Ian se acerco deprisa.

— ¿Qué le sucedió?

— Se termino de romper la costilla.

— ¡Traigan una de las camillas! —ordeno Ian a las personas que trabajaban con él— Te llevare a donde trabajaba mi madre, hay varios aparatos, alguno te debe ayudar.

Unos señores llegaron con una camilla y subieron a Drake con cuidado, Ian les ordeno que lo llevaran al laboratorio de su madre.

— Solo puedes entrar tu —le dijo Ian a Paz.

— Necesito a alguien que me ayude, ¿Puede venir Mandy? —el moreno miro a la rubia poniendo colorado y termino por aceptar.

Las chicas siguieron a los sujetos que transportaban a Drake hasta lo mas profundo de la cueva, siguiendo por un túnel estrecho hasta llegar a una puerta cerrada. Ahí Ian saco una llave y los dejo pasar a lo que era una especie de laboratorio.

A diferencia de sus pisos y paredes de piedra, habían varios equipos modernos que paz reconocía de la cúpula, era una caverna bastante grande y debía estar ubicada debajo de todas las demás.

Pusieron a Drake en una camilla grande que había en la habitación.

— Puedes sentirte libre de buscar lo que necesites —le indico Ian quien se mantuvo al margen de la situación.

La organización no era muy complicada así que Paz busco con rapidez entre unas gavetas hasta conseguir instrumentos de doctor, comenzó a estudiar lo que había en su interior. Tomo una bandeja y puso todo lo que creía que funcionaria en ella.

Corrió hacia donde estaba Drake, tomo un estetoscopio y se lo puso a toda prisa; ausculto los pulmones para ver si había entrado liquido por alguna posible perforación, pero todo se escuchaba en orden.

— ¿Qué piensas hacer? —preguntó Mandy

— Voy abrirlo y acomodar la costilla —Drake abrió los ojos como platos y miro a Paz asustado.

— No estás hablando en serio.

— Nunca bromeo cuando se trata de mi trabajo, Drake —el chico comenzó a negar con la cabeza retorciéndose en la camilla— No veo ninguna anestesia ¿Hay valerianas aquí? —Mandy se encogió de hombros

— No —respondió Ian.

— No quiero —dijo Drake

— ¿Vas a esperar a que te perfore un pulmón? —dijo Paz

— Tu dijiste que solo tenía que reposar.

— Si, pero no lo hiciste, ahora la costilla está fuera de su lugar —el chico cerro los ojos entregándose a su desgracia sin agregar más nada.

Paz rompió su camiseta con unas tijeras mientras Mandy desinfectaba los instrumentos con alcohol. Mandy paso unas gasas por el cuerpo de Drake y todo su torso para limpiarlo.

— Muerde esto —le dijo Paz a Drake mientras le colocaba varias paletas de madera en la boca—, si sientes mucho dolor, muerde duro, si quieres puedes sujetar las manos de Mandy también —el chico asintió con el rostro tenso y los ojos cerrados con fuerza.

Ambas se colocaron los guantes y se colocaron a cada lado de Drake. Paz tomo el bisturí en una inhalación profunda para relajarse y poder concentrarse.

En un grito ahogado de Drake, Paz corto la piel, luego ordeno a Mandy que tomara el retractor para que separara los bordes de la incisión y ella poder trabajar, le indico cual era el instrumento y la chica lo tomo temblando, jamás había visto tal cosa.

Mientras Mandy mantenía la herida abierta mostrando el interior, paz comenzó a cortar tejidos y músculos buscando su camino hacia las costillas.

— Mandy necesito que limpies la sangre con las gasas —temblando, intento limpiar la sangre por donde iba pasando el bisturí sin ser muy eficaz.

Paz sabía que en esas condiciones de trabajo sería imposible conseguir una operación limpia, así que hizo lo posible porque sus manos nadaran entre la sangre correctamente. Llego a la costilla y utilizo su sentido del tacto para sentir la fractura, efectivamente una de ellas se había roto por la mitad y se había desplazado un poco. Con sus dos manos acomodo la costilla rota en su lugar acompañado de un grito ensordecedor de Drake y el sonido de las paletas de madera rompiéndose.

El chico movió las manos con desespero intentando encontrar algo de que sujetarse, agarro las orillas de la camilla mientras gritaba para sus adentros.

Luego de que Paz se aseguro de que la costilla estuviera en el sitio correcto, echo un vistazo al laboratorio, no veía nada con que poder fijar la costilla en su sitio; además de que Drake seguía despierto y llorando del dolor, sería una crueldad atornillarlo en esas condiciones.

Drake estaba cada vez más pálido y seguía perdiendo sangre, tomo un laser para cauterizar la herida y le indico a Mandy que soltara el retractor, luego procedió a suturar y limpiar la herida.

— Viste, solo eran unos minutos —dijo Paz como si hubiera sido poca cosa.

Drake no dije nada, se quedó jadeando y con los ojos cerrados manteniendo el control, aferrándose a la poca fuerza que le quedaba.

Ian se acerco a las chicas y comprobó el estado de Drake.

—Les diré a los chicos que lleven a Drake a mi cuarto y así pueda dormir en mi cama.

— Es muy amable de tu parte —le dijo Mandy sonriéndole.

— Mandy ve a buscar a los chicos para que se lleven a Drake —le dijo Paz.

La chica asintió y salió.

Paz encontró en la habitación un compartimiento con varios frascos que parecían medicina.

— Toma esto —dijo acercándose a Drake— es un antibiótico.

Ayudo a Drake a levantar la cabeza, le dio las pastillas en la boca y lo volvió a colocar con delicadeza en la camilla

— Por favor no hagas ningún tipo de esfuerzo, cualquier movimiento podría mover la costilla, incluso si no te mueves corres el peligro de que se salga de su lugar.

— Gracias.

— No hay nada que agradecer, es mi trabajo.

Drake le quiso decir que lamentaba a ver sido tan terco y antipático pero las palabras no le salían.

William y Max llegaron para llevarse a Drake, con el cuidado que exigía Paz, subieron al chico nuevamente a la camilla portátil y lo subieron al cuarto de Ian.

Siguiendo el pasillo donde Ian les había explicado que estaban las habitaciones, Paz, William, Max y Mandy llegaron al cuarto del muchacho, simple como la de su padre solo contaba con una cama y un escritorio. Lucas los esperaba ahí.

— Puedes quedarte aquí mientras te recuperas —le dijo Ian.

— Gracias.

— No te preocupes, creo que es una forma de disculparme por haber sido un poco prejuicioso con su llegada, y no haberles creído cuando se quejaron del sol —Ian los miro a todos convirtiéndolo en una disculpa general, se detuvo un rato en Mandy quien le ofreció una sonrisa.

— Muy bien —dijo Lucas sonriente— ¿Qué tal? ¿Te dolió?

— Que pregunta Lucas —regañó Mandy

— Solo trato de bromear para que se sienta mejor, cálmate princesita de las montañas.

Mandy se puso roja y abrió los ojos de par en par, no creía que Lucas fuera capaz de hacer ese tipo de bromas delante de Ian, todos hicieron una mueca para no reír, incluso Drake, el único que no entendía de que hablaban era Ian.

— Viste, lo logre, ¿Qué sería de Drake sin mí?

—Tendría una vida más tranquila, seguro —dijo Drake

— Y aburrida.

— Bueno, el hecho de que Drake este en reposo no quiere decir que todos lo estén, ya va a ser la hora de cenar —se quejó Ian.

Y así de fácil boto a todos de su cuarto, comenzando a salir uno por uno.

— Espera Paz —dijo Lucas— ¿Drake no va a necesitar de una enfermera?

— Pues si, Drake no debería hacer ningún movimiento, necesitara de alguien que lo ayude a comer, bañarse, etc. Además hay que estar pendiente de si tiene fiebre, o un cuadro clínico que refleje que tenga alguna infección.

— Y si se pone grave alguien va a tener que atenderlo ¿no?

— Si.

— En ese caso la mejor opción serias tu, eres la mas capacitada, no tienes problema con ello ¿o si? —Drake cerro los ojos y suspiro «Se aprovecha de cualquier situación ¡no lo puedo creer!»

— Este... Bueno, si, aunque Mandy también tiene esos conocimientos ¿No? Y tiene mas confianza con Drake —la verdad es que Paz seguía un poco molesta por como le había hablado antes.

— ¿Yo? Bueno si... —Lucas la miro fulminante— ¡No! Digo no... yo solo se poner compresas en la frente, no sabría que hacer si Drake se complicara.

— Bueno, si Drake no tiene problemas... —dijo Paz

— Claro que no ¿Verdad? —se apresuro Lucas. Drake suspiro

— No, no tengo ninguno.

— Perfecto, ya es un hecho —dijo Lucas contento—. Bien, nos vamos a trabajar mientras Drake descansa y Paz lo vigila.

— No es necesario que alguien este con él las 24/7 —agrego Paz— vendré cada cierto tiempo a comprobar su estado.

— Bueno —dijo Lucas decepcionado.

— Bien, por ahora descansa Drake, no te muevas, no te sientes, no respires ¿Si? —Drake asintió frustrado y todos salieron dejando a Drake solo en la habitación con Ian.

La cena estaba lista y algunas personas se iban a bañar primero; Paz se iba a bañar para luego llevarle la cena a Drake. Fue una sorpresa cuando supo que todas las personas se bañaban juntos y...desnudos.

— ¿¡Todos se bañan juntos!? —preguntó Paz a Mandy.

— Así me explicaron, aquí todos se tienen mucha confianza al parecer

— Yo iré cuando haya solo mujeres —agregó Kristina.

— Ni siquiera así —dijo paz

— Al parecer eso es lo que harán, se bañaran primero los hombres y luego las mujeres —comentó Mandy

— No hay problema entonces —concluyó Kristina

— Supongo que entre mujeres no hay de que preocuparse, además es un lugar oscuro, no se vera nada del otro mundo —dijo Mandy.

Paz no agrego mas nada, tenia muchos complejos para agradarle la idea.

Mandy y Kristina decidieron bañarse antes de comer, Paz esquivo la propuesta diciendo que debía ver a Drake, se despidió de las chicas y fue al comedor, tomo su cena y la de Drake y se fue al cuarto de Ian.

Al entrar Paz, Drake miro a la puerta a ver de quien se trataba.

— Hola —dijo la chica.

— Hola.

— Debo admitir que estoy impresionada, pensé que te encontraría haciendo lagartijas o que se yo.

— Ganas no me faltan.

— Lo se, es un fastidio —Paz arrimo hacia la cama el escritorio de Ian para colocar la comida, Drake hizo para sentarse, pero Paz lo detuvo al instante—. No, no, no te muevas —Paz sostuvo la cabeza de Drake y doblo la almohada para que estuviera mas inclinado, Drake suspiro.

— Esto es humillante.

— No lo es, incluso los mas fuertes pueden lastimarse y estar en estas circunstancias —dijo sentándose en la cama.

Con el dorso de su mano midió la temperatura de Drake en la frente y en el cuello.

— ¿Cómo te sientes?

— Me siento adolorido y débil, pero estoy bien —Paz quito la venda que le había colocado luego de la operación para ver la herida.

— Tiene buena pinta, siempre has sido un chico sano ¿No? —asintió— Se nota, esto es un antibiótico, tómalo cada 6 horas —dijo colocando el frasco de medicina en la mesa—. Mandy vio unas hierbas que serian ideales para ti, dijo que te traería un té mas tarde —Drake asintió nuevamente mirando fijamente a Paz —¿Qué pasa?

— Nada, estoy acostumbrado hacer mis cosas solo, esto es denigrante —dijo apartando la mirada.

Hay mejores formas de desviar un tema Drake, pensó para si mismo.

Paz le ofreció un bocado de comida. El chico abrió la boca de mala gana.

— Ni cuando era un bebé mi mama me daba comida en la boca —Paz sonrió.

— Son casos extremos Drake, no puedes hacer nada —y le ofreció otro bocado riéndose.

— Lo estas disfrutando ¿No?

— Por supuesto, creo que ya he dicho que me encanta ser doctora.

— No me refería a eso exactamente.

— Se que no —dijo con una sonrisa.

— Lamento no hacerte caso antes, créeme, así como rechazar tu ayuda.

— Wao, no me esperaba eso de ti.

— ¿Cómo así?

— Por tu forma de ser tan... bueno, no pensé que pidieras disculpas.

— Tal vez soy un poco malhumorado, pero reconozco cuando me equivoco.

— Vaya, Wang jamás me pediría disculpas, aunque supiera que esta equivocado.

— ¿Quién es Wang?

— Es un "amigo", me lo recuerdas a veces.

— ¿Es gruñón y callado como yo?

— De hecho todo lo contrario, nunca se calla y siempre anda feliz por la vida

— Entonces ¿Por qué te lo recuerdo? —obviamente Paz no le iba a decir que le parecía igual de atractivo.

— Hoy estas muy conversador ¿eh? —Drake sonrió

— Si soy sincero ya estaba extrañando la compañía de alguien —Paz aun no respondía la pregunta— Entonces... ¿Wang? —Paz suspiro.

— Creo que es la forma en la que los dos logran sacarme de quicio, aunque de formas diferentes.

— ¿Yo te saco de quicio?

— Solo cuando te pones terco jeje —Paz soltó una risa nerviosa

Ya me va a gritar, pensó.

— Perdón —eso no se lo espero.

— No tranquilo, es tu forma de ser.

— Pero no siempre esta bien, se que a veces debería ceder un poco.

— Bueno ya no importa, aunque me impresiona que reconozcas tan abiertamente tus debilidades —Paz le dio otra cucharada de comida.

— Lucas me ha ayudado mucho con eso —Paz volvió a ofrecerle otra cucharada— ¿No hay una forma de hacer esto menos ridículo?

— Aquí viene el avión —dijo haciendo sonidos referentes— permiso para aterrizar —Drake frunció el ceño como nunca.

— Prefiero morirme de hambre —dijo rechazando la comida.

Paz no pudo contener la risa, apenas respiraba cada cierto tiempo para no ahogarse, logro contagiar a Drake, aunque luego se quejo del dolor por reírse.

— Lo siento —dijo todavía riendo

— No es tu culpa, si no fuera tan terco estaría mejor —Paz asintió con energía.

— ¿Lucas no ha venido a visitarte?

— No, eres la primera.

— Seguro no tarda en llegar, debe estar cenando o bañándose, tu también deberías recibir un baño.

— ¿Y como me baño? Si ni me dejas comer solo.

— Alguien tiene que bañarte —Drake la miro fijamente y con el cejo fruncido.

— No —Paz soltó una risa

— No tengo que ser yo si es lo que piensas, podemos decirle a Lucas.

— Eso no me tranquiliza.

— ¿No es tu mejor amigo?

— ¿Te dejarías ver desnuda por tu mejor amiga así como así? —Paz recordó que ni siquiera quiso bañarse con las otras mujeres por sus complejos, pero Drake no tenia nada de que avergonzarse, todo lo contrario.

— Ustedes son hombres, es diferente ¿no? Usan los orinales delante de los otros —Drake no sabia muy bien que eran orinales pero entendía a lo que se refería

— No es lo mismo a que te toquen todo el cuerpo —Paz volvió a reír imaginando la escena.

— Que bueno verlos contentos —Lucas apareció en la habitación con sonrisa picara.

— Estaba diciéndole a Drake que tu tienes que bañarlo —la sonrisa de Lucas se volvió maliciosa.

— Con mucho gusto —dijo mordiéndose un labio

— Prefiero estar cochino —intervino Drake

— ¿No confías en mi?

— No.

— ¿Tal vez prefieras que las manos experimentadas de Paz te bañen? —los rostros de Drake y Paz se pusieron rojos, aunque por razones diferentes.

— ¿Qué quieres decir con experimentadas? —dijo enojada Paz

— Bueno, que has atendido a muchos enfermos, sabes como bañarlos y eso.

— Ah eso, bueno si, yo no tengo ningún problema —dijo Paz relajándose, Drake se puso mas rojo y la sonrisa no le cabía en el rostro a Lucas—, te propuse a ti porque pensé que seria mas cómodo para Drake.

— ¿Qué dices Drake? —preguntó Lucas lanzándole una mirada de complicidad.

— Prefiero un hombre —la decepción apareció en la cara de Lucas.

— No siempre tendrás la oportunidad de que una mujer se te ofrezca ¿Sabes? —Drake no aguantaba la vergüenza pero a Paz solo le dio risa ver la incomodidad del chico— Yo no tengo problema con que me bañes, Paz —la sonrisa se le borro del rostro a la chica mientras sentía que la sangre se acumulaba en sus mejillas.

— ¡No seas tonto! Tu no estas enfermo.

— Puedo fingir ¿O solo quieres bañar a Drake? —dijo con mirada picara

— ¿Qué insinúas? ¡Es cuestión de vocación!

— Ya, ya, solo bromeaba

— Bueno, terminare de comer en el comedor —Paz tomo su plato de comida y salió sin demora de la habitación. Drake miro enojado a Lucas.

— ¿Es en serio?¿Que me bañara?¿¡Que te bañara!?

— Solo quería ver que decía

— ¿Querías ver si también quería bañarte?

— ¿Estas celoso?

— Tss, claro que no.

— ¿Entonces qué? ¿Te baño o qué? —Lucas se mordió un labio comí si lo deseara.

— Ni modo —dijo Drake suspirando.

Paz termino de comer y fue a la cocina a lavar su plato. Luego de la comida todos debían lavar sus propios platos en la cocina, habían dos grandes recipientes de agua, uno con jabón y otro solo con agua limpia.

— Aquí estas —apareció Mandy—, Lucas quiere que le expliques como va a bañar a Drake.

— Dile que tome agua en un recipiente, y con un pañuelo lo va limpiando, nada del otro mundo, pero debe tener cuidado con las costillas.

— ¿Y tu no te vas a bañar?

— Si, ya iba a eso.

— ¿Quieres que te acompañe?

— No, esta bien, sinceramente espero que este solo y poder bañarme en la privacidad.

— Pero no es recomendable estar completamente solo, el piso es resbaloso y la corriente es un poco fuerte.

— Bueno... estaré bien.

— No seas tonta, te acompaño, además te puede defender de un pervertido.

— No es como si un pervertido se fuera a fijar en mí —Mandy giro los ojos y la tomo de la mano para ir a la cascada.

El lugar parecía estar solo, Paz dejo la ropa, la toalla y el jabón que le había dado Mandy en el piso, con vergüenza comenzó a desvestirse pero noto que Mandy miraba hacia la entrada como vigilando, así que se apresuro a quitarse toda la ropa rápido y entrar en el agua de golpe.

— ¡Esta muy fría! —Paz se hundió hasta que el agua le cubrió hasta los hombros.

— No debiste entrar de golpe.

— Es que quise entrar antes de que alguien llegara.

— Bueno, ahí tienes las consecuencias ¿Por qué te da tanta vergüenza? Se que es incomodo, pero no para tanto —Paz desvió la mirada tapándose aun mas— ¿Tienes complejos? —Paz guardo silencio y tomo el jabón, la conversación era mas incomoda a que la vieran desnuda— Perdón por las preguntas, es que no entiendo, eres tan bonita y sin embargo te da tanta pena.

— ¿Yo, Bonita?

— Por supuesto ¿No me digas que te sientes fea?

— Es lo que me han dicho toda la vida.

— Pss seguro fueron unos chicas envidiosas.

— Envidiosas de mis logros académicos, no de mi físico, también los chicos lo decían.

— ¿Pero son ciegos o que?

— Es que no has visto a las otras chicas de la cúpula, van a los salones de belleza, se maquillan, se pintan el cabello, las uñas, usan cremas y esas cosas, yo ni siquiera tengo tiempo para peinarme, mucho menos para maquillarme y tapar mis pecas y las manchas que me dejo el acné.

— Ahí esta, son envidiosas porque eres bonita sin hacer todos esos rituales, solo tienes que soltarte el cabello, y por las pecas no te preocupes, te dan estilo, y te puedo dar mi receta secreta que uso para las manchas del sol, un día seré millonaria con ella.

— Gracias Mandy, a ti no te hace falta nada, tu cabello es hermoso, tu piel, tu cuerpo, eres sin duda la mas hermosa de todas las chicas de aquí.

— Oh Basta, imagina lo linda que quedarías en mis manos.

— Eso seria un milagro.

— Te demostrare que no, tienes un rostro fino y una hermosa silueta que te da elegancia, solo te falta aprender a lucirla.

— ¿Hermosa silueta? Wang me describía como un esqueleto andante.

— ¿Qué? Pero si estas muy bien proporcionada.

— Es que me estas comparando con los de tu pueblo que están un poco desnutridos, sin ofender —Mandy hizo un gesto de que no importaba—; en la cúpula tienes que tener piernas y gran trasero para entrar en los estándares.

— ¿En serio? Y yo que tenia envidia de tu delgada silueta.

— Pues no la tengas, en la cúpula serias la sensación.

— Pues tu veras, déjalo en mis manos y ese tal Wang se arrepentirá de lo que dijo.

— Lo dudo mucho, jamás lo hace.

— Es para que te hagas una idea de lo hermosa que quedaras.

Paz termino de bañarse y salió de la cascada con mas confianza, Mandy le dio una sonrisa y silbo como halago.

— Basta, estas exagerando

— Espera y veras

Paz se vistió con la ropa que le dieron, la camiseta se ajustaba a su delgada cintura y el mono ancho daba la impresión de que tenia mas caderas y piernas.

— ¿Te gusta? —le preguntó Mandy.

Paz se miro en el reflejo del agua, era diferente a su estilo de ropa holgada y cómoda, pero le gustaba la imagen que proyectaba.

— Si, gracias —Paz tomo las cosas para salir.

— Espera, espera —le dijo Mandy. Se detuvo detrás de Paz y soltó el moño que recogía su pelo— ¡Por dios! Tienes el cabello muy largo.

— Si pero no lo sueltes, es una jungla sin control.

— Esta un poco seco, pero nada que no se arregle con mi aceite secreto —Paz rió— pero tienes razón, te echare aceite y lo amarraremos por ahora, será el arma secreta cuando llegue el momento adecuado.

— ¿Ah?

— Tal vez si algún día, no lo se... llegas a tener una cita, seria el toque perfecto —obviamente Mandy se refería a Drake, pero tenia que disimular.

— ¿Una cita?

— Si, ya veras como los chicos caen rendidos a tus pies.

— Lo dudo, pero gracias por los ánimos... gracias por todo, tu y Lucas han sido muy amables conmigo.

— No hay de que —Mandy pensó que era el momento ideal para apoyar a su amigo—. No olvides a Drake, también se ha preocupado por tu bienestar desde que llegaste, solo que no le gusta mostrar su lado sensible.

— Si, lo tiene muy en el fondo.