Mal, mal, mal... todo iba malditamente mal...

Carlitos podía notar sin mucho esfuerzo el tenso ambiente, habían decidido ir a la casa del chileno en Santiago. Para ser más precisos estaban en La Moneda... Habían llegado de la nada y el argentino sin decir nada camino hasta una sala en específico en donde estaban la presidenta de Chile y la representación del país hablando con el estadounidense. Martín supo en seguida que la mandataria no estaba de acuerdo con aquella "relación" porque claro, a ella le gustaba que el chileno estuviera con él.

-¡Che, Manu~! Vamos-dijo sorprendiendo a los otros tres

Soltó la mano de la isla para rodear el cuerpo del castaño besando su mejilla, podía sentir la incomodidad de los de cabello claro, de parte de Carlitos y Manuel un ligero nerviosismo. Intento besarle más cerca de los labios pero el castaño le separo lentamente y con algo de temor por su reacción cosa que encantó al argentino, tanto que lamio sus propios labios, acto que sólo fue visto por el estadounidense

-Puedes irte, Chile, sólo procura no estropear las cosas- dijo la humana sonriendole levemente a los Latinos pero cuando fue a hablar con el "americano" fruncido levemente el ceño- Usted también puede irse

-Acompañare a Alfred-dijo el castaño tomando el brazo del nombrado

-No, Manu, nosotros tenemos que irnos-dijo Martín tomando la mano libre de su "novio" tirándole un poco, cuando el ojimiel le dirigió la mirada, sonrio, de esa manera que sabía perfectamente. Era la debilidad de esa nación

-Puedo irme sólo, dear -dijo Alfred ignorando aquello para sonreirle al castaño, le despeino un poco su cabello y beso su frente

-Ya nos vamos-hablo subiendo la voz Argentina tirando del brazo de Chile un poco más fuerte para rodearle con sus brazos pegándole a su pecho, mirando desafiantemente al otro rubio

-Bye, dear~-se despidió del chileno agitando animadamente su mano para salir de la sala

Martín escuchó como Manuel soltaba un suspiro, fruncido el ceño pero suspiro soltando al ojimiel para besarle la mejilla. Tomaron a la isla de la mano y despidiéndose de la presidenta para ir hacia un lugar en donde pudieran hablar tranquilos. Aunque para el chileno, hablar con Martín frente a Carlitos le seria más difícil expresarse libremente ante el rubio.

Finalmente, se decidieron por ir hacia un parque para dejar que la isla de alejara si quería y obviamente quería alejarse un poco, pero sólo para asegurarse de que no le mentian en nada se escondió detrás de un arbusto el cual estaba justamente detrás de ambas Naciones.

-¿Y~? ¿Por donde quieres empezar?-preguntó Martín tranquilamente

-¿Que te parece... en al parte en donde aceptas que terminamos?-pregunto Manuel sabiendo o quizás esperando fielmente a que el rubio no perdiera el control en público

-Manu, Manu, no seas pelotudo. Vos no podes dejarme-hablo al tiempo que movía su cabeza negando

-Puedo... y tal vez, quiero-hablo firmemente el castaño desviando la mirada soltando en suspiro

Carlitos escuchaba atentamente la conversación entre sus padres, casi después de la mitad de la conversación de dio cuenta de las verdaderas intenciones en las palabras del argentino. Estaba manipulando a su antojo al chileno, con las palabras adecuadas el ojimiel podía estar en la palma de su mano bailando a su antojo... finalmente escuchó algo que le sorprendió, algo que le hizo temblar levemente y que al mismo tiempo comenzó a hacerle dudar sobre todo.

-Manu, si de verdad querés terminar, primero te daré un tiempo para que lo pienses ¿Bien?
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"Porque después de todo, vos no podes dejarme y te lo voy a demostrar. Alfred F. Jones... te declaró la guerra por MI Manu..."
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Cuando por fin llego a casa, se dejó caer sobre el sofá. Realmente estaba agotado de todo... Carlitos miro al castaño bufar molesto mientras lanzaba su movil hacia la mesa de centro, decidió dejarle sólo y fue a la cocina para alimentar a su mascota

-Puta la wea-susurro el chileno dándose media quedando para mirar el techo escuchando de fondo el molesto sonido de su movil

Contesto la llamada escuchando con los ojos cerrados y un ligero dolor en la cabeza, suspiro aceptando la petición de uno de sus superiores y corto la llamada

-Que paja weon...

Aviso a la isla que iría a atender su trabajo, le dijo que se cuidará y en caso de cualquier cosa que le enviará un mensaje o una llamada.
Los días rápidamente pasaron y ya estaba a 11 de Septiembre, podía sentir una tensión en La Moneda cuando recibió una llamada por parte de Alfred el cual le estaba invitando a pasar la tarde con él, a lo cual aceptó ateniéndose a las consecuencias ya que casi todos en aquel lugar le querian más alejado del estadounidense. Martín no le habia dado problemas desde ese día en el parque, de hecho, se comportaba como si fuera su mejor amigo...
Manuel no lograba entender a los humanos, no se había fijado en aquello pero si tenía mejores relaciones políticas con el gringo sería más provechoso para esas ratas... que complicados eran los humanos...

Cuando salió del trabajo paso por Tierra de Fuego a casa del argentino, Martín le pregunto a donde se lo llevaba pero sólo pudo contestarle que estaría fuera de su territorio a lo cual sorprendentemente el rubio mayor sólo le sonrió deseandole suerte en lo que sea que fuera a hacer... eso, para nada le daba buena espina...

Tardó un poco por el tráfico en llegar, pero fue recibido por Alfred y el chico canadiense del cuál no recordaba el nombre

-¿Quien es?-preguntó Carlitos mirando curiosamente a ese "extraño"

-Oh, él es Matthew, he is my little brother!-exclamó sonriendo mientras rodeaba el cuello del nombrado con un brazo

Luego de saludarse entre todos, iban caminando por las calles notando el ambiente pesado y triste de la ciudad, a la isla le pareció extraño que todo estuviera tan... apagado pero luego recordó la fecha, era el once de septiembre. Una fecha que era triste y algo amarga tanto para Manuel como para Alfred.

Antes de poder decir algo, el tipo al cual había olvidado su nombre se lo llevo por un camino diferente, por otro lado el ojimiel estaba algo molesto porque el canadiense de llevará así sin más a su hijo pero Alfred le decía que era necesario. Suspiro frunciendo levemente el ceño mirando las calles y abrió los ojos con impresión al notar hacia donde iban o por lo menos, por donde iban a pasar...

Donde se perdieron tantas vidas, donde sólo el recuerdo estaba vivo, donde por más que quisieran sus familiares y amigos.
Esa gente que murió en el atentado...
jamás volvería...

-It's a sad location-murmuro el rubio con sus manos dentro de los bolsillos de su chaqueta sin atreverse a mirar hacia la vereda del frente

-It's a very sad day for you and me...-susurró el castaño evitando sus bromas típicas en "espanglish", sorprendió un poco al estadounidense pero este sonrió levemente atrayendo a su cuerpo el del latino al pasar su brazo por el cuello de este

-But, I want... I want this day he better happier for us

-¿Que? Oe, puede que sepa inglish pero no pa' tanto po'-alegó dejando de caminar cruzandose de brazos

-What?

-Dime lo que queriai' decirme...-dijo al tiempo que el otro se acercaba a él mirándole entre divertido, curioso y preocupado- De aquí no me muevo hasta que me digai' weon

-Weon... great! Ahora sigamos~

-¡Conchetumare, deja de agarrarme pa'l webeo!

-Ah? I'm sayings lo que you pidió!

-¡No, aweonao'! Teniai' que decirme la era que me dijiste en ingle' po gil... no entendí...

El ojiazul solto un suspiro pero sonrió y comenzó a reír suavemente al notar el rostro sonrojado del castaño cuando este recordó que estaban en mitad de la calle haciendo ese pequeño espectáculo

-Yo... quería decirte que...-susurró bajando la voz a medida que acercaba su rostro al del castaño- Quería que olvidaremos lo que ha ocurrido en este día, para hacerlo un día más nice

Luego de que el de lentes besara su frente, continuaron su camino un poco más tranquilos pero sin mirarse. Manuel pensaba en decirle lo ocurrido con Martín a Alfred pero desistió de la idea al notar lo tranquilo que estaba el ojiazul, mirando a su gente caminar en luto, tal vez si abría la boca podría echar a perder todo...

Hasta que un maldito recuerdo le invadió de golpe...

Sintió como su corazón latía con algo de molestia, respiró tratando de calmarse cerrando sus ojos, al abrirlos se topó con un parque el cual era atravesado por un pequeño riachuelo. Miro algo confundido al estadounidense pero este sólo solto un suspiro... ¿Acaso él había pensado en lo mismo? Era algo incómodo si lo pensaba de esa manera, pero ya había pasado tiempo y era momento de superarlo y seguir adelante...

-Let's go-usurro el rubio tomandole firmemente de la mano

A pesar de lo apurado que parecía estar el de lentes, Manuel estaba nervioso... quería decirle al gringo que le daría una oportunidad, pero vamos mierda... ¡¡Era difícil decir algo así de gay!! José Manuel González NO era gay ni nada... s-sólo le gustaban los rubios y eso era todo (?)

Iba a decir algo pero quedó embobado al observar el riachuelo pasar por ahí, algunos niños jugaban entre ellos un poco cerca, dos árboles estaban a casa lado y aunque no quisiera admitirlo, era un lugar bastante lindo... lleno de vida y si, también de esa otra "vida" (Hadas y demaces)

-Ta' lindo...-susurró apoyando sus brazos en la baranda

-Yes...

Se miraron a los ojos por unos segundos antes de volver a desviar sus miradas, Alfred le había pedido expresamente a su hermano que entretuviera a la isla para poder pasar un rato con el chileno, estaba nervioso y sentía que en cualquier momento se desmayaria, Arthur y Francia le habían hablado hace muchas años atrás de como era enamorarse de alguien fuera de los sentimientos "Por mi gente" "Estar con él/ella traerá beneficios para mi" y recién ahora podía confirmarlo... se sonrojo y desvío su mirada hacia la derecha, al lado contrario de donde estaba el ojimiel, la gente estaba llenos y viniendo.

Entre todas esas familias que estaban medias tristonas pudo distinguir una que otra pareja, que estaban o pasando a la face de matrimonio o entrando recién en el noviazgo. Soltó un suspiro pensando en fácil que la tenían algunos humanos para conseguir el amor mientras él estaba allí deseando que el pasado conflictivo que tenía con Chile no existiera o al menos que no fuera tan turbio

-Oye, gringo-llamo Manuel intentando demostrar seguridad en su tono de voz

Había pensado mil y un formas de decirle al rubio aquello, pero todas eran demasiado cursis y lo que menos queria despues de parecer mina o fleto era sacar el poeta encarcelado que tenía dentro. No, esa parte sólo podían conocerla un pequeño número de personas y Alfred sería parte de ese pequeño número de personas cuando confiara más... le faltaba mucho al gringo para tener su completa confianza, como la tenía cierto argentino hace tiempo, y calló en cuenta de algo que le hizo confundirse más

¡Iba a darle una oportunidad al estadounidense sin confiar completamente en él! Bravo, denle el premio al weon del siglo...

-¿Si...?-pregunto Alfred mirando le algo divertido por el sonrojo de vergüenza en la cara del castaño, olvidando que él estaba igual o peor

-Yo...-susurro mirando directamente a los ojos azules del otro, terminó desviando la mirada

"Que plancha weon... parezco tellible e' fleto con esta wea..."

-You?

-PorfinpudeterminarconelTinchoyqueriadarteunaoportunidadporqueYOLO!

Dijo casi gritando sonrojado, cuando termino cubrió su rostro con sus manos, bien, lo hecho, hecho estaba...

Espero unos segundos antes de sacar sus manos para poder ver, frente a su persona estaba el riachuelo, al mirar a su lado estaba sólo. Fruncido levemente el ceño comenzando a hacerse ideas extrañas... ya estaba pensando millones de ideas raras para matar al gringo con sus propias manos cuando sintió unos rápidos y torpes pasos acercándose por su izquierda

Al voltear su cara a vio entre unas cuantas rosas, se apartó lentamente algo confundido pero efectivamente ahí estaba Alfred respirando entrecortado pero con una sonrisa

-¿Gringo?-pregunto parpadeando confundido- ¿De donde...?

-For you!

-Eh?

Alfred hizo una pequeña señal con su mano libre para tomar aire mientras le entregaba las rosas al chileno el cual no podia saber con certeza cuantas eran así que a dijo así mismo "deben ser unas cien y pico"

-Whit some difficulty achieving understand what you said, run to get these flowers. I hope you like them~, obviously I would like to be whit you but not want to cause problems and miss so you just have to tell me what you want and I'll give it as soon as possible. You're too important to me, Manuel... I love you, i love you and i like you, it may sound idiot, but so have I, like an idiot... but...-retuvo sus palabras unos segundos tomando el aire necesario- Do you want to be the boyfriend of this Hero?

-E-Ehh...-soltó el castaño sonrojandose, mierda, debería aprender mejor inglés, iba a hacerle falta- ¿Si? Digo, entendi' algo de lo que me dijiste... pero... ¡A por la chucha weon oh! ¡Si, conchetumare, si, por algo terminé con el Tincho po'!

Lo siguiente su pudo ver el ojimiel fue la extremadamente radiante sonrisa de completa felicidad del estadounidense, le beso hasta dejarle sin aire y como un tomate maduro para luego comenzar a dar saltitos a su alrededor chillando emocionado. Trato de contenerse, pero el comportamiento del rubio y las palabras raras en inglés que no lograba entender su risa estalló

Rayos, quería detenerse pero Alfred no hacía otra cosa que seguir con sus tonteras sacándole carcajadas... las rosas casi se le caen al mini-río por aquello. Quizás el 11 de septiembre dejara de ser un dia tan trágico, tal vez podría mirar hacia delante desde ahora...

-I love you so much!!!!-grito Alfred rodeando el cuerpo de Manuel con sus brazos pasando pro su cintura para besarle

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-Boludo hijo de la...

Susurro Martín detrás de aquel árbol, por curiosidad y precaución había decidido seguir a su "ex-novio" para saber lo que haría...

Muy mala idea... ósea, sólo se habían dado un tiempo, él ya había arreglado las cosas con su ex isla dejándole muy en claro que si volvía a entrometerse iba a olvidarse que era una mujer e iba a dejarle en el hospital ¡¿Todo para eso?! ¡¿Para que Manuel le dejará de lado por el gringo capitalista?!

La madera del árbol estaba llena de arañaduras, no era para menos con lo fuerte que estaba apretando la madera. Tenía un arma en su bolsillo, un cuchillo para ser más exactos y perfectamente podría utilizarlo contra el ojiazul pero desistió para conformarse en apuñalar el pobre árbol. Manuel se las iba a pagar... muy caro...

Pero antes, iba a asegurarse de que Alfred sufriera mucho más, nadie se metia con Martín Hernández... mucho menos con SU CHILENITO, MANUEL ERA SOLAMENTE DE ÉL...

Miro con asco como ese otro rubio a besaba con SU chileno y dejo el arma entre su ropa. Ya tenia suficiente con esos dos, sobre todo con su vecino... oh, pero claro... Carlitos aún no estaba enterado

Sonrió perversamente, claro, ¿Como pudo olvidarse de la segunda persona que más amaba? Esa isla de la demostración de la unión perfecta y familiar que tenía con el castaño... sin darse cuenta comenzó a reír, sólo debia buscar una manera de tener a Tierra de Fuego más tiempo y comenzaría a notar la desesperación de Manuel para que volvieran a estar juntos como familia. Oh si, porque el chileno era su vida y no se cansaría de repetirlo jamás... JAMÁS

Era capaz de irse en contra de Alfred
De crear la tercera guerra Mundial
De matar
De atacar países completos
De irse en contra de su gente
De sus verdaderos deseos
Todo para hacer feliz al chileno a su lado...