba notar sus atributos; como sus pechos y su trasero, además de esa pequeña cintura... y su rostro maquillado, Dios... JiAh estaba como quería.
— Estando descalza puedo notar mejor lo enana que eres. — comentó cuando ella llegó a la mesa; recibiendo de la misma una mirada mordaz, sonrió de lado tomándole la muñeca y tiró de ella hacia hasta sentarla en sus piernas.
— Pero gimes mucho cuando me follas... no seré tan enana para ti entonces... — continuó ella para verlo sonreír con travesura mientras escabullía una mano en sus muslos hasta meterse debajo de la tela del vestido.
— No me interesa la estatura, mientras follen bien... — murmuró acercando su nariz a la de ella mientras acariciaba la piel bajo el vestido.— lo demás no importa. — su mano libre la llevó a su rostro para acariciarlo y la vio sumirse en ese suave tacto.— ¿Quieres que hoy controle yo? — preguntó en un susurro en su oído al verla excitada con sus manos acariciando su cuerpo por encima de esa camisa blanca que lo hacía ver sexy. JiAh quería sentirlo cerca, sentir su piel haciendo contacto con la suya.
— Sí... Papi... — susurró en sus labios y JungKook sonrió encantado con ese pedido. No tuvo que decirle lo que tenía que decir, ya sabía cómo pedirle las cosas.
— Acomódate. — ordenó con su voz ronca para tomarle la cintura y levantarla de su cuerpo.
JiAh pasó una pierna al otro lado del cuerpo de él y se sentó a horcajadas de su regazo, le tomó el rostro con sus manos y se fundieron en un beso con todas las letras, uno donde sus respiraciones se agitaron mezclándose entre sí para armar una cálida nebulosa que los hacía perderse en el deseo que se estaba creando. JungKook colocó sus manos en los glúteos de ella y los masajeó un momento antes de subir y acariciar su espalda cubierta; por lo que el vestido se le subió un poco. Dejó una mano en su espalda y la otra empezó a acariciarle el muslo.
Sus chasquidos seguían controlando el sonido del ambiente y eso los excitaba aún más; por lo que JiAh no se evitó el acariciar esas hebras largas y negras que le encantaban. JungKook soltaba jadeos en respuesta a ese masaje tan placentero, pues le encantaba sentir esos dedos acariciarle cada parte de su cuerpo, es por eso que cuando JiAh se detuvo para alejarse un poco de él y acariciarle el cuello con suavidad, este la vio un poco curioso.
— Quiero proponerte algo...
Se le quedó viendo por unos segundos y luego ella se levantó de su regazo, tomó la botella y se fue a la última habitación del pasillo. JungKook por su parte se quedó un momento asimilando la situación antes de levantarse y ajustar un poco su pantalón al sentir su miembro incomodar un poco.
Al llegar a la habitación cerró la puerta detrás de sí y vio a JiAh sentada a los pies de la cama pero con las piernas en dirección al lateral izquierdo de la misma.
— Dime qué quieres proponerme pequeña pervertida. — vio un blazer colgado en el sillón individual donde una vez la folló en cuatro, lo tomó y decidió ponérselo. A JiAh le gustaba verlo en traje, según le parecía excitante; por esa misma razón compró varios trajes para que se los pusiera en algunas de sus sesiones de roles.
Otra fantasía de ella.
— Siéntate. — le apuntó el sillón y JungKook se acercó para sentarse en el mismo, entrelazó los dedos de sus manos mientras los codos estaban recostados de los posa brazos y se dedicó a esperarla.— Quería hacerte una propuesta y nuevamente seré directa... — él sonrió de lado con ello.— Quiero alargar esto.
JungKook rio un poco y empezó a negar con su cabeza.
— Creo que ya te conozco demasiado. — alargó en un canturreo y ella le alzó la ceja.— sabía que esta "celebración" traía algo oculto. — comentó haciendo comillas con sus dedos.— no eres tan impredecible Seo JiAh. — dijo su nombre en sílabas y luego se levantó del asiento para pararse frente a sus piernas de piel brillante por la crema humectante. Se inclinó un poco y le acarició con sus dedos desde el tobillo hasta su muslo, para así colocarse sobre ella en la cama luego de apoyarse de su otra mano.— ¿Te gusta como te folla tu papi, preciosa? — susurró en sus labios y ella asintió mirando estos. Le parecían tan atractivos los piercings que allí adornaban.
JiAh llevó una mano a su cuello y lo atrajo a sus labios para atrapar los suyos en un beso necesitado.
— Podemos hacer tantas cosas si te lo propones... — nuevamente le susurró para intentar convencerlo.— podemos tenerlo todo si seguimos con esto... — volvió a besarlo y él aún sumido en el sabor de sus besos simplemente suspiró deleitándose con ese placer.
— Estás tan obsesionada JiAh. — susurró en respuesta separándose para colocarse a horcajadas de ella y dejarla entre sus piernas con su vestido subido dejando ver sus bragas negras de encaje, eso lo hizo dudar un poco.
JiAh se quedó acostada sobre la cama mientras lo miraba sobre ella. Un hombre escultural, un Dios griego... o mejor: su Lucifer.
— ¿Acaso no quieres? Es más placer para ti. — removió sus piernas entre sí para frotarse y se llevó la punta de su dedo índice a la boca para así morderlo con suavidad mientras lo veía con seducción.
Jungkook sonrió encantado con ese gesto y se acercó para apoderarse de sus labios nuevamente. Le subió un poco más el vestido de seda y luego colocó tres de sus dedos en su intimidad ya mojada.
— Oh~ eres una zorra JiAh. — susurró al ir a su oído. Sonrió aún más encantado de mojarla de esa manera tan sucia.— Estás muy mojada... — alargó en otro susurro.— tan lista para enterrarme en ti y hacerte gritar. — volvió a susurrar.
JiAh soltó un gemido bajito y llevó sus manos a ese cabello sedoso.
— Tócame. — susurró entre jadeos.— Quiero sentirte. — gimió algo agudo y JungKook mordió su cuello con suavidad para sentir su cabello presionado como respuesta.
Movió sus dedos con suavidad y ella empezó a removerse inquieta; deseosa por más toques suyos, por tenerlo ya dentro de ella.
— Déjame saborearte primero. — dijo en su oído para luego ir a sus labios y besarlos con parsimonia.
Empezó bajando a su barbilla y luego se fue directo a su pecho; allí mordió y besó cada trazo de piel hasta jugar con sus pezones erectos por el contacto de su boca. A JungKook le encantaba saborearlos y sentirlos de esa manera erguida gracias a él. Con su nariz trazó un camino por encima de la tela y llegó a su intimidad, allí dio un beso por encima del encaje y sonrió para morder su labio inferior mientras tomaba el elástico y los bajaba.
— Dios~ — susurró al sentir el beso del chico en la cara interna de su muslo.
Él empezó su trabajo con lentitud mientras succionaba su clítoris con suavidad, uno que soltaba cuando quería pasar su lengua desde su entrada hasta nuevamente su botón de placer.
— Eres deliciosa. — besó su labio superior vaginal y sonrió relamiendo sus labios para así introducir dos de sus dedos en su interior.
— Ah~ Dios... — se removió inquieta y él disfrutó verla así de desesperada.— El clóset... — susurró con sus ojos cerrados y él levantó la mirada para verla fijamente, JiAh abrió los ojos y lo miró también para luego apuntar hacia un clóset pequeño que tenía a un lado de una ventana.
Él se levantó y fue hacia el mismo, al abrirlo vio varios objetos disponibles para darle placer a la chica aún acostada sobre la cama.
— JiAh, JiAh, JiAh... — repitió en un tono burlón pero deseoso de ver aquello.— en verdad eres una sucia... pervertida... — volteó a verla con una sonrisa de lado y prosiguió.— me encanta. — rio un poco y volteó nuevamente al clóset.
Tomó un vibrador pequeño de color gris y caminó de regreso a ella con una sonrisa lasciva y traviesa. Encendió el aparato cuando se arrodilló entre sus piernas abiertas y lo presionó en su clítoris hinchado y débil.
— Ah~ Dios... — soltó en un gemido y él sonrió moviendo suavemente el aparato.
Al acercarse a su intimidad nuevamente empezó a jugar con ese botón débil introduciendo el vibrador en su interior, dándole suaves estocadas mientras succionaba su clítoris. Algo que JiAh no pudo soportar por mucho, pues unas cuantas estocadas y se corrió soltando un gemido liberador.
— Eso es. — le felicitó.— una buena corrida para una buena zorrita. — susurró sobre su intimidad para besar luego la cara interna de su muslo. Subió hacia su rostro y le besó los labios con deseo, un deseo tan intenso que se veía reflejado en su erecto amigo. Con una sonrisa maliciosa le acarició los labios con su pulgar.— Ahora necesito de tu boquita, preciosa.
Ella sonrió de lado y colocó sus manos en esos fuertes hombros para quitarle el blazer, lo empujó para dejarlo acostado sobre la cama y ahora fue su turno de arrodillarse entre esos muslos ejercitados. Empezó a desabrochar su cinturón y continuó con el botón de esos Jeans ajustados; unos que al revelar lo oculto le mostró un gran bulto debajo de sus bóxers grises, al bajar el elástico un poco salió a su encuentro ese miembro que tanto le encantaba. Su piel tan suave la acarició su lengua al pasarla por todo el largo de este, dándole así a JiAh el privilegio de escucharlo sisear un poco.
— Eso es nena... mételo todo. — acarició los cabellos de ella y sus miradas se encontraron cuando JiAh procedió a introducir todo el miembro en su boca, haciéndole succiones en la punta que lo hacían cerrar los ojos complacido.— Mierda~ JiAh eres tan buena en esto... maldición... — susurró entre jadeos y gemidos. Ella continuó usando ahora su mano y él sintió que iba a desfallecer allí mismo, por esa razón enterró sus dedos en esos cabellos castaños y la ayudó a ir más rápido.— Ah~ joder, JiAh... — gimió sintiendo su abdomen bajo contraerse para luego de unas succiones soltar todo su esperma en su boca y garganta.
JiAh se separó relamiendo sus labios y se quedó de rodillas limpiando sus labios frente a él; quien observó toda esa acción con sus ojos filosos y cazadores. Los tirantes del vestido habían caído un poco, por lo que se le veía parte de los pezones... verla así lo excitaba de sobre manera. Tiró del borde inferior del vestido y la atrajo un poco hacia él, pues se sentía más deseoso de ella y su miembro estaba volviendo a despertar; el cual JiAh sintió en su intimidad cuando la colocó a horcajadas sobre su regazo.
Con una mirada se dijeron todo, y JiAh por inercia se estiró hacia la mesa a un lado de la cama; donde permanecía una caja pequeña con condones, tomó uno y lo destapó para luego tomarle el miembro y masajearlo suavemente, quería estimularlo un poco más antes de poderlo cubrir con el látex.
— Anda preciosa... Fóllate, quiero verte hacerlo solita. — susurró deseoso mientras le acariciaba un muslo con su mano.
JiAh sin decir nada le cubrió el miembro con el látex y se colocó en posición antes de introducirlo con lentitud en su interior. Ambos soltaron un gemido por lo bien que se sentían al unirse con la humedad de su lado, lo hacía más delicioso al poder moverse sin incomodidad; y eso les gustaba de sobre manera. Ninguno podía negar lo bien que se sentía cuando ambos estaban juntos en una cama, pues todo era placer para ambos.
JiAh saltaba con frenesí mientras JungKook sólo le acariciaba su cuerpo a su antojo, masajeando sus pechos y apretando su cintura... JiAh era una Diosa para él.
— JungKook... — él le dio una palmada en su trasero para corregirla y ella chilló comprendiendo.— me voy a correr papi... — susurró en un gemido para luego morder su labio inferior deseosa por llegar a su punto de placer total.
Él se levantó y quedó sentado para tomarla del cuello y acercarla a sus labios sin besarla.
— Córrete... — ordenó en un gruñido sobre sus labios. Entonces a raíz de eso JiAh sintió que nuevamente se liberaba de esa presión. El pelinegro y sudado chico siguió ayudándola a moverse aún más rápido y eso la hizo gemir alto por la sobre excitación, así hasta que fue el turno de JungKook de liberarse.— Ah~ bien hecho. — susurró sonriente. Ambos estaban tan sudados que sus ropas ya se sentían húmedas.
— Esto es una prueba de lo que te decía de mi propuesta. — comentó en otro susurro para sonreír encantada con sus ojos cerrados.
JungKook abrió los ojos y la miró toda despeinada, sudada y jadeante sobre él. Una vista tan sexy de una Diosa. Ambos soltaron una risita cómplice y se fundieron en un beso apasionado.
Eso tenía que servirle como prueba para que se quedara con ella luego de su ayuda legal.
El anterior capítulo tuvo buena interacción de ustedes, por eso subí este hoy ♥
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