Arthur esta de lado de... ¿¡Martin!?
-Oh, vamos...-le replicó Malvinas cruzándose de brazos dejando sobre la mesa su taza de té- Es un trato justo
-Yes, is it... pero no voy a ser parte de tu juego- dijo Alfred frunciendo levemente el ceño
-¿Por qué lo dices?
-Es... es tentador y todo... pero no acepto, si él quiere estar conmigo quiero que sea por su propia voluntad...
-Es una oportunidad única, perfect para tenerlo a tu lado-dijo tratando de convencer al rubio
-Sorry... pero no me convence nada de lo digas-finalizó levantándose y dejando su parte de lo pedido
-¡Oye! ¿De verdad solo vas a ignorarme?-repitió indignada
-...- el estadounidense se quedó en silencio unos segundos antes de llegar a la respuesta- Lo tendre en mente, pero no te aseguro nada...
"Porque no necesito tú ayuda, si Iggy hará lo que necesito..." pensó y salió del lugar para pasear un rato y despejar su mente antes de encontrarse con el chileno "Solo será una vez... una vez más y ya..." se detuvo unos momentos mirando a las noticias que daban por los televisores en venta, otra noticia sobre su jefe y el de México tratando de llegar a un acuerdo justo. Suspiro y su móvil sonó por el mensaje de Inglaterra diciéndole que iba en camino y lo mejor...
-¡Yes!-grito al leer "Manuel viene conmigo"
*******
Unos minutos antes Chile y Argentina se encontraban terminando de almorzar siendo acompañados por Francia e Inglaterra, con el primero molestando al argentino por sus habilidades en la cocina diciendo cosas como que ya estaba perdiendo su toque...
-Ahora que lo recuerdo- dijo el inglés limpiando su boca interrumpiendo a los otros dos rubios antes de que se mataran a indirectas o peor aún... comenzaran una guerra de cocina..- Hay algo de lo que debo hablar contigo, Manuel...
-¿Es urgente?- le preguntó Martin antes de que su novio pudiera siquiera abrir la boca- Manu no saldrá de casa hoy
-Si es urgente o no, es nuestro problema, Martin- dijo Chile bebiendo del tè y respirando con suavidad
-Con todo lo que ha pasado últimamente...-susurro Argentina bebiendo de su mate tensando al final a los europeos que ya estaban enterados de "ese" temita...
-Tincho, no empesi' con tus weas porfa...-le pidió el castaño-Además, no es como si tu no hubierai hecho eso con alguien más alguna vez ¿O me equivoco?
-Manu...
-Tu soy el weon que ma' vece' se ha metido con alguien más y yo no ando como weta detra de vo' cada vez que salí a maraquear- dijo seriamente levantandose y dejando lo que utilizo en el lavabo pero al pasar por detras del argentino este le sujeto el brazo
-Al menos, soy discreto-dijo bebiendo un poco y levanto la mirada para encontrarse con la ahora molesta mirada miel de su AÚN novio- Y lo que hago no lo sabe todo el mundo
-No lo sabrá todo el mundo... no decepcionas a nadie de afuera, no me decepcionas a mi... pero si decepcionas a tu hijo, decepcionas a Carlitos cada vez que lo haces- dijo fríamente cuando recordó la primera vez que el niño se enteró de que Martín le había engañado, terminó soltandose rápidamente le dijo para finalizar- Y no sabi' cuantas veces me ha dicho "Ojala tuviera un padre más responsable"
El silencio se apoderó del comedor, las miradas entre ambos latinos eran fuertes y sin duda llenaban de incomodidad a los mayores, finalmente el argentino se puso de pie y con un semblante serio que pocas veces se le veía le deseo a Manuel una buena salida y se fue a su cuarto cerrando la puerta despacio. El chileno suspiro y busco apoyo en la pared dejando la cabeza baja, si no fuera porque allí se encontraban los otros dos y los niños tal vez aquella discusión hubiera llegado a mucho, mucho más... pasó su mano por su frente e ignorando los temblores levantó la cara con una sonrisa de falsa felicidad pero misma farsa había logrado calmar un poco a los otros dos rubios que suspiraron levantándose de igual de manera
Agradeció en su mente que Gilbert le enseñara ese truco y que Antonio le reforzará lo aprendido para hacerlo casi perfecto. Francia dijo que èl esperaría unos minutos para que Hernández se relajara y pudiera terminar de hablar lo que dejo pendiente asi que sin más demora, ambos amantes del te subieron al auto del cejon para ir al punto de reunión.
-Deberías... cuidar lo que dices...-le dijo Arthur cuando ya estuvieron lo suficientemente lejos
-¿Por que?- le preguntó Manuel dejando el celular de lado- Nunca te cayó bien Martin
-E-En eso tienes razón... pero deberías entender cómo se sintió cuando nombraste al little kid
-No entiendo... ¿A que queri llegar, Art?
-Bien, voy a ser directo contigo-dijo al momento de frenar en el semáforo en rojo, suspiro y miro directamente los ojos del que en el pasado fue su objetivo- No acepto lo que está pasando entre tu y Alfred...
-¿Se supone que deberia importarme lo que dices?
-¿¡Estas bromeando!? ¡It's really serius!
-Si lo se pero...
-¿Has pensado en todos los problemas que traería ser el novio de Alfred? ¿Los tratos que pierdes? ¿A lo que te arriesgas? ¿A las posibles batallas y guerras? ¿En tu gente y la suya? ¿Y tus hermanos latinos, que? ¿Has olvidado TODO lo que ocasionó èl en tu pasado? ¿Ese golpe de estado... que tanto te cambio? ¿Las atrocidades que te hizo hacer...? ¿Cuánta gente murió entre tus manos? ¿Cuánto hubiera cambiado el mundo si solo una de las cientos de personas esas... se salvaban?
-...-se quedó en silencio mientras apretaba los labios y desviaba la mirada para que el cejon no viera como sus ojos se aguaban
-Creo... que te he dado algo para pensar-dijo por último apretando el acelerador sintiendo un poquito mal por el chileno, pero si España no quería actuar como un verdadero padre contándole lo que estaba mal, se encargaría de ser èl entonces, quien pusiera a González en su lugar.
-D-Dime... una última cosa...-susurro con la voz algo quebrada- ¿Por que... te pones del lugar de Martín ahora...?
-Look, si bien es cierto que èl se parece a Francia... realmente te quiere, siempre está pendiente de ti, de lo que te sucede, si te falta algo o no. En algunas reuniones cuando llegas tarde o simplemente no vas cambia su actitud y te defiende de cualquiera sin importarle si se trata de Rusia o de su hermana, siempre a estado a tu lado y a pesar de las traiciones que puedan provocar entre ambos es el precio que paga una nación por ser feliz, por esos pequeños momentos de felicidad junto a esa persona especial... no estaría bien, que destruyas además de esa hermosa relación que tienes con Martín, que rompas el entorno familiar y de cariño que tiene tu isla, Tierra de Fuego, junto a ustedes... si vas a hacer algo, trata de no involucrar al niño, ya sufrió bastante por mi culpa como para que ahora sus padres le maten las ilusiones y la inocencia...
-Art...-susurro volteando levemente su rostro aguantando las lágrimas, él era fuerte y no lloraba, pero de solo recordar el pasado y las veces que deseo tener una vida normal en su país darle a otro esa horrible carga hacian que se pusiera débil, toda la gente que ha visto morir a través de sus años de vida, de los casi 500 que tenía realmente, de los casi 200 que celebraba... tantos rostros se le venían a la mente con las palabras de uno de sus modelos a seguir...
-Lo siento, no era mi intención hacerte llorar- se disculpó el rubio abrazandole con cuidado aprovechando otro semáforo en rojo
-N-No es eso- mintió a medias limpiando el mismo las gotas en sus mejillas- Pero siempre, siempre tengo que ver por alguien más... por mi pueblo, por mi gobierno, por Martin, por Carlitos, por Julio o Miguel... ¿Cuando... cuando sera el dia, que deba decidir por mi y para mi felicidad?
-I don't know... eso sólo puedes saberlo tú...- le susurró acariciando su mejilla y beso la frente del castaño sintiéndose como un padre dandole consejos a su hijo
Tomaron un pequeño desvío par relajarse y hablaron de cualquier tema que se les viniera a la mente, entre uno de esos temas estaba el misterio sobre cómo rayos llegaban tan rápido de un país a otro cuando los humanos se demoraban días y horas en llegar. Manuel suspiro cuando fue el turno de bajar del auto pues debía llegar a la plaza caminando junto con el inglés pues este sabia donde le esperaba el estadounidense, miro hacia el suelo pensando en que hacer, iba a tener que decidir y las antiguas palabras del cejon se lo demostraban. De lo único que sí estaba seguro, era de que... pasara lo que pasara... iba a darle lo mejor de sí a Alfred, le sonreía y le diría las palabras que a Martín tanto le gustaban por una sola razón.
"A diferencia del Tincho... me deja ser libre... no me siento atado a nada cuando estoy con el" pensó suspirando y levantando la cabeza mirando al de lentes hablar con unos niños sobre un gato "Perdoname Tincho... porque a pesar de todo... el gringo me atrae ..."
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