Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo LXVI

No podía creer que el idiota de Zoran había entrado en mi cuarto así como si nada.

—¿Qué le sucede a este tipo? —Donghae mantenía los puños apretados.

—¿Puedes soltar su boca al menos? —Leeteuk preguntó con una mueca en su cara que seguro quiso que fuera una sonrisa pero no le salió.

—¡Ha si! Lo siento Aysel. —Se disculpaba mientras que de apoco retiraba su mano.

—¿Qué piensas que estabas haciendo? —pregunté sobre él mientras lo golpeaba lo más fuerte que podía—. Me has dado un susto de muerte idiota. —Él solo se defendía esquivando lo más que podía mis golpes.

—Espera Aysel, no te ensucies las manos. —Eunhyuk me tomó de la cintura para sacarme de arriba de mi amigo que iba a ser carne muerta en cuanto se descuidara.

—¡Lo siento osita! De verdad lo siento. —Zoran ahora se encontraba de rodillas suplicando perdón.

—Puedes darte por muerto. —afirmé, y es que él sabía que lo que más odiaba en el mundo era que me asustaran.

—Ya te dije que puedo explicarlo. —Él seguía de rodillas.

—Te escucho. —dije cruzándome de brazos aún siendo sostenida de la cintura por Hyuk.

—¿Es necesario que ellos se queden? —Zoran miró descaradamente a los chicos hasta que puso una cara de confusión al notar a alguien que no había visto—. ¿Y él quién es? Deja de meter extraños en tu casa osita. —Ya había comenzado a decir cosas sin sentido.

—No soy un extraño, me llamo Ryeowook y soy miembro del grupo. —Wook le mostró una sonrisa amable y es que él era tan lindo.

—Un gusto, soy Zoran el mejor amigo de Aysel. —Le extendió la mano desde el suelo para saludarlo pero intervine aún enojada.

—¿Y si dejamos las presentaciones para el día de tu velorio? O sea hoy. —Amagué con volver a acercarme para golpearlo pero Hyuk volvió a detenerme presionando sus brazos sobre mi cintura.

—Tranquila. Lo que sucedió fue que esta mañana me levanté temprano para ir al Café a prepararte el desayuno pero Lena me dijo que no irías hoy y como tenía ganas de verte y hablar contigo vine hasta aquí. —Zoran se había sentado en el suelo cruzando sus piernas como si fuera un indio—. Naturalmente la puerta estaba cerrada pero Lena había comentado anoche de que el ventanal de tu cuarto aún seguía roto por lo que aproveché para entrar por aquí. Iba camino a la cocina cuando noté que el sol te estaba molestando y corrí las cortinas, me diste las gracias, te despertaste, estabas gritando, me asusté, te tapé la boca y así fue como terminamos. —concluyó con la cabeza gacha.

—Yo puedo hacer que se vaya. —Siwon se ofreció a echarlo de casa.

—Hoy no tenemos tiempo como para que él se ponga a molestar, no podemos retrasarnos. —Yesung habló mirándolo desafiante.

—¿Por qué? —Zoran estaba altamente intrigado.

—No es de tu incumbencia. —Yesung respondió cortante, no le caía bien y se lo hacía saber.

—Pero osita tu dijiste que hoy desayunaríamos juntos. —Estaba poniendo su cara de pájaro mojado, y es que antes de irse era tan flaco que con Lena lo apodamos pajarito mojado.

—Es cierto, pero es que de la emoción de verte ayer me había olvidado que tenía cosas que hacer con los chicos. —Hyuk ahora me había soltado, ya estaba algo más calmada aunque todavía quería matarlo.

—Puedes hablar con él mientras preparamos el desayuno. —Leeteuk habló sorprendiendo a todos—. Es demasiado temprano y todavía tenemos tiempo. —dijo con cariño y dulzura mientras me observaba, lo cual estaba bastante agradecida.

—Perfecto, eso será suficiente. Prometo que no llegaremos tarde. —Le devolví la sonrisa.

—¡Ahora vamos! —dijo moviendo a los chicos que estaban delante de él.

—Pero ¿por qué? —Heechul preguntaba incrédulo ante lo que estaba presenciando.

—Porque son amigos y hace mucho que no se ven. Y porque lo digo yo que soy el líder. —Raramente Teuk utilizaba su posición de líder para demandar algo por lo que yo también quedé bastante sorprendida con su actitud.

Después de que los chicos se marcharon Zoran se acercó hasta mi para envolverme en un cálido abrazo. Y por un segundo me dejé llevar en esos recuerdos de cuando éramos pequeños, pero también sabía que estaba buscando salvar su vida.

—Ya está de tanto cariño. —dije dándole unas suaves palmadas en su espalda.

—¿Qué te pasa? Se ve que has cambiado mucho, antes no te quejabas de mis demostraciones de afecto. —Zoran me soltó y se acomodó en mi cama.

—Ya te lo había dicho, he cambiado, he crecido Zoran, ya no tengo diez años. —Trataba que entendiera que habían cosas que ya no podíamos seguir haciendo como las muestras excesivas de cariño—. Si sigues haciendo eso la gente pensará que somos pareja. —Terminé por comentar sentándome a un lado de la cama.

—¿Y qué hay de malo en eso? ¿O es que acaso no te gusto? —Su pregunta me desacomodó por completo.

—No entiendo a qué viene tu pregunta. —dije confundida ante sus palabras.

—Es fácil, te estoy preguntando si nunca me has visto como un hombre. —Ahora la seriedad adornaba su rostro haciendo que se viera mucho más masculino.

—No... —Mis palabras fueron firmes—, nunca antes te he visto como hombre y menos ahora. Siempre te he mirado como el hermano que nunca tuve y me hubiera gustado tener. —Se que no era lo que esperaba escuchar, podía notarlo en sus ojos, pero era lo que sentía.

—Puedo entenderlo de antes porque no era más que un pajarillo todo flaco pero ahora he cambiado. —Había desesperación en sus palabras.

—¿Por qué hablar esto justo ahora? ¿Por que hablarlo después de tanto tiempo? —Por más que lo intentara y le diera vueltas en mi cabeza no comprendía el porqué de sus sentimientos.

—El estar tanto tiempo lejos tuyo me hizo darme cuenta de que ya era el momento de que te lo dijera. —Zoran se acercó de nuevo hasta mi y me tomó del rostro para acariciarme de una forma muy suave—. Te quiero, y no como amiga, sino como mujer, como pareja, como amante. —Él no dejaba de mover su mano sobre mi mejilla.

—¿Desde cuándo? —pregunté al borde de las lágrimas, y no lloraba porque su declaración estaba haciendo eco en mi corazón, lloraba más bien porque sabía que todo se volvería incómodo.

—Desde siempre. —Su declaración logró que rompiera en llanto—. Desde que te conozco he sentido algo más fuerte que una amistad. —Yo solo comencé a llorar con mayor intensidad, sentía que la amistad que consideraba genuina había sido solo una farsa y unidireccional—. Deja de llorar osita. —Zoran se acercó aún más y me envolvió en un fuerte abrazo.

Zoran continuaba abrazándome mientras que yo con mis brazos a los costados de mi cuerpo lloraba desconsolada, no tenía fuerzas para aferrarme a su espalda, ya no sabía qué era cierto en él, no estaba segura de saber si en verdad lo conocía.

—Aysel el desayuno ya... —Hae entró al cuarto y se quedó helado por un segundo—. ¿Qué le has hecho hijo de puta? —dijo y sin más se largó hasta el cuerpo de Zoran y le atinó un golpe en la cara.

En un segundo Donghae estaba sobre Zoran moliéndolo a golpes, mi amigo estaba tan sorprendido que todavía no reaccionaba.

—¡Hae detente! ¡Ayuda! —gritaba desesperada intentando que Hae saliera de encima de Zoran—. ¡No le vayas a pegar! —detuve con mis manos el puño de Zoran que iba directo al rostro de Donghae.

En ese momento los chicos aparecieron y como pudieron los separaron. Corrí hasta Donghae para ver si estaba bien.

—¿Qué fue lo que le hiciste animal para que llorara de esa forma? —La ira salía de cada palabra que Nemo pronunciaba.

—Estoy bien, tranquilo... —Trataba de calmarlo, pero a pesar de que Siwon y Shin lo tenían de los brazos él seguía moviéndose con fuerza—. ¡Mírame! —grité sosteniéndolo del rostro para que se enfocara solamente en mi—. Estoy bien, tranquilo. —Suavemente lo acaricié para que notara que no me había hecho nada.

—¿Es enserio? —Zoran se puso de pie con el ojo morado debido al golpe de Hae—. Yo fui al que golpearon y ¿te preocupas por él? —Sabía que estaba en lo cierto pero no podía hacer nada, mi instinto me decía que corriera hasta Hae.

—Ven que te voy a tratar la herida y después te irás. —dije tomándolo de la mano—. Ustedes desayunen que yo en cuanto termine lo haré, procuren de que Donghae se de una ducha de agua fría. —Tras dar mis instrucciones caminé con Zoran hasta el baño de mi cuarto para revisar su ojo.

—¿Te has enamorado de alguno de ellos? —preguntó tan pronto cerré la puerta.

—¡Cállate y siéntate! —Saqué el botiquín de primeros auxilios, y después de lavar la herida le puse una bendita ya que se había cortado en el párpado superior.

—¡Aysel, no me has contestado! —Insistió tomándome de la mano para que pudiera verlo.

—No es asunto tuyo lo que yo haga con mi vida privada. —contesté rúdamente—. Ahora por favor vete que tengo que alistarme para el trabajo con los chicos. —Caminé hasta la puerta y la abrí.

—¿Trabajo? —preguntó confundido.

—Si trabajo como su intérprete durante las entrevistas. En cuanto pueda hablaré contigo. —Después de decir eso extendí mi mano indicándole que se marchara.

—No estoy dispuesto a dejarte así como así. Tenlo en mente. —Zoran me observó confiado y se marchó.

¡Qué manera de comenzar el día! Si así arrancaba no me quería ni imaginar cómo iba a terminar.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro