10: Rick Loco Grimes
¿Por que es tan linda? Su ensoñación por la cercanía con Robin lo estaba volviendo bobo y loco. Ambos sentía todo un remolino como el de Dorothy del Mago De Oz, solo que no era causado por algo mágico (o tal vez si) , sino que era causado por su cercania. Peor fue cuando una mano toco la otra, dando un cosquilleo de la mano hasta el pecho, sus manos se unieron firmemente dando caricias leves.
— Te extrañe.
— Yo más, Carl — decir eso había salido para intentar calmar el ambiente de ambos, aunque no lo hacía.
Esa sonrisa le sentía perfectamente bien a Carl, su gorro de Sheriff le daba un toque diferente (a Robin le gustaba como le quedaba). Pero Carl no podía decir lo mismo por no ver los dientes de Robin, ya que ella le dedicaba una sonrisa, pero sin mostrar la dentadura siendo ladeada y muy leve.
Los gruñidos cesaron, Carl se inclinó queriendo observar que no hubiera peligros cerca, como no lo había, Carl salio primero antes que Robin protestara. Salieron juntos con las manos agarradas y ambos las vieron sin saber que decir.
— Debemos irnos — Robin asintió, pudo notar como sonreía leve viendo el agarre que tenían al tirar de ella, ocasionando que sonriera la castaña.
Lamentablemente duro poco su agarre, porque Robin se aventuró saltando unas raíces dejando a Carl como espectador de lo que hacia , se veía tan tierna pero sabía que podía ser tierna y una persona capaz de sobrevivir contra caminantes. Sus manos fueron a sus bolsillos mirando el frente y los costados por si habían más infectados cerca.
Sus corazones y sus mentes no paraban de procesar ese momento, esa conexión que les dio escalofríos y ganas de irse corriendo de esas emociones. Y por afuera, tanto Robin como Carl querían ignorar lo sucedido como si no hubiera pasado.
Aun así, Carl sabía que estaba volviéndose un loco enamorado por Robin.
— ¿Recuerdas cuando no querías bajar del árbol por miedo?
— Si, fue horrendo — hizo una mueca Carl por ese recuerdo.
— Yo de a poco aprendi a escalar, tuve un gran físico y no es que me gustara tanto hacer deporte — Robin se subió a una raíz de árbol haciendo equilibrio y dio un salto hacia adelante.
— ¿Asi sobreviviste? — esa pregunta dejó pensando a Robin, pero por alguna extraña razón asintió algo insegura de la respuesta.
— Llegar aca fue raro, es como si nunca hubieran visto un caminante, como si no se...
— Fueran normales — ella asintió — Papá dice que debemos acostumbrarnos.
— Deberíamos, pero es difícil y si lo hacemos podemos volvernos débiles — dejó de andar por las raíces y se puso a la par del chico.
— También dice que esto es por Judith. Nunca tuvo una vida normal, nació en una prisión abandonada cerca de caminantes.
— Que agradable historia — uso el sarcasmo acomodando la improvisada venda en su mano — Me da pena Judith, por nacer en pleno desastre.
— Fue una aventura peligrosa cuidarla, no es fácil sobrevivir con una bebé — definitivamente Judith podía ser su mayor debilidad.
— Me sigo preguntándo como sigues vivo — Carl ofendido la miro mal y le dio un pequeño empujón — Que sensible eres, Grimes.
— Solo me ofende que desconfíes de mi fuerza — se defendió encogiendose de hombros.
— Entre los dos, seguro yo soy mejor — el ego en Robin parecía habitual en estos tiempos.
— Nunca te ví en acción, cuando lo vea, juzgare — le guiño el ojo y la contraria rodo los ojos.
Para Robin, el chico llegaba a ser sensible y molesto, pero lo quería y así le gustaba pasar tiempo con el.
Siguieron caminando hablando de vez en cuando por no querer llamar la atención de personas ajenas o infectados. Fueron risas, recuerdos, quejas de Carl, bromas de Robin lo que alegraba el ambiente entre ambos.
