Obra: Twisted Wonderland [Juego]

Ship: Rollo Flamme & Malleus Draconia

Tema: Llegó el bebé.

Título: Cuidados.

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Fue toda una sorpresa para Rollo que fruto de su relación con Malleus, este resultara embarazado, mayor fue su asombro al saber que no sería un embarazo normal, ahora debían cuidar de un huevo juntos.
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La relación de Rollo y Malleus no era ordinaria, aparte de sus complicados temperamentos también debían lidiar con las diferencias propias de sus naturalezas, detalles que no les impidió ceder a sus deseos y caer en la tentación de poseerse físicamente hasta saciarse por completo. Momentos de placer en los que el fastidio y afecto parecían formar una extraña combinación que hacía de cada encuentro clandestino tan excitante, deleitable y algo adictivo.

Un apasionado romance que se hubiera mantenido en secreto de no ser porque un día del interior de Malleus un pequeño huevo salió, una gran sorpresa para sus más cercanos vasallos, incluso para si mismo, ya que no tenía idea de que su cuerpo era capaz de dar vida de esta manera. Después de toda la conmoción, Malleus no tuvo más opción que revelar a Rollo lo que habían creado juntos. El joven humano al ver una pequeña silueta reflejarse en ese huevo que brillaba en un tenue destello entre verde y rojo, entendió que no era mentira, una criatura crecía en su interior.

A pesar de lo que veía, no podía creerlo, se negaba a admitir que tendría un hijo con Malleus Draconia, menos de esta inusual forma. Después de unos minutos resignado tuvo que aceptar esta verdad, tal vez la mirada furiosa del hada dragón influyó un poco en su convencimiento. Así ambos aceptaron la responsabilidad de sus actos, llegando al acuerdo de cuidar juntos de su huevo, darle afecto sincero, atención y magia que era esencial para su desarrollo.

—Hoy le toca a Flamme dormir con el bebé.

—¿Qué? Ya me tocó pasar todo el día con él, tengo tareas pendientes.

—Puedes hacer tus tareas mientras mantienes cerca al bebé.

—No es un bebé, es un huevo.

Replicaba malhumorado Rollo en esa nueva discusión que tenía con Malleus, quien abrazando a su preciado huevo lo saludaba esa noche en la habitación del presidente de Noble Bell College.

—Dentro del huevo hay un bebé, nuestro bebé.

—Como sea, tenemos un cronograma y hoy... —Decía Rollo revisando entre sus papeles el horario que habían acordado para cuidarlo esa semana—...Me toca cuidarlo a mi.

—Te lo dije, solo pasaba a darle las buenas noches.

—A ti te gusta desvelarte, ¿por qué no te haces cargo?

—Tú también te desvelas, ese no es el punto, nos estamos preparando para cuando nazca. Lilia dice que con un recién nacido nos esperan muchas noches de desvelo.

En un suspiro Rollo lo escuchaba, pensaba en lo complicado que sería criar un bebé, mucho más si este era un pequeño dragón. Por un instante se desanimó al darse cuenta del giro que estaba dando su vida, ¿acaso este era un castigo por su indecencia? Definitivamente no debió ceder a la tentación, pero su mayor deleite fue tomar a Malleus y hacerlo suyo, tener el control sobre su cuerpo, hacer lo que quisiera con él en la intimidad, no sabía si era correcto el arrepentirse de todo aquello ahora.

De repente sus pensamientos fueron interrumpidos por un sonido que parecía un ronroneo mezclado de gruñido, eran los sonidos guturales del bebé hada dragón, según lo dicho por Lilia.

—¿Qué pasa pequeño? —Cuestionó Malleus al oír su manera de llamarlo— ¿Flamme te hizo sentir mal?

—Yo no... —Sobresaltado Rollo decía al sentirse descubierto en sus terribles pensamientos, después de todo ese pequeño no tenía la culpa de existir. Cubriendo con un pañuelo su boca desviaba incómodo la mirada— Me tomaré esta noche y voy a leerte ese cuento que te gusta.

—Me pregunto qué pensabas para querer disculparte de esa manera.

—¡Cállate! ¡Despídete y vete de una vez!

Nuevamente el bebé dentro del huevo se expresaba con ese peculiar sonido, empezaba a destellar intensamente. —¿No quieres que me vaya? Oh, pero Flamme no me dejará pasar la noche aquí.

—Claro que no.

—Ah, pensar que antes del bebé pedías que me quedara.

Malleus decía con un fingido gesto afligido, a pesar de su compleja relación con Rollo sentía quererlo a su peculiar manera, sentimiento que creció en el transcurso de su convivencia con el huevo, sin embargo eso jamás lo admitiría. El pequeño siguió haciendo esos ruidos y su magia parecía alterarse.

—Cálmalo, van a descubrirlo.

—No sé cuánto tiempo pretendes mantener a tu hijo en secreto. —Era el murmullo de Malleus tratando con su magia de calmar al pequeño.

—Para ti es fácil decirlo, a ti te da igual si te echan de la escuela... Yo no tengo el futuro resuelto como tú, necesito graduarme.

—Excusas... Eres uno de los humanos más brillantes que he conocido, sé que te las arreglarías si la escuela lo descubre. Solo te avergüenza que sea un dragoncito.

—Que tonterías dices... No es eso...

Rollo le debatía con el ceño fruncido, aunque él tampoco tenía muy claro el por qué se negaba a reconocer públicamente que tendría un hijo con Malleus, tal vez era por el simple hecho de que lo vincularán románticamente con él al punto de concebir un bebé.

—Flamme, creo que el bebé va a nacer. Se necesitará magia más fuerte y podría formarse un ligero alboroto. Lo llevaré a Diasomnia para que Lilia me ayude. —Sugería Malleus aferrándose a su huevo que parecía temblar alterado, al disponerse a partir sintió como una mano lo detuvo.

—¡Espera! ¡Voy contigo! —Le gritó Rollo impidiendo su partida, Malleus le dedicó una sonrisa al ver su repentino desespero— Por supuesto que no voy a perderme el nacimiento de mi hijo.

—Si, creí que dirías eso. Rollo ama a nuestro bebé después de todo.

—Solo cállate y vámonos.

Un sonrojado Rollo le ordenaba, acercándose se abrazaba sutilmente a Malleus y su huevo para llegar con su magia a Diasomnia al instante. Esa noche el pequeño dragón salió de su huevo para la alegría de sus padres y más cercanos.

—Flamme, ¿no crees que nuestro hijo es hermoso?

—A su manera lo es... —Respondía Rollo con fingida seriedad, disimulando la extraña sensación de alegría que albergaba en su pecho. Aunque ese pequeño no era igual a un niño humano, le parecía adorable. No pudo evitar notar los leves rasgos en que podían parecerse, el color de sus ojos y el color de su cabello reflejado en algunas escamas de su pequeño cuerpo.

De repente Rollo sintió como una llamarada color verde y rojiza le fue lanzada, que evadió de inmediato. Pensando que era un absurdo ataque de Malleus se prestaba a reprocharle, solo se dio cuenta como su bebé con un gesto serio tenía aún humo salir de su boca.

—¡Oye, no hagas eso!

—Parece que al bebé no le gustó esa respuesta. —En tono burlón Malleus decía— O solo quieres que lo cargues.

—¡Si quieres que te cargue solo dilo como lo hacías cuando estabas en el huevo!

Diciendo aquello le quitaba el pequeño dragón a Malleus para apagarlo en su regazo, no podía negar lo reconfortante que se sentía la calidez cercana de este bebé, era algo diferente del huevo. Ese gesto de sincera alegría en el rostro de Rollo no pasó desapercibido para Malleus, quien sonriendo emocionado por tan hermosa escena paternal se unía en ese abrazo.

Padre e hijo le dedicaron una mirada severa a Malleus por interrumpir su momento especial, Lilia no pudo evitar echarse a reír por esos gestos parecidos, al parecer Malleus tendría que lidiar con una familia bastante temperamental, pero era evidente que podría soportarlo por el amor que se percibía entre ellos, ese amor que hizo que su bebé creciera hermosamente y saliera de su huevo sin ningún inconveniente.

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Muchas gracias por leer esta pequeña historia 💖🔥 Espero que haya sido de su agrado 💖🔔