Capítulo 22. La Cacería.
Después de que el aerodeslizador recogiera los primeros siete cadáveres y de que Krystal terminara de desinfectar y vendar su pierna se pone a ayudar a Percy a ordenar las provisiones de la Cornucopia, cuando está por atardecer ya han preparado dos mochilas con comida y armas, aparte de las que llevan ajustadas en los cinturones, tan pronto anochece, van por unos palos que parecen que eran una puerta de madera, cortan una mochila y enredan varios pedazos de tela en los palos, después con otras maderas y las cerillas hacen una fogata, prenden sus improvisadas antorchas, se cuelgan sus mochilas y salen en busca de presas.
Haymitch se acerca a nosotros. –¿Están bien?
–Si Hay, no te preocupes.
–Chico ¿cómo lo llevas?
–Estoy bien Haymitch, apenas iniciamos, llevan 11 horas en esa Arena aún nos falta mucho que ver.
–Bien, cualquier cosa díganme, me voy a Producción a ver un momento a Effie, aquí todo está tranquilo y ahorita no hay que intervenir. –Nuestro mentor se va, Plutarch se acerca a nosotros.
–Ahora que no hay mucha actividad deberían seguir estudiando a sus mutos.
–Bien Plutarch, ya nos ponemos en ello. –Le contesto yo, no quisiera hacerlo, pero tengo qué. Vuelvo a presionar el botón cuando Plutarch está viendo las pantallas. Aparece la imagen de una mujer con alas y patas de ave, todo su cuerpo es gris y su cabello es oscuro, mientras que sus ojos son amarillos, su nombre:
· Arpía. Veloz, garras muy filosas, puede cargar hasta cinco veces su peso, ágil en el aire y engañosa.
Cambio de muto y aparece un perro enorme de tres cabezas, colmillos largos, sus ojos rojos, su cuerpo negro tan negro como la noche sin luna, su nombre:
· Cerbero. Fuerte, peligroso, sus medidas varían entre los 8 y 15 metros de altura y pesa entre 200 y 300 toneladas, dientes filosos con una longitudes que varían entre 1 metro y 1.5 metros, olfato muy sensible, capaz de seguir un rastro por toda una semana, vista nocturna, patas y mandíbulas muy fuertes, pero su debilidad es la música.
Vuelvo a cambiar de muto y aparece la imagen de lo que podría llama un dragón pero con cinco cabezas, es de color purpura y Rosado, todas las cabezas tienen diferentes dientes filosos y sus cuatro patas decoradas con garras, su nombre:
· Hydra. La mitad de sus cabezas arroja ácido, la otra mitad fuego, cuando una cabeza es cortada, salen dos más, altamente peligrosa y es parcialmente ciega pero tiene buen oído.
Y ese es el último muto del catalogo de esta Arena.
Terminamos de ver los mutos y Plutarch da la alerta.
–Atención inicio de actividad. Percy y Krystal se acercan a un grupo.
Revisamos el mapa, Enobaria busca la cámara más cercana al grupo y comprobamos que Paris, Shine, Shirley y Abberforth están sentados detrás de una construcción comiendo mangos, Percy y Krys están a un par de "casa" de ellos, el grupo solo está armado con una espada y ninguno es muy diestro en usarla, mientras que "los letales" van armados hasta los dientes, el grupo está entretenido platicando y se ríen, lo que hace que el par los escuchen, Percy toma su espada y Krystal un hacha, rodean la construcción de manera que acorralan al grupo, la primera en atacar es la chica morena con el hacha, la entierra en la espalda de Shine que estaba de espaldas a ella, mientras el rubio atraviesa su espada en el abdomen de Shirley, Abberforth y Paris intentan huir, Paris entra en la construcción por un agujero, Abberforth intenta seguirla pero Percy lo jala del pie y Krystal le entierra el hacha en la cabeza, lo que provoca que se salpique con la sangre del chico.
Enobaria hace sonar tres veces el cañón, mientras ese par de chicos rodean las ruinas de casa para atrapar a Paris, la cual sigue dentro escondida bajo una pila de escombros, Percy y Krys entran a la casa en ruinas, buscan a Paris iluminando con sus antorchas, Krystal es quien ve el cabello de la chica y acerca su antorcha para encender su cabello, el cabello de Paris se empieza a incendiar, la chica sale de su escondite, el rubio intenta cortarla con la espada, pero la morena se lo impide.
–No, Percy, necesitamos entretenimiento. Dejemos que se queme.
–Como quieras. –Le dice el rubio a la morocha encogiéndose de hombros, mientras Paris grita con desesperación, el fuego ya ha llegado a su cuerpo y pronto se convierte en una antorcha humana y no soporto ver más la escena y salgo de la Sala, escucho que alguien viene detrás de mí. Cuando estoy en el pasillo cubro mi rostro con mis manos y me siento en el suelo con la espalda recargada en la pared y empiezo a llorar. Siento que alguien se sienta junto a mi y pasa un brazo por mis hombros. El inconfundible olor de mi novio llega a mi nariz y yo recuesto mi cabeza en su hombro mientras lloro, escucho pasos rápidos por el pasillo y después escucho a Haymitch.
–Quédense aquí, les avisaré cuando puedan volver.
–Gracias Haymitch. –Le contesta mi Peeta a nuestro mentor. Yo sigo llorando, mientras escucho que Haymitch entra en la Sala y recuerdo a Paris arder en llamas y no puedo evitar compararla con mi hermana, casi eran de la edad, ¿cómo pueden ser tan crueles Krystal y Percival? Sigo llorando y parece que siento de nuevo mi piel arder, Peeta acaricia mi cabeza y mi brazo, se que para él también fue difícil ver a esa niña arder, el vio también a mi patito tener un final igual a ese, también sintió el fuego en él, no hay nadie que entienda como me siento en este momento como él me entiende, pero tengo que ser fuerte, esto apenas comienza y yo sola me metí en esto, así que Katniss sé fuerte y deja de llorar. Dejo de llorar y quito mis manos de mi rostro, intento secar mis lágrimas con mis manos, mi chico me da un pañuelo de tela y limpio mi cara. Se lo devuelvo.
–Gracias amor.
–De nada ¿ya estás más tranquila?
–Si, perdón.
–No tienes de qué pedir perdón, a todos nos afectó ver esa escena pero sabemos porque no podías seguir viendo esa escena.
–Gracias por estar conmigo Peeta.
–No es nada, sabes que es lo que quería desde hace años, estar contigo en las buenas y en las malas.
Y sus palabras me hacen sentir tan bien que lo beso, me corresponde y no paramos hasta que los pulmones reclaman su oxigeno, seguimos sentados en el suelo, abrazados y escuchamos que alguien sale de la Sala y su caminar por el pasillo. Nuestro mentor se detiene junto a nosotros y nos dice: –Vamos adentro, ya es media noche, anunciaremos a los caídos y Plutarch asignará las guardias nocturnas.
Haymitch nos ayuda a levantarnos y caminamos de regreso a la Sala, justo cuando el himno de Panem está sonando, termina y Beetee hace aparecer en el cielo los rostros de los primeros 11 caídos, más de un tercio de Tributos muertos en el primer día. Después de mostrar el rostro de los 11 niños aparece el sello del Capitolio y la Arena vuelve a quedar en penumbras.
Plutarch empieza a dar indicaciones.
–Bien, hemos comenzado muy fuerte, sin duda hay que contener a Percival y Krystal o esto no durará y estaremos en problemas, ya mañana se encargarán de ello Katniss y Peeta con algunos mutos, bien, la mayoría está durmiendo y nosotros también necesitamos dormir por lo que las guardias nocturnas quedan de la siguiente manera: Haymitch, Johanna y Enobaria harán la guardia de esta noche, cada uno tendrá un descanso de una hora de manera intercalada, primero la señorita Mason de la 1:30 a las 2:30, después la señorita Prince de 2:30 a 3:30 y finalmente Haymitch de 3:30 a 4:30, tendrán un par de avox por si necesitan algo de beber o comer durante toda la noche, el resto llegaremos aquí a las 7:00, el día de mañana la guardia nocturna será Beetee, Peeta y Katniss. Es todo y cualquier novedad comunicarla por la agenda, buena guardia y buenas noches a todos.
El Vigilante en Jefe sale, Peeta y yo nos despedimos de Haymitch y vamos a nuestra habitación.
A veces siento que Katniss llora demasiado, pero oigan ¿ustedes no llorarían todo el tiempo también si hubiesen pasado por todo lo que ella paso?
Karly 🖤
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro