___☆_16_☆___
Lydia
— ¿Acaso están imbéciles o qué?, estamos en un lugar público, ¿Por qué no se pueden comportar? — suelto molesta, ambos me miran apenados, parecen dos niños bobos — ¿Qué no saben que los problemas no se arreglan a golpes?
— Lo siento Lydia, sé que no llevamos mucho tiempo de conocernos, pero este imbécil me saco de mis casillas —dice Zac en un tono arrepentido.
— ¿Sigues con lo de imbécil? —cuestiona Liam molesto.
— En parte estoy diciendo la verdad, ¿de qué te quejas? —replica Zac con burla en su voz.
— Ya me hartaron con su juego tonto —recrimino con fuerza— Liam, te voy a dejar algo bien en claro, ambos sabemos perfectamente que tú y yo NO tenemos nada, ¿no entiendes?, ¿qué quieres ganar con todo esto?, te deje todo claro, me hiciste algo imperdonable no sé porque sigues diciendo que soy algo tuyo, lo nuestro ya es pasado, sólo supéralo —señalo molesta, él baja la mirada — Y tú Zac, ya deja tus problemas con este tonto que no vale la pena —añado, no tengo que decirle como tal, así que decido irme antes de que mi voz se quiebre, me molesta que Liam no me deje ser feliz, me lastimó y todavía se cree dueño de mí, todo se salió de control, nunca debí venir a esta tonta fiesta, lágrimas pequeñas salen poco a poco, seco mis ojos y antes de que pueda dar un paso más unos brazos me rodean de forma cálida, haciéndome sentir protegida.
—Lo siento, soy un tonto —expresa Zac con la voz quebrada, yo simplemente me quedo helada, las palabras no quieren salir y sin dudar volteo sin soltarme se su agarre, lo miro a los ojos, aunque sus labios invaden mi vista, me acerco a él acortando la distancia entre ambos, acaricio su rostro y él sonríe, mis labios se posan en los suyos, él rodea mi cuello con sus manos y yo hago lo mismo, después de mucho vuelvo a tener esa sensación agradable, es un beso dulce y cálido, aún recuerdo la primera vez que me beso, se siente igual, solo que la diferencia es que ahora yo tome la iniciativa, nos separamos después de un rato, él paso su dedo por mis labios y me mira a los ojos
— Cariño, espero que me perdones, sé que no debí montar ese show, pero en seriome moleste mucho, su actitud —dice con ternura, aunque trata de controlarlo su respiración parece acelerada.
¿Cariño?, ¿Me dijo cariño?, ¿Escuche mal?
—¿Su actitud de patán? —inquiero finiendo asombro — Esa actitud me es parecida a la de alguien que conozco.
—Bueno, ese no es el punto —pone los ojos en blanco — ¿Me perdonas?
—Amm, no lo sé —digo divertida.
—Lydia, por favor —pide juntando sus manos.
—Bien, te perdono, aunque me vas a tener que dar algo a cambio.
—Claro, lo que tú quieras —acepta sin dudarlo.
Vaya, no creí que fuera tan fácil, ¿qué le pido?, ¿un álbum de BTS o un boleto para su concierto?
No Lydia, ponte seria, aunque no sería una mala idea.
—Una cita.
— ¿Una cita? —medita mi propuesta — ¿Te parece que sea el último día de escuela?
—Si, está perfecto —acepto feliz.
*
Emma
Han pasado los días, hasta parece que fue ayer cuando inicio el semestre, todas aprobamos los exámenes, aunque no con las calificaciones que hubiéramos deseado, lo cierto es que llevo una semana de vacaciones y extraño a mis amigas.
Lydia se irá de viaje con su mamá, Meli no comento sobre sus planes, Alina también fue de viaje y yo me quedaré en casa, lo cierto es que salir de vacaciones es imposible, ya que mis papás están ocupados, lo bueno es que Nina, Adam y yo montaremos la decoración navideña, me siento emocionada porque es de mis festividades favoritas del año.
Tiene dos semanas desde la fiesta y recordar mi tontería de la bebida aún me tiene apenada, Dylan me vio salir con Eithan y al parecer se enojo, no lo culpo, pero no quería estar ahí ni un minuto más, despejo mi mente y me alisto con algo cómodo y peino mi cabello con dos trenzas, ahora tendré dos largos meses para acabar de matar lo que siento por Eithan y olvidarme de todo, solo seré yo con mi familia, me emociona saber que tendré tiempo para mí, es algo que me hace falta, el timbre capta mi atención, así que voy, parece que mis papás están ocupados en la cocina.
— Hola —saluda Dylan con cierta frialdad en su voz.
— Hola —respondo indiferente.
—¿Están tus papás? —cuestiona más cortante, detesto su actitud, tiene razón de molestarse, pero no es mi culpa que alguien más se ofreciera en llevarme ¿o sí?
—Si —respondo peor que él, si me lo propongo puedo ser muy cortante y dura — Lamento mi falta de modales, ¿deseas pasar? —cuestiono fingiendo estar apenada, él no responde y entra, les aviso a mis papás de su llegada y subo a mi cuarto, en estos momentos su cara es la que menos quiero ver.
Dylan
— Hola —saludo indiferente, me duele hablarle así, pero me dolió lo que hizo, me preocupe cuando no la encontré y para el colmo nunca contesto su teléfono.
— Hola —su tono de voz me deja claro que no le importo.
—¿Están tus papás? —cuestiono en busca de sonar más cortante, esto es tan cruel, quisiera abrazarla, pero mi maldito orgullo me lo impide.
—Si —su respuesta duele — Lamento mi falta de modales, ¿deseas pasar? —no respondo y paso.
—Mamá los busca Dylan.
—Hola Dylan —saluda su mamá bastante contenta, por lo que me obligo a cambiar de ánimos.
—Hola —saludo con amabilidad.
—¿A qué se debe tu visita muchacho? —inquiere el papá de Emma, logro ver que ella se va, realmente está molesta, pero ya da lo mismo.
—Mis padres estaban algo ocupados y me enviaron para hacerles la invitación a la casa que tienen en el bosque —sonrió — Esperamos que pasen estas vacaciones con nosotros —confieso un poco ansioso, pensar que puedo estar un tiempo conviviendo con ella me da esperanzas para conquistarla
—Tendríamos que ver, hemos estado muy ocupados —responde el papá de Emma serio — Y tenemos planes con la familia.
—Lo entiendo, pero espero y deje que sus hijos vayan y de ser posible vengan unos cuantos días, así se adentraran en la naturaleza y disfrutaran de sus merecidas vacaciones.
—Déjanos pensarlo, aunque lo más seguro es que accedan ir —duda de su respuesta.
—Bueno, esperamos su respuesta, mi padre tiene todo planeado, ahora solo falta ver si desean ir.
—Está bien y gracias por la invitación —responden ambos al unísono.
—No hay nada que agradecer, son como hermanos para mis padres, disculpen, pero me tengo que retirar.
—¿Por qué tan rápido? – cuestiona la señora Abby.
—Tengo que pasar a comprar unas cosas y avisarles a los papás de Idali y Meli —respondo dedicándoles una sonrisa.
—Está bien —acepta la señora Abby con una sonrisa muy amigable.
—Los dejo, espero su respuesta —añado, antes de marcharme, ellos me acompañan a la puerta y me alejo de la casa de Emma.
Emma
—¿Qué iremos a dónde?
—A la casa de Jackie y John—responden mis papás emocionados.
— ¿A su casa? —inquiero desconcertada.
— Si, tienen una casa en el bosque, es como una cabaña, sólo que algo grande.
— Amor, es enorme —corrige mi mamá con obviedad.
—¿Cuándo nos iremos? —cuestiona Nina emocionada.
—Hable con John, ustedes estarán tres semanas ahí, nosotros tomaremos una semana para estar ausentes y reunirnos con ustedes —explica mi papá.
— ¡Wow!, que emoción —suelta mi hermana bastante feliz.
—¿Sólo iremos nosotros? —cuestiona Adam.
—No, también irá Idali y Melissa.
—Bueno y ¿cuándo nos iremos?
—Si, lo olvidaba, mañana se van con Dylan —responde mi papá con un semblante bastante tierno.
—Así que preparen lo que se vallan a llevar y usar para que salgan mañana a primera hora —añade mi mamá, sin dudarlo subimos a nuestras habitaciones y comenzamos a empacar, estar lejos y con él me pone nerviosa, lo bueno es que Meli estará ahí, sólo espero que no me abandone por estar con Idali.
—¿No estas emocionada? —Nina interrumpe mis pensamientos.
—Algo...
—Sigue molesto contigo ¿verdad?
—Si, sé que estuvo mal, pero no fue mi culpa —replico en un tono aniñado.
—Emma, si se preocupó por ti obviamente se iba a molestar —suelta con obviedad.
—No es mi culpa que Eithan se haya ofrecido en llevarme —una boba sonrisa se dibuja en mi rostro al recordarlo y mencionar su nombre.
—Y luego Eithan —suspira con fastidio — ¡Dios!, hasta los ojitos te brillan con tan solo mencionar su nombre —lanzo una almohada por lo mencionado.
—No es divertido, es horrible que ese nombre aún cause efecto en mi —replico frustrada, es cierto.
¿Cómo resistirme a esos ojos hermosos con su brillo especial, ¿cómo soportar el hecho de emocionarme ante su personalidad alegre?, aunque a veces me pregunto si hay días en los que finge esa alegría.
¿Por qué su ternura aún sigue provocando que algo dentro de mí lo admire?, ¿Qué rayos me pasa?, el hecho de que comporte como un niño pequeño, esa fragilidad que inspira, esa sonrisa que se dibuja en su rostro y contagia a sus bellos ojos. Para colmo de mi desgracia, no ayuda mucho ser testigo de lo leal que es a sus amigos y como los ayuda, que sea protector, su dulzura, su forma tan delicada de dar buenos consejos, que a pesar de que su voz sea gruesa puede decir las cosas con ternura.
¡Ay!, que haga todo por las personas que le importan, que arriesgue su propia felicidad por el bien de quien ama, que sus abrazos sean cálidos y que a pesar de que pueda desesperar a los demás, siempre, de verdad, siempre te saca una sonrisa con cualquier tontería.
—Emma ¿sigues ahí?
—Amm si, lo siento – respondo al darme cuenta de que lo que siento y lo que conocí de él, sigue siendo superior a su traición.
—Ve cómo te tiene Eithan —dice burlona.
—No estaba pensando en eso —replico sin conseguir sonar convincente.
—Ajá, lo que tú digas hermanita.
— Ash, ve a hacer tu maleta —ordeno con fastidio, ella me deja, por lo menos está vez no pelemos.
Tres semanas, debo llevar cosas para tanto tiempo, en si ropa y lo básico, no sé qué llevar, después de tanto rendirme decido lo que llevaré, incluso agrego un libro y un cuaderno con un bolígrafo para entretenerme.
—Niños, ya bajen a merendar —bajo y me encuentro con mis papás tomando café, huele bastante bien, en la mesa hay una tarta de queso con mermelada de fresa, delicioso.
—Voy a querer que se comporten y no hagan cosas malas —papá rompe el pequeño silencio.
—Tranquilo bebé, sabes que no se nos da eso de hacer locuras —expresa Nina con un tono de voz tranquilo.
—Adam, quiero que cuides a tus hermanas —ordena, si bueno, nos protege demasiado.
—Si, no te preocupes.
—Confío en ustedes —nos mira, a pesar de lo emocionado que está, al mismo tiempo parece intranquilo.
— Si papá —respondemos al unísono, mamá nos sirvió una rebanada de tarta, hablamos y reímos de los comentarios que hacen, una que otra charla se torna seria.
Últimamente han salido demasiado, no los culpo, ellos están felices desde que sus amigos llegaron, es obvio que pasen tiempo con ellos, aunque no verlos por dos semanas, no sé, se siente raro.
Me despido de mi hermosa familia y subo a mi habitación, me alisto para dormir y me meto a la cama, mañana será un día largo, el sueño tarda en aparecer, así que tomo mi cuaderno y escribo, esto es una clase de terapia, me ayuda a alejar todas las emociones que se acumulan, es bueno, de hecho puedo decir que en ocasiones escribo esas cartas que nunca daré.
"Hay ciclos que muy difícilmente se cierran, personas que impactan tu vida al grado que es difícil sacarlas de tus pensamientos y de tu corazón, hay sueños por los que se tiene que luchar, obstáculos que superar, lágrimas que derramar, caídas con raspadas y fracturas que deben sanar.
Nuestra piel quedará marcada por cicatrices que no se borrarán, aprendizajes que se quedarán, recuerdos que dolerán y que te harán sonreír.
Aquellas cosas que deseas borrar seguirán al asecho, tomarás decisiones que impactarán tu vida, aparecerán traiciones que no esperabas, luchas que serán difíciles de ganar, pero ante toda adversidad siempre habrá luz, porque la obscuridad siempre buscará de la luz para no estar sola.
Tu eres mi luz en los días oscuros, mis alas que impiden la caída, el pañuelo que enjuaga mis lágrimas para transformarlas en sonrisas, eres el pintor que hace de este mundo gris un mundo con muchos colores, creas recuerdos que regocijan mi corazón, tu mano me impide sentirme sola, el calor de tus brazos me protege y consuela, tus palabras son una melodía perfecta, los pequeños detalles hacen que mi rostro irradie de felicidad, sin ti solo sería una triste canción en busca del músico perfecto, eres mi presente y futuro con el que puedo soñar."
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro