Disclaimer: Naruto no me pertenece. Sus derechos están en posesión de Kishimoto Masashi y hago esto sin fines de lucro, solo por amor a la escritura y como un homenaje a esta pareja.

Nota: Disfruten de la lectura.

-"ABCD"- Kyuubi hablando

ABCD kyuubi pensando

-"ABCD"-gente hablando

ABCD gente pensando

Nueve cuentos del zorro.

5.-Pesadilla.

La respiración agitada y alterada se escuchaba por los corredores de ese misterioso lugar, el eco de los sonidos de los pasos retumbaba por los solitarios pasillos dejando escuchar los chapoteos del agua que dejaba a su paso.

"ven…"

Un estremecimiento pasó por todo el cuerpo de aquel hombre que miraba con terror en todas direcciones para buscar a su perseguidor, la frustración y el miedo recorrían su cansado cuerpo así como su mente que colapsaría en cualquier momento.

"no hay lugar a donde ir"

-"dejame en paz"- la voz de aquel joven grito llena de ira y angustia sin tener en cuenta la dirección ya que la misteriosa voz parecía provenir de todos lados.

"aquí no hay lugar en donde esconderte…"

Las pequeñas gotas de sudor comenzaron a sobresalir en su rostro, bajando lenta y dolorosamente por su cuerpo, provocando una espectral sensación de frió y miseria. No obstante esa terrorífica sensación no se podía comparar con lo que sentía muy dentro de si, esa sensación de increíble terror superaba cualquier cosa.

El seguía corriendo sin dirección fija, pero sin importar cuanto siguiera parecía que nunca escaparía de aquellos pasillos los cuales parecían formar tétricas visiones de el mismo y su aparente vida.

-"Maldición"- una vez mas el joven grito solo para ser detenido bruscamente al caer al piso por el cansancio.

Ahora su cuerpo estaba totalmente agotado y humedecido por el agua que cubría ese extraño lugar, el solamente podía respirar con cansancio buscando tranquilizarse al no encontrar ninguna salida.

Varias gotas de sudor recorrían su rostro cayendo lentamente al momento que se deslizaban por su nariz a la pequeña porción de agua de esas alcantarillas.

El hombre no pudo evitar ver la imagen que se reflejaba en esa difusa y oscuras aguas, la imagen de aquel rubio de ojos azules que era hace tantos años, en esos años en los que su vida parecía mejorar gracias a su fuerza y dedicación.

Sin embargo pronto la imagen fue cambiando abruptamente, siendo remplazada por una versión nueva de si mismo, un hombre cansado y agotado de luchar contra lo inevitable, perseguido por los fantasmas y espectros del destino.

"Naruto…"

Una vez mas la voz comenzó a acercarse peligrosamente provocando que el rubio comenzara a correr sin rumbo fijo una vez mas, sin poder evitar ver los recuerdos de su vida en cada rincón en donde giraba para escapar de ese monstruo que habitaba en sus pesadillas.

-"dejame en paz"- el joven grito pidiendo clemencia de aquella tortura solo para escuchar las risas demoníacas de una bestia sin alma.

Los pasos del rubio siguieron asta donde una misteriosa luz atrayente lo llevo, ahora se encontraba en una gran cámara donde se encontraban unos barrotes que en alguna ocasión tenían como propósito encerrar al mas poderoso de los demonios.

Pero ahora no eran mas que unas oxidadas y destruidas barras de metal, la destrucción del lugar dejaba ver el poder y la muerte, el único rastro de lo que anduvo preso ahí una vez fue las huellas del zorro.

-"bienvenido Na-ru-to-kun"- una delicada voz se escucho justo detrás del chico, pero su miedo fue incapaz de mantenerlo alerta y fue apresado en una pared cercana por una fuerza misteriosa.

Naruto no podía pronunciar ninguna palabra, la presión del poder y la fuerza hacían que perdiera por momentos su respiración, el ahogamiento por la presión en su cuello comenzaba a matarlo lentamente.

Lentamente abrió los ojos para ver a una hermosa mujer pelirroja enfrente suyo, su pelo de fuego, su figura sensual, nueve colas ondulaban detrás suyo, un kimono negro mostraba las fantasías de cualquier hombre.

Pero sobre todo su rostro fino, lleno de locura, la sonrisa en su rostro mostraba su placer de ver el sufrimiento del chico, combinado con el éxtasis del placer, sus ojos mostraban ira, deseo y lujuria desenfrenada.

-"sueltame"- el joven exigió solo para oír la maravillosa risa del Bijuu.

-"no estas en posición de exigir algo"- la zorra se acerco peligrosamente a su odio y mordisqueo suavemente asta al punto de hacer sangrar la oreja del rubio –"en cambio yo puedo hacer lo que quiera"-

El tono sensual de las ultimas palabras de Kyuubi fueron precedidas por un fuerte golpe en el rostro de Naruto, la sangre corría lentamente por las heridas, el no podía ver mas que la bestia acercándose suave y atractivamente hacia el.

-"¿acaso creíste que me mantendrías encerrada por siempre Naruto-Kun?"- El demonio se burlo del humano que retrocedía arrastrándose por el suelo.

-"yo soy el demonio mas poderoso del mundo entero, no hay forma en que un patético humano pueda mantenerme en su poder"- Otro golpe en el cuerpo de humano provoco que el sonido de los huesos rompiéndose resonara en la cámara.

-"todos los humanos son patéticos… pronto seré libre y destruiré a todo los que se me oponga y esta vez ni siquiera el Uchiha tendrá tanta suerte"- Casi al instante una oleada de chakra rojo rodeo a la mujer transformándola en la temible bestia de nueve colas en todo su esplendor.

Los ojos azules de Naruto se redujeron al ver como el monstruo se abalanzo hacia el mandándolo a volar con increíble rapidez, lastimando su cuerpo y destruyendo su mente. No había escapatoria, el ya no tenia el poder sobre su propiamente y era preso de los deseos del Kyuubi.

El miedo dominaba por fin su alma y grito de terror, el tiempo parecía detenerse, el sufrimiento lento y pasivo lo torturaban por lo que parecían ser días o semanas, sin embargo el demonio no pretendía querer matarlo, solo era un juego en el cual no podía escapar.

-"kukuku… ponte de pie Naruto-kun, aun no quiero que el shinigami te lleve al otro mundo"-una de las colas del Bijuu tomo al rubio y lo puso de pie, el estado de dolor no le permitía resistir mas.

El zorro gigante una vez mas retomo su forma humana, la bella mujer camino hacia Naruto y lo rodeo con sus nueve colas de manera posesiva, al mismo tiempo su cuerpo rozaba al joven con necesidad y lujuria.

Los delicados brazos de Kyuubi rodearon el cuello del rubio y beso con pasión sus labios, dándole una inexplicable sensación de calor y dolor. El beso lentamente se volvió húmedo y fuerte, Kyuubi mordía el labio de Naruto haciendo que saliera sangre que lamía con sensualidad.

-"pronto… cuando salga todos sabrán lo que soy capaz y tu mi querido Naruto veras como me apodero de todo, yo soy el Kyuubi no Kitsune y puedo tomar lo que se me antoje de este mundo… incluyéndote a ti"- los ojos de la pelirroja se tornaron rojos sangre y en ellos se veía el mundo de dolor que estaba por venir.

Antes que Naruto pudiera gritar una repentina sacudida provoco que perdiera contacto con la zorra y su escape mental. Ahora lentamente habría los ojos, la luz de la luna llena lastimaba su vista y varias siluetas rodearon al muchacho.

-"¿Naruto-Kun estas bien?"- una voz desconocida pregunto con preocupación.

-"¿Qué sucedió?"- el rubio pregunto al mismo tiempo que veía con detenimiento a su alrededor.

Las miradas de todos sus amigos se posaban en el, algunas llenas de miedo y otras de preocupación sin embargo recordó que se encontraba en medio de uno de los campos de entrenamiento.

-"estabas gritando mientras dormías…"- Una pelirosa hablo mientras revisaba sus signos vitales.

Por unos momentos el silencio reino en el lugar, los latidos del corazón de Naruto se podían oír sin dificultad, su respiración bajaba y subía como si no hubiera mañana y su mirada de terror era espeluznante.

-"so-solo era una pesadilla"- Aun con esa explicación las miradas no cambiaron, pero fue suficiente como para no tocar el tema.

-"hay que volver a dormir, la misión empezara mañana temprano"- La voz de Kakashi hizo que todos se disiparan dejando solo a los dos hombre.

-"¿todo esta bien?"- la rápida pregunta no sorprendió al rubio.

-"no lo se…"- La mirada de preocupación de su compañero cambio repentinamente, los pensamientos de peligro y duda lo invadían.

-"vuelve a dormir… mañana iremos a hablar con Tsunade-sama"- Con esas únicas palabras Naruto volvió a acostarse, el miedo rondaba sus pensamientos.

Lentamente fue quedándose dormido, su corazón sentía estragarse por la sensación de miedo, pero aun así no podía evitar sentirse frustrado por lo sucedido, no podía evitar que aquel demonio ganara su poder de nuevo y no podía evitar caer en sus garras, ser de Kyuubi, ser su juguete.

"Buenas noches MI Na-ru-to-Kun"

La voz de la bestia se escucho entre risas, lo inevitable sucedería tarde o temprano, los ojos del rubio solo podían ver como la macabra sonrisa de la zorra se formaba en su mente, llena de deseo y locura.

-"Buenas noches… Kyuubi"- Fueron las ultimas palabras del rubio antes de sentir como aquellos brazos del demonio lo tomaban calidamente hacia un mundo de miseria.

FIN