𝐂𝐀𝐏Í𝐓𝐔𝐋𝐎 21
Habían pasado dos meses desde que las cosas habían empezado a mejorar.
Hace dos meses que no recibía ninguna carta de Michael, ya no más llamadas, ni cajas extrañas. La relación entre Harry y yo seguía igual, solo éramos amigos, tal vez una que otra vez nos besábamos, pero no teníamos un título oficial.
Tal vez no necesitábamos un título.
Él provocaba sensaciones en mí que no había sentido en toda mi maldita vida. Era como si un huracán me hubiera arrasado por completo, dejándome como una persona nueva.
Harry era aquella persona con la que podía ser yo misma. Aquella persona que hacía que mi existencia no fuera tan mierda.
La vida me había golpeado tantas veces, me había dejado destruida, sin esperanzas. Sentí tantas veces que llevaba la carga del mundo sobre mis hombros, era un pesar indescriptible. Pero él solo se presentó a mi vida y la cambió por completo.
Faltaba solo una semana para que el receso invernal comenzara. Estaba entusiasmada, muy entusiasmada, ya no tendría que hacer tareas, trabajos ni exámenes. Además, cada vez faltaba menos para el fin de las clases. Es decir, que faltaba poco para empezar la universidad. Algo realmente emocionante, pero que a la vez me ponía muy nerviosa.
Savannah y yo estábamos en su casa, mientras planeábamos a donde ir de vacaciones. Este año, habíamos decidido ir de vacaciones los cuatro: Noah, Harry, Savannah y yo.
Hace dos años que no salía de mi pequeño pueblo, no me sentía segura y cada vez que salía de mi casa, el miedo invadía mi cuerpo de tal manera que pensaba que ese día iba a morir.
No me sentía segura en ningún lugar, ni siquiera en mi propia casa.
—¡Hay demasiadas cosas que hacer! —gritó Savannah apoyando su cabeza sobre la mesa—. Tengo que planear las vacaciones y el baile. ¿Cómo haré eso?
—Si estas tan estresada deja que alguien más planee el baile —propuse.
—¡Claro que no! —respondió exaltada—. Desde pequeña ha sido mi sueño planear el baile de fin de año, así que nadie va a robarme este puesto.
—Tranquila —dije levantándome de la silla y elevando las manos—. Si quieres, más tarde te ayudo a planear el itinerario de las vacaciones.
—¿No vas a quedarte? —preguntó haciendo puchero.
—No. Voy a ir a ver a Rydel, necesito ir a verla después de todo lo que sucedió.
—Ha pasado mucho desde que la viste.
—Exactamente tres meses —indiqué con una leve sonrisa—. Es muy difícil ver a alguien que amas, alguien que es como tu hermana, postrada en una cama sin saber si algún día volverá.
—Va a despertar, Addi —dijo acercándose a mí para abrazarme—. Solo ten esperanzas.
—Las tengo —respondí separándome de ella—, pero con la situación de Michael, dudo que duren mucho.
Mis esperanzas comenzaban a agotarse y no sabía cuánto dudaría este período de felicidad.
[ ... ]
El hospital.
Dicen que el cementerio es el peor lugar para ir a visitar, tal vez lo sea, pero creo que no hay nada peor que saber que en los hospitales están aquellas personas que luchan por sus vidas todos los días y ni siquiera sabes si sobrevivirán.
Estaba sentada en uno de los asientos afuera del cuarto en donde se encontraba Rydel, aún no comenzaba el horario de visita.
Era realmente difícil verla en ese estado. Saber que estaba entre la línea de la vida o la muerte, preguntándome cada día si iba a volver a despertar, y si lo hacía como es que reaccionaría a la situación de que estuvo en coma dos años.
Me preguntaba si al despertar olvidaría todo lo que sucedió, si me perdonaría. Lo dudaba, pero deseaba que lo hiciera.
Una de las enfermeras salió de la habitación de Rydel y me indicó que pasara.
Allí estaba, igual que en los últimos dos años, inmóvil sin saber que pasaba a su alrededor. Acerqué lentamente una silla al lado de su camilla para estar más cerca de ella.
Había leído en muchos libros que las personas en coma podían oír lo que pasaba a sus alrededor. No sabía si era cierto, pero no perdía absolutamente nada con intentarlo.
—Hola —saludé observando cada facción de su rostro—. Hace mucho que no te he venido a visitar, pero las cosas se pusieron complicadas más de las que te podría imaginar.
A pesar de que sus heridas habían sanado, algunas de ellas habían dejado cicatrices pequeñas, pero al fin y al cabo cicatrices que quedarían marcadas en su piel.
A veces quería contarle todo lo que pasaba, de que Michael había vuelto, y que las cosas se habían complicado.
—Conocí un chico —susurré sonriente—. Se llama Harry; Harry Reynolds. Lo conozco hace nueve meses. Solo somos amigos, aunque creo que me gusta un poco; bueno en realidad me gusta mucho, demasiado.
¿Qué clase de hechizo lanzaste en mí, Harry Reynolds?
Él solo apareció y derribó las murallas que creé alrededor de mi corazón, cambiando mis ideales.
Aquel chico que a veces podía ser un poco irritable, me tenía completamente loca.
—Jamás pensé que podía volver a enamorarme. Lo conocí en un castigo escolar el primer día de clases. Si despiertas sé que te agradará, creo que hasta podría convertirse en tu mejor amigo —dije sintiendo como las lágrimas mojaban mis mejillas.
Carajo, odiaba llorar.
¿Por qué la vida tenía que ser tan injusta? ¿Por qué ella?
—Por favor, Rydel, despierta. Te extraño demasiado, y la culpa no deja de consumirme. Están pasando cosas malas y tengo miedo de que alguien vuelva a salir herido por mi culpa. —Mis manos temblaban, pero aun así tomé su mano entre las mías—. Creo que a pesar de que este año ha sido una mierda, no fue tan malo. Conocer a Harry fue lo mejor que me sucedió después de lo de Michael. Me hace sentir segura y cada vez que estoy con él todo el dolor y el miedo desaparecen.
Miré el reloj que estaba en la pared, sabía que era hora de irme, pero no quería.
Vivimos en un mundo perverso y oscuro, en donde cada vez más las cosas empeoran.
Solo pensar por un segundo que en algún otro lugar en el mundo alguna niña, adolescente o mujer está siendo torturada y asesinada sin ninguna razón.
Muchas mujeres deben aguantar el maltrato físico y psicológico por parte de sus parejas, porque nadie las escucha y solo hacen algo cuando es demasiado tarde y han acabado con sus vidas.
Adolescentes y los adultos intentan quitarse la vida por el hecho de que sus vidas son pesadillas vivientes y es ahí cuando me pregunto:
¿En dónde está la empatía por el otro?
¿Dónde está la conciencia de que la otra persona es un humano y qué siente dolor físico y emocional?
A veces, creo que los humanos son algún tipo de monstruo indefinido, un monstruo con dos caras, una buena y una mala, pero una de esas caras siempre prevalecerá, y por lo que veo la cara mala está ganando.
Vivimos en un mundo en donde hay guerras, asesinatos, robos. Y lo más triste es que esto no va a acabar nunca, va a seguir hasta el fin de los tiempos.
Es como un círculo vicioso de pura maldad. Pensar que unas simples palabras, una simple opinión diferente a las demás puede desencadenar caos; puede terminar con la vida de alguien. Sé que suena exagerado, pero es la verdad.
Es por eso que la mayoría de las personas sufren depresión o estrés; es por eso, que muchas mujeres y también hombres no pueden amarse. En donde el físico es lo más importante.
¿Cómo esperamos que alguien nos ame, sino nos tenemos amor propio?
Tal vez por eso el ser humano siente un vacío. Creo que jamás estaremos conformes con nosotros mismos, siempre intentaremos ser perfectos y no para nuestro bien, sino para el de los demás.
Nos dejamos llevar por la opinión de los demás, cuando nos debería importar una mierda. Porque al final ellos también son seres humanos y en algún momento cometerán errores, no podemos pretender ser perfectos porque no lo somos y jamás lo llegaremos a ser.
Solté lentamente la mano de Rydel y acomodé la silla nuevamente en su lugar. La observé una vez más y me prometí que jamás perdería la esperanza de que algún día pudiera despertar, incluso cuando todo se venga abajo.
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¡¡Hola hermosuras!!
¿Cómo están?
Yo estoy hiper mega feliz porque... ¡YA SON 1.8K DE LEÍDO Y 667 VOTOS AHHHHHHH!
Muchas gracias por todo su apoyo
Creo que debe ser muy difícil ver a una persona en ese estado y es por esa razón que quise plasmar algunos sentimientos y emociones que esta afrontando Addison por esta situación
¿Qué les pareció la canción?
Yo lloré, realmente me llegó hasta el corazón. Les recomiendo ver el vídeo original es un poco fuerte, pero se los recomiendo.
Por lo que se Lady Gaga (como muchas artistas mas en la industria musical) paso por un abuso de joven lo cual trajo muchos problemas psicológicos a su vida. Y realmente la admiro por que sigue adelante y no es nada fácil hacerlo.
Nunca se queden calladas, siempre habrá alguien dispuestos a ayudarlas. Y aunque a veces parezca, el silencio solo es el camino hacia la autodestrucción de uno mismo. Sé que cuesta, y que no es algo que se olvide, pero uno puede superarlo.
Fuerza a todas las mujeres que pasaron por una situación igual o similar ♥
También quería comentarles que se me ocurrió hacer una historia sobre Michael, pero quería preguntarles si les gustaría.
En esta ocasión este capítulo se lo voy a dedicar a un persona que no esta desde el principio, pero de igual manera su apoyo parece como si lo hubiera estado. Es una persona que se gano un lugarcito en mi corazón y que la quiero mucho.
AYLIN_MKLS Este capítulo esta dedicado a vos belleza.
Espero que le haya gustado el capítulo.
No se olviden de votar o deja un comentario que es gratis JAJAJAJA y me alegran el día.
Bueno pronto estaré subiendo el próximo capítulo.
Nos leemos prontos!!
Besos 💞
Instagram: skar_roma
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