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Diecinueve

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Ni siquiera sabía porqué lo estaba haciendo, ella no tenía porqué hacerlo en realidad. Pero él era su mejor amigo, obviamente no podía decir que como su hermano porque bueno, sería escalofriante y asqueroso... pero el hecho de estar pasando situaciones que los hagan dejar de hablarse tampoco era lo que quería.

Le dejó un mensaje donde le decía que podía llegar hasta su oficina y así hablaban mejor. No recibió respuesta hasta unas horas después donde un emoji del pulgar arriba era lo único que estaba en su mensaje. Suspiró agotada mientras llevaba los dedos a sus ojos y los masajeaba un poco. Había dormido bien, pero luego de la follada mañanera que le brindó JungKook perdió todas sus energías.

Tomó la taza de café y le dio otro sorbo cuando vio la puerta abrirse con suavidad y allí se dejó ver su mejor amigo con su humor de perro rabioso. Parecía que iba a explotar por sus mejillas coloradas de la molestia. Cerró la puerta detrás de sí y caminó hasta pararse frente al escritorio, allí puso sus manos y se recostó de estas.

- ¿Lo conoces al menos JiAh? - preguntó molesto y ella rodó los ojos.

- No necesito hacerlo más allá... sólo tenemos ese trato en lo sexual, es todo. - se encogió de hombros.

- JiAh no puedes andar acostándote con cualquiera así como así... eres una abogada muy reconocida, cualquier cosa que digan de ti y destruyen tu carrera. - le volvió a regañar preocupado. En realidad le preocupaba que pudiesen dañar a su mejor amiga.

- No hay que temer nada, él no me destruirá. - negó con suavidad y Jimin también lo hizo pero hacia las respuestas de ella.

- ¿De dónde lo conociste? - preguntó otra vez.

- Jimin, lo siento... pero eso no es de tu incumbencia. - aclaró con suavidad para no sonar tosca.- estoy lo suficientemente grandecita como para saber qué es bueno y qué es malo para mi.

- Yo sólo me preocupo por ti, JiAh. - volvió a alzar un poco la voz y ella lo vio de forma filosa.- ¿Desde cuándo? - se refirió a ella con Jungkook.

- Tampoco te incumbe... - le dijo esta vez más seria y se levantó del escritorio para darle la vuelta y colocarse frente a él.- yo creo que ya es hora de que te dejes de preocupar por mi y te enfoques en tu relación con Leah. - presionó su dedo índice en el pecho de él y este mordió su labio inferior desviando la mirada.

- Terminé con Leah. - murmuró viéndola a los ojos.

- Ah... seguro vuelven la próxima semana. - le animó dándole una palmada en el hombro.

- No JiAh, no estás entendiendo. - negó con su rostro.- ella no terminó conmigo, yo terminé con ella. - aclaró y vio el ceño fruncido de JiAh. Sí, era extraño ya que él nunca había terminado con ella, más bien ella había terminado con él varias veces pero igual lo perdonaba y volvían a la semana.

- O sea... ¿Terminaron de verdad? - quitó su mano de él y lo vio asentir.- ¿Por qué? - preguntó confundida.

- Es que yo no podía seguir en esa relación... y debía dejarla hacer su vida. - añadió pero JiAh frunció el ceño aún más, confundida por ello. Debía haber algo más para que Jimin tomara la decisión definitiva.

- ¿Qué pasó en realidad, Jimin? - preguntó curiosa. Ella lo conocía demasiado bien.

- Me pidió que nos comprometieramos, que sus padres lo estaban hablando de por sí con los míos... - ella abrió los ojos en grande y suspiró.- Sabes que las cosas así no me gustan JiAh, y si no le había propuesto matrimonio es porque no quiero casarme aún. - dijo desesperado. Tal vez por eso la estaba buscando para hablar tan temprano en la mañana y a pie por la ciudad.- lo hablé con Leah muy temprano en la mañana y se molestó demasiado... Al final sólo le dije que lo mejor era dejar nuestra relación hasta allí y no seguir hablando del tema.

El ambiente se volvió silencioso de pronto, JiAh no sabía qué decir referente a eso.

- ¿Y cómo tomó el rompimiento? - preguntó por lo bajo viendo al chico pensativo.

- Nada bien. - negó.- se puso a llorar mientras me decía que no la dejara... - negó otra vez con su cabeza.- Sabes que no me gusta que se comporte así tan sumisa y dependiente de mi, mucho más sabiendo como soy y estando clara en ello... - suspiró viendo los ojos castaños de su amiga y prosiguió.- hay otra cosa que debes saber.

- ¿Hay más? - preguntó un poco sorprendida viéndolo asentir.

- Leah sabe lo de nosotros. - comentó viendo como su mejor amiga cerraba los ojos con fuerza, parecía molesta. En realidad estaba molesta, porque lo de ella y Jimin sólo fue sexo, y no quería problemas con Leah por eso cuando sabía todos los cuernos que su novio le había montado.

- ¿Es en serio? - él volteó la mirada y suspiró otra vez.

- Bueno lo insinuó en realidad... pero no lo acepté ni lo negué para no darte problemas a ti. - murmuró acercándose un poco a su rostro.- JiAh... sabes que jamás te dañaría ¿verdad? - ella asintió y vio sus ojos brillar.- Leah era mi novia... pero para mi la persona más importante luego de mis padre eres tu. - tomó sus antebrazos y la atrajo a su cuerpo para abrazarla.

- Jimin... - intentó separarse pero él no la dejó.

- Ese imbécil te va a dañar... lo sé. - murmuró sobre la cabeza de ella y suspiró en su cabello.

- Sabes que no dependo de ningún hombre. - le dijo en su oído por estar abrazados.

- ¿Ya no quieres estar conmigo? - cambió el tema y JiAh se separó de él para tomarle el rostro entre sus manos. Jimin era precioso.

- Jimin, eres mi mejor amigo y te adoro, te quiero muchísimo y eso nunca va a cambiar. - murmuró sonriéndole suavemente.

- No respondes a mi pregunta. - interrumpió con una sonrisa sin ganas.- vas a dejarme por él ¿no es así? - ella no respondió.- ¿Lo prefieres a él? - ella sonrió de lado por la ternura que a veces emanaba su amigo.

- Tu y yo no somos novios... y él y yo tampoco... así que no prefiero a ninguno. - comentó con una risita viéndolo cambiar su gesto a uno entristecido.

- Si quieres puedo hacer lo que él hace pero no me cambies ¿si? - le pidió nuevamente y JiAh rio.

- ¿Qué es lo que le pasa a mi mejor amigo Park Jimin, casanova mujeriergo? - él respondió con una risita similar y luego le quitó las manos de su rostro.

- Pasa que no quiero dejar de hacer lo que hacemos JiAh... tu y yo nos complementamos bien, y lo sabes... - ella negó recordando unas palabras.

"Soy egoísta... no me gusta compartir...así que mientras te follo... no quiero que más nadie lo haga. ¿Entendido?"

- Jimin sabes que eso no es así... - susurró suavemente y él le tomó el cuello con delicadeza. Todo lo contrario a JungKook, quien siempre la tomaba de allí con fuerza.

Por una parte le gustaba el trato delicado de Jimin... pero por otro lado, el lado más salvaje de JiAh, le encantaba el trato rudo de JungKook. ¿Por qué no se podía quedar con ambos?

Quiso reír por ese pensamiento.

- Entonces... - alargó en pregunta y ella le sonrió.

- Creo que deberías ir a tu apartamento y relajarte un rato. Lo necesitas. - aconsejó y él asintió lentamente.

Le acarició la barbilla y luego la mejilla con una sonrisa antes de darse la vuelta y empezar a caminar hacia la puerta.

- Jimin. - llamó luego de acercarse y tomarle la mano, él se dio la vuelta prestándole atención para después verla acercarse y tomarle las mejillas uniendo sus labios en un beso suave y corto.- Siempre serás mío antes que de alguien más.

Ambos rieron y después se abrazaron con suavidad, ella lo sintió oler su cabello para después besar su mejilla.

- Estamos hablando hermosa. - murmuró en su oído y luego se separó con una gran sonrisa antes de salir por esa puerta.

JiAh relamió sus labios y sonrió. Sí, estaba siendo una zorra, pero Jimin definitivamente formaba parte de lo que era ella hoy en día; por lo que no podía quedar en malos términos con él. Quizás recuperaría esa relación cuando el caso terminara.

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Jungkook entró a su casa viendo a su padre preparando el almuerzo en la cocina. Caminó hacia él llevando las bolsas con las compras que había hecho de camino allí.

- JungKook, llegaste. - sonrió dándole esa calidez paternal que tanto le gustaba de su papá.- me había preocupado que en la mañana no te vi en tu habitación. ¿Dónde estabas? - preguntó curioso mientras colocaba unas frutas en la licuadora.

- Trabajé horas extras y me quedé cerrando el lugar. - excusó sintiéndose mal por nuevamente mentirle a su padre, pero debía hacerlo, no iba a decirle que literalmente se estaba prostituyendo con tal de poder ayudar a Suni.

- JungKook sé que sientes una gran responsabilidad pero no es bueno que duermas tan poco tiempo y que no sea en las noches. - volvió a decir su padre preocupado.

- Lo sé, sólo que... tuve la oportunidad de ganar un dinero extra. - le dijo con suavidad y después decidió cambiar la conversación.- ¿Cómo durmió Suni?

- Bien, anoche no sintió dolores y pudo dormir con tranquilidad. - el más joven asintió tranquilo con la notificación y decidió ir hacia la habitación de la nombrada.

Entró a la misma viéndola despierta pero con su mirada perdida en la ventana.

- Hola nena. - saludó con una amplia sonrisa y la chica lo miró para devolverle una suave.- me contó mi padre que dormiste bien. - se acercó a ella y se sentó a su lado en la cama.

- Kook... - dijo con suavidad mientras sonreía. Él la rodeó con su brazo y sintió su cabeza recostarse en su pecho, así que le dio un beso en ésta; cubierta por un gorro.

- ¿Pasaste bien la noche? - preguntó otra vez y ella murmuró un sonido afirmativo.- eso es bueno preciosa. - volvió a dejar otro beso en su cabeza y luego ella se separó para verlo.

- Estuve viendo el amanecer hasta ahora que ya son más de las once de la mañana. - se rio un poco y él la imitó.- ¿Sabes? Estuve viendo el paisaje y me decía a mi misma lo hermosa que es la vida y no la valoramos lo suficiente... - él sonrió con suavidad viéndola fijamente con su mirada embobada. Ella siempre decía frases como esas, y cuando lo hacía era porque venía una reflexión detrás de eso.- Kook... te he dicho que no te mates trabajando, me gustaria que disfrutaras tanto como puedas de la vida... a veces estamos bien y otras veces estamos en una cama todo el día como yo. - se encogió de hombros con suavidad.

- Lo sé, Suni... pero sabes que lo hago porque quiero, y sabes que disfruto de hacer algo por mi propia voluntad. - le dijo con más suavidad y tacto en su voz.- es más deberíamos pasear hoy en la tarde ¿te parece? - ella lo miró ilusionada y él asintió. Le encantaba verla sonreír así, muy poco lo hacía a pesar de ser muy optimista en todo.

- Muero por salir y tomar un poco de aire fresco que no sea el aire del hospital... es muy triste. - él rio un poco asintiendo de acuerdo. Le tomó la mano y luego la llevó a sus labios para besarla con suavidad, siempre trataba a Suni de la forma más suave que podía.- Kook. - volvió a llamar y él la miró.- deberías empezar a hacer tu vida... - él la miró fijamente.- has dedicado mucho tiempo a cuidarme al igual que tu padre, y... siento que te estoy quitando un tiempo tan valioso para conseguir a alguien que te acompañe en todos tus momentos.

- Suni. - regañó con suavidad. Siempre que podía le repetía lo mismo.- Sabes que si quisiera hacerlo ya lo hubiese hecho. - ella asintió.

- Lo sé, eres imparable. - rio con suavidad y él se le unió.- pero creo que de verdad ya es hora de que empieces a planificar tu vida... - susurró acostando su cabeza al pecho de él mientras observaba la ventana.

Jungkook no dijo nada y simplemente la abrazó con suavidad a su pecho. Suni siempre le brindaba calidez a pesar de su piel tan fría y delgada... dio un beso a su cabeza otra vez y se quedó viendo también a la ventana frente a ellos.

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