Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 15

— Yo, soy el Señor de los Dragones… — Persona normal hablando.
    [Yo, soy el Señor de los Dragones…]    Seres Sellados hablando.

—ʺSiento que Lilith-tan extraña a su Onii-chanʺ — Persona normal pensando.

El universo Highschool DXD y sus personajes pertenecen a Ichiei Ishibumi quien es su respectivo autor.

Capítulo 13: Recuperando el tiempo perdido y festival Parte 3

Katase detuvo su mano a centímetros de la puerta al escuchar varias voces mencionar el nombre del castaño.

Esto no era algo para sorprenderse pues Issei era miembro de este Club, sin embargo, ella tenía los ojos bien abiertos y estaba congelada en su sitio.

El origen de su sorpresa era la emoción de anhelo y amor que detectó en el tono de las chicas.

Ella se giró y miró a Murayama y Aika con ligera estupefacción, misma que se agravó al ver como ninguna de las dos se mostraba sorprendida por esto, es más, parecían interesadas en lo que ocurría detrás de la puerta.

— ¿Qu…? — Empezó a abrir la boca.

Sin embargo la castaña de lentes reaccionó rápidamente y la silenció cubriéndole la boca con su mano, para luego pegar su oído a la puerta, seguida de Murayama.

Katase tenía su oído pegado a la puerta por Aika, cesando su lucha para soltarse del agarre de la castaña de lentes cuando escuchó la voz de Rias pronunciar con profundo amor el nombre del chico.

Esto la sorprendió completamente.

Ella sabía que estaban cerca, pero no hasta este punto.

Por eso se rindió a escapar para escuchar lo que sucedía al otro lado de la puerta del Club de Investigación de lo Oculto.

— Rosseweise — Oyeron decir a la voz de Rias.

A Katase le sorprendió el tono informal en la voz de la peli-roja, pues no esperaba que ella se dirigiera de esa forma a un maestro.

Por su parte, Murayama lo tomó mejor, pues la Valquiria le había dicho que solía ser la [Torre] de Rias, siendo su transferencia al grupo Hyodou desconocido para la peli-roja sea dicho de paso.

Aika también sabía esto, así que solo lo dejo pasar.

Entonces vino el reclamo por parte de la peli-roja, algo que dejó a la peli-rosa sin habla, pues sonaba como un reclamo de una mujer a su esposo, novio, amante, etc.

Fue entonces que la conversación fue cuesta abajo.

Lo oyeron decirle a Rias sobre no tener el tiempo para él y por ello viajó por varias ciudades para entrenar, aunque la mención de varias ciudades alrededor del mundo la sorprendieron, Katase parpadeó confundida por la mención del Inframundo.

— “Extraño” — Pensó la peli-rosa.

Luego la mención del nombre Tsukiumi hizo que el tono en la voz de Rias sonara molesta, sin mencionar que exigió el término de su relación con ella.

La peli-roja dejó en claro que ella no la aceptaba, además de declarar que el chico era posesión de varias personas, ella incluida.

Esto la confundió aún más.

Por su parte, Murayama y Aika solo alzaron las cejas ante el tono posesivo de Rias y su declaración, mientras la primera reprimió el resoplido burlón, la segunda se tomó la barbilla antes de encogerse de hombros y seguir escuchando.

Fue entonces que la mención de los novios de las chicas del Club de Ocultismo sembró un lapso de silencio.

Para Katase todo esto no tenía sentido.

— I-I-Ise, d-déjame explic-carte — Oyeron tartamudear a Rias.

Katase y Aika parpadearon, pues no esperaban escuchar esa inseguridad y pánico en la voz de una de la famosas Onee-sama de Kuoh.

En cambio, Murayama se mostró un poco más interesada, pues sabía algunas cosas, pero no todo y quizás en esta conversación averiguaría más detalles sobre la relación de Issei con el grupo Gremory.

Fue entonces que vino el comentario mordaz del chico hacia la peli-roja.

— ¿Y qué me dirás Rias? ¿Qué empezaron una relación con otros chicos para tener experiencia y así hacerme feliz? Por favor, tú eres más inteligente que eso y no creo que hayas pensado en una estupidez de esa índole — Fue lo dicho por el chico en tono cortante.

Por alguna razón, las tres chicas que escuchaban a escondidas sintieron un leve escalofrío, además de abrir los ojos ante el reclamo de Issei.

Además de que Aika y Murayama cerraron los ojos al saber las acciones de Rias, coincidiendo con Issei en que era una estupidez.

Él también hizo otro comentario que involucró a las demás, sembrando más silencio en la habitación.

Entonces otro comentario mordaz rompió el silencio en la habitación, lo que fue seguido de la voz de Rias.

— De verdad, que tan idiota puedes ser, ¿Acaso pensabas en que hacías esto por mi bien? — Lo oyeron preguntar con sorna.

— ¡Por supuesto que sí, todo lo que hice fue pensando en tu felicidad! — Dijo Rias en voz alta y desesperada.

El trío se encogió un poco al oír la desesperación en el tono que suele ser elegante y digno.

— No Rias, tú lo hiciste creyendo que era por mí, pero nunca pensaste en cómo me podría sentir cuando las viera junto a otros chicos, incluso si me lo hubieras dicho desde un principio… eso es porque decidiste egoístamente que tus acciones eran por mi bien según tus caprichos — Dijo el castaño en tono neutro.

Las oyentes podían sentir claramente su descontento.

— Que tonto ha sido de tu parte caer en ese error — Dijo en un tono que se endureció a cada palabra.

El trío de chicas se sintió incomodo, pues una sensación de ligera culpa se abrió paso en sus pechos, debido al rumbo que estaba tomando la discusión.

Ahora pensaban en que era una conversación que no debieron escuchar.

— Aunque no puedo culparte del todo, después de todo era de esperarse de un Demonio — Lo oyeron hablar de nuevo.

Aika y Murayama se tensaron, pues no esperaban que saliera el tema sobrenatural tan fácil en esta conversación.

Si, quizás escuchar a escondidas fue mala idea.

Por su parte, la peli-rosa estaba absorta en cierta parte de la conversación.

— “¿Demonio?” — Pensó Katase con duda.

Aika miró a las dos chicas de reojo, notando como Katase mostraba un poco de confusión en su lenguaje corporal, mientras Murayama no demostró nada de eso.

Eso era algo sospechoso, pero optó por dejarlo por ahora.

— “Creo que Hyodou podrá encargarse de eso más tarde” — Pensó con un encogimiento de hombros.

— Entonces, ¿Qué tienes que decirme Rias? — Continuó hablando el castaño.

En ese momento el trío de chicas tuvo consciencia de sí mismas, de su posición y de lo que hacían, por lo que las tres se miraron en silencio, indecisas de si irse o seguir escuchando.

Sin embargo, no tuvieron tiempo de decidir ya que la conversación siguió su rumbo.

— ¿Me dirás que querías una vida normal? ¿Una relación normal? ¿Qué encontraste que Sensei tenía las cualidades que buscabas en el hombre ideal? ¿Qué quisiste experimentar una relación más madura con él? ¿Qué pensaste compensarme el resto de nuestra vida casi inmortal cualquier daño que me hicieras? — Lo oyeron decir en tono seco, casi indiferente.

Las tres chicas se congelaron al escuchar todas las preguntas, mientras Katase tomaba nota de la última parte.

Ahora estaba claro para ella que el castaño tuvo una relación con la peli-roja.

— Asia, realmente me decepcionas, no pensé que tu ignorancia llegara a tal grado de no darte cuenta de que obrabas mal, o que me estabas traicionando — Habló el castaño con tono ligeramente dolido.

— Ise-san — Oyeron la voz ahogada de la rubia.

Las tres chicas hicieron una mueca, pues sabían cómo de cercana era la chica con el castaño, Aika siendo la que mostró preocupación visible en su rostro por su amiga.

— Akeno, no esperé que tu rivalidad con Rias te llevara a emular sus acciones y olvidarte del objetivo original de dicha rivalidad, lo que me hace dudar de tus sentimientos hacia mí — Habló nuevamente dirigiéndose a otra de las chicas.

Ellas escucharon algo deslizarse, para que luego sonara un leve llanto.

— Xenovia, tu falta de sentido común aunado al hecho de competir con Rias te cegó, si tenías dudas pudiste preguntarle a Griselda o Venelana-sama, o hablar directamente conmigo como siempre lo has hecho — Volvió a reprender el chico.

— Ise — El tono afectado de Xenovia las sorprendió.

Nuevamente Aika hizo una mueca por el dolor que la voz de su amiga trasmitió.

— Irina, no sé cómo te viste envuelta en todo esto, pero esperaba más de ti como el As de Michael y como quien tuvo mi primer beso — Dijo el castaño mientras se dirigía a su amiga de la infancia.

— ¿Sabías? — Oyeron un susurro ahogado mientras su voz casi se quebraba.

No hacía falta decir que la imagen de la energética chica con lágrimas en los ojos les vino a la mente.

Nuevamente Aika hizo una mueca.

El trío de la iglesia eran amigas cercanas a ella, por lo que sabía que recibir tales palabras duras de la persona que amaban las lastimaría como nunca.

Lamentablemente ellas estaban sufriendo las consecuencias de sus acciones.

— Koneko, siempre reprendiendo mi conducta desvergonzada, no pensé que te prestaras a esta clase de cosas sabiendo bien que resultaría herido nuevamente — Lo oyeron decir con cierto pesar en su tono.

Las oyentes abrieron los ojos ante el tono afectado, además de oír la respiración entrecortada que denotaba un llanto silencioso, seguramente de parte de la mencionada.

— “¿Qué té sucedió Hyodou?” — Pensó Katase con ligera preocupación.

Ese reproche sonaba como si alguien hubiera jugado con el corazón del castaño en el pasado.

Aika tenía esos mismos pensamientos, mientras Murayama recordaba la breve explicación del chico del cómo se adentró en el mundo sobre-natural gracias a cierto Ángel Caído.

— Ravel — La voz del chico las sacó de sus pensamientos.

Esta vez su tono era un poco más suave.

— Al menos esperaba contar contigo cuando las demás decidieron salir con otros chicos e ignorarme, pero te centraste tanto en tus propios asuntos que no viste como todo esto me afectaba, ni una sola vez te molestaste en revisar como estaba, descuidando de paso tu trabajo cómo mi manager — Lo oyeron decir con calma.

Aun así ellas podían sentir claramente la decepción en su tono.

— Ise-sama, yo… — Oyeron decir a la mencionada.

Otro lapso de silencio, además de notar como la rubia había callado abruptamente, casi como si la hubieran silenciado.

Entonces hubo un leve jadeo colectivo en el interior del club, por lo que el motivo de que Ravel dejara de hablar fuera algo que hizo el chico y que las tomó por sorpresa.

— A pesar de todo no puedo odiarlas, hemos pasado tanto juntos que no tengo el corazón para albergar odio hacia ustedes… sin embargo, han perdido mi confianza y por lo tanto, me retracto de la promesa que hice con ustedes, Ravel, Xenovia, Asia — Lo oyeron decir mientras su tono de endurecía.

Por alguna razón, ellas podían sentir la conmoción dentro de la habitación, además de escuchar algo desplomarse al suelo.

— ¡Ise! ¡¿Tú…?! — Oyeron la voz alterada de Rias exclamar.

— Así es, ahora soy un Demonio de Clase Alta, fui promovido y en algún momento usaré estas [Evil Piece] para formar mi nobleza, lamentablemente los puestos que estaban apartados ahora están disponibles para otros miembros — Dijo el castaño manteniendo un tono duro.

Esto confundió enormemente a Katase, sobre todo la mención de ser un Demonio, así como la formación de una Nobleza y las [Evil Piece].

Al menos ahora se daba cuenta de que la promesa a Ravel, Xenovia y Asia era ser miembros de su nobleza, pero con lo ocurrido el castaño se retractaba como un castigo por sus acciones.

Aika y Murayama también se sorprendieron por ello, pues ninguna sabía de esto.

— Cómo dije, no puedo odiarlas, pero me han decepcionado… — Volvió a hablar el chico dando un suspiro.

El trío de chicas contuvo la respiración cuando otro silencio reinó detrás de la puerta, indicando que probablemente el castaño estuviera valorando el estado en que estaban las chicas.

Y si realmente era así, se preguntaron cuáles serían sus pensamientos en ese momento.

— Rose, vámonos… — Lo oyeron decir.

— Hai Ise-kun — Oyeron la respuesta de la peli-blanca.

Aika, Katase y Murayama se congelaron momentáneamente sin saber qué hacer, pues en el pasillo donde estaban no había lugar donde esconderse.

— ¡Ise, espera! — Oyeron gritar a Rias.

Cualquier intento de retirarse del lugar fue bloqueado al escuchar el grito de Rias, sobre todo por la desesperación y el pánico en su tono.

Lograron superar la sorpresa, pero la voz del castaño las enraizó en sus lugares nuevamente.

— Una última cosa, si de verdad quieren que recupere mi fe en ustedes superen este error y no se dejen derrumbar, demuéstrenme que las mujeres que tanto admiré y amé aún siguen ahí, solo sus acciones a partir de hoy definen si el puente entre nosotros puede ser reparado de nuevo — Dijo el castaño con voz seria.

Fue en ese momento que las dos castañas y la peli-rosa se volvieron a estremecer cuando el chico dejó que sus palabras anteriores se hundieran y volvió a hablar.

— Pero les advierto, no jueguen con el corazón de esos chicos, porque si lo hacen… jamás las perdonaré — Habló el castaño con tono lapidario.

A pesar de la frialdad en su voz, Aika, Katase y Murayama detectaron un indicio de ruego en el tono de voz usado.

Parece que el castaño no deseaba que los chicos sufrieran lo que él mismo había sufrido.

Esto se ganó el respeto de Aika y Murayama, mientras Katase se quedaba pensando con una expresión seria.

Quizás había más de Hyodou Issei de lo que pensaba y quizás eso era lo que su amiga había visto en él para tratarlo de forma más amable.

— Ustedes se involucraron con ellos y desarrollaron sentimientos sin quererlo ni desearlo, si realmente quieren que no las odie entonces valorarán sus actuales relaciones y no las descartaran por mí, porque saben de antemano que no las aceptaré en mi vida en el corto plazo — Lo oyeron decir para que luego la puerta se abriera.

Ellas retrocedieron cuando el castaño y la peli-blanca salieron de la habitación.

Issei abrió los ojos al verlas, notando como ellas estaban congeladas como un ciervo frente a los faros.

Rápidamente salió de su leve aturdimiento mientras llevaba su mano derecha a la cintura, donde se manifestó el mango de una espada.

Planeaba salir lo más rápido de este lugar antes de que Rias y las demás reaccionaran por lo que no tenía tiempo que perder, así que sin dudarlo decidió invocar a Ascalón como originalmente tenía planeado.

Esto era más seguro que un círculo de tele-transporte que Akeno o Rias podrían intentar rastrear, ya que casi no dejaba rastro.

Su proceso de pensamiento y toma de decisión duró solo dos segundos, antes de sujetar la empuñadura de su espada y extraer la hoja de su dimensión de bolsillo, dando un corte al aire hacia uno de sus costados como lo solía hacer Arthur del equipo Vali.

Cabe mencionar que le costó bastante emular esa habilidad y fue solo por su mayor control en el poder de Great Red.

Por su parte, el trío de chicas se alarmó al ver como el chico sacaba una espada de la nada, sobre todo Katase, quien se congeló de miedo al ver el arma, pero su alarma se volvió asombro al ver como el castaño cortaba la realidad misma con esa magnífica espada creando una grieta brillante en el aire.

Rosseweise también estaba sorprendida por la acción del castaño frente a las chicas, pero rápidamente supo que le interesaba más salir de aquí que pasar desapercibido ante la peli-rosa del grupo que desconocía lo sobrenatural, así que se tranquilizó y se preparó para irse.

Dando un paso al frente, Issei tomó la mano de Murayama mientras Rosseweise le asentía a Aika para después tomar la mano de Katase.

El castaño entró en la rasgadura con una rígida Murayama, para que luego la Valquiria le indicara a Aika que la siguiera mientras arrastraba a una paralizada Katase dentro del portal.

La pobre chica no opuso mucha resistencia mientras su boca se abría, pero ninguna palabra salía de ella.

La castaña de lentes tragó silenciosamente al verlos desaparecer, para después entrar en la rasgadura con cierta aprehensión, la cual se cerró segundos antes de que la puerta del Club de Ocultismo se abriera abruptamente.

— ¡Ise! — Exclamó Rias mientras miraba el pasillo vacío, para luego desplomarse en el suelo.

Inframundo – Castillo del Dragón

El grupo apareció en la sala principal del Castillo, pues Issei no quiso arriesgarse a encontrarse con los chicos si se movía hacia su Club, ya que Saji le dijo que estos frecuentaron el lugar en su ausencia.

Al parecer el rubio Sitri tenía algo planeado para el festival que incluía a los chicos, ya que notó como este tenía un brillo travieso en los ojos cuando lo mencionó.

— Uff, eso estuvo cerca, realmente hablar con ellas me dejó agotado — Dijo el castaño mientras se dejaba caer en un sofá de su sala.

Murayama se sentó junto a él mientras su mirada recorría el lugar con asombro.

Aika juzgaba los muebles determinando que eran de alta calidad y muy costosos, mientras Katase miraba al castaño fijamente, desviando la mirada a la espada refirmada a un lado del sofá en intervalos.

— Hyodou, ¿Dónde estamos? — Preguntó Aika después de recorrer el lugar con la mirada.

— Estamos en mi casa — Respondió el nombrado mientras enderezaba su postura y después la miraba con tranquilidad.

— Ise, ¿Por qué el cielo es púrpura? — Preguntó Murayama mirando hacia una pequeña ventana.

— Eso es porque estamos en el Inframundo — Respondió una voz desconocida.

Las dos chicas castañas se sobresaltaron y se voltearon rápidamente hacia el origen de la voz, encontrándose con una sirvienta de cabello rojo y una cicatriz en la mejilla izquierda.

Esta se inclinó de forma elegante.

— Mi nombre es Maya, Doncella Maid de Hyodou Issei-sama — Se presentó con educación y profesionalismo.

— Ah, s-soy Murayama Kaori, una compañera de clase — Respondió la castaña con un ligero tartamudeo.

— Kiryu Aika, una compañera de clase — Fue el turno de la castaña de lentes con tono más resuelto.

Entonces la Maid miró a la peli-rosa, la cual no dejaba de mirar a Issei.

El castaño la miró, mientras las dos castañas sintieron nerviosismo acerca de la posible reacción de la peli-rosa cuando lograra procesar lo que había pasado.

Por su parte Rosseweise se mantenía tranquila, después de todo, se podía usar magia para borrar sus recuerdos si algo salía mal.

Entonces Katase parpadeó, mientras la comprensión empezaba a llegar a ella.

Abrió la boca para decir algo, pero nada salió de esta.

Luego bajó la mirada, como si estuviera escogiendo sus siguientes palabras, mientras mantenía sus manos en su regazo y guardaba silencio.

Finalmente alzó la mirada, mientras una inusitada seriedad se veía en su rostro.

— ¿Qué eres? — Fue la pregunta que salió de sus labios.

Issei parpadeó un tanto sorprendido, pues de todas las preguntas que la peli-rosa podría haber hecho, esa era la menos probable en estos momentos.

Después de todo ella había sido tele-transportada a través de una rasgadura en el espacio y eso hubiera sido su foco de atención.

— Una persona normal no podría hacer lo que hiciste con una espada y traernos a donde sea que estemos a través de un portal — Agregó en un tono serio, pero el castaño notó la calma forzada de su parte.

Ahora mismo, Katase estaba lívida después de procesar lo que había pasado.

Si bien tenía preguntas acerca de lo sucedido, lo primero que le vino a la mente fue la persona que realizó tal hecho increíble.

Ella notó como Aika y Murayama mostraban algo de sorpresa, pero no al nivel de ella.

Esto apuntaba a que ellas sabían algo, pero lo dejó por el momento y se concentró en la persona que tenía todas las respuestas.

Entonces ella lo vio sonreír levemente, causándole cierta aprehensión.

— Dime, ¿Crees en lo sobrenatural? — Preguntó Issei en tono suave.

La peli-rosa parpadeó mientras procesaba la pregunta, para luego ampliar levemente los ojos y soltar un largo suspiro.

— Normalmente te diría que no, aunque soy algo supersticiosa, pero tu pregunta implica que todo es real, ¿me equivoco? — Preguntó con una débil sonrisa.

El castaño sonrió en respuesta, mientras un guantelete rojo era invocado en su mano izquierda.

Los ojos de Katase y Aika se abrieron al ver esto, incluso jadearon levemente por la sorpresa.

Murayama por su parte, sintió su cara calentarse al recordar como ella cayó de su cama al oír la voz de Draig por primera vez cuando Issei le mostro la [Boosted Gear].

— No, no lo haces, Dioses, Yokai, Dragones, Ángeles, Ángeles Caídos y Demonios, todos son reales — Empezó a decir el castaño.

La peli-rosa abrió los ojos ante las razas mencionadas por el chico, sintiéndose pequeña y un poco intimidada ante la existencia de Dioses.

— Por otra parte, algunos humanos nacen con un artefacto dado por el Dios Bíblico llamado [Sacred Gear], lo que los empuja al mundo sobrenatural, ese fue mi caso — Continuó Issei mientras se ganaba la atención de Katase y Aika.

Murayama reprimió la pequeña risa que amenazaba escapar de sus labios, pues la castaña de lentes y la peli-rosa se inclinaron en su lugar hacia el chico mientras este relataba la historia de cómo se adentró en este mundo.

Entonces el castaño contó cómo una chica se le acercó, la cita que tuvo, como fue asesinado y cómo fue revivido como un Demonio reencarnado por Rias.

— Espera, espera, espera, ¿me estás diciendo que Rias Gremory es un Demonio? — Preguntó Katase con los ojos bien abiertos.

— Si, Rias es un Demonio, no estoy seguro si lo sabes, pero Gremory es uno de los 72 Demonios del libro de Salomón — Expuso el castaño con tono divertido.

Ante esto, Katase tenía la boca abierta con una expresión de shock total.

— Es normal que te sorprendas, después de todo nunca lo hubieras imaginado — Agregó Issei encogiéndose de hombros.

Ante esto, la chica salió de su conmoción y se llevó una mano al rostro.

— Por supuesto que no, maldita sea… — Dijo con tono forzado.

— Eso es porque no son monstruos sedientos de sangre como lo pintan las historias, aunque si son criaturas del pecado… de todos modos, ellos suelen hacer contratos con humanos haciendo tareas para ellos, a cambio reciben dinero, artículos o favores que los ayudan a aumentar su estatus y poder entre los suyos — Explicó el castaño brevemente.

La peli-rosa lo miró con duda ante esta explicación.

— ¿No roban el alma de las personas? — Preguntó antes de abofetearse mentalmente ante lo insensible de su pregunta.

Después de todo la peli-roja no le daba la impresión de realizar tales actos, sin mencionar que aún recordaba los diversos sentimientos en la voz de Rias cuando escuchó su conversación con Issei.

— Creo que en la antigüedad solían hacerlo, como sea, ya que hubo algunas cosas que pasaron sus números empezaron a decaer, por eso el Maou Beelzebu, uno de sus Líderes, creó el sistema [Evil Piece]… — Explicó Issei un poco más.

Así Issei aclaró el sistema Nobiliario que se basaba en el ajedrez.

La peli-rosa asimiló la explicación, mientras su mente corría a mil por hora analizando la información y creando algunas teorías.

— Entonces debo suponer que el Título Nobiliario de Rias-sempai son los miembros del Club de Ocultismo, ¿no es así? — Dedujo Katase con cierta realización visible en su rostro.

El castaño se mostró un poco sorprendido, al igual que las demás presentes, Maya incluida.

— Eso es correcto — Confirmó el castaño con una pequeña sonrisa.

— Bueno, ya que te uniste al Club de Rias-sempai pensé que podría ser obvio — Dijo la peli-rosa con cierta vergüenza ante las miradas admiradas de Murayama, Aika y Rosseweise.

— Si, supongo que eso es bastante obvio… en fin, muchas cosas pasaron y ascendí en la sociedad Demoniaca a Demonio de Clase Alta, por lo que recibí un juego de [Evil Piece] — Siguió explicando el castaño.

Ante esto, la peli-rosa abrió los ojos sorprendida.

— Eso quiere decir que puedes tener sirvientes, ¿no es así? — Pronunció en realización.

— Así es, mi promesa con Asia, Xenovia y Ravel fue que ellas se unirían a mí cuando llegara a ser un Demonio de Clase alta, pero hubieron circunstancias y decidí deshacer esa promesa — Dijo el chico mientras las miraba con los ojos entrecerrados.

El trío se dignó a sonrojarse, puesto que ellas escucharon a escondidas todo lo que se habló en el salón del Club de Ocultismo.

— La sociedad Demoniaca permite la poligamia, Rias se hizo cargo como la eventual esposa principal, sin embargo creo que se dan una idea de lo que pasó y que por ello nuestra relación terminó — Dijo mientras sus ojos se ablandaban y su postura se relajaba.

Katase tenía los ojos abiertos con un gran sonrojo, pues una visión del castaño sentado en   un trono con las chicas del Club de Ocultismo a su alrededor en ropas provocativas llegó a su mente.

Murayama no estaba sorprendida, sobre todo por conocer el gran número de chicas enamoradas del castaño, ella incluida.

Aika sonrió divertida por la expresión de la peli-rosa.

— ¡¿Q-Que..?! — Logró balbucear Katase cuando volvió en sí.

— Hee~, así que tenías un harem, ¿No es así Hyodou? — Dijo Aika con tono sugerente.

En respuesta el castaño se encogió de hombros.

— El aura de un Dragón suele ser bastante atrayente para el género femenino — Dijo Issei mientras se ponía de pie.

Katase y Aika parpadearon confundidas por las palabras del chico, para luego abrir los ojos con estupefacción cuando dos enormes alas de color rojo salieron de la espalda del chico.

— Lo que nos lleva a tu pregunta original acerca de lo que soy, Katase… y la respuesta, es que soy un Dragón — Fueron las palabras del chico que retumbaron en los oídos de Katase y Aika.

Murayama también tenía algo de sorpresa visible en su rostro, pues ella solo había visto la [Boosted Gear], además de hablar un poco con Draig.

Si bien se lo había mencionado, no pensó que él podía generar alas de Dragón.

[He~, a pesar de pasar siglos encerrado aquí dentro, aún es divertido ver esas expresiones en los humanos, sobre todo cuando no soy yo quien las provoca, sin duda eres único compañero]

Se oyó decir a una voz desconocida.

Esto sacó de su sorpresa a ambas chicas, las cuales buscaron con la mirada al responsable de esas palabras.

— Chicas… — Les llamó Murayama.

Cuando las dos chicas la miraron, esta les señaló cierta dirección, misma que ambas siguieron con la mirada, solo para ver el guantelete del castaño levantado mientras la joya verde quedaba expuesta hacia ellas.

[Es un gusto conocerlas oficialmente, mi nombre es Draig, el Dragón de la Dominación]

Fueron las palabras que resonaron mientras la joya brillaba entre palabras, enfatizando el origen de la voz.

Esto hizo que ambas se quedaran sin habla, mientras una expresión de incredulidad se iba asentando en sus caras.

— Hay algunos [Sacred Gears] con seres sellados dentro de ellos, en mi caso es un Dragón y eso influyó en mi cuerpo volviéndome parte Dragón — Señaló el castaño al tiempo que su guantelete desaparecía en partículas de luz y retraía sus alas mientras volvía a sentarse.

Las chicas solo asintieron con expresiones en blanco, mientras Murayama empezaba a preocuparse un poco por tal reacción, pues incluso Aika se veía conmocionada.

Entonces ella abrió los ojos al recordar algo.

— Ise, ¿las chicas están aquí? — Preguntó Murayama mientras lo miraba.

El castaño parpadeó un tanto sorprendido, antes de sonreír ligeramente mientras sus ojos se entrecerraban concentrándose en su vínculo con sus siervos.

— Si, están todas a excepción de Sona, de hecho siento que vienen hacia acá — Respondió después de unos segundos.

Y efectivamente, como lo dijo el castaño, Brielle, Musa, Griselda y Kuroka entraron a la sala en ese momento.

— Regresaste antes — Dijo Griselda con una ceja alzada.

— Si, tuve mi conversación con Rias hace unos minutos, así que decidí regresar a descansar — Respondió el chico con tono serio.

Ellas claramente pudieron sentir el ligero agotamiento en su voz.

Esto hizo que las cuatro se pusieran serias, para luego mirar a la Valquiria, quien asintió de forma solemne con un sutil brillo de preocupación en sus ojos.

— Ya veo, supongo que no querías estar cerca de ellas después del encuentro — Dijo Musa cruzando sus brazos debajo del busto.

Issei soltó un suspiro mientras sus hombros caían y cerraba los ojos.

Luego sonrió de forma lánguida para abrir los ojos y mirarlas.

— A pesar de trasmitir mi desconformidad acerca de sus actos, aún tengo algo de resentimiento dentro de mi pecho que no pude desahogar, supongo que a pesar de purgar mi corazón de sentimientos negativos, la amargura y desilusión aún persisten un poco dentro de mí — Dijo con una sonrisa de auto desprecio.

Apenas terminó de decir eso, las demás chicas y Silver entraron en la sala, con las chicas teniendo expresiones serias al oírlo decir eso.

Las únicas excepciones fueron Tsukiumi, que mostraba cierta expresión enfadada, mientras Yukikaze, Elsha y Silver mostraban preocupación en sus rostros.

Por otra parte, la aparición de varias personas sacó de su aturdimiento a Aika y Katase, al tiempo que la castaña de lentes alzaba ambas cejas al ver nuevas caras y la peli-rosa era intimidada ante el gran número de mujeres hermosas que había.

— Debo suponer que solo las reprochaste un poco para no lastimarlas tanto, ¿no es así? — Inquirió Kurumi con expresión suave.

El castaño asintió.

— A pesar de lo que sus acciones provocaron, no puedo culparlas del todo, pues incluso yo no sabía que habría este tipo de consecuencias — Declaró Issei mientras soltaba un largo suspiro.

Lógicamente hablaba acerca de su reversión y casi conversión en un Dragón Maligno.

— Eso no justifica que te abandonaran de esa forma, sin una explicación y pensando que al decir que lo que hicieron fue por tu bien, las recibirías con los brazos abiertos para tener un final feliz — Fue el comentario mordaz de Tsukiumi mostrando su desagrado.

A través del vínculo con su Ashikabi podía sentir como la decepción y la tristeza asolaba el corazón del chico.

Para ella eso era una vil traición hacia el amor verdadero que buscaba su especie.

Issei se mostró sorprendido ante el comentario de la rubia, mientras las chicas la miraban con respeto y admiración por tales palabras.

— Estoy de acuerdo con Tsu-chan, solo se preocuparon por ellas mismas buscando intereses personales — Dijo esta vez Penemue con dureza en su voz.

— Eso de querer ganar experiencia con otros chicos para hacerte feliz fue una total idiotez nya, yo prefiero aprender y experimentar con la persona que amo, de eso se trata una relación — Fue lo dicho por Kuroka.

Las demás asintieron con ojos duros, mientras Elsha y Silver le sonrieron de forma suave.

El castaño las miró con los ojos abiertos, para luego relajar su expresión mientras una sonrisa divertida se formaba en sus labios, gesto que ocasionó que más de una de las chicas tuviera un leve tinte rosado en sus mejillas.

Pudo darse cuenta que estas eran las más tímidas respecto a asuntos de índole romántica.

Véanse Neru, Penemue, Valerie, Le Fay, Leo y Alleyne.

— Entiendo, gracias chicas — Agradeció con tono cálido.

— Ahora que estás aquí, puedo aprovechar el presentarte a los nuevos miembros del grupo, Kaori — Dijo Rosseweise al notar como el ambiente tenso se disipaba.

Esto logró sacar de su aturdimiento a Katase, que rápidamente tomó el hombro de su amiga y se acercó a ella hasta poder mirarla a los ojos.

— ¿Sabías sobre esto? — Preguntó en un susurro mientras la miraba con reproche.

Murayama la miró de forma impasible, dibujando una ligera sonrisa que puso nerviosa a Katase.

— Usé un panfleto con un círculo mágico que Aika me dio, no pensé que fuera real, así que imagina mi sorpresa cuando Hyodou apareció en mi cuarto desde un círculo brillante en el piso — Dijo de forma relajada.

Katase parpadeó, para luego soltar a su amiga mientras soltaba un suspiro.

— Supongo que tú sabías sobre esto desde hace tiempo, Aika-san — Inquirió a la castaña de lentes con tono tenso.

— En mi caso fue a Asia a quien invoqué la primera vez, por eso después de conocer a algunas de las chicas de Hyodou les pedí un volante de su Clan, luego se lo di a Kaori-chan cuando me comentó acerca de un problema que tenía — Respondió encogiéndose de hombros.

— El panfleto decía ‘cumplimos todos tus deseos’, así que le di una oportunidad — Agregó Murayama con un encogimiento de hombros.

— Ese día todas estaban ocupadas con sus contratos, así que me tocó responder la convocatoria — Dijo esta vez Issei en tono casual.

— Ya veo — Fue lo dicho por Katase para luego quedarse en silencio.

Su mente procesando toda la información que estaba recibiendo.

Si bien ya no estaba tan perturbada como al principio, aún estaba un poco aturdida por todo el descubrimiento que había hecho.

Todo por escuchar una conversación personal.

Ella reprimió una mueca al recordar ese hecho.

Entonces su mirada vagó hacia las chicas presentes.

Una chica de cabello negro y ojos rojos, cuyo ojo izquierdo estaba cubierto por un flequillo y su cabello atado en dos colas que caían al frente sobre su pecho.

Vestía un Yukata simple color negro con estampado de serpientes blancas.

Otra chica de cabello rubio y ojos verdes, la cual vestía un yukata lila con tonos suaves y fuertes entremezclados y un obi naranja.

Lo más sobresaliente de ella eran su cola y orejas expuestas, por lo que busco en su mente deduciendo que era una Kitsune del folclore japonés.

Había una chica de cabello violeta y ojos rojos, quien vestía un suéter blanco de lana que dejaba al descubierto sus hombros, escote y piernas.

Una chica rubia de ojos verdes, su cabello atado en un bollo mientras vestía una blusa negra manga larga y unos jeans.

Otra chica rubia, pero de ojos azules, con el cabello a la altura de los hombros con una trenza que caía por su espalda, vistiendo una camisa blanca de botones sin mangas, un short negro y medias hasta el muslo también en negro.

Su mirada se fijó en una pequeña rubia con uniforme escolar, llevando un sombrero de bruja y una capa, además del bastón en sus manos.

Otra rubia de ojos azules, con un vestido negro y blanco que le devolvió la mirada con los brazos cruzados bajo su enorme pecho.

Una chica de cabello blanco con ropa ligera que mostraba mucha piel, siendo destacable las orejas y colas de león.

También una rubia platinada con ropas verdes y unas llamativas orejas largas que ella reconoció como un Elfo.

Otra chica rubia de ojos verdes y un bollo en el cabello con un vestido rojo revelador.

Un hombre de cabello negro con ropa hogareña, la cual contrastaba con la cicatriz en su sien derecha y los pendientes plateados que traía.

Otra chica rubia de ojos azules que llevaba un vestido blanco de tirantes y sandalias.

Una chica de cabello negro que vestía una yukata negra que dejaba al descubierto los hombros y escote, con orejas de gato y dos colas en su espalda.

Otra chica rubia de ojos rojos, vistiendo un abrigo ligero.

Por último estaba la maestra Rosseweise y esa Maid.

Ella fue sacada de sus pensamientos cuando Rosseweise tomó a Murayama y la presentó a cuatro de las personas presentes, tres chicas y el único hombre aparte de Issei.

— Ellos son Silver Fullbuster, Leon Mitchelli, Elsha Laevateinn y Alleyne, los últimos [Peones] de Issei — Presentó la Valquiria.

— Un gusto Ojou-chan — Saludó Silver con una sonrisa amistosa.

— Mucho gusto Kaori-san — Dijo Leo con una sonrisa formal, pero sincera.

— Hola — Fue el simple saludo de Elsha alzando la mano.

— … — Alleyne solo asintió con los brazos cruzados.

— Ah, un gusto — Respondió la castaña con una sonrisa nerviosa.

Después de todo, las tres chicas eran sumamente hermosas.

Entonces, cierta castaña de lentes se hizo notar.

— Bueno, si bien me entusiasma experimentar cosas nuevas y visitar lugares exóticos sin gastar un solo centavo, debo recordarles que aún estamos en horario escolar — Dijo Aika mientras alzaba su mano para darse a notar.

Esto generó que varios de los presentes tuvieran una gota en la nuca, pero las chicas del Club de Kendo abrieron sus ojos alarmadas por eso.

— No es bueno, no he faltado ningún día a las prácticas del Club — Dijo Murayama con pánico en su rostro.

— Tampoco yo — Fue el turno de Katase.

El castaño se rascó la nuca con cierta sensación de culpa, pues él las había arrastrado en horas del almuerzo, el cual ya casi terminaba si no mal calculaba.

Entonces se giró hacia la Nekoshou.

— Kuroka, ¿podrías llevarlas? De paso avísale a Sona lo que ocurrió, también ve si encuentras a Azazel-sensei, con su ayuda se podrá justificar la ausencia de Rose, además necesitaré otra máscara, ya que la que me dio fue destruida en mi última pelea — Dijo con tono amable.

Sin embargo, todos notaron cierta orden impresa en su tono, a lo cual la peli-negra sonrió coquetamente mientras asentía.

— Dalo por hecho nya~ — Respondió mientras se acercaba al trío.

Ellas estaban un poco sorprendidas al escucharlo hablar de esa forma, sobre todo porque la chica se mostraba bastante obediente a pesar de parecer alguien que no respeta la autoridad, si la forma de responder juguetonamente indicaba algo.

— Vamos chicas, quizás pueda ver a Shirone si tengo suerte — Mencionó con tono serio mientras invocaba un círculo mágico.

A pesar de todo, ella se preocupaba por su hermana pequeña y ahora mismo ésta atravesaba un mal momento.

Todas lo entendieron, por lo que le desearon las mejores de las suertes.

— Te lo encargo, Kuro-chan — Dijo el castaño, esta vez en un tono más suave y cálido.

La mencionada no respondió mientras activaba el círculo de espaldas a él, pero el castaño pudo notar como sus orejas se crisparon levemente, además de ver su cuello un poco enrojecido, lo que lo hizo sonreír tenuemente.

Para el trío de chicas de preparatoria, la visión de la chica sonrojada tiernamente las sorprendió un poco, antes de desaparecer del sitio.

El castaño miró el lugar donde estaban las chicas antes de desaparecer unos momentos más.

— ¿Estas preocupado por ellas? — Preguntó Kurumi mientras se acercaba a él.

Issei se mantuvo en silencio por unos momentos, para después mirarla y ver la preocupación en sus ojos rojos.

— Mentiría si dijera que no, después de todo he vivido muchos momentos junto a ellas… sé que son fuertes y que se levantarán, pero también sé lo frágiles que son, lo único que puedo pedir es que superen esto en el menor tiempo posible — Respondió el castaño soltando un profundo suspiro.

Las demás chicas y Silver se mantuvieron en silencio, pero admirando al chico por sentir empatía por aquellas que le causaron tanto mal.

Incluso si fue por capricho, inmadurez o ignorancia lo habían herido profundamente.

Que a pesar de toda la decepción que albergaba en su corazón, parecía que aun velaba por ellas de alguna forma.

Esto generó sonrisas en las chicas, mientras Silver lo miraba con respeto.

Grrr

— Bueno, creo que nos vendría bien algo de comer — Dijo con una sonrisa avergonzada.

— Es verdad, no pudimos almorzar porque fuimos a hablar con Rias y las chicas — Dijo Rosseweise al recordar ese pequeño detalle.

— Espere unos minutos Issei-sama, en seguida prepararé algo para usted y Rosseweise-san — Fue lo dicho por Maya mientras se inclinaba.

— Gracias, lamento molestarte — Dijo el castaño con tono agradecido.

— No se preocupe, después de todo es mi trabajo — Dijo Maya mientras se retiraba hacia la cocina.

Todos los ocupantes del Castillo se pusieron cómodos esperando la comida, mientras Tsukiumi, Kurumi, Yuki y Rosseweise se mantenían cerca del chico.

— Es verdad, ¿de que hablaban ustedes esta mañana Ise? — Preguntó la Valquiria al castaño.

Este se miró preocupado por un momento, para luego suspirar.

— Almorcemos primero, Rose, te diré todo después — Dijo en ligero ruego.

La peli-blanca se preocupó un poco, pero asintiendo accedió al pedido del chico, el cual le sonrió de forma reconfortante, lo que le hizo preguntarse qué tan grave era lo que él le diría.

Los demás solo observaron de forma seria, con un leve toque de preocupación.

Mundo humano — Academia Kuoh

El trío de chicas de preparatoria había aparecido junto a la Nekoshou en el salón de eventos de la escuela.

— Desde aquí pueden llegar a su destino nya~ — Dijo Kuroka mientras sus rasgos se ocultaban y un uniforme de la escuela reemplazaba su kimono.

Todo con magia.

— ¿A dónde irás tú? — Preguntó Aika al ver el cambio de ropas.

— Iré a cumplir la orden de mi [Rey], además de que mi pequeña Imouto está atravesando un mal momento y es mi deber como hermana mayor estar con ella en estos momentos — Dijo con tono serio mientras empezaba a caminar fuera del lugar.

Aika y Katase parpadearon con confusión ante tal respuesta.

— Ella es la hermana mayor de Koneko-chan — Aclaró Murayama cuando la Nekoshou se perdió de vista.

Esto hizo que las otras dos la miraran con incredulidad.

— Si, yo también me sorprendí, la diferencia entre ambas es… muy notoria — Dijo con cierta incomodidad en su tono.

Aika y Katase la siguieron mirando sin poder creerlo.

— Como sea, se hace tarde y el almuerzo casi termina — Dijo mientras salía del lugar rápidamente.

Este comentario despertó a las otras dos chicas.

— ¡Es verdad! — Exclamaron ambas antes de seguirla sin perder tiempo.

Consejo Estudiantil

La Nekoshou no tardó mucho en llegar, ya que la preocupación por su hermana le hizo caminar más rápido, así que al sentir las presencias que buscaba abrió la puerta sin siquiera tocar.

— Sona-nya, justamente te estaba buscando, a ti también Azazel — Declaró a la hora de entrar al salón.

Sona estaba sentada en su escritorio comiendo su almuerzo, al igual que toda su Nobleza reunida.

Azazel se encontraba refirmado en el marco de la ventana, bebiendo una simple botella de agua.

Los mencionados, así como el sequito [Sitri] la miraron al instante, siendo que algunas se sobresaltaron cuando la puerta se abrió bruscamente y Saji se atragantó con una pieza de pollo frito comenzando a ahogarse.

Por suerte, Momo y Ruruko lo ayudaron, para que después Bennia le diera un poco de su bebida con suma preocupación.

— Kuroka, ¿podrías tocar la próxima vez antes de entrar? — Preguntó una seria Sona mientras bajaba sus palillos y se acomodaba los lentes.

— Vamos, no seas así Sona-nya — Dijo la peli-negra en tono juguetón.

— Entonces, para que nos buscabas Kuroka — Preguntó esta vez un curioso Azazel.

Este había venido a preguntar sobre el estado de Issei y como se comportaba en casa.

Cabe decir que la preocupación que tenía se disipó cuando Sona dijo que estaba perfectamente, que la cena con sus padres fue bastante amena y además de que su nuevo brazo no le generó ningún problema.

— Bueno, Ise-nya ya se reunió con el grupo Gremory hace un rato, de hecho regresó a casa a descansar después de la reunión — Informó la Nekoshou con tono serio.

Sona y las chicas de su séquito, así como Rugal y un recuperado Saji adquirieron diversas expresiones ante lo dicho por la Nekoshou.

— Ya veo, supongo que la reunión lo agotó mentalmente — Fue lo dicho por la heredera después de unos momentos de silencio.

— Supongo que vas a ver a tu hermana — Dijo esta vez Azazel al notar la ansiedad en la chica.

Ante lo dicho por el Ex Gobernador, la Nekoshou asintió con seriedad.

— Así es nya, Ise también me pidió que te dijera que cubrieras la ausencia de Rose-chi, además de que necesita una nueva máscara, por que la anterior fue destruida — Agregó Kuroka mientras se daba la vuelta.

El resto solo la vio retirarse apresuradamente.

— Bueno, creo que iré a reunirme con el director ahora mismo para justificar la ausencia de mi colega profesor… en cuanto a la máscara, tengo algunos [Sacred Gear] en blanco y el respaldo de su información, será fácil tener un repuesto para esta noche — Dijo Azazel mientras se retiraba.

— Eso es bueno — Dijo Sona al escucharlo.

— Entonces nos veremos más tarde — Se despidió saliendo de la habitación.

El sequito Sitri se quedó en silencio.

Entonces Sona suspiró.

Sin más regresó su atención a su almuerzo.

Los demás la imitaron.

Sona no se mostraba tan preocupada por Rias, pues sabía que el castaño no sería tan duro con ella.

Si bien posiblemente le habrá señalado los errores cometidos y el haber asumido que lo que hizo fue por pensar en el bienestar de su relación, sabía que el chico buscaba también que ellas superaran dichos errores y que se volvieran más fuertes mentalmente.

Eso solo podría lograrse tendiéndoles una rama de olivo.

En pocas palabras, un incentivo para que ellas pudieran levantarse y seguir adelante.

Sin embargo, lo más probable es que Rias y las demás lo malinterpreten pensando en que tienen la oportunidad de volver a estar relacionadas con él sentimentalmente.

Solo esperaba que ellas fueran lo suficientemente fuertes para afrontar la futura negativa del chico a amarlas de nuevo.

Por su parte, su sequito no lo pensó y solo se conformaron el considerar que el castaño ya se había tardado en confrontarlas y hacerlas ver su monumental error.

Club de Ocultismo

El ambiente dentro del club era por demás depresivo.

Las chicas aún no se recuperaban de su encuentro con Issei, siendo destrozadas verbalmente por este sin dejarles siquiera oportunidad de defenderse, pues el castaño no les dejó ningún argumento válido en cual escudarse para justificar sus acciones.

Rias estaba sentada en su escritorio, derrumbada sobre este mientras trataba de pensar en la razón por la que empezó a pensar de esa forma.

Ahora mismo se sentía horrible, no ayudando en nada el ver como las chicas estaban igual o peor que ella.

Asia lloraba mientras abrazaba a su pequeño familiar, sentada en el sofá y sin que sus lágrimas dieran señales de detenerse.

Koneko a su lado estaba con las rodillas en el pecho, con leves temblores evidenciando su llanto.

Xenovia estaba debajo de la ventana, sentada en el piso con una expresión de conmoción, no pudiendo procesar todavía lo ocurrido.

Akeno ocupaba el otro sofá, donde ella estaba sentada con expresión perdida, como aquella vez cuando se pensó en la muerte del chico.

Una llorosa Irina trataba de consolar a la pequeña Phoenix, quien lloraba abiertamente la perdida que acababa de sufrir.

Kiba y Gasper se habían retirado, no sin antes dedicarle una mirada de decepción.

Esto la hizo sentir más miserable.

Entonces la puerta del Club se abrió de golpe.

Rias alzó la mirada un poco, encontrando un par de ojos dorados que se estrecharon levemente al verla, para luego recorrer la habitación hasta encontrar a la persona que buscaba.

Koneko se tensó cuando sintió una mano acariciar su cabeza, pero luego un aroma familiar llegó a ella.

— Todo estará bien Shirone, Onee-chan está aquí — Habló Kuroka con tono suave.

La pequeña alzó la mirada, encontrando los ojos dorados de su hermana mayor, los cuales a pesar de trasmitir cierta decepción, también trasmitían preocupación y cariño.

— Onee-sama — Pronunció débilmente la peli-blanca.

Kuroka le dio una débil sonrisa, misma que fue suficiente para que la pequeña Nekoshou derramara lagrimas nuevamente y se lanzara a los brazos de su hermana mayor.

— Onee-sama, Onee-sama, ¡Onee-sama! — Exclamó la peli-blanca mientras lloraba de nuevo.

Rias apartó la mirada cuando Kuroka la miró.

— No preguntaré que sucedió, porque mi única razón para estar aquí es Shirone, princesa interruptor — Declaró la Nekoshou en tono serio.

La peli-roja sintió un escalofrío al percibir el descontento en el tono de la gata negra, así que se limitó a guardar silencio y sumergirse nuevamente en su miseria.

Así pasó el tiempo, mientras la Nekoshou consolaba a su hermana pequeña y la peli-roja se lamentaba de sus acciones, derramando lágrimas silenciosas de vez en cuando.

Kuroka ignoró el estado mental de las chicas y solo se concentró en cuidar de su hermana pequeña, hasta que esta se durmió de tanto llorar.

Aun así no se despegó de su lado.

Inframundo – Castillo Dragón

El almuerzo había terminado y ahora el castaño estaba en su despacho personal junto a Rosseweise.

Ambos sentados en el sofá, mientras el castaño la acercaba a su lado con un abrazo, mientras la peli-blanca se preocupaba un poco al sentir cierta vacilación en su lenguaje corporal.

Entonces lo escuchó soltar un suspiro.

— Rose, esto que te diré lo supe cuando me perdí, si no te lo dije al regresar fue porque no quería arruinar nuestro reencuentro — Dijo un serio Issei mientras la miraba a los ojos.

La peli-blanca tragó un poco al ver la seriedad con la que se expresaba el chico.

Acto seguido el castaño alzó su mano con la palma hacia arriba, donde una llama violeta apareció ardiendo con algunos tonos azules y verdosos.

La Valquiria miró con duda esta flama, pues era la misma que el castaño usaba recientemente y que lo vio manipular para lograr sus nuevos ataques.

Ella no vio nada raro en ella.

Aun así su mirada siguió en la llama, no encontrando nada extraño, hasta que decidió concentrarse en su naturaleza, lo que la hizo estremecer y que a su mente viniera un nombre bastante familiar.

— Nigghod — Susurró con los ojos bien abiertos mientras su piel palidecía visiblemente.

Los ojos de la peli-blanca cayeron sobre el castaño, mostrando alarma y al mismo tiempo exigiendo una respuesta inmediata.

El castaño cerró sus ojos mientras la flama desaparecía de su palma.

— Ise, dime que no es lo que yo creo — Pidió con tono rígido.

Aunque ella ya intuía la respuesta.

— Al parecer, volverme un Datenryu es más que caer por amor… es una inversión total — Dijo el castaño con suma seriedad.

Las pupilas de Rosseweise se dilataron y su respiración se atoró en su garganta, pero se obligó a controlarse.

Ella necesitaba escuchar esta explicación.

— Dímelo todo — Dijo en tono lapidario.

En respuesta el castaño tomó su mano, mientras su mirada se volvía suave.

Fuera del despacho

En el final del pasillo, podía verse al Título Nobiliario de Issei, de los cuales algunas chicas miraban la puerta del despacho del castaño con cierta preocupación.

Entonces sintieron una pesada aura aparecer de un segundo a otro, la cual trasmitía bastante agresividad y violencia de un modo avasallador.

Pero pasados unos segundos esta desapareció.

Todos estaban con los ojos bien abiertos y sudando levemente después de que pasó tal sensación, todos con excepción de Kurumi, quien ya se esperaba algo así.

Aunque también sintió algo familiar en el aura que desató la Valquiria.

— Sin duda fue su mejor decisión esperar hasta después de la reunión — Dijo Silver con tono serio.

— Si, a pesar de esperarlo no pensé que Rosseweise-san pudiera soltar algo así — Dijo una seria Penemue.

Por un momento se sintió abrumada, a pesar de ser una Cadre nivel Serafín después de reencarnar.

— Esa aura es idéntica a la de Nii-chan cuando está molesto — Dijo Elsha recordando la vez que asesinó al Demonio que la iba a torturar antes de morir.

Ella había logrado percibir por un breve momento su aura agresiva, la cual estaba llena de violencia y sed de destrucción.

— Si, es igual a la que Ise desató la vez que Yasaka fue secuestrada — Confirmó Leo con tono serio.

La antigua gobernante recordaba sentir su poderosa aura a flor de piel.

Era violencia pura y arrolladora.

— Mmm~ — Fue lo único salido de la boca de Kurumi.

Ella se daba una idea del porque podía sentir que la Valquiria tenía un toque dragontino en su aura.

— Como sea, es mejor dejarlos solos, estoy segura que Ise puede controlar la situación — Declaró la [Reina] del grupo mientras empezaba a alejarse.

Los demás se miraron por un momento, para luego soltar un suspiro y seguir a su [reina].

Aunque Valerie, Le Fay y Tsukiumi miraban hacia atrás de vez en cuando.

Así el grupo se dispersó.

Dentro del despacho

Issei miraba con preocupación a una Valquiria que respiraba hondo tratando de calmarse.

Ella estaba rodeada de un aura azul turquesa, misma que por un momento había sido bastante intimidante y agresiva, pero al darse cuenta de esto ella suprimió sus deseos de aplastar al grupo de mujeres del Clan Gremory.

Una vez que se sintió más tranquila, ella abrió sus ojos.

El castaño abrió levemente los ojos al ver como la pupila de Rosseweise era rasgada, como la de un reptil.

— ¿Sucede algo Ise? — Preguntó confundida al ver la expresión del chico.

— Tus ojos — Pronunció Issei recuperando la compostura y mirándola con seriedad y un toque de preocupación.

La peli-blanca alzó una ceja, pero al ver la preocupación en la cara de su novio, tomó un espejo cercano y se miró en él.

Rosseweise mostró sorpresa al ver el cambio en sus ojos.

— ¿Qué…? — Pronunció en completo shock.

— ¿Dime Draig, tú sabes que sucede con Rose? — Preguntó el castaño con tono serio.

[Mmm, puedo decir que esto es parecido pero a la vez muy diferente a cuando un Dragón marca a su hembra… pues normalmente, después de volverse uno, el Dragón macho deja su esencia y algo de su poder para advertir a otros machos que dicha hembra está tomada]

Explicaba el Dragón sellado a la pareja.

Cabe decir que estaban muy sonrojados, pues recordaron brevemente todo lo ocurrido anoche.

[Sin embargo, en este caso puedo sentir como tu alma y el alma de la Valquiria están unidas por un lazo creando una poderosa conexión… es más, puedo sentir varias conexiones con el alma de tus demás chicas, aunque estas sean menos poderosas y varíen su intensidad…]

Seguía el Dragón con su explicación.

Esto por supuesto sorprendió y dejó con más dudas a la pareja.

— Eso no puede ser posible, según Tannin-Ossan, esa marca solo aparece después del apareamiento y no antes, por ello a veces dos o más Dragones pueden competir por la atención de la hembra, al menos eso fue lo que me explicó — Expuso el castaño con seriedad.

Él recordaba que durante su entrenamiento con el Rey Dragón, este le había hablado de su especie y sus hábitos, más que nada por precaución debido a ser parte Dragón.

Así si algo cambiara en su comportamiento él ya estaría informado y le sería más fácil lidiar con la situación.

Pero hasta ahora no hubo indicios de algo así.

— Bueno, quizás así son los Dragones, pero recuerda que tú originalmente eras humano, por lo que aún si tu cuerpo es el de un Dragón, tu alma sigue siendo humana — Fue lo dicho por Rosseweise en tono pensativo.

[La Valquiria tiene razón, aquí tu parte Dragón no tiene nada que ver ya que la conexión es más profunda, es como si sus almas hubieran hecho la conexión usando el poder Dragontino como medio… eso explica porque hay más conexiones, si no me equivoco entonces son lazos del alma creados a partir del amor que hay entre ambas partes]

Fue la conclusión a la que llegó Draig.

Esto dejó en silencio a la pareja, sin mencionar que el castaño sintió como su corazón daba un vuelco y se llenaba de calidez.

— Un lazo del corazón, eh~ — Musitó Issei con una pequeña sonrisa.

En cambio, la Valquiria regresó a la normalidad gracias a un nuevo sentimiento que reemplazó la rabia anterior.

— Ya veo — Fue lo dicho por Issei.

Entonces este sonrió mientras la tomaba de la mano.

Ambos podían sentir una cercanía que antes no estaba.

[Este es tu corazón actualmente socio]

Dijo Draig.

Entonces desde el brillo verdoso en la mano del chico, un círculo mágico surgió, para luego ampliarse y que el castaño lo reconociera de inmediato.

Pero lo más llamativo eran los cambios que este había sufrido.

Donde antes había cinco llamas ardiendo en sus respectivos espacios, nuevas llamas habían aparecido llenando los espacios ocupados por las llamas muertas.

Azul turquesa para Rosseweise.

Morado y negro para Kurumi.

Azul y blanco para Tsukiumi.

Azul y plata para Sona.

Verde azulado para Kuroka.

Esas eran las llamas que ardían originalmente la última vez que el círculo mágico se manifestó, dejando tres llamas grises y muertas.

Sin embargo, ahora dos de esas tres llamas ardían intensamente, sin mencionar que otras más se habían añadido al círculo mágico.

Una llama color dorado con tintes blancos.

Una llama verde en tonos claros y oscuros.

Estas ardían a la par de las cinco llamas originales, mientras el círculo se había ampliado gracias a las llamas extras que aunque no eran tan brillantes como las demás, si se mostraban llenas de vida y fuerza.

Una llama roja con tintes más oscuros de rojo.

Una llama dorada.

Una llama rojo carmesí.

Una llama verde con destellos de color más claro.

Una llama blanca con destellos de oro.

Una llama color fuego con destellos naranjas.

Una llama color azul con destellos blancos.

Una llama color marrón con destellos naranjas.

Para el castaño fue una gran revelación este enorme cambio, para luego salir de su ensoñación cuando la Valquiria le dio un apretón a su mano, por lo que este la miró.

— Creo que está claro, tu corazón lo supo desde el principio — Dijo mientras le sonreía con calidez.

Ante esto, el pecho del castaño se apretó, pero no era un mal sentimiento, sino algo más cálido y reconfortante.

— Yuki y Leo — Pronunció mientras estiraba su mano hacia las dos llamas más brillantes.

De estas, una parte se desprendió hasta su palma, donde el castaño las atrapó suprimiendo un destello al cerrar su mano en un puño, para luego abrirla.

Ahora en su palma, se podían ver un par de objetos que el chico guardó en su bolsillo para dárselo a ellas más tarde.

[Así que es eso]

Dijo Draig en tono de realización.

— ¿Averiguaste algo más Draig? — Preguntó el chico notando el tono del Dragón.

[Parece ser que el círculo del ritual se conectó directamente a tu alma, no solo para purificarlo, si no que se convirtió en una manifestación física de tu corazón y el lazo con tus personas más cercanas sin contar a tus padres… esto también es fruto de que ellas hayan sido honestas contigo desde el principio, dejando en claro que su amor por ti es sincero y eso desencadenó esta conexión entre sus corazones, además de que esos artículos que creaste son basados en el mismo principio, por ello hay una conexión más fuerte al grado de compartir algo de tu poder con quien los porte]

Fue lo explicado por Draig.

Para el castaño eso tuvo sentido, pues ese era el objetivo de crear esos objetos, aunque parece ser que la conexión es más profunda de lo que pensaba, por lo que introdujo su mano en el bolsillo para sujetar ambas piezas que acababa de hacer y sonreír con calidez.

En cambio, la Valquiria miró por inercia su brazalete, con lo cual pudo notar como la joya color turquesa pulsaba levemente de forma sincronizada con la llama que le correspondía a ella.

Luego Rosseweise miró el círculo que aun brillaba y sonrió ante esto, mirando las otras llamas, siendo para ella bastante claro a quien pertenecía cada llama.

La llama dorado con tintes blancos era de Yukikaze, o mejor dicho Kunou.

La llama verde en tonos claros y oscuros era de Leo.

La llama roja con tintes más oscuros de rojo era la de Valerie.

La llama dorada era de Gabriel.

La llama rojo carmesí era de Penemue.

La llama verde con destellos de color más claro era de Alleyne.

La llama blanca con destellos de oro era Griselda.

La llama color fuego con destellos naranjas era Nero.

La llama color azul marino con destellos blancos era de Le Fay.

La llama color marrón con destellos naranjas era Murayama, si no se equivocaba.

Esta era un tanto dudosa, porque apenas empezaban a conocerse de verdad, pero quizás lo ocurrido aquella velada dejó cierto impacto en el castaño y por eso estaban esos sentimientos crecientes.

Además de ser la más débil de todas las llamas.

[Tal como te lo he dicho antes socio, tu corazón está lleno de nuevo y esta vez será para siempre]

Fue lo dicho por el Dragón en tono sincero.

El castaño por su parte, amplió un poco más su sonrisa trasmitiendo el contenido de su corazón a ojos de la Valquiria, misma que sintió una oleada de felicidad provenir del chico frente a ella gracias a que ahora era consciente de esa conexión.

Aunque ella no fue la única que lo sintió.

—Ya veo, eso es bueno… —Fue lo dicho por el chico con tono suave.

A pesar de esa corta frase, sus palabras y tono denotaban alivio, así como esperanza.

Sin más el círculo desapareció y la pareja quedó en un cómodo silencio.

— Creo que debemos ver a los demás — Dijo la Valquiria de repente.

— Si, ellos estaban un poco preocupados acerca de tu reacción, probablemente hayan sentido tu furia de hace un momento — Fue lo dicho por el castaño con tono serio y levemente preocupado.

Este comentario hizo que la Valquiria parpadeara un poco, mientras sopesaba las palabras del chico.

— Es verdad, creo que nunca me había sentido tan furiosa y con ganas de destrozar algo en toda mi vida — Dijo Rosseweise con tono pensativo.

— Creo que podría ser por el aura de dragón que ahora posees — Dijo el chico recordando el cambio en los ojos de la peli-blanca.

Esta parpadeó, para después sonrojarse ligeramente al recordar la explicación de Draig, pero no obstante asintió en acuerdo.

— Si, sin duda tendré que aprender a controlar mejor mi temperamento — Agregó la Valquiria con seriedad.

Esto se debía a que el impulso la abrumó por un breve segundo.

— Sabes que cuentas conmigo para ello — Dijo el castaño mientras se ponía de pie y extendía su mano.

La Valquiria lo miró, para luego mirar la mano del chico y sonreír antes de tomarla, poniéndose de pie con su ayuda.

— Te amo Ise — Dijo Rosseweise de la nada.

— Te amo Rose — Respondió el chico ante la espontaneidad de la chica.

Ambos sintiendo el sentimiento impreso en cada palabra de la corta frase.

Así, tomados de la mano salieron de la habitación.

En la planta baja, todos se ocupaban de sus cosas mientras un aire tenso casi sofocante reinaba en la habitación, hasta que escucharon pasos venir desde uno de los pasillos, viendo a la pareja entrar con sonrisas serenas en sus caras.

— Lamento haberlos preocupado, pero todo ya ha sido resuelto — Dijo la valquiria cuando vio los ojos preocupados de sus compañeras caer sobre ella.

Ella notó lo tenso del ambiente, así que optó por disculparse sinceramente.

Hubo un pequeño lapso de silencio, hasta que alguien se atrevió a hablar.

— Es bueno escuchar eso, aunque ahora sé cómo es estar en la guarida del dragón… Jou-chan — Fue lo dicho por Silver en tono divertido.

La valquiria se sonrojó ante lo dicho por el peli-negro, entendiendo que se refería a su pequeña reacción de antes.

Por su parte, las demás sonrieron al ver a su compañera avergonzada, disipando así cualquier preocupación e incomodidad a expensas de la vergüenza de su compañera.

Issei aplaudió mentalmente al comentario de Silver, pues ese tono ligeramente bromista había relajado el ambiente e hizo que todo volviera a la normalidad, demostrado por como Kuroka y Elsha eran las primeras en seguir las bromas hacia la valquiria.

— ¿Entonces, que piensas acerca de lo sucedió? — Preguntó Kurumi con cierta seriedad.

Esto hizo que se formara un ambiente más serio en la habitación, pero a diferencia de antes, no era tenso ni nada, solo un poco más formal.

La peli-blanca respiró hondo, para luego exhalar y presentar una sonrisa suave.

— Mentiría si dijera que no me molesta… pero Ise-kun lo superó y eso es lo que más me importa, todo lo demás sale sobrando — Respondió sin dudar ni un segundo.

El castaño no pudo evitar sentirse orgulloso de la respuesta, pues era como en su caso.

A pesar de todo él todavía sentía un poco de rencor hacia el grupo Gremory, lo que notó al momento de enfrentarlas y desahogarse con ellas, guardándose muchas cosas con el fin de no devastarlas por completo y ponerlas en riesgo al dejarlas tan vulnerables.

Por ello se decidió que pensar en ello ya no valía la pena y prefería recordar los viejos tiempos con cariño como un incentivo para seguir protegiendo a esas chicas.

Y al parecer la valquiria llegó a esa misma conclusión.

— Ya veo, es un buen pensamiento el que tienes allí — Asintió la [Reina] del grupo Hyodou con una pequeña sonrisa.

Si bien su respuesta fue bien recibida, solo unas pocas de las chicas habían llegado al mismo hilo de pensamientos que la valquiria y la aceptaban con facilidad, siendo las de mayor edad y madurez mental para entender su resolución.

Estas eran Gabriel, Nero, Elsha, Penemue, Griselda, Silver, Leo, Alleyne y Maya respectivamente.

Las demás aún estaban un tanto inconformes, pero respetaban la decisión de la peli-blanca.

— ¿Qué piensas hacer ahora Issei? Dudo mucho que quieras regresar a clases después de lo sucedido — Preguntó Griselda con curiosidad.

— Mmm~ Tenía pensado unos ejercicios para la vinculación del equipo este fin de semana, pero creo que podemos hacerlos ahora para matar el tiempo ¿Qué dicen? — Dijo y preguntó el chico mirando a sus siervos.

Estos mostraron un poco de sorpresa, para que luego Kurumi asintiera cruzada de brazos.

— Esa es una buena idea, ya que tenemos nuevos miembros, sin mencionar que solamente hemos hecho una misión en conjunto y a pesar de que hiciste un gran trabajo guiándonos, aún tenemos fallas que pueden costarnos caro si no lo remediamos — Fue lo dicho por la [Reina] del grupo.

Los que estuvieron en dicha misión adquirieron expresiones serias, ya que todavía recordaban como terminó todo.

— Entonces eso es lo que haremos el resto de la tarde — Dijo el castaño mientras se daba la vuelta y empezaba a caminar seguido de la Valquiria.

Las demás chicas y Silver lo siguieron después, mientras se mentalizaban para sacar el mayor provecho a su próxima sesión de entrenamiento.

Mundo humano — Kuoh, Japón

Kuroka acariciaba la mejilla de una dormida Koneko, teniendo ella una expresión seria.

Después de llorar en brazos de su hermana mayor durante una hora, la Nekoshou menor logró dormirse, sin embargo al intentar alejarse la pequeña se aferraba a su ropa, razón por la que decidió quedarse más tiempo de lo planeado.

Ahora mismo ella pudo soltarse del agarre de su pequeña hermana sin que esta intentara aferrarse a su Kimono.

Una Rias con ojeras y ojos rojos la miró con desgana.

Ella pudo controlarse un poco más y por ello era la que en mejor condición estaba, pero de igual manera la confrontación con el castaño le pasó factura, sobre todo porque fue la principal instigadora de lo que ahora supo fue una idiotez de su parte.

El ver como su Nobleza se desmoronaba por su culpa la hacía sentir como una basura.

Lo peor fue la decepción en la voz del castaño, más en el momento en que destrozó completamente cualquier argumento que intentara en su defensa al anticiparlo previamente.

Eso fue algo que jamás se esperó del chico, pero supuso que el dolor y sufrimiento que ella misma le causo lo hizo madurar de esa forma tan abrupta.

Ella salió de sus pensamientos cuando un pequeño círculo mágico apareció en la oreja de Kuroka.

— ¿Estás desocupada Kuroka? — Se oyó la voz de Valery salir del círculo de comunicación.

— Acabo de terminar aquí nya~ — Respondió la Nekoshou dándole una última caricia a la cabeza de su hermana menor.

— Ya veo, entonces será mejor que regreses, tendremos una sesión de entrenamiento con Spectra-sama y solo faltas tú — Dijo antes de cortar la comunicación.

La Nekoshou no tuvo que pensarlo tanto, para ella era claro que el castaño buscaba desahogar un poco su frustración, además de que probablemente las chicas hacían esto para que lo ocurrido en la última misión no volviera a ocurrir.

Y ella estaba de acuerdo con eso, por ello rápidamente creó un círculo de tele-transportación.

Sin embargo, antes de irse miró a la peli-roja desplomada en su escritorio.

— Mocosas, será mejor que muevan esos traseros fuera de ese agujero de culpa y miseria si quieren ganar su reconocimiento de nuevo nya, de ustedes depende si superan esto o lo vuelven a decepcionar — Dijo en voz alta antes de desaparecer del Club de Ocultismo.

Inmediatamente Rias se levantó de golpe ante las palabras de la Nekoshou.

— ¡¿Cómo sabes…?! — Exclamó rápidamente poniéndose de pie, pero la Nekoshou ya se había ido.

Cabe decir que lo dicho por Kuroka y la reacción de Rias hicieron reaccionar a las demás chicas, las cuales estaban desperdigadas en la habitación del Club.

— Rias-Onee-sama, Kuroka-san… — Dijo Asia mientras hipaba levemente.

La peli-roja se dejó caer en su asiento con pesadez, para luego mirar a la rubia.

— A estas alturas no debo sorprenderme, últimamente se vio bastante cercana a Issei y Koneko, por lo que seguramente está al tanto de todo — Dijo la peli-roja pellizcando el puente de su nariz.

Era incluso probable que ella presenciara su reunión con el castaño.

Sin mencionar la mirada llena de desdén y molestia que ella tenía cuando desapareció.

— Aun así, lo que dijo es verdad… no podemos quedarnos sin hacer nada y dejar que esto nos destruya, Ise nos está dando otra oportunidad y no debemos desaprovecharlo — Habló nuevamente la peli-roja.

— Aunque al mismo tiempo nos ha puesto en una posición más complicada — Dijo esta vez Akeno mientras la luz volvía a sus ojos lentamente y reaccionaba.

Ellas se quedaron en silencio, pues era cierto, ya que ahora mismo sus sentimientos eran bastante complejos.

Por un lado estaban sus actuales novios, a los cuales han llegado a tener bastante afecto al grado de sentir un ligero enamoramiento, que aunque no supera a lo que sienten por el castaño, si llega a ser algo notorio y no pueden dejarlo de lado con tanta facilidad.

Después de todo ellos no tenían la culpa de sus errores y ellas lo sabían.

Es más, Issei mismo lo sabía y por ello les había advertido de que no terminaran sus relaciones y siguieran con ellos, incluso llegando a decirles que jamás las perdonaría si llegaran a tales extremos.

Rias solo pudo exhalar mientras cerraba sus ojos.

El castaño les preparó un camino donde si su relación con los chicos no llegaba a funcionar, esta terminara de forma natural, en vez de terminarla por despecho y dejando solo corazones rotos en ambas partes.

Con la cabeza más fría ella se dio cuenta de que si eso hubiera llegado a pasar, ellas se sentirían más miserables que nunca pues el chico también las rechazaría dejándolas completamente solas.

Abrió sus ojos, viendo a su séquito llegando a la misma conclusión que ella, solo si la mirada contemplativa de Xenovia fuera indicio de su nueva realización.

Por otra parte, Ravel aún seguía cabizbaja, pues ella descuidó al castaño de otra forma y el pensar en todo lo que sufrió sin que ella se diera cuenta o le diera una segunda mirada dolía mucho.

— “Si no fuera tan tonta, yo también podría…” — Pensó con auto-reproche y sonrojándose un poco.

La rubia aun recordaba cierta información dada por la Nekoshou respecto a la Valquiria que lo acompañó en todo este tiempo.

Si, quizá ella también tendría la esencia del castaño en ella si no lo hubiera descuidado.

Pero rápidamente negó con la cabeza.

— “Debo ponerme al corriente de todo, no puedo dejarme vencer por esto, soy una Phoenix después de todo y como el ave inmortal renaceré de mis cenizas y seré una mejor yo” — Pensó con decisión en su mirada.

Un ojo ámbar miró todo esto, antes de volver a cerrarse mientras sonreía ligeramente.

— “Gracias, Onee-sama” — Pensó la Nekoshou del grupo al sentir como el ambiente en la habitación cambiaba poco a poco.

Llevaba despierta desde que Kuroka se separó de ella, pero no quiso causarle más molestias y fingió dormir todo este tiempo.

Koneko se sintió un poco indigna de tener una hermana tan buena, la cual a pesar de estar decepcionada de ella y saber lo que hizo, no la dejó sola en ningún momento.

También el darles el empujón que necesitaban.

Sin más dejó que el cansancio la reclamara de nuevo y se durmió.

Inframundo — Castillo Dragón

¡BOOOMMM!

¡BOOOMMM!

¡BOOOMMM!

¡BOOOMMM!

El sonido de las explosiones llenaba la habitación especial creada por Ajuka Beelzebu y Azazel para el entrenamiento de cierto castaño y su grupo, mismo que había adoptado la forma de un claro amplio cubierto de hierba.

Habían pasado ya seis horas desde que Kuroka regresó del Club de Ocultismo, uniéndose a la sesión de entrenamiento que tenía como objetivo mejorar su trabajo en equipo en futuras misiones.

Lo primero fue una explicación y demostración de las habilidades de cada integrante de la Nobleza, para luego formar parejas y tener combates simulados, rotando de compañero cada 15 minutos para familiarizarse con cada miembro y poder afrontar cualquier situación sin problemas.

El castaño se mostró sorprendido con las chicas, ya que notaba perfectamente lo comprometidas que estaban a la causa, pues los ataques combinados, los hechizos defensivos, la compenetración en cada dúo y el cómo buscaban corregir sus puntos débiles era sumamente fructífero.

Eso podía verse debido a que él y Kurumi tenían un duro encuentro contra Neru y Penemue.

¡CLANG!

¡CLANG!

¡CLANG!

¡CLANG!

Se oía el choque de espadas entre Issei y Neru.

— ¡Nada mal master, sin duda no perdiste el tiempo al mejorar tu técnica! — Exclamó Neru mientras lanzaba varios cortes consecutivos hacia su oponente con su espada de fuego.

Por su parte, el castaño bloqueó y desvió sin problemas los cortes ígneos con Arifal, para luego empezar un combo propio.

— Descuidar mi entrenamiento hubiera sido un insulto a Griselda y a ti, jamás lo podría permitir — Respondió el chico cuando el viento cubrió la hoja de su espada.

Neru abrió los ojos, antes moverse velozmente y salir del rango de ataque, quedando en el punto ciego del chico y preparando un corte que este esquivó rodando fuera del camino.

La rubia sonrió ente esto, pues solo usaban técnicas de espada en este encuentro y los elementos de dichas hojas.

Mientras una seria Penemue atacaba con una lanza de luz solidificada a la [Reina] del grupo, la cual contenía a su oponente con un par de dagas hechas de su poder.

Actualmente Kurumi se enfocaba en aprender a luchar con armas, sin mencionar que debía acostumbrarse a usar su poder en menor cantidad de forma eficiente, para así poder mostrar habilidades acorde al nivel de poder que usaría como [Reina] en el séquito del castaño y así no llamar la atención innecesariamente.

No quería ser objeto de algún grupo o ser que buscara su poder con fines bélicos, así como lo hizo Rizevim y la [Khaos Brigade].

Ella ya no era solo Ophis, el Dragón Ouroboros, sino Tokisaki Kurumi, [Reina] y pareja sentimental de Hyodou Issei y así quería que se mantuviera para siempre.

Por fin había encontrado un hogar y personas que la aceptaban con los brazos abiertos, todo gracias al hombre que amaba.

Penemue tenía una mirada férrea mientras manipulaba su lanza con gran maestría.

Ella no recordaba desde cuando usó toda su capacidad contra un oponente, pero frente a su [Reina] podía soltarse completamente y así mejorar a pasos agigantados.

Eso podía notarse como ella se movía, pues era veloz y contundente, casi como una bestia que mostraba sus colmillos con intención asesina.

Esto era porque la Cadre, así como las demás chicas, tenían un acuerdo silencioso de mejorar y así proteger mejor a su [Rey] para no volver a cometer el mismo error dos veces y que este pagara por ello.

La misma atmosfera seria era compartida en el campo de batalla.

Como en el caso de Gabriel y Griselda, quienes peleaban contra Alleyne y Elsha.

La Serafín había creado una lanza de luz bastante peculiar, pues parecía una lanza de estilo medieval, la cual usaba para atacar con rápidas estocadas a pesar de su tamaño relativamente grande.

Usualmente se usaba en duelos y montando a caballo, pero ella demostraba su maestría en el manejo de armas.

En cambio la Exorcista usaba una espada que podía convertirse en un arco, lo que le daba ventaja a corta y larga distancia, mientras sus hechizos sacros cubrían también la media y larga distancia.

Alleyne usaba su lanza de doble punta, contrarrestando el estilo de Gabriel y usando su mente analítica para buscar puntos débiles en su defensa, pero era difícil ante la habilidad del Serafín con la lanza, quedando en cierto punto muerto ante el choque en sus niveles de maestría en sus respectivas armas.

Por su parte, Elsha se defendía usando a Ascalón, además de que su [Sacred Gear] podía impulsar lo que fuera, en este caso aumento su tiempo de reacción para interceptar los proyectiles de luz que el arco de la Exorcista desató sobre ella.

Otra pareja era la de Leo y Silver contra Kuroka y Rosseweise.

Ambas Yokai intercambiaban golpes, con Kuroka teniendo sus puños cubiertos de Touki para desviar los cortes del hacha de Leo, además de que usaba sus habilidades espaciales para neutralizar los ataques de fuego que su oponente le mandaba.

Por otra parte, Silver usaba ataques de hielo contra Rosseweise, que se defendía con su alto conocimiento de magia Asgardiana, misma que se le dificultaba contrarrestar al peli-negro, el cual no tuvo de otra que usar su magia Ice Demon Slayer para cerrar la brecha.

Por último estaba el enfrentamiento de Valerie y Yukikaze contra Le Fay y Tsukiumi.

La Damphire y la maga tenían un enfrentamiento de magia, en la cual la primera usaba magia de sombras, así como algunos hechizos elementales, mientras la segunda era más del tipo de contra-ataque y bloqueo, así como debuff que Valerie lograba anular con su [Sacred Gear].

El Hada guerrera usaba sus habilidades en magia de agua en contra de la Kitsune y su magia de fuego, las cuales se anulaban entre sí.

Yuki tenía ventaja en combate cuerpo a cuerpo con Touki, pero Tsukiumi usaba el agua de forma defensiva para mantenerla a cierta distancia, así que ambas se encontraban en un punto muerto.

¡BIIIIIIIIIIIIPPPPPP!

Sonó una alarma, al tiempo que todos los combates se detenían al instante.

Todos respiraban agitadamente, además de sudar de forma abundante, pues ya llevaban varias horas luchando entre sí.

El castaño soltó un suspiro, mirando la hora en su reloj.

— “4 P.m.” — Pensó mientras alzaba la mirada y miraba el cielo del lugar.

Maya aprovechó para entregarles toallas y que secaran el sudor de sus rostros, además de una botella de agua que bebieron ávidamente.

Entonces las chicas y Silver lo miraron, esperando nuevas órdenes, por lo que este bajó la vista y los miró, para luego sonreír.

— Creo que por hoy fue suficiente, tomemos un baño y luego cenemos — Dijo el castaño con calma.

— Eso suena bien nya — Dijo Kuroka mientras se estiraba.

— Umu, necesito refrescarme y estar presentable para mi Master — Asintió Neru después de olfatearse a sí misma.

— Maya, ¿Podrías? — Preguntó a su Maid.

— En seguida iré a preparar la cena, con su permiso — Dijo mientras se inclinaba, para después retirarse.

Entonces el castaño sintió un escalofrío, para luego ver como Kuroka y Kurumi lo miraban con un brillo malévolo en sus ojos, para luego sentir como Rosseweise y Musa sujetaban sus brazos y restringían su movimiento, mientras Tsukiumi lo sujetaba de su camisa desde el frente con la mirada baja y un gran sonrojo visible.

— ¿Te parece tomar ese baño juntos? — Preguntó la Valquiria con un indicio de sensualidad en su tono mientras le sonreía.

El castaño tragó en seco, para luego mirar a las demás chicas en busca de ayuda, sin embargo este se encontró con que algunas desviaban la mirada con un ligero sonrojo.

En este caso, Brielle, Griselda, Valerie, Le Fay y Leo.

Otras se mostraban ajenas a lo que ocurría, ya sea que no vieran que fuera algo malo o simplemente no les importaba lo que ocurría.

Véanse Alleyne, Yukikaze, Neru y Elsha.

Silver optó por no prestar atención y empezó a retirarse, mientras alzaba su mano en despedida hacia su [Rey], el cual miraba incrédulamente como era dejado a su suerte por el peli-negro.

— “Traidor” — Pensó el castaño con un tic en el ojo.

— “Lo siento, pero estas solo chico”— Pensó Silver cuando por fin salió de la habitación.

Respirando hondo, el castaño miró a las cinco chicas con cierta duda.

— Eres nuestra pareja, es normal querer pasar más tiempo junto a ti — Fue lo dicho por Kurumi en tono serio.

— ¡C-como tu esposa es mi deber lavar tu espalda A-Anata! — Fue la exclamación de una decidida Tsukiumi alzando la mirada y viéndolo a los ojos.

— Permítenos esto nya — Dijo Kuroka con ligero tono de súplica en su voz.

Luego su mirada se posó en Rosseweise y luego en Musa, sintiendo como se aferraban a él mientras lo miraban con cierta necesidad.

Él solo pudo suspirar resignado, pues jamás podría negarles algo a estas chicas.

— Ya veo, entonces no perdamos más tiempo — Dijo en tono complaciente.

Al instante se sintió feliz al ver la mirada iluminada de las cinco chicas, para luego ser jalado por ellas fuera de la habitación.

— Si alguien más desea unirse a nosotros es bienvenida, las demás pueden ducharse en los baños de sus habitaciones — Fue lo dicho por Kurumi, quien iba detrás de Issei y las chicas.

Cabe decir que al instante Yuki se les unió, al igual que una sonrojada Leo.

Cuando las siete chicas se fueron con el castaño, un incómodo silencio reinó en el lugar.

La mayoría de las chicas estaban sonrojadas por las palabras de la [Reina] del grupo.

— Bueno, eso fue algo, sin duda Nii-chan tiene una vida complicada… en fin, yo me voy a mi habitación — Declaró la ex portadora de Draig mientras se retiraba.

Esta acción y palabras sacaron a las demás de sus pensamientos, siendo la Elfo la primera en retirarse sin mostrar ninguna expresión en su hermoso rostro.

— Supongo que me uniré, aún tengo que revisar cómo están sus heridas… — Fue lo dicho por Alleyne con facilidad.

Las demás la miraron con sorpresa, pero luego sacudieron la cabeza, pues con el corto tiempo de conocerla sabían que era muy seria en esas cosas, además de que quizás las palabras que dijo cuando ella les explicó acerca de la verdad oculta tras la Caída del Dragón tenían mucho que ver.

En pocas palabras, ella también se interesó en el chico.

Un incómodo silencio llenó el lugar, para que luego otra de las chicas empezara a salir de la habitación.

— Creo que aceptaré su oferta, con todo lo sucedido me siento tonta por dudar de esta manera — Fue lo dicho por Griselda mientras sonreía con cierta ironía.

Las palabras de la Monja calaron hondo en la mente de Gabrielle, por lo que soltando un suspiro siguió a su ex [Reina] de corazones con un rumbo ya conocido.

— U-Umu, creo que esto también puede ayudar a reforzar nuestro vínculo siervo-maestro — Dijo esta vez Neru mientras empezaba a seguir a la Serafín.

Unas sonrojadas e incrédulas Valerie y Le Fay se miraron por un momento, para luego sacudir sus cabezas y poner expresiones llenas de decisión.

Entonces se volvieron a mirar y se dieron la mano.

— Si queremos estar junto a Issei-sama… — Comenzó a decir Le Fay.

— …debemos dejar las inseguridades atrás — Terminó la Dhampir.

Era un acuerdo que todas en el sequito sabían, el cual era que para intentar algo con el chico debían de estar 100% seguras de lo que sentían por él, además de no andar por las ramas y ser claras con él desde el principio.

Sin más, ambas chicas se dirigieron hacia donde estaba el chico con todas las demás.

Baño principal

El castaño estaba sentado en un taburete de madera, con una toalla cubriendo su entrepierna mientras una rubia envuelta en una toalla lavaba su espalda con una esponja.

Issei se mantenía con los ojos cerrados, sintiendo los cuidados de su novia Sekirei.

— ¿L-Lo hago bien? — Preguntó una nerviosa Tsukiumi.

En respuesta el castaño sonrió.

— Lo haces perfecto, Tsu-chan — Respondió el chico.

— Q-Que bien — Respondió con el rostro iluminado mientras seguía frotando la espalda del chico.

Las demás chicas se lavaban entre ellas, siendo que Rosseweise, Kurumi, Kuroka y Musa no llevaban nada puesto, mientras Tsukiumi, Leo y Yuki llevaban toallas puestas al no sentirse con la suficiente confianza de despojarse de estas.

Fue entonces que la rubia Sekirei miró a Kuroka, Kurumi y Rosseweise, con la primera alzando su pulgar mientras sonreía de forma traviesa, la segunda hizo lo mismo pero su sonrisa era más suave, mientras la tercera asentía con una pequeña sonrisa.

Así que tomando valor, Tsukiumi se retiró la toalla, para después enjabonar sus pechos para hacer abundante espuma y luego pegarse a la espalda del chico, el cual se puso rígido por un momento, para después relajarse y soltar un leve suspiro.

— ¿Estás segura de hacer esto, Tsu-chan? — Preguntó el chico con un toque de preocupación en su tono.

Esto era porque la rubia estaba levemente temblando mientras se aferraba a él, además de que gracias a la estrecha cercanía podía sentir su corazón latiendo presuroso.

Sin embargo, al notar la preocupación en el tono del chico y a través de su vínculo, ella sintió una calidez recorrer su interior, pues Issei estaba poniendo sus sentimientos por sobre su propia satisfacción personal.

Entonces respirando hondo, la rubia sonrió tranquilamente y empezó a frotar sus pechos por toda la espalda del chico con más seguridad, el cual sentía como los pezones endurecidos de la chica se movían de un lado a otro y después en forma circular, todo con movimientos fluidos y naturales que lo sorprendieron gratamente.

— Yo… estoy feliz de haberte conocido Issei, te amo, así que no te preocupes porque nunca he estado más segura de algo en mi vida — Dijo mientras se detenía y lo abrazaba suavemente.

Issei abrió los ojos y se giró un poco sobre su hombro, para ver como la rubia lo miraba dulcemente.

El castaño no pudo evitar que su corazón latiera ante las palabras de la chica, por lo que la tomó de la mejilla y la atrajo a un beso lento y profundo, trasmitiendo en ese gesto el mismo amor que ella le profesaba.

Al terminar el beso, ambos juntaron sus frentes mientras se miraban a los ojos.

— Yo también te amo, Tsukiumi, mi Hada del mar — Dijo el chico con calidez.

La rubia abrió los ojos y se sonrojó, pero luego dibujó una hermosa sonrisa que cautivo al chico al verla.

Pero entonces este sintió como alguien se sentó en su regazo, por lo que separándose de la rubia bajó la mirada encontrándose con unos ojos dorados que lo miraban con extrema calidez y que pertenecían a una Kitsune rubia, la cual estaba totalmente desnuda frente a él.

— Sé que recién me uní, pero quiero decirte que yo también te amo, te he amado desde que nos ayudaste sin pedir nada a cambio… te amo Ise — Dijo la chica en su regazo.

Cabe decir que al ver el acto de la rubia, Yukikaze también se despojó de la toalla y esperó un poco, no queriendo interrumpir el momento de Tsukiumi.

Así que al ver su oportunidad, ésta la tomó.

El castaño se sorprendió ante lo dicho por la Kitsune, pero al procesar lo dicho por esta, sonrió con calidez y tomándola por la mejilla este la besó con ternura.

Yuki sintió una gran calidez, además de amar el sabor de los labios del chico que amaba.

— Gracias por amarme, Kunou, yo también te amo, mi princesa Kitsune — Dijo el castaño usando su nombre real.

La expresión de la Kitsune se iluminó después de estas palabras, para luego frotar sus pechos en el pecho del chico, generando espuma y sumándose a la Sekirei, la cual al ver lo que hacia la Kitsune también empezó a moverse.

Issei podía sentir los grandes pechos de Tsukiumi a su espalda y los jóvenes pero bien dotados pechos de Kunou frente a él, cuyos pezones se habían endurecido al igual que los de la Sekirei, siendo notados por el chico.

Por su parte al ver esto, Rosseweise y Kuroka se miraron por un segundo, asintiendo en un acuerdo silencioso de probar esa combinación ellas mismas en otra ocasión con el castaño.

Kurumi miró sus propios pechos con curiosidad, pensado en probar lo mismo con el chico la próxima vez.

Penemue y Leo suspiraron ante la vista, pero no obstante sonrieron ante el intercambio de palabras y sentimientos entre los tres.

— “Supongo que esperaré un poco más” — Pensaron en sincronía ambas mujeres.

Fue entonces que la puerta del baño se abrió, al tiempo que Alleyne entraba con solo una pequeña toalla cubriendo su mitad inferior, dejando al descubierto sus pechos firmes y de buen tamaño.

Detrás venían Griselda y Gabrielle vistiendo lo mismo, mostrando sus propios pechos y un marcado sonrojo mientras desviaban la mirada tímidamente sin mostrar intenciones de cubrirse a pesar de sentir la mirada de Issei en ellas.

Fue solo unos segundos en los cuales sus ojos vagaron en sus formas semidesnudas, los cuales bastaron para memorizar la forma, el color y cada sensual detalle de tan sublime vista gracias a su gran experiencia previa.

Luego alzó la vista encontrándose con la seria mirada de la Elfo.

El castaño se sonrojó al ser descubierto.

— Necesitaré revisarte Ise, ¿chicas, pueden dejarlo unos momentos? — Dijo Alleyne con facilidad y sin inmutarse al ser vista por el chico.

Yuki y Tsukiumi dejaron de frotar sus pechos en el chico, para después apartarse de él a regañadientes, pues ellas empezaron a disfrutar el roce de su piel húmeda con el cuerpo del castaño.

Seguidamente la Elfo tomó una tina llena de agua y se acercó a él, para luego sentarse en su regazo sin dudar, sorprendiendo al chico y las demás chicas por su actuar.

Luego Alleyne derramó el agua sobre ellos, mojando su toalla y limpiando la espuma en el cuerpo del castaño.

Para este, la vista de su firme pecho, así como su vientre plano y definido con gotas de agua recorriendo su tersa y suave piel era bastante erótico, sin mencionar su suave y firme trasero presionando su entrepierna, pero este se controló y la miró a los ojos.

Entonces sintió como la Elfo trazaba con su mano la cicatriz que surcaba desde el hombro izquierdo, cruzando su pecho hasta la parte derecha de su cadera.

— “Suave” — Pensó al sentir su piel y su toque.

La mano de la Elfo se había iluminado en un tenue color verde.

— La herida se curó perfectamente y no quedó ni un solo indicio de la maldición… el Senjutsu de Tamamo-dono es bastante efectivo — Dijo con satisfacción.

En ese momento llegaban Neru, la cual sorprendentemente venía desnuda, Le Fay y Valerie, ambas cubiertas con unas toallas, pero solo la maga la llevaba puesta hasta el pecho mientras la Dhampir emulaba a la Elfo, la Serafín y la Exorcista al mostrar abiertamente sus pechos desnudos.

Las recién llegadas escucharon lo dicho por la Elfo, prestando atención y estando un poco preocupadas para luego tranquilizarse ante lo dicho por Alleyne.

Luego esta pasó su mano hacia su brazo derecho por debajo del hombro, donde estaba cierta pulsera que lo ayudaba a controlar su brazo artificial.

— ¿Cómo lo has sentido? — Preguntó con cierta preocupación.

El castaño miró al trío recién llegado por un momento, bastante sorprendido ante la audacia que las chicas estaban mostrando actualmente, pero sacudiendo sus pensamientos se enfocó en la pregunta y miró a la Elfo en su regazo mientras dibujaba una sonrisa leve.

— No me ha dado problemas desde que tengo la pulsera que me dio Azazel, pero entrenaré para no depender de esta — Dijo mientras miraba la mencionada pulsera de reojo.

Cabe decir que al distraerse con esta acción y pensar en un entrenamiento futuro, se perdió el hecho de que tomó a la chica distraídamente de sus caderas para mantenerla asegurada en su regazo y acercarla un poco más a él.

La Elfo lo notó y no pudo evitar un ligero sonrojo ante el toque, además de que la esquina de su boca se elevó un poco en una imperceptible sonrisa.

A pesar de ser algo que no había sentido antes, Alleyne le dio la bienvenida a este nuevo acercamiento entre ambos.

— Bien, entonces es mejor que entres en el agua caliente y te relajes un poco — Dijo mientras se levantaba del regazo del chico.

Este asintió, mientras en su interior suspiraba decepcionado.

Sin duda disfrutó tener a la hermosa Elfo cerca, además de sentir como la distancia entre ambos se reducía.

Así que con la vista del trasero de la Elfo cubierto por una toalla mojada alejándose de él, el castaño se levantó del banco de madera y entró en las cálidas aguas sintiendo sus músculos relajarse mientras las demás se lavaban.

Issei cerró sus ojos para disfrutar el agua caliente, sin embargo él percibió una presencia acercándose junto al sonido de agua moverse, para luego sentir cómo le quitaban la toalla y un peso caía sobre su regazo mientras una sensación suave, firme y cálida rodeaba su miembro semi-erecto.

Luego sus manos fueron tomadas para que estas fueran obligadas a rodear un cuerpo que se apoyó en su pecho.

Abriendo levemente su ojo derecho, divisó un suave y húmedo cabello negro.

Al ver la ausencia de orejas, rápidamente averiguó la identidad de la chica por descarte.

— Kurumi — Murmuró mientras volvía a cerrar sus ojos y disfrutaba la cercanía de la nombrada.

Ophis en su Alter-ego suspiró con satisfacción cuando el chico susurró su nombre, sintiendo los latidos del castaño a través del contacto de su espalda con su pecho, además de sentir como su hombría se endurecía otro poco en medio de sus nalgas presionando un punto sensible que ella no sabía que tenía.

Esto era porque el castaño estaba un poco animado después de ver a todas las chicas mostrarle su cuerpo, ya sea sus pechos, o en el caso de unas cuantas sus intimidades al mostrarse totalmente desnudas ante él.

Claro, a excepción de Le Fay cuya toalla la cubría totalmente.

— Mmm~ se siente bien — Murmuró la peli-negra con un leve suspiro satisfecho.

Por un momento recordó el acto del chico y la valquiria, así como su curiosidad al sentir cosquilleo en esa zona sensible que no era su intimidad, pero rápidamente lo descartó.

Ahora mismo se limitó a disfrutar de su cercanía con el hombre que amaba.

Igualmente Issei ignoró su excitación en pos de disfrutar el hecho de que las chicas estuvieran con él de esta forma, demostrando así la confianza que le tenían, por ello aprecio sus formas femeninas con admiración y respeto.

Cabe decir que todas lo sintieron lo que las hizo sentir seguras y apreciadas, así que sintiéndose más en confianza ellas entraron al agua con él después de lavarse a sí mismas.

Rosseweise estaba a su derecha y Kuroka a su izquierda, ambas refirmadas en sus costados, mientras Tsukiumi, Leo y Yukikaze eran también las más cercanas a su posición.

— Sona se está perdiendo un buen baño nya~ — Dijo la Nekoshou con una sonrisa traviesa.

— Aunque la vez pasada nos ganó, esta vez me tocó el mejor asiento de la casa — Fue lo dicho por Kurumi con una pequeña sonrisa.

Las demás la miraron con cierto reproche y envidia, mientras ella meneaba un poco el trasero bajo el agua caliente, ocasionando el roce del miembro del chico con su entrada trasera, provocándole un ligero escalofrío y una curiosidad creciente.

Por su parte, Issei tuvo un deja-vu, pues Sona había hecho lo mismo cuando se quedó dormido dentro del baño y ella se sentó en su regazo.

Es más, aun recordaba perfectamente aquella sensación del trasero de la heredera Sitri envolviendo su miembro, por lo que hubo reacción inmediata de su parte, así que al igual que aquella vez, su miembro se endureció por completo entre las nalgas de Kurumi, para disfrute de esta.

Pero pasado el momento, las chicas soltaron un suspiro para calmarse, luego la valquiria tomó la palabra nuevamente.

— Bueno, tal vez ella ya no sea la Kaichou del Consejo Estudiantil, pero sigue teniendo la responsabilidad de vigilar su territorio — Fue la aportación de Rosseweise recuperando su seriedad.

— Sin mencionar que el grupo Gremory no estarán en su 100% durante un tiempo — Dijo ahora Musa.

— Eso significa un aumento de trabajo y atención en Kuoh por parte de Sona-san — Dijo esta vez Brielle con algo de seriedad.

— Eso no es del todo cierto, recuerden que ahora también soy propietario de Kuoh, así que estaremos haciendo nuestra parte y con ello Sona no tendrá tanta carga de trabajo — Dijo rápidamente el castaño mientras miraba a las chicas con una pequeña sonrisa.

Esto hizo que todas lo repensaran y estuvieran de acuerdo.

Sin embrago, todavía había cierta duda.

— Aunque no podremos ir todas, o llamaremos la atención — Expuso Griselda en tono pensativo.

Las demás se miraron brevemente, para luego mirar al chico.

Issei cerró los ojos por un momento, para luego abrirlos y sonreír con facilidad.

— No se preocupen, ya no es necesario cuidar nuestros pasos, no tengo ningún reparo en mostrar mi Nobleza ante Rias, ya dejé de huir de mi pasado… aunque seguiré siendo Spectra por un tiempo, será divertido verla devanarse los sesos tratando de justificar a Rosseweise y Tsukiumi en mi grupo cuando deben de estar con Hyodou Issei — Dijo con una sonrisa tranquila, para luego dibujar una sonrisa traviesa y llena de diversión.

Las chicas tuvieron una gota en la nuca y algunas sonrieron con nerviosismo, mientras otras lo hicieron de forma más alegre al sentirse felices de ver como el chico se mostraba más abierto y natural.

— Con respecto a Sona, porque no pasas por ella a la escuela y la llevas a comer algo — Sugirió Kurumi de repente.

Esto sacó al castaño de sus propios pensamientos, para luego mirarla con duda.

— Es verdad, seguramente ella también esté preocupada por tu reunión con Rias y no la verás hasta la noche — Apoyó la Valquiria de repente.

Las demás chicas solo oían la conversación en silencio.

— Mmm~ supongo que es una buena idea — Sopesó el castaño cerrando brevemente los ojos.

— Entonces no pierdas más tiempo, ve por Sona — Dijo Kurumi mientras se levantaba.

Rápidamente extrañó la sensación del miembro del chico entre sus nalgas, pero no era tiempo para eso.

Sin darle tiempo de procesar lo que ocurría, ella lo jaló del brazo para que se pusiera de pie, luego empezó a sacarlo del baño mientras este mostraba una expresión perpleja por las acciones de su [Reina], hasta que este se hallaba fuera del baño y la peli-negra cerró la puerta tras él.

Las demás chicas estaban con un enorme sonrojo, pues habían visto el cuerpo desnudo del chico, además de cierta parte de su anatomía totalmente endurecida, lo cual generó algunos sangrados nasales, como en Penemue, Gabriel, Griselda, Nero y Leo.

Por otra parte, Rosseweise, Yukikaze, Kuroka y Alleyne tuvieron cierta apreciación, mientras la Elfo lo disimulaba, la Valquiria y la Kitsune sonreían de forma tímida y la Nekoshou se relamía de forma sensual.

En cambio Le Fay, Valerie y Tsukiumi se taparon los ojos, pero abrieron los dedos para ver con los rostros muy sonrojados.

Fue entonces que la [Reina] del grupo regresó a su lugar.

— Entonces, ¿disfrutaron la vista? — Preguntó con una sonrisa inocente.

Esto solo hizo que varias se atragantaran con su propia saliva.

Fuera del baño

Issei parpadeó con duda al verse apoyado en la puerta cerrada del baño, para luego sentir una ligera brisa que le provocó un escalofrío.

— Ah — Pronunció al darse cuenta de que estaba desnudo.

15 minutos después

El castaño ahora vestía pantalones negros de cuero y botas color café oscuro, así como una camisa sin mangas ajustadas con varios broches en su pecho, guantes negros sin dedos y encima un abrigo negro con detalles color violeta oscuro.

Este era un diseño diferente ya que optó por un tema oscuro debido a su nuevo [Balance Breaker], solo faltaba la máscara que le había encargado a Azazel, la cual ya tenía planes de cambiarle el color.

También se había equipado sus pistolas detrás de su cintura, a Arifal en su espalda y Ex Machina en su dedo anular.

El chico se miró en el espejo y luego asintió satisfecho al ver su nuevo estilo.

Entonces él miró hacia la puerta del baño.

— Supongo que las chicas se tomarán su tiempo — Murmuró al ver que ninguna había salido del baño de la habitación.

Sin más desapareció en un círculo mágico.

Mundo Humano - Kouh Japon

Issei apareció en un callejón solitario, para que luego su cabello se volviera más corto y cambiara de color a rubio, con sus ojos volviéndose color rojo sangre, además de que sus armas desaparecían en círculos mágicos.

Luego usó a Ex Maquina y recordando el proceso sin tanta dificultad invocó una motocicleta Harley Davidson Panhead tipo Chopper que vio en cierta película, la cual montó rápidamente y seguidamente encendió.

BRRRR

Se escuchó el rugido del motor al tiempo que sonreía satisfecho.

— Mmm~ — Musitó ahora un poco pensativo.

Ahora mismo pensó en usar una máscara temporal para llegar a la Academia en lo que Azazel le enviaba el repuesto, pero en vez de eso se decidió por invocar unos lentes oscuros por que hacían juego con la vestimenta y el vehículo.

— Esto está mejor — Habló para sí mismo mientras veía su reflejo en el espejo retrovisor.

Y sin más arrancó en dirección a la Academia.

Academia Kuoh

El atardecer había llegado y con ello el fin de las actividades escolares en la Academia Kuoh.

Las alumnas y alumnos se aglomeraban en las puertas para ir directo a casa, mientras otros tenían planes de permanecer en el plantel educativo debido a actividades extracurriculares en sus respectivos clubes.

RUUNN

El sonido suave de un motor llamó la atención, mientras todos veían como una motocicleta se desplazaba lentamente por la concurrida calle frente a la Academia, hasta detenerse en sus puertas.

Todos los alumnos miraron con curiosidad a la persona que apagaba el motor, se bajaba del vehículo y luego de refirmaba en este con los brazos cruzados mirando hacia el interior de las puertas de la Academia.

El aura de confianza los intimidó un poco, pero también encendió en las chicas un interruptor a lo cual empezaron a susurrar emocionadas acerca de si el misterioso chico esperaba a alguna alumna de la Academia, además de que si era así, a quien estaba esperando.

Por su parte, los varones solo podían rezar que no viniera detrás de una de sus queridas Onee-sama.

Lamentablemente para ellos, ese era justamente el caso, además de ser una de las bellezas frías que todos sabían era inalcanzable.

[Solo bastarán unos minutos para que los rumores le lleguen a tu chica y ella misma salga a recibirnos]

Fue lo dicho por cierto Dragón sin ocultar la diversión en su tono.

— “Lo sé, esto será divertido” — Pensó de estando de acuerdo con Draig.

Salón del Consejo Estudiantil

Sona se encontraba revisando algunos documentos en lo que era su antigua oficina.

La mayoría de su Nobleza estaba presente, a excepción de Tsubasa Yura su [Torre] y Bennia su [Caballo].

Ella podría hacer el trabajo en la noche, pero aprovechando el hecho de que Xenovia no se encontraba, además de que posiblemente estuviera fuera el resto del día, avanzaría en sus deberes para tener su noche libre y pasarla junto a su novio.

Aunque su productividad estaba siendo mermada por una sola cosa en su mente.

— “Ise” — Pensó la heredera Sitri en ese momento.

Ella mentiría si dijera que no estaba un poco preocupada acerca de cómo se sentía él después de su reunión con Rias.

Ante este lapso de pensamiento ella se mordió el labio ligeramente.

Fue entonces que la puerta fue abierta y sus piezas restantes entraron.

— Sona-sama — Pronunció Yura al entrar en la habitación.

Esto sacó de sus pensamientos a Sona, la cual alzó una ceja al notar como la [Torre] peli-azul lucía una expresión perpleja y hasta un poco sorprendida.

Los demás dejaron de hacer lo suyo y también prestaron atención.

— ¿Qué sucede Yura? — Preguntó mientras se ajustaba sus gafas con expresión seria.

— Bueno, como decirlo… creo que es mejor que usted lo vea en persona — Expuso la chica mientras se rascaba la mejilla con expresión nerviosa.

La Segadora también mostraba inquietud en su lenguaje corporal.

Esto no hizo más que aumentar la curiosidad de la peli-negra, así que asintiendo esta se puso de pie.

— Está bien, guía el camino — Indicó Sona a su sierva.

Club de Investigación de lo Oculto

Ya habían pasado varias horas desde que Kuroka se fue y actualmente el sequito Gremory se hallaba un poco mejor, sobre todo al apoyarse entre ellas para sobre llevar la situación y el desenlace de su encuentro con el castaño.

Ellas habían llegado a cierta resolución sobre la oportunidad de arreglar las cosas con Issei, así que se propusieron hacer las cosas bien y no arruinarlo más de lo que ya estaba.

Después de todo, las culpables eran ellas y no los chicos.

Ahora mismo algunas de ellas trataban de distraerse.

Como Rias que hacía su papeleo, Akeno preparaba Té y algunos aperitivos, Asia abrazaba a su familiar para tranquilizarse, Koneko comía sus dulces, Ravel se ponía al día con sus estudios mientras Xenovia e Irina conversaban de temas triviales para pasar el rato.

Si bien se encontraban mejor, el ambiente deprimente aun subsistía, aunque no tanto como antes.

Entonces cierta Nekoshou lo notó.

— Él está aquí — Dijo mientras dejaba de comer sus dulces y alzaba la mirada.

Rias dejó de leer los informes en su escritorio y las demás miraron a su compañera sin entender nada.

En ese momento los dos únicos varones del Club sin contar a Issei entraron en la habitación.

— Rias-sama, parece que hay un pequeño alboroto en la entrada de la Academia — Informó el rubio con un poco de seriedad.

Gasper no alzó su mirada de la consola en sus manos, pero asintió a lo dicho por Kiba.

— ¿Un alboroto? — Preguntó la peli-roja con duda.

— Dragón… puedo sentir la presencia de Spectra Phantom en la entrada de la Escuela — Dijo esta vez Koneko con tono serio y levemente tensa.

El resto adoptó expresiones serias y en algunos casos, preocupadas.

Akeno y Rias se miraron por un segundo.

La duda era lo que el chico buscaba, pues llegó a la entrada en vez de concertar una cita con ella o tele-transportarse directamente al Club.

Sona tampoco le informó acerca de alguna reunión programada.

— Será mejor comprobar que es lo que quiere — Dijo la semi-caída con seriedad.

— Su presencia y su apariencia llamará la atención de todos, abogaremos por él para que nadie llame a la policía o se meta en problemas — Dijo Rias estando de acuerdo con su [Reina] y agregando su propia conclusión.

— Entonces debo ir por delante, como Presidenta del Consejo Estudiantil es mi deber atender estos asuntos con los alumnos — Fue el turno de Xenovia poniéndose de pie.

Con eso dicho la peli-roja asintió y poniéndose de pie salió junto a la peli-azul, además de la peli-negra.

Las demás salieron detrás de ellas tres pues sentían un leve indicio de preocupación, ya que aún recuerdan que a pesar de tratarlas con formalidad el aura de Spectra tenía un toque de violencia para con ellas.

Al verse solos y sentir lejos la presencia de su [Rey] y compañeras, el rubio soltó un suspiro cansado.

— ¿Qué crees que hará Ise-kun, Gasper? — Preguntó a su compañero [Obispo]

— Lo más seguro es que venga por Sona-sama para una cita o algo — Respondió el Dhampire sin dejar su juego.

Kiba parpadeó, para luego soltar una leve risa.

— Supongo que no quiso esperar para quitarle la preocupación a Sona-san, ¿quieres ir a ver? — Dijo y preguntó el rubio a su compañero.

— Claro, será interesante ver la reacción de todos — Dijo mientras pausaba su juego, guardaba la consola y se ponía su bolsa de papel en la cabeza.

Al ver esto Kiba tuvo una gota en la nuca, pero sacudiendo su cabeza decidió no decir nada.

Después de todo Gasper estaba mejorando a su propio ritmo.

— Bien, vamos — Dijo para luego salir del edificio acompañado del Dhampire.

Puertas de la Academia

Spectra sintió varias presencias acercándose, por lo que sonrió, ya que el momento había llegado.

Entonces lo primero que vio fue a la persona que buscaba, así que reincorporándose este empezó a caminar hacia ella.

Sona llegó con su séquito detrás de ella, la cual al ver al chico se congeló momentáneamente sin poder procesar la presencia de Issei en la Academia.

Su visión de túnel no le dejó notar la motocicleta detrás de él, o que en vez de su máscara llevaba lentes oscuros cubriendo sus ojos.

En ese momento llegó el séquito de Rias, mientras Xenovia se adelantaba para acercarse a Spectra.

— Soy Xenovia, la presidenta del Consejo Estudiantil, dígame, ¿busca a alguien por casualidad? — Preguntó la peli-azul actuando lo mejor que pudo.

Cabe decir que estaba nerviosa ante la presencia del chico, pero supo disimularlo.

Por su parte, Sona salió de su estupor al escuchar a la peli-azul, así que ella al igual que todos los presentes esperó la respuesta del chico.

Desde una distancia más lejana, Murayama y Katase miraban lo que ocurría con un deje de preocupación.

Ambas preguntándose quien era ese chico.

Entonces el rubio se retiró los lentes y mirando a los ojos a la peli-azul dio su respuesta en voz alta.

— De hecho si Xenovia-san, vine a recoger a mi novia para llevarla a una cita — Respondió con tono tranquilo y una pequeña sonrisa.

Esta respuesta dejó sin palabras a todos los presentes, mientras en el caso del séquito Gremory estaban con los ojos abiertos al ver por primera vez el rostro del rubio, notando un cierto parecido con cierto chico muy conocido para ellas, pero descartándolo al instante.

Por su parte, el séquito Sitri aun miraba todo con un toque de preocupación, sobre todo al notar como este le dejaba ver su rostro al grupo Gremory y no mostrarse ni siquiera un poco preocupado al respecto.

El silencio duró poco, pues rápidamente las alumnas empezaron a susurrar entre ellas con gran emoción preguntándose a quien vino a buscar.

Fue en ese momento que el rubio pasó de largo a Xenovia y se acercó a cierta peli-negra de lentes, la cual empezó a notarse bastante nerviosa cuando por fin pudo procesar lo que ocurría, aunado a la declaración de su novio frente a todos los alumnos.

Los susurros cesaron cuando el rubio quedó frente a una nerviosa Sona, que bajó su mirada con un sonrojo notable en su rostro.

La imagen de la pareja dejó sin palabras a los presentes, pues esta acción del chico y la reacción de la peli-negra dejaba en claro lo que algunos aún no podían creer.

Por otra parte, esto le dejaba en claro a Murayama quien era esta persona.

— Ah, ese es Ise — Dijo después de hacer una pausa cuando llegó a esa realización.

Katase volteó a verla tan rápido que casi se rompe el cuello por la velocidad de su reacción, mirando con estupefacción a su amiga.

— ¡¿Ese es Hyodou?! — Preguntó gritando en su susurro incrédulo.

— Si la besa frente a todos y ella corresponde entonces sí, es Ise — Respondió la castaña saliendo de su propia incredulidad inexpresiva.

Ante tal respuesta, la peli-rosa regreso su mirada a la pareja.

Nadie presto atención al dúo, con excepción de cierta pervertida de lentes, la cual al escuchar lo dicho por la castaña sonrió con diversión anticipando lo que se venía por lo que rápidamente se acercó al foco de atención mientras acaba su teléfono.

De vuelta con la pareja, Issei levantó la barbilla de Sona para que lo mirara, con todos los presentes inhalando fuertemente y en algunos casos conteniendo el aliento ante las acciones del chico.

— Quería verte Sona — Dijo el rubio con tono cálido.

La heredera Sitri se perdió en la mirada llena de amor y cariño que el chico le dedicaba, olvidándose de todo a su alrededor, espectadores incluidos.

La preocupación que sentía desvaneciéndose ante el amor puro y sincero que su mirada le trasmitía.

La mano del chico pasó de su barbilla a su mejilla, provocando que ella cerrara los ojos y se inclinara más hacia su toque, sorprendiendo a los alumnos ante la reacción de Sona.

— Espero no haberte preocupado mucho — Dijo en tono de disculpa.

Sona abrió los ojos, para luego sonreír y negar levemente.

— Ya no importa, ahora estás aquí — Respondió la chica con tono aliviado.

Esos ojos, esa sonrisa y el tono de voz, sin mencionar su olor a jazmín.

Issei miró sus labios rosados y no pudo evitar querer reclamarlos, por lo que sin dudar se inclinó hacia ella y conectó sus labios con Sona.

La heredera Sitri abrió sus ojos ante la acción del chico, pero casi al instante cerró sus ojos mientras rodeaba el cuello del rubio y profundizó su beso.

En respuesta Issei la tomó de la cintura para acercarla más a él.

En este punto, todos los alumnos presentes dejaron caer sus mandíbulas ante el beso que compartía la pareja.

Si el comportamiento de Sona los sorprendió, el devolver el beso y hacerlo más íntimo los dejó con un derrame cerebral figurativo.

Era una escena inverosímil.

Murayama asintió, sabiendo de la relación de Sona e Issei esperaba de alguna forma que todo terminara así.

Aun así le sorprendía el comportamiento de la anterior Presidenta del Consejo Estudiantil.

Mirando un poco más, se preguntó cómo se sentiría un beso con el chico, pero al darse cuenta del rumbo de sus pensamientos esta negó rápidamente y volvió a la escena con un rubor en sus mejillas.

Katase se hallaba con la boca abierta, aun sin creer que ese fuera Hyodou.

Aika por su parte, sin perder el tiempo había grabado a la pareja con su teléfono desde el inicio, alcanzando a grabar incluso la pequeña conversación gracias al profundo silencio en el campus de la Academia.

— Motoko-sempai me deberá una grande por esto — Murmuró sin dejar de grabar.

Cuando el beso terminó, ambos se separaron con hilo de saliva uniendo sus labios, para luego mirarse a los ojos y sonreír de forma suave.

Entonces este giró su cabeza hacia la portadora de Durandal.

— Xenovia-san, lo siento pero me llevaré a Sona conmigo — Dijo mientras miraba a la peli-azul, todo sin dejar de abrazar a la peli-negra.

En ese momento Sona salió de su mundo propio, lo que le hizo darse cuenta de que todos en la Academia la miraban con la boca abierta, por lo que escondió su vergüenza enterrando su rostro en el pecho del chico.

Las palabras de Issei sacaron a Xenovia de su estupefacción.

— ¿Eh? Ah, si… las actividades del día ya concluyeron, así que no hay problema — Respondió distraídamente aun aturdida por lo presenciado.

Sin más el chico soltó a Sona, para luego tomarla de la mano y dirigirse hacia su motocicleta con la chica mostrándose nerviosa y avergonzada por la mirada de todos.

Entonces Issei se montó en ella con la peli-negra subiendo detrás de él, al tiempo que lo abrazaba fuerte y enterraba su sonrojado rostro en la espalda de este.

BRRRR

El rubio encendió la motocicleta y luego arrancó.

RUNNN

Solo pudieron ver como la pareja llegaba al final de la calle, para que luego el rubio doblara en una esquina y acelerara de golpe, provocando que la llanta delantera se alzara en el aire en un caballito y luego se perdiera de vista.

Este fue el momento en que todos salieron de su estupor y lograron reaccionar.

— ¿Eh? ¡¿Ehhhhh?! — Exclamaron ruidosamente, lo que llamó la atención del alumnado que aún se encontraba en las instalaciones y no presencio lo ocurrido.

Pero luego vino la realización de lo ocurrido y la reacción cambió.

— ¡Kyaaaa! — Exclamaron las chicas emocionadas ante la escena anterior.

— ¡Noooo! — Fue el turno de los chicos, específicamente del Club de Fans de Sona y todo aquel que estuviera enamorado de ella.

El grupo Gremory se miró con incredulidad, todavía procesando las reacciones de Sona y sobre todo, que por fin pudieron ver el rostro de Spectra Phantom.

Aunque la mayoría sintió una punzada en el pecho, pues ellas imaginaron por un momento al castaño haciendo lo mismo con cada una de ellas.

El séquito Sitri solo sonrió ante la expresión avergonzada de su [Rey], deseándole suerte en su cita.

Por otra parte, Saji sintió un escalofrío, por lo que miró en todas direcciones con pánico visible en su rostro buscando la fuente de esa sensación tan alarmante.

Para su suerte o desgracia él no notó la mirada hambrienta de Momo, Ruruko, Reya y Bennia en su dirección.

En cambio, Murayama se retiró a su Club, con una peli-rosa que le exigía respuestas.

Kiba y Gasper se miraron y sonrieron, mientras el Caballero Gremory ya hacía planes de sacar a Tsubaki a una cita y Gasper sentía una mirada en su nuca.

Era un poco confuso para él, pero sabía que esta provenía de Tomoe Meguri del séquito Sitri y si era sincero, no estaba seguro de que hacer.

Así que tomando como ejemplo a su sempai se decidió por invitarla a una salida de amigos.

Quizás esto era bueno para él y su problema social.

La [Caballo] Sitri se sintió feliz y ansiosa por alguna extraña razón.

Calles de Kuoh

Issei condujo su Harley hasta un pequeño restaurante, entrando y deteniendo su motocicleta en el estacionamiento contiguo propiedad del mismo restaurante, el cual era exclusivo para clientes.

Se bajó del vehículo y luego ayudó a Sona a bajar de este.

La heredera Sitri miró el lugar con curiosidad, con su vergüenza en sus niveles normales ahora, pero conservando un pequeño sonrojo en sus mejillas.

— Fuiste muy lejos Ise — Pronunció mientras se cruzaba de brazos y lo miraba de forma amenazante.

Aunque para Issei ella lucía muy tierna con ese sonrojo, sin mencionar que su rostro molesto casi se convertía en un puchero.

Adorable.

El rubio se retiró los lentes y le sonrió sin pena.

— Tal vez, pero no te quejaste cuando te besé — Dijo mientras se acercaba a ella y la rodeaba con los brazos.

Sona descruzó sus brazos para rodearlo con los brazos y refirmarse en su pecho, donde escondió brevemente su rostro.

— Sabes que en momentos así me dejo llevar, aun soy nueva en esto — Se quejó la heredera en voz baja.

Ante esto el rubio sonrió y la apretó un poco más contra él.

— Y no lo cambiaría por nada del mundo… Bueno, que tal si comemos algo y conversamos un poco acerca de nuestro día — Concluyó Issei en tono suave.

La heredera asintió aun con su rostro enterrado en su pecho, por lo que ambos se separaron segundos después para luego tomarse de la mano y entrar en el establecimiento.

Issei lo había visto en su camino hacia la Academia y hasta se detuvo momentáneamente para ver mejor el lugar, gustándole mucho al ambiente y llegando a la conclusión que sería un buen lugar para su pequeña salida con Sona.

Fueron atendidos con amabilidad, no importándoles la extraña combinación de la pareja, ya que a ojos de los presentes el rubio tenía la apariencia de delincuente, mientras Sona resaltaba como una estudiante sobresaliente ayudada por sus lentes.

Cabe decir que un par de meseras miraban con ligera envidia como Sona era tratada, pues a pesar de su apariencia el chico se comportaba con caballerosidad, siendo recompensado con sonrisas leves de la heredera.

— Entonces, ¿cómo te fue en tu reunión con Rias? — Preguntó Sona con expresión seria.

Para el rubio esto era Sona Sitri, así que no se sorprendió que su primera pregunta fuera esa.

Así que Issei la miró con calma inusitada, pero también pudo ver cierta preocupación en su lenguaje corporal, así que soltando un suspiro, este dibujó una pequeña sonrisa y respondió.

— Bueno, ellas estaban alegres de verme después de mi larga ausencia… luego de eso Rias empezó a bombardearme con algunas preguntas, ya sabes, lo normal para este tipo de situación — Empezó a decir el rubio con calma.

Para Sona no fue difícil imaginar el tipo de preguntas o comentarios hechos por Rias, así que se abstuvo de preguntar al respecto y solo asintió en comprensión.

— Dije una respuesta vaga con algo de verdad en la mezcla, aunque cuando respondí la pregunta acerca de Tsukiumi, Rias quiso imponerse de inmediato, ordenándome que terminara con ella, algo sobre no haberla aprobado sino mal recuerdo… — Explicó Issei haciendo memoria.

Sona prestaba atención a cada gesto hecho por Issei mientras respondía su pregunta, tranquilizándose enormemente al no notar signos de incomodidad o molestia en su expresión.

De hecho él lucía bastante tranquilo.

— Incluso Rias dijo que era por su preocupación por mí y que nadie salida de la nada tendría lo que era de ellas… ah sí, Akeno también me acusó de portarme mal cuando ellas no miraban… — Siguió diciendo mientras se encogía de hombros.

Luego sonrió de nuevo, aunque esta vez notó que dicha sonrisa tenía un toque irónico.

— De hecho ese comentario fue la mecha y yo solo puse la chispa al responderles acerca de que sabía de sus actuales relaciones, después de eso fueron un desastre balbuceante y lo demás es historia — Terminó de decir mientras su sonrisa cambiaba de nuevo, volviéndose un tanto divertida.

La heredera Sitri solo podía parpadear ante esto, sorprendida por que el chico se lo tomaba con bastante normalidad, incluyendo el cambio de expresiones y lo que estas trasmitían.

Al parecer se había preocupado por nada, pero aun así no se dejó llevar por esto y respirando hondo, Sona tomó su mano sobre la mesa, mientras sonreía tenuemente.

— Debió ser un poco estresante para ti — Dijo la chica mientras lo miraba con un toque de preocupación.

Issei soltó un hondo suspiro, mientras dibujaba una sonrisa lánguida.

— Cómo no tienes idea, al terminar la reunión regresé al inframundo con Rose… yo pensaba hacer una prueba de habilidades este fin de semana pero Kurumi me sugirió hacerlo en ese instante para ayudarme a desahogarme, como ves funcionó bastante bien — Respondió el chico mientras su sonrisa se volvía más genuina.

A él le sorprendió que sin mostrar tanto su incomodidad Sona se diera cuenta que no había sido nada fácil el encuentro con Rias y las demás.

Sabía que por sentido común era de esperarse, pero al minimizar su reacción al puro recuerdo de ese encuentro, cualquiera hubiera dado por sentado que no le había afectado en nada cuando fue todo lo contrario.

Sin embargo, Sona no se dejó llevar por esa falsa sensación de seguridad y expresó su preocupación por él.

Esto lo llenó de calidez.

— Ya veo, sin duda Kurumi-san supo que hacer — Dijo con alivio en su tono.

Seguido de esto la pareja se sumió en un cómodo silencio, mismo que fue interrumpido por una mesera.

— Aquí están sus órdenes — Dijo mientras les servía sus platos.

Issei y Sona sonrieron ente sí para luego comenzar a degustar los alimentos.

La heredera Sitri lo hizo con el corazón más ligero después de mitigar sus preocupaciones, disfrutando de este pequeño tiempo en compañía del chico que amaba.

— ¿Y tú día que tal? — Preguntó el chico después de beber un poco de café.

Sona se limpió con una servilleta antes de contestar.

— No tan agitado como el tuyo, las clases habituales, el almuerzo y un par de chicos que probablemente ya no se acerquen a mí después de lo que hiciste — Expuso con tono calmo muy común en ella.

Ante esto, el chico sonrió complacido.

— Más bien hicimos, mi querida Sona… y no suenas tan molesta por ello — Declaró ampliando su sonrisa cuando vio el sonrojo en la chica.

— Ejem… dejando eso de lado, esos chicos no entienden una negativa a sus invitaciones, así que si esto los hizo perder el interés es beneficioso para mí — Dijo mientras se recuperaba del lapsus.

Issei no dijo nada, pero sonrió internamente ante lo dicho por la chica.

— Lo último que hice fue terminar con algo de papeleo antes de que llegaras — Terminó de decir para luego beber de su taza de Té.

El rubio asintió.

— Kurumi y Rose me dieron la idea, ellas me comentaron que posiblemente estuvieras bastante preocupada, así que vine para despejar dichas preocupaciones y pasar tiempo con mi chica — Expuso el chico con tono fácil y sincero.

Sona se volvió a sonrojar, pero esta vez sintió como su corazón latía y se llenaba de calidez ante el gesto del chico.

— Ya veo — Fue lo que dijo mientras limpiaba sus gafas con un paño.

La comida pasó amena mientras conversaban de cosas banales, para que luego Issei hiciera un gesto y una mesera se acercara a ellos.

El rubio pagó la cuenta y salieron del Restaurant, volviendo a subir en su moto con Sona detrás de él.

RUUUNNN

Issei arrancó y recorrió las calles en dirección a una aparte alejada de la ciudad.

La heredera Sitri miró hacia el cielo nocturno, para luego notar como ambos se alejaban un poco de la ciudad, llegando a un mirador a orilla de carretera desde donde podía verse Kuoh completamente.

Este se elevaba varios metros, además de tener un pequeño espacio para aparcar el auto y disfrutar de una gran vista, usada mucho por los jóvenes para traer a sus citas si querían darle un final apropiado para a su cita.

La panorámica, el ambiente y el cielo estrellado era algo que dejó una gran impresión en Sona, quien abrazó a Issei fuertemente disfrutando de su calor.

Este invocó una chaqueta suya previamente preparada, ya que imaginó que más tarde habría un poco de frío y no se había equivocado.

— Gracias — Pronunció Sona cuando recibió la prenda.

Cuando se la puso pudo distinguir el aroma del chico rodearla mientras el calor la inundaba.

— No es nada Sona — Dijo mientras se bajaba de la motocicleta.

Sona lo imitó, para que luego él se refirmara en ésta atrayendo a la heredera hacia su pecho y la rodeara con sus brazos abrazándola por detrás.

La peli-negra inhaló profundamente, disfrutando del gesto y la sensación de seguridad que la llenaba en ese instante.

Así ambos permanecieron en silencio, con el canto de los grillos y las estrellas brillando en el cielo nocturno.

Club de Investigación de lo Oculto

Rias y su séquito habían regresado al edificio del Club, con expresiones bastante perplejas ante lo que habían visto por parte de Sona y Spectra.

Otra cosa importante era que al fin había visto el rostro de Spectra Phantom.

No había duda, ella aún recordaba ese ojo rojo que la miró con diversión por sobre su hombro mientras terminaba su partida de ajedrez con Sona, el color era el mismo.

Rojo escarlata con la pupila de un tono casi naranja.

Entonces la peli-roja miró a sus sirvientes, notando como al menos ellas se distraían de todo gracias a tal acontecimiento.

Rias no pudo evitar sonreír un poco, pues ahora que miraba bien el panorama completo, Spectra llegó como un motociclista rebelde mientras Sona, era Sona.

Ella representaba las reglas y la rectitud en la Academia como anterior Presidenta del Consejo Estudiantil, sin mencionar su reputación de Dama de Hierro o Reina de hielo por su frío carácter, todo para terminar rompiendo esa imagen de rectitud y siendo un manojo de nervios mientras mostraba algo que solo ella y los más cercanos a Sona habían podido presenciar.

Estaba segura que mostrar tal faceta había logrado hacer latir a varios corazones, mismos que rompió instantáneamente al responder aquel beso que Spectra le robo.

Entonces su sonrisa divertida se atenuó, ya que por un breve momento se imaginó en lugar de Sona, con Issei llegando a buscarla de la misma forma, mostrando su propia faceta lejos de la bestia pervertida de Kuoh.

Soltando un suspiro negó, ella tenía que estar feliz por su amiga, después de todo casi pierde al chico que amaba según el informe y por como Sona se comportó por un tiempo.

Eso era algo que ahora ellas sufrieron por sus propios errores.

Negó nuevamente, no era tiempo de mostrarse pesimista en estos momentos, no después de jurarse hacer las cosas bien para recuperar la confianza de Issei.

Un momento de lucidez le permitió comprender que esto era lo primero que debía recuperar, para poder avanzar y tener al menos una oportunidad de volver a tener el amor del castaño, pues ahora sabía que no todo volvería a ser como antes, pero podía ser mejor si se esforzaba y ponía todo de sí misma, empezando con cumplir la petición de Issei.

Luego miró a su séquito, las cuales volvían poco a poco a sus propias actividades.

— “No sé si ellas habrán llegado a mí misma conclusión que yo, pero si no es así, llegado el momento se los haré saber para no presionar a Issei” — Pensó con una sonrisa lánguida.

Ella las guio hacia el precipicio, por lo tanto era su deber sacarlas de ese fondo rocoso y darles un mejor futuro.

En ese momento un círculo mágico surgió de la mesa de centro, desde donde una pequeña proyección de Grayfia se pudo ver, llamando la atención de los presentes.

— Rias-sama, hay una petición del Archiduque… — Empezó la imagen de Grayfia.

La peli-roja afiló la mirada, quizás esto la ayudaría a desahogarse junto a las chicas.

Las demás se pusieron serias en respuesta mientras escuchaban las nuevas órdenes.

Dos Kilómetros al sureste de Kuoh

El séquito Gremory, así como el As de Michael acompañados de Ravel, llegaron a un páramo a orillas de la carretera.

— Según la información de Grayfia, aquí se está formando un nido de Demonios Renegados que debemos exterminar — Expuso la peli-roja con seriedad a su grupo.

Esto solo hizo que el ambiente fuera más tenso y serio.

Pues en este lugar apartado no había nada más que un simple bar, donde solo las luces se hallaban encendidas.

No había ni un solo vehículo, ni un solo sonido, ni siquiera el viento soplaba.

— Huele a sangre — Dijo Koneko con sus rasgos fuera.

Ella había levantado una pequeña barrera para enmascarar la presencia del grupo.

— Puedo sentir una presión fuerte en el ambiente, algo se siente malévolo y peligroso — Declaró Kiba con una mirada gélida.

Su sola presencia era filosa, como si cualquier cosa en su campo de visión fuera a ser cortada en segundos.

Rias se sintió orgullosa, pues todos los presentes emitían una poderosa aura, fruto de todo lo que habían pasado.

Recordando el pasado, su sonrisa se volvió nostálgica.

Aunque faltaba el eje central de su grupo, que era Issei.

Pero no era momento para perderse en el carril de la memoria, por lo que afilando su mirada Rias inspeccionó el lugar con sus sentidos.

— Hay una gran acumulación de poder Demoniaco, me hace difícil deducir cuantos enemigos hay… ¿Koneko? — Dijo con seriedad, para luego preguntar a su [Torre].

Pero esta negó.

— Yo tampoco puedo saberlo — Respondió con cierto tinte de frustración en su tono.

La peli-roja miró a su [Reina], la cual se miraba seria por una vez.

Akeno podía darse cuenta que las cosas no serían tan fáciles debido al pesado ambiente, también a la energía que podía percibir.

Claramente este era un asunto serio y se lo hizo saber a su [Rey] con una mirada.

— Ah~ supongo que no se puede evitar, llamaré a Sona — Fue lo dicho por Rias con cierto arrepentimiento en su voz.

Ella no quería arruinarle su noche, pero era necesaria su ayuda en esto, como segunda propietaria de Kuoh.

Así que intuyendo que podría estar interrumpiendo a su amiga en público, optó por sacar su teléfono y marcar a su número.

Solo basto un par de tonos para que la comunicación se lograra.

— ¿Qué sucede Rias? — Se oyó en el otro lado de la línea.

— Necesito tu ayuda con un trabajo Sona, te enviaré mi ubicación para que traigas a tu Nobleza y… — Empezó a decir.

Pero en ese instante Kiba y Xenovia se movieron, colocando sus espadas defensivamente cuando una enorme bola de energía apareció de la nada frente a la peli-roja.

BOOOMMM

Una enorme explosión iluminó la noche en ese paramo.

Con Sona y Spectra

La pareja disfrutaba de un silencio cómodo, hasta que la peli-negra sintió su bolsillo vibrar, por lo que extrajo su dispositivo móvil para reconocer el número y luego contestar.

— ¿Qué sucede Rias? — Preguntó con cierta duda en su tono.

Para ella eran raras las veces que la peli-roja llamara a su número, por lo que podría ser algo banal.

— Necesito tu ayuda con un trabajo Sona, te enviaré mi ubicación para que traigas a tu Nobleza y… — Oyó decir al otro lado de la línea.

Pero luego sonó una explosión y la comunicación se cortó después.

La peli-negra miró la pantalla de su móvil, para después mirar a su pareja con seriedad.

— Para que haya pedido tu ayuda debió encontrarse con algo difícil de resolver por su cuenta… de hecho pude sentir una ligera fluctuación de energía cuando la llamada se cortó, probablemente estén bajo una poderosa barrera  — Respondió mirando en cierta dirección.

Sona se separó de él, para que el rubio se subiera a su vehículo seguido de la peli-negra.

RUUUNNN

Rápidamente arrancó la motocicleta y se dirigió hacia el lugar donde sintió esa perturbación.

Con Rias y los Gremory

La peli-roja miraba seriamente como varias ondulaciones en el aire aparecían a su alrededor, con los demás poniéndose en posición de batalla.

De estas ondulaciones salieron varios Demonios Callejeros, así como un par de Ángeles Caídos y un par de Yokais, todos con sonrisas enfermizas y un aura malévola rodeándolos.

— “Ya veo, con ayuda de esos Yokai y Caídos crearon esta barrera que interfiere con nuestros sentidos Demoniacos, incluso Koneko no los sintió en ningún momento… esto es peligroso” — Pensó analizando la situación.

— Rias, no puedo contactar a Sona o a Grayfia, las cosas no pintan bien — Informó Akeno con seriedad.

Entonces ella revisó de reojo la pantalla de su celular, notando que la barra de señal estaba vacía, así que tampoco podía enviarle su ubicación a Sona.

— Tsk, esperemos que Sona no tarde mucho en encontrarnos — Fue su murmullo con tono molesto y tenso.

Pero sacudiendo su cabeza, miró a sus enemigos y empezó a crear un plan.

— Koneko — Pronunció la peli-roja.

— Son Demonios de Clase Alta en poder, además no se ve que hayan perdido la razón… los Ángeles Caídos son al menos de tres Alas y esos Yokai manejan el Youjutsu a un nivel superior — Informó lo que pudo averiguar con su Senjutsu.

— Ya veo… por el momento iremos en pareja, estén atentos a cualquier cosa a su alrededor, lo más seguro es que haya trampas pero si podemos resistir Sona y su Nobleza vendrán en 15 o 20 minutos máximo — Ordenó al instante.

Al menos ella esperaba que en ese tiempo ella estuviera aquí.

Oh~ ese es un buen plan, esperemos que les dé resultados, Rias Gremory — Se oyó a una voz decir.

Esto llamó la atención de los Demonios y el Ángel, notando como un Demonio cubierto por una túnica salía de entre el grupo de Demonios, notándose únicamente unos ojos brillantes color rojo ya que esta cubría por completo su cuerpo.

Rias, Akeno, Asia y Ravel rápidamente notaron que su firma mágica era muy superior a los Demonios presentes.

— Así que tú eres quien está detrás de todo este grupo, ¿no es así? — Preguntó Rias mirando a ese sujeto.

Si podía hacerlo hablar, le daría tiempo a Sona para acercarse a su ubicación más rápido.

También podría sacar información que le ayudara en el combate.

El resto del grupo lo sabía, así que relajaron un poco su postura, pero no bajaron la guardia y estaban atentos a cualquier truco que ese sujeto haya preparado.

Así es, tuve suerte de encontrar mano de obra aceptable entre tanta basura Callejera, así que después de un estricto control de selección henos aquí, donde tengo que ocuparme de que no estén husmeando en mis planes — Expuso con tono casual y hasta cierto punto amistoso.

Aunque claro, que sus ojos aumentaran su brillo maligno no auguró nada bueno para el grupo.

Aunque no pensé que me detectaran tan pronto, en fin… no tiene caso seguir perdiendo el tiempo, si bien no tengo preocupación de ser detectado ahora que terminé de levantar mi barrera definitiva, tengo cosas más importantes que hacer e investigaciones que terminar… acaben con ellos — Ordenó mientras se retiraba nuevamente.

Rias y compañía se prepararon para la batalla.

En ese momento un gran círculo mágico brilló sobre el lugar y al instante se sintió un cambio, al grado de que el séquito Gremory abrió los ojos al sentir como su poder disminuía de golpe y el de sus oponentes crecía desmesuradamente.

Esto los estaba poniendo en cierta desventaja, que los obligaba a usar todo su poder para tener oportunidad de sobrevivir y eso era decir mucho para un grupo de Demonios Callejeros, por lo que sin duda este sujeto era alguna pieza mutada de [Obispo] si las túnicas y habilidades mágicas eran algún indicativo.

Pero antes de que la batalla estallara, se oyó un ruido distante, mismo que se acercaba cada vez más.

— ¡Rias-sama! — Exclamó Ravel señalando a lo lejos.

La peli-roja y los demás voltearon, notando como un objeto brillante se dirigía a ellos por la carretera dejando un fino rastro a su paso.

El Demonio Callejero detuvo su andar y miró en la misma dirección que el grupo Gremory, abriendo los ojos con sorpresa porque alguien haya entrado en su barrera.

Así, cuando el objeto estuvo al suficiente alcance de la vista, pudieron ver que el brillo en este era fuego, además de distinguir perfectamente que objeto era y eso causó dos reacciones diferentes.

— “¡Eso es…!” — Pensaron en sincronía con absoluta incredulidad en sus caras al reconocer el objeto.

¡Qué demonios! — Exclamó el Demonio Líder cuando miró el objeto que se acercaba a ellos.

Un par de minutos antes

— ¿Estás seguro de esto? — Preguntó con seriedad y cierta preocupación la heredera Sitri a su novio.

— Si, ya no tengo ningún temor o preocupación… así que déjame esto a mí y a los demás — Respondió sin despegar la vista de la carretera.

Sona suspiró, pero luego sonrió levemente y se aferró otro poco al chico.

— Entonces confío en ti, Ise — Dijo sin ninguna duda.

Issei sonrió ante la confianza en el tono de Sona, para luego poner una expresión seria cuando sintió como el ambiente cambió.

— Una barrera, además una muy poderosa — Fue lo dicho por una seria Sona.

— Si no fuera porque la motocicleta fue hecha a partir de mi poder, entonces hubiera tenido un retraso para poder pasar — Dijo el rubio seriamente.

— Supongo que es una característica del poder dimensional de Great Red en tu cuerpo, ¿No es así? — Inquirió Sona con una ceja alzada.

— Si, gracias a eso tengo un poco de dominio sobre el espacio, pero apenas estoy incursionando en ese campo — Respondió Issei con una ligera sonrisa.

Se dio cuenta después de su enfrentamiento contra Vali, ya que su nuevo ataque basado en el Half Dimension del Hakuryuuko era una aplicación de este poder.

La posibilidad que había pensado para duplicar el espacio en respuesta a la división de este a manos de Albión al ser su opuesto, fue mejorada enormemente por el poder de Great Red, siendo esta la razón de que lograra al primer intento tal experimento en plena batalla con su rival.

Sona, siendo una gran analítica lo comprendió rápidamente y no dijo nada más.

Entonces un círculo mágico apareció en el oído de Issei, usando un poco del poder de Great Red al notar como al principio no podía conectar con el exterior de la barrera.

— ¿Sucedió algo Ise? — Se oyó a través del círculo mágico.

— Prepárense todos, los invocare en un par de minutos para apoyar al grupo Gremory en batalla — Dijo sin perder tiempo.

— Entiendo, estaremos esperando tu llamado — Respondió la voz con tono serio.

— Te lo encargo Kurumi — Dijo el rubio antes de cortar la comunicación.

Sona notó la seriedad en el tono de la [Reina] del grupo Hyodou, pero al mismo tiempo la aceptación de la orden dada por su [Rey] y soltó un suspiro que no sabía que contenía.

Parecía que poco a poco estaban dejando ir el rencor que le tenían al grupo Gremory, además con esto demostraban que el chico era más importante para ellas que el descontento con dicho grupo.

Ella tenía cierta ventaja en el camino del perdón por su larga amistad con la peli-roja, pero nada más.

— Bien, es hora de empezar — Dijo Issei mientras se llevaba la mano izquierda al rostro.

Al instante su poder se hizo presente en un brillo que le cubrió el rostro a la altura de los ojos, el cual al despejarse mostró una máscara idéntica a la que solía llevar como Spectra, solo que de color violeta oscuro con negro, mientras la pupila electrónica era azul brillante en vez de dorado.

Luego la motocicleta fue cubriéndose de fuego, cambiando poco a poco su forma con el sonido del metal retorciéndose, inquietando un poco a Sona por las llamas que se encendieron y la recorrían con ellos aun a bordo, pero tranquilizándose al ver que no los afectaba en absoluto.

Sucedió en menos de 15 segundos, pero la motocicleta había cambiado totalmente.

Ahora tenía una forma cadavérica muy llamativa que dejó a la peli-negra sin habla.

Spectra Phantom sonrió al ver la nueva forma de su vehículo, sintiendo la mirada incrédula de Sona a su espalda mientras aumentaba la velocidad y recorría la solitaria carretera dejando un rastro de fuego a su paso.

De vuelta al presente

El grupo Gremory vio con incredulidad como Spectra Phantom llegaba en su increíble vehículo hasta ellos, al tiempo que pateaba al Demonio más cercano sin detenerse en ningún momento.

¡Gah! — Exclamó el Demonio Callejero sintiendo su mandíbula casi romperse por la fuerza del golpe antes de salir proyectado en el aire.

Este no había reaccionado por la impresión de ver el vehículo llegar, además de que tenía el faro apuntando a él por lo que fue cegado por un momento.

JIIIIII

La motocicleta giró y frenando con un chirrido de metal detuvo su recorrido al lado del grupo Gremory, mientras Sona se bajaba con tranquilidad y al mismo tiempo Spectra metía su mano detrás de su cintura, sintiendo su agarre cerrarse en una empuñadura familiar.

Rias y compañía vieron como Spectra sacaba su arma mágica y apuntaba a otro Demonio.

BANG

Se oyó el sonido de un disparo.

Sin embargo, este se disipó al impactar una esfera defensiva que protegía al Demonio, el cual había alzado sus brazos para protegerse inútilmente, solo que la barrera que lo protegía salvó su vida.

— Así que no solo aplica un Buff a tus minions, sino que incluso los protege mientras nos roba poder — Fue lo que dijo Sona mientras se acomodaba las gafas.

Sin que nadie lo notara, una capa rojiza la cubría creando una armadura espacial aislándola del sello mágico que afectaba al grupo Gremory.

La deducción a la que había llegado era por como lucía el grupo Gremory, además de que no había rastro de pelea alguna, lo que también le indicó que Rias había podido ganar tiempo por lo que probablemente les tocó un enemigo hablador en cierta medida.

Claro que este comentario sacó de su impresión al grupo Gremory.

— Sona, Spectra — Pronunció la peli-roja con cierto alivio en su tono.

Entonces el enmascarado bajó de la motocicleta, la cual desapareció en una llamarada a sus espaldas oscureciendo su frente, pero resaltando el brillo de las pupilas electrónicas de su máscara creando gran impacto visual.

Puede que el rubio no fuera del agrado de Rias por los resultados de sus encuentros con él, pero ella tuvo que admitir a regañadientes que esa fue una épica entrada, pero sobre todo por el vehículo que estaba en su posesión y todo el espectáculo visual que hizo en cada movimiento.

Por una vez tuvo envidia de Sona y no ayudaba en nada la pequeña sonrisa presuntuosa que podía distinguir en el rostro de su amiga.

Entonces alguien se hizo notar.

Para que no haya notado que entraste en mi barrera, debes de ser alguien problemático… bueno, no importa, después de todo esta barrera sería capaz de detener al Sekiryuutei, el cual al parecer está ausente — Dijo el Demonio Líder mientras masajeaba su cuello.

Sona alzó una ceja, pues este tipo se notaba confiado.

Además de que nadie podrá venir en su ayuda ya que toda magia de tele-transporte esta inhabilitada… encárguense de ellos, ya he perdido bastante tiempo en distracciones inútiles — Declaró con ligera irritación antes de empezar a retirarse nuevamente.

Ante esto Spectra guardó su arma nuevamente, mientras dibujaba una amplia sonrisa.

— ¿Te vas? Pero si apenas estamos empezando… además, quien dice que no puedo llamar refuerzos — Declaró para después chasquear los dedos.

Un círculo mágico con el diseño de un Dragón occidental color morado apareció en el suelo detrás del él.

El Demonio detuvo su andar nuevamente, pero esta vez se giró rápidamente con inquietud en su lenguaje corporal, pues claramente podía sentir la activación del círculo de tele-transporte.

¡Imposible! — Exclamó cuando varias figuras empezaron a emerger del círculo mágico.

La nobleza de Rias, con Ravel e Irina dio un paso atrás ante la presión que el nuevo grupo causó con tan solo su presencia.

Kiba, Gasper y Sona solo miraron con admiración todo el teatro hecho por su amigo/ pareja.

Los Demonios Callejeros, los cuales rodeaban al grupo se tensaron, pero aun así se prepararon para atacar.

— Les presento a mi Nobleza, observen bien ya que cualquiera de ellos será su última visión en este mundo — Sentenció extendiendo sus brazos y hablando con tono lúdico.

Las chicas llevaban su atuendo de batalla, siendo que algunas traían puesto nueva indumentaria de combate.

Kurumi vestía un Kimono negro con detalles rojos y estampado de algunas serpientes blancas formando el símbolo del infinito.

Rosseweise llevaba su armadura de Valquiria, con Valerie llevando ahora un vestido rojo elegante con volantes en negro.

Kuroka llevaba su Kimono usual, mientras Brielle ahora llevaba una armadura plateada con detalles azules sobre un traje azul con adornos en dorado, su cabello lo llevaba atado en un bollo trenzado además una lanza medieval metálica.

Griselda llevaba una armadura gris sobre sus vestimentas blancas, junto a una espada hibrida que se podía convertir en un arco, con Nero llevando su vestido rojo y su espada a juego.

Musa llevaba un traje ajustado color morado, con una parte más oscura simulando un abrigo terminando en un faldón, así como hombreras metálicas en dorado con una pequeña capa sobre sus hombros y un velo sobre su cabello, llevando una lanza roja en cada mano.

Le Fay llevaba su uniforme de escuela, su capa y su sombrero así como su bastón.

Yukikaze su kimono morado, con medias negras y unos palillos como adorno en el pelo.

Tsukiumi llevaba su abrigo negro sobre su vestido blanco, con medias negras y botas de cuero.

Leo llevaba su armadura y su hacha, montada en su Chocobo.

Alleyne sus vestimentas verdes, capa roja con su lanza pesada de doble punta en su hombro.

Elsha su traje ajustado, con su chaqueta azul sobre sus hombros mientras se cruzaba de brazos.

Silver llevaba una nueva armadura, con las palaras Zero Absolute en el pecho, así como una capa y pendientes en forma de cruz.

Con Spectra frente al grupo, quien ahora estaba cruzado de brazos al tiempo que una espada enfundada aparecía en su espalda.

Rias y las chicas sintieron un escalofrío mientras temblaban por la gran presión que envolvía al grupo recién llegado, ni siquiera habían notado a Rosseweise y Tsukiumi entre ellos por el estado mental alterado.

— Tch, de todos modos, no podrán hacer nada, después de todo mis subordinados tienen protección y un aumento de energía suficiente para encargarse de todos — Dijo tratando de sonar confiado.

En respuesta Spectra sonrió con malicia.

Así el rubio extendió su mano izquierda hacia un costado, mientras flamas aparecían en cada yema de sus dedos, para luego proceder a sujetar la realidad misma si la visión de sus dedos hundiéndose el aire ocasionando ondulaciones en este indicaba algo.

Desgarrador Celestial — Pronunció mientras tiraba.

RASSS

El sonido de desgarro llenó el ambiente al tiempo que el círculo mágico desaparecía como si fuera arrancado de la realidad misma.

Rias, Akeno y Ravel tenían los ojos bien abiertos al ver como este tipo deshabilitaba la barrera con una eficiencia aterradora.

¡Elimínenlos! — Ordenó el Líder mostrando por primera vez pánico en su voz.

— Adelante — Ordenó Spectra con inusitada calma.

Con esa simple orden comenzó y los Demonios reaccionaron muy tarde.

¡Mizu no Ya! (Flechas de Agua) — Exclamó Tsukiumi cuando el agua fue invocada desde la atmosfera.

¡Zettai Rei Do! (Cero Absoluto) — Fue el turno de Silver desatando su aura.

— ¡Atraviésalos, Doumas! — Leo fue la siguiente mientras cambiaba su hacha por un bisento,

— Kaw — Respondió la enorme ave cuando empezó a correr.

Musa giró sus lanzas y saltó hacia atrás con elegancia al tiempo que varias copias de su lanza la rodeaban.

Le Fay, Rosseweise y Valerie invocaron varios círculos mágicos alrededor de su grupo y el de Rias.

BOOOMMM

Fue en un solo instante, cuando las flechas acuáticas, al aire helado, una lluvia de lanzas carmesíes y un bombardeo de hechizos borraron por completo a casi todos los enemigos en el campo de batalla, con algunas excepciones al ser los miembros con reflejos más rápidos del grupo, en este caso los Caídos y Yokai.

Los Caídos se habían elevado en el aire por reflejo saliendo del área de bombardeo a tiempo, mientras los Yokai sintieron sus instintos gritar que salieran de allí.

Sin embargo estos no llegaron muy lejos, ya que hubo alguien que se adelantó a sus movimientos y gracias a su montura acortó la distancia en segundos.

Cuando el humo se despejó, solo quedó en el lugar una gran cantidad de cuerpos de los Demonios callejeros que no lograron escapar, para impresión del grupo Gremory.

— Eran rápidos, pero no tan rápidos — Comentó Leo mientras regresaba al grupo aun montando a Doumas con su bisento en el hombro.

Detrás de la Ex Reina había un grupo de al menos 10 Yokai muertos o agonizando en un charco de sangre.

El grupo de Caídos observó esto desde el aire, mientras su instinto de conservación les exigía romper el trato con el Líder de los Demonios callejeros y escapar de ahí a toda prisa, sin embargo ellos no tendrían esa oportunidad.

— Ustedes no se irán de aquí — Declaró una seria Griselda detrás del grupo de Caídos.

Estos abrieron sus ojos, para luego darse la vuelta rápidamente mientras invocaban lanzas de luz para defenderse.

Entonces estos vieron a Griselda con sus alas de Ángel fuera mientras les apuntaba con su arco, donde una flecha de luz ya estaba cargaba y lista para ser disparada desde su arco hibrido.

Cabe decir que al instante se congelaron al sentir la enorme cantidad de energía que la flecha de luz contenía.

— ¡Flecha Celestial! — Exclamó soltando el proyectil.

Al instante de dejar el arco, este se dividió en varios rayos de luz que dejaron sin oportunidad al grupo de Caídos, esto por la enorme velocidad del ataque y la distancia tan corta que debía recorrer para encontrar a sus objetivos.

BOOOMMM

Un destello, un estruendo y luego una nube de humo marcó el fin del grupo de Caídos.

Luego Griselda descendió lentamente hacia su [Rey], mientras su arco regresaba a su forma de espada, el cual volvió a envainar dentro de la funda en su cintura.

Fue en ese momento que Xenovia fue consciente de la presencia de su figura materna dentro del grupo de Spectra, dejándola con una expresión estupefacta e incrédula que la hizo dar un paso atrás en reflejo a su presencia.

Por su parte, sus compañeras del grupo Gremory, así como Irina también mostraron incredulidad al verla en el grupo.

— Gracias, Leo, Doumas, Griselda — Agradeció el enmascarado cuando ambas chicas estuvieron junto a él.

Ante sus palabras la Yokai asintió con una pequeña sonrisa, la Exorcista se sonrojó ligeramente al no esperarse el comentario del chico pero igualmente asintió.

— ¡Caw! — Aleteó entusiasmado el Chocobo al ser tomado en cuenta.

Cabe decir que Xenovia quedó con la boca abierta al ver la reacción de Griselda, pues nunca la había visto sonrojada, ya que esta era bastante conocida por ser prudente y en control total de sus emociones.

Así que ver esa faceta fue un ligero shock para la [Caballo] de Rias.

También fue entonces que el grupo Gremory notó a Rosseweise en el grupo, así como a Tsukiumi, lo que las hizo abrir los ojos en shock nuevamente, sintiendo un caos en sus cabezas debido a la gran cantidad de preguntas que ahora tenían en mente.

Sona, así como los hombres del grupo Gremory notaron el reconocimiento en las expresiones de Rias y las demás, preocupando ligeramente a Kiba, mientras Gasper reflexionaba un poco, sabiendo que su sempai no haría algo así si no estuviera seguro de sus acciones.

Jalando la manga del otro rubio para hacerse notar, Gasper señaló a Sona cuando hubo captado la atención del Caballero Gremory, el cual miró a la heredera detenidamente, observando su semblante tranquilo a pesar de lo que ocurría.

Así que rápidamente llegó a la conclusión de que Issei tenía todo bajo control.

Con esto en mente, agradeció al Dhampire con un asentimiento y solo se limitó a observar como terminaba todo.

Pero entonces la atención de todos fue atrapada nuevamente por el Líder del grupo Downfall Dragon.

— Parece que mis refuerzos fueron algo excesivo para tu pequeño grupo… bueno, la verdad los llamé para presentarlos formalmente con el séquito de Rias Gremory y que mejor forma de hacerlo que mostrar sus capacidades en directo — Dijo calmadamente Spectra al único sobreviviente de esta masacre.

Este era el Demonio Líder, el cual se escondía detrás de varios círculos defensivos, mientras respiraba agitadamente por el shock de casi morir si no fuera porque reaccionó a tiempo.

Pero luego sacudió su cabeza, para después mirar con rabia al sujeto frente a él.

— Sin embargo, me llevé una gran decepción pues solo bastó la mitad de mi Nobleza para acabar con todos tus secuaces al primer ataque… en fin, solo quedas tú, no perderé mi tiempo y te acabaré yo mismo, ya que tengo mejores cosas que hacer en este momento — Dijo Spectra empezando a caminar hacia su oponente.

O más bien dicho presa.

El Demonio renegado apretó los dientes con ira, sin embargo tuvo que aceptar el hecho de que este grupo estaba muy fuera de su liga, incluso con todas sus preparaciones no había sido suficiente.

Luego se obligó a calmarse, pues no todo estaba perdido.

Ahora sabía que había un nuevo grupo activo en el mundo humano que sería problemático para ciertos grupos delictivos.

Bueno, eso ya no era su problema.

Después de todo él era bastante precavido y desde el principio tenía un círculo de tele-transporte preparado por si las cosas no salían según lo previsto, aunque jamás llegó a imaginar que tendría que usarlo.

Sin duda no me esperé encontrarme con un grupo como el tuyo, por lo que rezo por no volvernos a encontrar nunca — Declaró mientras un círculo mágico aparecía a sus pies.

Todo parecía indicar que escaparía con éxito.

Cualquier ataque tendría que pasar a través de sus círculos defensivos, los cuales eran lo suficientemente fuertes para detener cualquier ataque entrante y retrasaría los intentos por detenerlo.

Tal como lo tenía planeado.

Sin embargo, no tenía contemplado el nivel de su oponente.

Scarlet Neddle (Aguja Escarlata) — Pronunció Spectra con tono calmo mientras lo señalaba con el dedo índice de su mano izquierda.

Su uña se alargó y se volvió color escarlata, para que luego un aura rojiza rodeara su cuerpo por un momento antes de dirigirse hacia su dedo desde donde surgió un láser rojizo que atravesó su defensa y lo impactó en el pecho.

¡Gah! — Exclamó cuando sus pies dejaron el suelo y se interrumpió su escape.

Este voló cinco metros en el aire antes de caer de forma descompuesta, para luego intentar levantarse con dificultad mientras se sujetaba el pecho y jadeaba audiblemente.

Cabe decir que Rias tenía estrellas en los ojos al ver el ataque, pues lo reconocía perfectamente al ser amante del anime.

Pero entonces ella sacudió su cabeza.

— “Calma Rias, por increíble que haya sido ese ataque es Spectra de quien hablamos” — Se reprendió mentalmente ante su pérdida de compostura.

Akeno y Koneko la miraron con mirada plana, ya imaginando sus pensamientos.

Las demás chicas solo mostraban impresión, pues Spectra estaba dominando el campo de batalla con extrema facilidad, sin mencionar su poderosa Nobleza.

Por otra parte, Kiba y Gasper miraban con admiración la actuación de su amigo, mismo que pudo haberlos engañado a ellos si no supieran su verdadera identidad de antemano.

Sona se limitó a limpiar sus gafas con un pañuelo, mientras dibujaba una pequeña sonrisa de suficiencia ante la impresión que su novio estaba dejando en el grupo Gremory.

Entonces la capucha del demonio cayó hacia atrás mientras se hallaba en el suelo, mostrando a un hombre de treinta años, de piel ligeramente purpura con venas rojas por la corrupción al convertirse en Demonio Callejero, pero conservando algo de su antiguo aspecto, demostrando que era más fuerte que un Demonio común.

C-Como — Pronunció con dificultad.

Por su parte, el enmascarado bajó su dedo, el cual había regresado a la normalidad.

— No eres el primero en intentar escapar de mi cuando lo supero por completo y… digamos que al ver tu círculo de escape mi instinto me hizo actuar sin pensar — Respondió Spectra con tono uniforme sin revelar nada.

El Demonio tembló ante su tono, pues no pudo identificar ningún sentimiento en él, como si tenerlo a derribado a sus pies no significara nada.

Esto lo hizo apretar los dientes con odio y frustración.

Necesitaba una distracción para poder escapar, pero ante el gran número de enemigos no sería nada fácil.

Sin embargo, antes de siquiera pensar en un plan, lo sintió.

El poder de Spectra se estaba elevando.

— Bueno, sin duda tenías algo fuera de lo común con tus habilidades mágicas y lo dejaste claro, por lo que sería descortés de mi parte no corresponderte con algo igual de personal… así que terminemos con esto — Dijo Spectra alzando ambos brazos al aire mientras los cruzaba sobre su cabeza.

Un aura dorada surgió de su cuerpo, incomodando al grupo Gremory al reconocer el aura sacra que el enmascarado expulsaba en gran cantidad.

Por otro lado, los miembros de su Nobleza abrieron los ojos al ver esto, pues ellos no sabían que podía usar ese poder.

Incluso su pureza era tal que se equiparaba al de un Serafín.

La única que no se mostró sorprendida fue Kurumi, pues ella pudo sentir como la conexión con la pieza de Gabrielle latía en respuesta a los actos de Spectra.

— “Así que Issei puede usar en cierta medida nuestro poder a través de las piezas… interesante” — Pensó la [Reina] del grupo Hyodou.

El Demonio callejero retrocedió en el suelo, al sentir como ese poder lo presionaba y lo envolvía, paralizándolo en su lugar cuando entró en pánico.

— Déjame mostrarte, como destrozo las estrellas… — Declaró Issei antes de cambiar de posición.

Su puño derecho estaba a la altura de la cintura, mientras su mano izquierda la colocaba casi frente a su cara y abría las piernas, mostrando un poco su perfil izquierdo.

Rias, Akeno, Koneko y Kiba abrieron sus ojos ante esta postura, así como las palabras que Spectra pronunció.

Cabe decir que era por la peli-roja que esto era posible, pues ella había arrastrado a los miembros de su Nobleza a maratones de anime cuando estaban en el inframundo, siendo esta frase, esta postura y el aura dorada rodeándolo lo que les trajo a la mente un momento épico en palabras de Rias.

— ¡E-Esperaaaaa!!! — Exclamó el Demonio con terror.

Pero ya era tarde.

¡Galaxia Explosion! (Explosión de Galaxias) — Pronunció el enmascarado desatando su ataque.

Spectra empujó su puño derecho, el cual abrió para tener su palma abierta apuntando al Demonio callejero, mientras que a su alrededor se formaban planetas y cuerpos celestes hechos de energía, los cuales que avanzaron hacia su víctima al tiempo que se despedazaban en violentas explosiones.

¡Gahhh! — Fue el grito lleno de agonía mientras el ataque lo arrastraba y envolvía en su poder destructivo.

Tud

Fue el sonido de un cuerpo al caer.

Spectra dejó de expulsar su aura, para luego girarse hacia los demás.

Así fue que pudo ver como Rias y Gasper lo miraban con estrellitas en los ojos, mientras Akeno y Koneko tenían expresiones totalmente incrédulas.

Por su parte, Kiba solo pudo poner una expresión que decía “ya no me sorprende” que lo hizo sonreír incómodamente por dentro.

Irina y Ravel se mostraban un poco aprehensivas y hasta cautelosas, mientras Xenovia lo miraba con seriedad y calma, pero el agarre tembloroso en Durandal decía mucho de su verdadero estado emocional.

Asia lo miraba con asombro y un toque de temor.

Sona lo miraba seriamente, para luego negar y sonreír.

Sin duda ella era la que disfrutó más de este espectáculo.

En cambio su Nobleza tenía expresiones mixtas, desde incredulidad, sorpresa, admiración, analíticas y por último tranquila en el caso de Kurumi.

— Bien, ya que todo ha terminado será mejor que me retire — Dijo Spectra con tranquilidad mientras se acercaba a todos.

Esto sacó de su aturdimiento al grupo Gremory e hizo reaccionar a Rias, la cual rápidamente se paró frente a Spectra con una cara extremadamente seria.

— Espera, aún tienes muchas explicaciones que dar, como la presencia de Rosseweise en tu grupo cuando ella pertenece a mi Nobleza por ejemplo — Empezó a decir la peli-roja con tono demandante.

Sin embargo, Spectra pasó de largo junto a ella hasta llegar al lado de Sona.

— Ciertamente es una duda que esperé que tuvieras si la veías en mi grupo… sin embargo estoy cansado y quiero llegar a casa, porque no concertamos una reunión en otro momento y responderé todo — Dijo el enmascarado mientras se volteaba hacia Rias con Sona abrazada a su costado.

En respuesta Rias entrecerró los ojos, no gustándole la respuesta de Spectra y por ello se cruzó de brazos mientras una leve capa de aura carmesí la rodeaba.

— No juegues conmigo Spectra y responde ahora — Dijo con tono helado y peligroso.

Esto hizo que la Nobleza de Issei se pusiera seria, lo que se trasmitió a través de su lenguaje corporal al tensarse, listos para la batalla.

Lo mismo pasó con el grupo Gremory, con excepción de Kiba y Gasper al anticipar la acción de su amigo, el cual no los defraudó al alzar su mano para que su Nobleza se tranquilizara, lo que hicieron a regañadientes.

— Rias Gremory, ten en cuenta que acabo de darte una mano en un problema en el cual tendrías muchos problemas para superar sin recibir daños que te habrían comprometido una temporada… — Dijo Spectra con seriedad y en tono formal.

La peli-roja frunció el ceño y maldijo por dentro, pues el enmascarado tenía razón.

Aun cuando hubieran vencido, no saldrían indemnes de tal batalla lo cual los obligaría a estar inactivos por un tiempo, lo que afectaría sus contratos con los clientes del Clan Gremory que han hecho.

Esto comprometería sus logros ante la sociedad Demoniaca y eso no podía permitirlo, tampoco quería preocupar a sus padres, a los cuales aún les tenía que informar acerca de los problemas actuales con el castaño.

Spectra notó el profundo pensamiento de la peli-roja, así que decidió presionar un poco más.

— Tómalo como una cortesía por interrumpir la cita con mi Sona — Agregó en un tono más cortés.

Cabe decir que la mencionada se sobresaltó al oír esto, sonrojándose enormemente cuando Spectra dijo “mi Sona”, no obstante se podía ver una pequeña sonrisa avergonzada en el rostro de la heredera Sitri.

Rias se mostró un tanto desconcertada, pero al ver la reacción de Sona soltó un suspiro resignado mientras se tranquilizaba.

— Está bien, no quiero mostrarme desagradecida ante la ayuda que nos han dado… — Dijo mientras se masajeaba la sien.

— Sona te avisará el día y la hora para nuestra reunión — Añadió Spectra con calma.

La peli-roja asintió, al tiempo que su Nobleza se relajaba.

En ese momento Issei notó un movimiento en las sombras, sin embargo no se movió.

CLANG

Una lanza de luz fue bloqueada por Kiba, mientras un encapuchado luchaba por clavar dicha lanza en la nuca de una Rias que parpadeó ligeramente ante el atentado que acababa de sufrir.

SLASH

Al segundo siguiente el encapuchado fue divido por Durandal.

Ambos Caballeros habían notado una intención hostil, la cual se hallaba acechándolos en espera de que bajaran la guardia.

Así que al ver como su ama se encontraba en peligro Kiba y Xenovia actuaron, siendo el rubio quien con su gran velocidad tomó la delantera y bloqueaba el golpe mortal, mientras la peli-azul con menos velocidad tomaba la ventaja al ver a su blanco inmovilizado por su compañero y atacó a matar.

Cabe decir que Rias no se quedó atrás y al sentir una presencia emerger a su espalda había invocado una capa del Poder de la Destrucción para que la rodeara defensivamente, la cuál habría destruido la lanza de luz al instante de tocar su piel.

Esto fue un instinto y habilidad que pulió desde el momento en que le mostró a Issei la caza de Demonios callejeros y él la salvó ante un pequeño descuido.

Por ello no se encontraba en peligro real.

Sujetar

Spectra sujetaba el brazo de otro encapuchado, el cual tenía una daga apuntando al cuello de Sona, la cual se limitó a acomodar sus gafas con tranquilidad, pero mostrando una expresión fría.

Ella tenía una leve capa de hielo cubriendo su cuerpo, demostrando que no estaba indefensa.

— Ya veo, supongo que pudieron curarse lo suficiente gracias a su Senjutsu y esperaron el momento justo para atacar — Dijo Sona analíticamente al notar sangre en la ropa del encapuchado.

Este al forcejear contra el agarre de Spectra su capucha cayó, mostrando sus rasgos Yokai.

— Un Yokai y un Caído lograron sobrevivir por pura suerte, desgraciadamente su odio y resentimiento los hicieron perder esta segunda oportunidad — Dijo Xenovia al ver el cadáver del sujeto que mató.

Leo solo pudo maldecir por lo bajo, pues al parecer subestimó las habilidades de uno de los Yokai, al mismo tiempo que Griselda dibujaba una mueca ante la persistencia del Caído que sobrevivió a su ataque.

Por su parte, Spectra ya estaba rodeado de su poder Dragontino, al tiempo que agarraba al sujeto por su cabeza llamando la atención de todos.

Garuda ¡Flap! (Aletazo de Garuda) — Dijo con tono calmo, para luego exclamar la última parte mientras lo mandaba a volar.

Todos vieron como el sujeto se alzaba hacia el cielo en un rayo de luz y se perdía en el firmamento lleno de estrellas.

Entonces Spectra dio dos pasos al frente y dibujó una equis en el suelo con su pie.

— En tres segundos caerá aquí y este lugar se convertirá en su tumba — Declaró con tono gélido.

En este momento Rias casi babeaba ante su lado otaku, pero rápidamente sacudió su cabeza, recordándose que a pesar de lucir genial era Spectra y por ello no debería emocionarse ante su repertorio de ataques.

Por otra parte, la Nobleza de Rias tenía los ojos abiertos ante el ataque del enmascarado, mientras tragaban duro.

Akeno era la única que sintió un hormigueo en su sentido sádico.

— Ufufu — Rio la semi-ángel provocando algunos escalofríos en los presentes.

CRASH

Entonces pasados los tres segundos una sombra cayó justo en el lugar que Spectra marcó, creando una nube de humo y una ráfaga de viento.

Cuando el humo si dispersó, se mostró un enorme cráter con un cuerpo en el centro, el cual se mostraba totalmente inerte.

El silencio que siguió fue profundo, hasta que Spectra se volvió hacia su Nobleza con Sona a su lado.

— Creo que eso fue todo por esta noche, nos veremos después chica Gremory — Dijo mientras invocaba un círculo de tele-transportación.

Esto hizo reaccionar a Rias.

— ¡Espe…! se fue — Dijo la peli-roja cuando el enmascarado desapareció junto a su grupo.

El resto permaneció en silencio unos momentos, procesando lo ocurrido esta noche.

— Bueno, al menos fue amable para interrumpir su cita y venir — Dijo Irina con torpeza tratando de aligerar el ambiente tenso del lugar.

Las demás soltaron un suspiro mientras la tensión empezaba a abandonarlas poco a poco, aunque Rias sentía un inminente dolor de cabeza por todos los eventos del día.

— Supongo que al menos debo darle eso, sin embargo no se escapará de mis preguntas la próxima vez — Dijo Rias con tono serio.

— Spectra es genial — Pronunció Gasper con admiración en su tono.

Esto hizo que la peli-roja dibujara una expresión incrédula y hasta cierto punto horrorizada, misma que deleitó a la peli-negra, la cual rio levemente ante el daño que un simple comentario causó.

— Yo… pienso que es un poco aterrador — Murmuró Asia con un leve temblor.

La rubia miró el cráter y tragó audiblemente.

Rias soltó un gran suspiro y se controló.

— Al menos sabemos que es un aliado que responderá a un llamado de auxilio — Comentó esta vez Ravel.

Eso causó una ola de alivio en cierta medida, después de todo el enmascarado demostró su dedicación al deber que había recibido como nuevo propietario de Kuoh junto a Sona y Rias.

— Supongo que es hora de irnos, realmente todo esto me ha dejado sin energía, solo quiero descansar — Dijo Rias con voz y mirada cansada.

Las demás asintieron y procedieron a retirarse con un círculo mágico.

Así el grupo Gremory desapareció del lugar.

Inframundo — Castillo Dragón

El séquito Hyodou junto a Sona Sitri apareció en la sala del Castillo, para que Spectra se dejara caer en el sillón más cercano mientras cerraba sus ojos, con los demás poniéndose cómodos.

— Por fin se terminó nya, por un momento pensé que la princesa swicht haría algo tonto — Dijo la Nekoshou con tono travieso.

— A pesar de lo que pasó, Rias no es tonta y sabe que tiene una deuda con Spectra — Declaró Sona mientras se acomodaba sus gafas.

— Por un momento me sentí mal por ellos si estallaba la batalla — Dijo Elsha mientras se rascaba la mejilla con expresión tímida.

Habían estado en silencio durante la misión, dejando todo en manos de su [Rey], por lo que ahora sintieron era el momento adecuado para dejar salir sus comentarios y opiniones.

— ¿Lo dices por la diferencia de poder? — Inquirió Alleyne con una ceja alzada.

— Es normal, la mayoría de nosotros estamos en Clase Ultímate, mientras Rias y su grupo siguen siendo Demonios de Clase Alta — Fue lo dicho por Issei sin abrir los ojos.

Las chicas le dieron la razón en esto, aunque algunas se removieron incómodas al sentirse un poco fuera de lugar, pero rápidamente lo superaron pues ellas estaban aquí por una sola persona.

— No se preocupen, saben que me importan más ustedes que el poder — Agregó aún sin abrir los ojos.

Esto hizo que el grupo sintiera una sensación cálida, elevando aún más la opinión de su [Rey].

Entonces ciertas personas se hicieron notar.

— Te ves cansado chico — Dijo una voz de repente.

Issei no reaccionó, solo soltó un suspiro cansado mientras regresaba a su apariencia normal.

Su séquito permanecía a su alrededor, con Rosseweise y Kurumi sentados junto a él.

— Parece que la misión de Rias se complicó un poco — Comentó otra voz.

— Espero que todo haya salido bien — Dijo una tercera voz.

Entonces el enmascarado miró al origen de ambas voces.

— Azazel, Sirzechs-sama, Michael-sama — Pronunció al ver a los dueños de las voces sentados en el mini-bar con bebidas ya servidas, aunque el Serafín bebía solo jugo.

Maya detrás de la barra, atendiéndolos con diligencia.

— Azazel trajo tu encargo, en cambio Michael vino a ver a Gabrielle y Sirzechs intuyo que te usó de excusa para escapar del papeleo — Fue el comentario casual de Kurumi mientras explicaba la presencia de los tres.

Cabe decir que los Líderes alzaron una ceja ante el tono informal que usó la [Reina] del grupo Hyodou, aunque el Satán peli-rojo tuvo una expresión levemente nerviosa ante la veracidad del comentario.

Fue en ese momento que se sintió un cambio en el ambiente, lo que los hizo poner una expresión seria ante la distorsión que se percibió en la realidad misma.

Entonces el castaño abrió los ojos al sentir varias presencias aparecer a las puertas de su hogar, por lo que rápidamente se puso de pie, siendo secundado por unos serios Líderes y detrás de ellos el sequito del chico, al igual que Sona.

Cuando llegaron a las puertas, pudieron ver a unas figuras que pudieron reconocer, pero que los hizo abrir los ojos con incredulidad, sobre todo cuando la figura que los lideraba soltaba un comentario que pudieron escuchar gracias a sus sentidos mejorados.

— En el peor escenario posible — Oyeron decir a la figura con voz tensa.

Así, cuando ambos grupos quedaron frente a frente, el castaño sonrió de irónica.

Al parecer todavía no acababan los eventos del día y las personas frente a él fueron la cereza del pastel, como lo demostraban las expresiones estupefactas de su séquito, así como la de los Líderes que lo acompañaban, los cuales tenían la mandíbulas hasta el piso.

— Vaya, esto es… inesperado — Comentó Issei sintiendo una leve migraña llegar.

— Lo sé — Respondió la figura con una sonrisa tensa.

Bien, he de admitir que jamás pensé en tardar tanto para actualizar.

Perdí mi inspiración y me bloqueé por completo, hasta que leí algunos comentarios de lectores que aun esperaban mi actualización y que me hicieron esforzarme por avanzar desde donde lo dejé.

No fue fácil, pero al momento de que pude escribir más de mil palabras fue que logré dejar correr mis ideas y el capítulo simplemente fluyó como debió ser hace tiempo.

Espero que les haya gustado, mi próxima actualización será Naruto Gremory, luego Dragón heroico y luego Nueva vida nuevamente para cerrar el ciclo.

Tarde tres años en lograr sacar este capítulo y espero que el siguiente sea más rápido en escribirse, ya que en todo este tiempo pude pensar varias escenarios para cada fic, solo que no encontraba manera de poder incorporarlos y eso me frustraba.

¿Qué les pareció el final?

¿Les suena de algo?

Bueno, los que adivinaron pues felicidades, mientras los que no tendrán que esperar al siguiente capítulo.

Gracias por esperarme y no perder su fe en mí, espero no haber perdido mi toque en las peleas y sobre todo, en temas serios donde se muestre la personalidad y pensamientos de cada personaje.

Por cierto, la caída del dragón se volvió tendencia y algo repetitivo en varios fics, nunca ahondaron más en el tema y se hizo genérico en fics de traición, lo que me deja mal sabor de boca, incluso aparece en google y pues eso también contribuyó un poco a que me bloqueara mentalmente.

Solo quería sacarlo de mi pecho.

Sin más que decir, Kami fuera.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro

Tags: #uzu-no-kami