— Claramente que no quería mis 15, son una mierda para mi. Nada es como vos queres — Robin bufo — O sea, todo mal.
— Yo habria hecho un gran 15, hubiera sido el mejor y claro... Estaría en el camino de rosas — con firmeza afirmo lo último.
— Lo dudo, a esa edad seguro todo estaría ambientado en las pelotudeces de un adolescentes como vos. Y seguro habríamos cambiado de gustos.
— Nunca podremos saberlo — Carl se encogió de hombros con un poco de melancolía.
— Yo si, creo que habrías puesto una estatua de Iron Man — bromeó al ver su mal estado.
— Claro que no — nego repetidas veces — Iría Capitán América, obviamente.
Robin comenzo a reírse y Carl bufo al ver como se reía de su amor hacia ese superhéroe, era su idolo. Aun así se unió a la risa por que Robin se reía de una manera muy contagiosa.
— Hace tiempo no me divertía tanto — confeso el chico luego de reír.
— Es porque no estaba yo — bromeó antes de avanzar más por que la caminata se le hacia muy larga.
Seguramente... Dijo una parte de la cabeza de Carl, quedó viendo la espalda de Robin y con una sonrisa se acercó más para seguir pasando el tiempo.
El hablar con Robin era algo que haría toda su vida, soportaba sus momentos de ego (aun le sorprendía ese ego), rodaba los ojos cuando ella bromeaba con cosas que a él "le molestaban".
Río cuando Robin casi se cae al querer trepar un árbol.
— Perdiste el don — canturreo un poco y la contraria rodo los ojos.
— Era como Katniss sobreviviendo los Juegos del Hambre — el tono usado fue uno de queja, estaba enojada consigo misma por lo sucedido.
— ¿Y que más?, ¿Tuviste a un Cato que quería matarte y estaba re loco?
Robin se quedó callada, no dijo palabra y solo se quedó en un trance que le impidió contestar. El ojiazul quedó en silencio viendo aquello, quería preguntar que le había pasado a Robin, podía ver que algo ocultaba, y quería averiguarlo para hacerle saber que estaría para ella.
— Aja... — murmuro siguiendo el camino recordando con cada paso esa noche sangrienta.
Carl preocupado la siguió, estaba en duda con ella. Pero como era Robin, se la dejaba pasar, y además, sus emociones con lo sucedido con Robin y esos nuevos sentimientos que crecían le hicieron dejar en el olvido aquello.
(......)
— ¿Recuerdas cuando éramos fans de Spice Girls?
El tema de hablar sobre las películas de terror a tirar tales cosas, sus temas eran muy variados si querían.
Al final, Carl había olvidado en serio la respuesta de Robin, era como si su cabeza no quisiera pensar tan mal de la chica, se negaba a pensar que podría ocultar algo.
— Solo era fan de Wannabe — aclaró Robin.
Esa canción había salido hace años y desde que la conocieron, con Carl se enamoraron de aquella canción al punto que siempre se oía en la habitación. La canción tenía su tiempo pero para los infantes parecía un hit nuevo.
— Ir you wanna be my lover, you gotta get with my friends — canto Robin dando mini pasos de baile al caminar — Gotta get with my friends.
— Make it last forever, friendship never ends.
Carl detuvo la caminata en un momento para darle una vuelta quedando otra vez más cerca. Robin disimulo lo que sintió dándole un besito en su nariz y volver a caminar de la mano de Carl, y este intento hacerlo riéndose a la par para que no viera sus nervios.
— Vamos ya, Grimes.
Ambos entre empujones como si fuesen niños caminaron saliéndose del bosque llegando a la parte de cemento, Alexandría estaba cerca y ninguno por fortuna no estaba cansado. Habían probado lo que era caminar horas, o hasta días, así que sin problema el camino hacia Alexandría era poco comparado con lo que habían caminado antes.
— Papá me mataría si supiera que salí.
— Y a mi, ese hombre me entro a patadas a casa cuando me desperté de madrugada.
— ¿Asi que por eso apareciste de la nada en la cocina con Michonne?, yo pensaba que era por que me extrañabas — se quejó el chico.
— Digamos que si, casi muero del susto. Y el tono tan serio que tiene — una mueca apareció en Robin.
— Es asi, bueno conmigo no... Cuando la conoci andaba con caminantes de guardianes y así pasaba las hordas sin que le hicieran algo. Era muy inteligente — la admiración de Carl por esos métodos de Michonne eran claras.
— Algún día lo haré cuando este en problemas. ¿Y como hace que no la muerdan?
— Le saca los dientes, se los destroza, y cortas sus brazos para que no la rasguñen, los que están cercas los mata con la katana — ante eso, Robin solo un silbido sorprendída por eso.
— Sería tan cool como Daryl, ahora quiero ser Michonne y Daryl juntos. Sería invencible.
Carl asintió con una sonrisa, pensar que no hace poco las esperanzas de volver a verla le eran imposible, ahora estaba ella ahí al lado hablando sobre distintas cosas que le importaban. Era tener a la mismísima Alegría a su lado.
(....)
Entraron a Alexandría trepando otra vez, debían alejarse por el castigo, porque sino el plazo de tiempo de su castigo se sumará a más y más. No quería tener toda la vida un castigo (a su vista) inecesario.
— No me vas a acompañar.
— Claro que si, no quiero que te pase algo malo — la cara de Robin se volvió confusión y alteración al mismo tiempo.
— ¡Vivimos al lado! — grito la chica y Carl se sobresalto.
— Bueno, pero igual. Vamos Robin, total debemos seguir el mismo camino — dicho eso, la castaña gruño y Carl sonrio victorioso.
Alexandría era tranquilo, el ambiente que tenía en esos momentos era de que nadie estaba afuera y estarían en su mundo dentro de sus casas.
Pero no duro, por personas que corrían de una forma desesperada. Confundidos, los recién llegados fueron caminando intrigados del porque de esas corridas y la desesperación en sus rostros siendo que siempre están tranquilos.
No esperaron encontrar a Rick peleando con Pete, el bastardo marido de Jessie. Le parecía correcto a Robin que golpeara a ese tarado, pero había consecuencia y era el hecho de que Deanna claramente no estaría contenta con lo sucedido.
Carl quiso meterse tomando los hombros de Rick, pero fue en vano ya que cayó al suelo. Robin automáticamente fue a ayudar a que se levante el chico tirando de este para que no intentara otra vez algo más, llevandolo donde Mikey con Enid veía el espectáculo.
— Se lo merece — escucho a Enid susurrar.
— Lo sé — la chica miro de reojo como Mikey suspiraba diciendo eso.
El karma, lo sabía. Tarde o temprano Pete Anderson pasaría por algo tan malo o parecido a lo que hacia sufrir a su familia, Mikey siempre lo supo.
Rick estaba rojo, Pete parecia menos dañado aúnque tuviera sangre. Hubo un momento que Rick le ganó tomándolo del cuello sacándole la respiración poco a poco. Lo quería muerto, quería que ese bastardo no volviera a atacar a Jessie. Deanna apareció cansada, había corrido como los demás ante el conflicto de esos dos, todo el escandolo ya era observado por casa habitante de Alexandría, sumándose Nicholás y Glenn al final.
— ¡Basta! — grito cansada la mujer — Ya basta... Ahora.
Pero no, el amenazo a Pete con palabras que algunos de los espectadores no podían escuchar con claridad.
— ¡Diablos Rick, te dije "Basta"!
Sam estaría enterándose de todo ese desmadre, y si, efectivamente Sam estaba viendo todo (por suerte Carol estaba para el).
Robin (que había visto a los demás habitantes) al volver sus ojos hacia Rick y que este sacara un arma apuntando a los que se acercaban, la alertó de un futuro peligro. Trago saliva y puso atrás a Mikey, Enid y Carl (aunque este último salió de atrás e intercambio lugares con Robin).
— ¿O que?, ¿Me van a echar? — dijo hacia Deanna.
— Baja esa arma, Rick.
La orden de Deanna lo hizo pensar, y el alivio en varios habitantes era notorio. Aun así, el no bajaba el arma.
— No lo entienden, ¡Ninguno! — bajo el arma pero aún estaba en mano, preparada para disparar — Sabemos que hay que hacer y lo hacemos, somos los que sobrevivimos. ¡Ustedes! — señalo a los de Alexandría — se quedan sentados y planean, y vacilan.
Carajo tiene razón, SIEMPRE LO DIGO. Robin tragó saliva por las miradas de miedo de los demás habitantes, luego de esto estaban muertos.
— Fingen que lo saben, pero no — seguía dando su discurso Rick — Desearían que las cosas no fueran como son... ¿Quieren vivir?, ¿Quieren que esta lugar siga en pie?, no podrán hacerlo a su modo. Las cosas no se resuelven porque ustedes lo desean.
Jessie lloraba, los demás oían, Sam era protegido por Carol. Los adolescentes tenían distintas reacciónes, Ron y Carl preocupados por sus padres peleando, Enid solamente escuchando, Mikey sin dejar de ver el cuerpo de Pete casi muerto y Robin solo estaba prestando atención a todo el entorno.
— Desde este momento tenemos que vivir, en el mundo real — aclaró el mayor de los Grimes — Debemos controlar quien vive aquí.
— Eso jamás había sido tan evidente como ahora — Deanna miraba a Rick con seriedad y juraba que enojo.
—¿Por... Mi? — el Sheriff se río un poco, lo cual no daba linda imagen por su cara Roja de sangre — ¿Te refieres a mi?... Ustedes destruiran este lugar. Harán que mueran personas, ya hicieron que mueran personas y no voy a quedarme parado a ver como pasa.
El que no pelea, morirá, ¡No me quedaré al margen...!
Michonne apareció dándole un fuerte golpe a Rick desmayandolo, parando el discurso y parando el estar teniendo a todos advertidos por un arma. Quería golpearla la adolescente Pietro por haber hecho eso, pero era necesario antes que el entrara en pánico y disparara a un inocente, así lo pensó cuando intento usar la razón.
Le saco el arma y la guardo, ella solo miro a los demás con frialdad y ellos agradecidos porque el "loco" No los iba a matar. Conforme la gente se iba con temor, Robin y Carl corrieron al hombre desmayado.
— Hay que curarlo — Carl le susurro a Michonne preocupado por su papá, ella asintió y se agachó viendo mejor el estado del hombre.
— ¿Ayudarlo?, ¿Por que?
Carl hizo su mayor esfuerzo en no decirles algo, lo mismo paso con los presentes del Grupo que iban a atender a su líder.
— ¿Lo dejaran así?, al final si son como dice el... Dejaran a que la gente morir, felicidades — irónizo al final Robin siendo mal vista por el hombre, que ¡oh sorpresa!, era padre de Mikey.
El ruloso Mikey Donnelly se sentía mal por lo sucedido, no quedó de otra para el que tener que ayudar diciendoles el camino a la enfermeria y ayudando a Denisse, que dentro de todo, sabía algo de Medicina y ayudaría a Rick, aunque la había tratado como inútil.
— ¡Michael!, ¡Ven aquí! — Los ignoró — ¡Michael!
Los gritos de sus padres eran entendibles, pero no le parecía correcto dejar al hombre así, siendo que Pete estaba un poco mejor que Rick. Daba pasos aun con el grupo hasta que su padre con rudeza lo tomo del brazo parandolo, acto que desató en Mikey a gritarle a su progenitor.
— ¡No! — grito fuertemente — ¡Los ayudaré y no me vas a hacer cambiar de opinión!
Pudo notar claramente Robin como algunos de los del Grupo que no iban con Rick se sorprendieron al respecto, siendo igual la reacción de los padres de Mikey por el grito. Se soltó de su padre corriendo a ver como poder ayudar al hombre.
En la enfermeria, Denise pidió varias cosas para curar las heridas, cosas que le paso Robin a Carl. A este último mencionado se le veía deprimido por la actitud de Rick, y también preocupado por su rostro (no era grave, pero era su padre).
Tanto Robin como Carl salieron de donde estaba Denisse preocupados por el estado del hombre mayor, se miraron antes de dedicarse un abrazo pensando en el lío que se había metido todo el grupo.
— Estará bien — sus rostros estuvieron frente a frente sin dejar el abrazo — Se que no me crees, pero lo estará.
— Solo... — miro la puerta de donde había salido — no te vayas — Robin le sonrió de costado antes de volver a abrazarlo fuertemente.
— Nunca lo haré, Grimes.
(.....)
Robin estaba sentada afuera de la casa en las escaleras de la entrada pensando en lo sucedido hace horas, la noche estaba en su mayor esplendor.
Conocía a Rick, pero no al nuevo Rick. Pero con todo esto el aún tenía la esencia de Rick Grimes, el hombre bueno que busca justicia y no acepta que la pasen mal sus seres queridos. Lo que pasó con Pete fue un acto violento, cosa que Robin habría hecho hacia Pete al entrarse de la mierda que le hacia a Jessie, además, Carol había mencionado que fue a hablar con Deanna y seguro la vieja no le dio importancia que un hombre golpeara a su mujer. El pensamiento molesto y furioso de Robin era bastante notable.
Las maderas rechinaron y pudo ver unas botas de hombre, también oyo un suspiro. El o la desconocida/o y Robin quedaron en silencio, hasta que quiso descubrir quién era, y era nada más ni nada menos que Glenn, el coreano.
— ¿Pensando lo de Rick? — asintió la menor — ¿Crees que no lo hizo por ser malo?
— Yo se que no todos somos Buenos y malos. Pero Rick es un hombre que no lastima porque si, siempre tiene un motivo, o así era el que conoci de pequeña.
— Rick es nuestro líder, siempre cuido del Grupo y si murieron en manos de el fue por motivo... Como Shane — el nombre del amigo de Rick dejó confundida a Robin.
— ¿Lo mató? — Glenn asintió — Wow... No lo esperaba.
— Igual era un idiota, así que mejor — la broma del mayor relajó el ambiente tenso que tenía Robin con el tema de la pelea.
El silencio breve reino a los dos, la chica bajo la cabeza soltando un suspiro pasando las manos por su cabello hacia atrás, levanto la cabeza ya sin pelos en su rostro. Estaba preocupada como todos, y Glenn buscó hacerle compañia.
— Si quieren sacar a Rick, yo me voy — confeso Glenn — Pero Maggie se queda, aunque sea una mierda... Termina siendo mejor que viva aquí.
— Pienso lo mismo, y que Judith igual lo haga. Es una bebé, necesita una vida fuera de caminantes — se encogio de hombros la menor.
— ¿Sabes, futura Grimes?, cuando apareciste nadie te quiso.
La sorpresa de lo dicho dejó un momento sin saber que decir a Pietro, pero al procesar lo dicho río ligeramente.
— Auch, ya entendí — dijo en tono burlesco ignorando el "Futura Grimes".
— Dejame términar — interrumpió riendo—Parecias egocentrica y el tono que tratabas a Abraham tampoco agrado mucho. Luego te ví con Carl, con Maggie, con Judith y con Carol... Eres una niña aún, y me llegaste a ablandar — movió su cabello como diva y recibio por eso un leve empujón de Glenn — Así que nada... Nadie te lo dijo, pero, Bienvenida al grupo.
— Gracias coreano — el rodo los ojos y Robin sonrio en grande.
Acabaron riéndose después los dos, teniendo un lindo momento donde el hombre le mostraba que el la apreciaba un poco aunque sea. En ese momento Robin seguía teniendo su cabeza sobre el futuro de Rick Grimes, Rick Loco Grimes.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro