—¿No crees que Celeste está un poco rara últimamente? —interrogó Valeria mientras cepillaba el cabello de Yui. 

—¿A qué te refieres?

—Está un poco rara, ¿no lo crees? —dijo Valeria.

—No la he visto hace varios días, ¿recuerdas? Vengo de la mansión Mukami...

—Ah, sí...

—¿Y bien? —Yui cuestionó viéndola a través del espejo—. Dime qué le ocurre. 

—Se ha comportado de una forma extraña, ¿sabes? —Murmuró la castaña—, como si ocultase algo.

—¡Vaya! 

—Pero no estoy segura... Normalmente, Celeste no oculta nada a nosotras... 

El sonido de la perilla de la puerta la interrumpió. Alguien iba a entrar. 

—¿Puedo pasar? —Celeste se asomó por una pequeña rendija.

Al sentirse incómoda e inútil en aquel momento, Yui solamente desvió la mirada. 

—Claro. —Valeria sonrió un momento antes de seguir peinando a su amiga. 

Con una cara de cansancio y pesadez, Celeste se dirigió a su respectiva cama.

—¡Estoy tan cansada!  —agregó mientras hundía su cara en una de las almohadas. 

—¿De qué? 

Valeria observó de reojo a su amiga, esperando una respuesta; Yui hizo lo mismo. 

—¿Qué quieres decir?

—¿Nos ocultas algo? —Valeria soltó de golpe. 

Celeste no sabía mentir, así que tenía dos puntos menos en ese momento. Uno era no saber mentir, otro era hacerlo a una amiga. 

—¿Por qué les ocultaría algo? —Celeste desvió la mirada.

—Has estado actuando un poco raro desde que te encontré el lunes, en la habitación de Ayato...

Por un momento, la castaña dejó de cepillar el cabello de Yui

—¿Qué?

—Desde entonces, han pasado 4 días desde el incidente —informó la castaña—, y sigues comportándote extraño. Algo te pasa.

—No me pasa nada, ¿cómo puedes creer eso? —Celeste no se dignaba a levantar la mirada. No podía verla a los ojos.

—¿Cómo puedo creer esto? —cuestiona Valeria para sí misma—. Por el simple hecho de que estás más débil de lo normal.

 —Es solamente porque no me he alimentado bien, tranquila... 

—También estás más pálida últimamente... —continuó Valeria.

¨¿Qué trata de decir Valeria?¨ se preguntó Yui. 

—Dime la verdad...

—Estás actuando de forma paranoica —Celeste suspiró, cansada. 

—Pero... 

 —Val... Si ella no quiere hablar con nosotras sobre esto, está bien. Ella también necesita su privacidad... Y, si le pasase algo malo, nos lo diría. 

Valeria suspiró.

—Bien... ¡Pero no te dejaré de vigilar! 

—Mínimo te preocupas por mí, eh... 

La castaña rodó los ojos. 

***

Unas horas más tarde, Valeria se dirigía al laboratorio de Reiji. Al parecer, tenía que ayudarle con algo de suma importancia... O eso había sido lo que le comunicó Kanato. 

—¿Puedo pasar? —Valeria llamó desde fuera de la habitación.

—Adelante.

La joven abrió la gran puerta con cuidado, antes de pasar. 

—¿Necesitabas mi ayuda en algo, Reiji? —Preguntó Valeria, tratando de dar su mejor sonrisa. 

—Sí. Preparé algo y necesito que me digas qué tal está. 

—¿Seré tu conejillo de indias? 

—No. Es solamente un té—informó el vampiro. 

¨Seguramente está envenenado...¨ Pensó la chica.

—No, no está envenenado. 

—¿Qué? 

—Lo dijiste en voz alta... 

Valeria tragó saliva. 

—¿Ah, sí? Bueno... No quise decirlo... Quiero decir, no quise que se oyera tan mal... Es decir... 

—Sí entendí, no necesito que me des explicaciones. Ahora, por el momento, mejor guarda silencio. Necesito terminar el té. 

Suspirando, Valeria se puso a observar lo tétricos títulos de los libros que la rodeaban. ¨Artes Oscuras¨, ¨Magia Negra¨, ¨Lugares Prohibido¨, ¨Hechizos y Encantamientos¨, ¨Libro Antiguo: Primer Volumen¨, ¨Libro Antiguo: Segundo Volumen¨... 

¨¡Qué nombres de libros tan extraños!¨ se dijo Valeria.

—¿De qué tratan estos libros? —preguntó la chica. 

—De temas que, quizá, no entiendas. 

—¿Y tú cómo sabes? Era de las más altas en la clase, respecto calificaciones. 

—Como quieras... Solamente, no lo maltrates. 

Valeria observó aquellos títulos oscuros. 

—¿Puedo tomar ¨Artes Oscuras¨? —Reiji se giró hacia la chica.

—¿Qué harías tú con un libro de encantamientos y rituales oscuros? —quiso saber.

—¿Hay algún problema que me interesen?

—¿No vienes de un convento? —Valeria reflexionó las palabras de Reiji.

—Bueno, sí... —Valeria desvió la mirada—. ¿Qué dices de ¨Libro Antiguo: Primer Volumen¨?

Reiji observó un instante a Valeria antes de suspirar. 

—Bien. Agarra el primero que escogiste. 

—Gracias...

Silencio. 

—¿Podrías pasármelo? —murmuró.

—¿Qué? —el ser inmortal de cabello negro se giró hacia ella.

—El libro —respondió Valeria—, ¿podrías pasármelo? 

¨Estúpidos humanos¨ se dijo Reiji mientras bajaba el libro. 

Reiji x Valeria o Subaru x Valeria? 7///7 Ok no XD ♥